Jongin pestañeo desconcertado ¿por qué se sentía como si le hubiesen terminado?, era un extraño sentimiento, lo cual le estaba angustiando, corrió tras de ese chiquillo deteniéndose justo antes de que cerrara la puerta.
- ¿ qué haces Jongin!?- lo miro con los ojos bien abiertos al verlo parado frente a él impidiéndole que cerrara la puerta.- vete!
- No quiero, no sin antes me digas porque estas molesto ¿por qué ya no quieres que te hable?, kyungsoo.
- No quiero… enamorarme de ti ni de nadie.- frunció los labios bajando la mirada avergonzado.- lo he dicho siempre, las cosas del amor son del diablo.
- Me gustas.- dijo al alto haciendo que kyungsoo se olvidara de respirar por un momento.- me gustas kyungsoo.
- No. A ti te gusta todo mundo.- frunció el ceño.- como puedo creerte si haces lo mismo con todos, o todas, lo dijo Taemin- ah, casi la misma escena, a no ser de porque tú y yo no estábamos jugando.
- Kyungsoo eso es… Taemin es.- como explicarle?
- El chico que tus padres quieren para ti, no es así?- los ojos del moreno se abrieron hasta mas no poder.- Jongin vete por favor, quiero dormir.- le miro suplicante, el moreno entendió retirándose de la puerta la cual se cerró frente a su cara.
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Y si bien el juego termino siendo una charla entre todos, algo así de, tienes dudas, cuéntanos tus problemas que entre todos te ayudamos.
- Le dirás a kris?- pregunto tao a Chanyeol casi susurrando, el castaño negó.- por qué?- puchereo.
- Solo ve a la habitación con el, yo me llevo a Baekhyun, no es tan difícil.- sonrió.- así menos explicaciones.
- Tienes razón.- coincido volviendo a la conversación de las chicas y sus problemas menstruales y sus cambios de ánimos.
- Tienes sueño?- pregunto yifan al pequeño rubio quien había bostezado y tallado sus ojos.- puedo acompañarte a la habitación.
- Está bien hyung, puedo ir solo.- sonrió poniéndose de pie.- me iré a dormir.- se despido del mayor quien le miro ir escaleras arriba, Chanyeol en cuanto vio a su hermano se retiraba no dudo en ir tras de el.
…
- Baekhyun.- el nombrado se detuvo al girar la perilla de la puerta y se giró a mirarlo.- tenemos que hablar.
- No quiero.- frunció el ceño la molestia volvió a el.- buenas no…
Ni siquiera pudo cerrar la puerta cuando el mayor ya lo estaba jalando de la mano, el rubio forcejeaba por que le soltara, intento fallido, una vez dentro de la habitación Chanyeol le soltó y puso seguro a la puerta.
- Chanye…
- Me puedes decir por qué demonios hiciste todo eso!?- dijo en tono grave sorprendiendo al menor.- realmente buscas hacerme enojar? Porque lo has logrado Baekhyun.
- No eres el único enojado, déjame salir.- intento acercarse a la puerta pero el castaño lo tomo de la muñecas y los llevo hasta una de las camas en donde lo acostó sin soltarlo de las manos subiéndose encima suyo.- que haces chan… Yeol- lo miro asustado.
- Te hice una pregunta Baekhyun ¿Qué buscabas haciendo todo eso?- su mirada era penetrante, seria y dura.- respóndeme.
- Me duele.- respondió apenas audible desviando la mirada.- que beses a alguien más, no quiero eso.- una lagrima traicionera rodo por sus mejillas lo cual sorprendió al castaño, pero esta vez no, no sería blando con el, no demasiado.
- Y crees que a mí nO? Mírame.- Baekhyun lo miro temeroso.- yo no pedí lo de Luhan, no siquiera me gustan los…
- Eres un mentiros.- lo interrumpió.- te gusto el beso, te vi lamiéndote los labios y…
Se quedó callado al sentir los suaves labios de su hyung besándolo lento y pausado sintiendo su corazón estremecerse, era tan delicado que solo se centró en el rose de esos labios tan perfectos.
- Tus labios son los que me gustan, no hay mas.- Baekhyun se estremeció al sentir la mano de Chanyeol acariciar su piel bajo su ropa.- y como tales no quiero que nadie más los toque, pero al parecer eso es imposible, lo de yifan lo pase por alto, porque no lo vi y tú me lo dijiste, y sé que él también lo hará, pero que vayas por la vida haciendo las cosas frente a mi cara eso no lo puedo pasar.-suspiro cansado.- baek…
- Perdón.- hiperventilo frunciendo los labios ¿ qué había dicho?- yo no lo volveré hacer yo…- las lágrimas ahí estaban otra vez.
- Shtt, no llores.-acaricio suavemente su rostro.- no me gusta verte llorar, todo está bien okey?
- Te quiero hyungnim.- hizo un mohín triste la cual desvaneció la molestia del mayor ¿ por qué tenía que ser siempre así?- también te quiero, no lores más- seco sus lágrimas las cuales no querían parar, pero Baekhyun hiperventilo más fuerte.- baek, ¿ qué ocurre? Todo está bien ¿Por qué llorar?
- Yo, ten, tengo miedo.- hipeo, algo no estaba bien.
- Por qué tienes miedo? Yo estoy contigo.- sonrió dulcemente acariciando su cabeza suavemente.- no debes de temer.
- Tengo miedo de eso, de que ahora estás conmigo.- sollozo.- y que de un día para otro encuentres a alguien especial y me dejes solo.- sorbió la nariz.- y dejes de querer a Baekhyunnie, no quiero eso.- Chanyeol sonrió enternecido acomodando el flequillo rubio de su hermano.
- Baekhyunnie, recuerdas lo que me preguntaste antes? Sobre hacer el amor y esas cosas.- el rostro de menor se sonrojo violentamente.- quieres aun hacerlo conmigo?- delineo sus labios.
- Eh? Eso… yeollie.- cerro sus ojos lentamente al tener el rostro de su hyung mas cerca, su respiración esa cálida y chocaba con la suya haciendo que su corazón latiera más rápido, suspiro profundamente al sentir esa lenta caricia bajo su polera, la cual erizo cada bellito de su cuerpo, abrió sus ojos lentamente encontrándose con esa cálida mirada de unos hermosos ojos marrones, era una mirada distinta a todas las demás, esta le hacía sentirse tímido, avergonzado, querido.- hyung…nim.
Los suaves labios del mayor rosaron los suyos lentamente, saboreándolos a su gusto, disfrutando de ese maravilloso rose, el cual trasmitía deseo pero no era brusco, era lento y calmado, que les hacía estremecer.
Lentamente Chanyeol fue subiendo la polera del menor hasta quitársela completamente dejando a la vista su blanca y suave piel la cual acaricio una y otra vez disfrutando de su suavidad, tan perfecta y única, sin prisa alguna se quitó su sudadera junto con su playera mostrándole al pequeño rubio u cuerpo trabajado, lo cual lo deslumbro, no era la primera vez que lo veía sin ropa, pero si la primera vez que le observaba detenidamente, Chanyeol tomo su rostro entre sus manos besándolo una vez más sintiendo al menor estremecerse al momento que sus pechos se juntaron, era tan placentero rosar sus pieles.
Sin cortar el beso las manos de Chanyeol bajaron de su rostro por todo su pecho hasta llegar a ese pants gris el cual comenzó a bajar lentamente…