Esteban
Todos los días en mí había diversión a costa de fumar, tomar y golpear eso era mi rutina durante toda mi adolescencia, pero un dia estuve a punto de ir a prisión decidí estudiar y comportarme adecuadamente pronto recibí una beca para estudiar en Dinamarca. Actualmente estudio y trabajo en Dinamarca, pero en mi seguía el vacío, no creía en él y lo consideraba una debilidad humana, trabajo, estudio y vivo en Dinamarca y aún sigo viendo esto una rutina. Tengo veinte años y estoy a punto de graduarme pero se me hace algo inútil seguir con esto.
Era una tarde lluviosa había ido con unos compañeros a tomar un café esto no era parte de mi vida, Salí de la cafetería estaba viendo mi celular cuando tropiezo con alguien.
-lo siento-dijo tímidamente
-no te preocupes-dije fríamente
Era un chico de cabello rubio, ojos color azul y una hermosa piel blanca, parecía u n niño de catorce años pero su uniforme decía que era de la escuela superior. Aquel chico me había interesado, ¿acaso me enamore de el a primera vista? En eso me doy cuenta de que aquel chico había tirado su credencial de estudiante, la miro y veo sus datos.
Dominick era su nombre así que decidí investigar más de Dominick hasta el dia que tuve que evitar que lo golpearan, ese dia supe que estaba enamorado de él.
-quiero conocerte más-dije
Me dijo un poco acerca de él, era tarde tenía que marcharse quería que estuviera junto a mí y hacerlo mío, pero Dominick apenas me conocía no tuve más opción que llevarlo a su casa. Al llegar a mi departamento encendí la computadora y comencé a buscar más acerca de Dominick, busque a su familia Harrison, era una familia adinerada la cual se había hecho rica a su cadena hotelera alrededor del mundo, pero Dominick era el hijo nacido fuera de un matrimonio con una mujer que trabajaba con aquella familia, quería que me digiera más de él, en eso me doy cuenta del amor que comienzo a sentir por él.
Al dia siguiente voy a su escuela él se da cuenta de que lo estoy esperando, se acerca a mi sonrojada mente.
-hola, Esteban-dijo sonrojada mente
-hola, vamos-dije
-¿A dónde?-dijo
-vamos a comer a mi departamento-dije
Encendí mi auto y fuimos directamente al departamento, prepare la comida y comimos, parecía sencilla para él, pero esperaba que le agradara porque no sabía si comía este tipo de comida en su país natal.
-Esteban estuvo buena los tacos, pero la salsa esta picosa-dijo tomado un sorbo de soda
-lo siento-dije
-no te preocupes-dijo con una gran sonrisa
Esa sonrisa me hacía más amarlo aún más. Era el momento de saber más de él, lo tome de la mano y lo lleve al sillón.
-dime acerca de ti-dije
-Esteban, no se-dijo
-tu dime de ti yo te diré todo acerca de mi-dije sonriendo
Comenzó a contarme que provenía de Inglaterra, era el hijo de la sirvienta con uno de los herederos a las cadenas hoteleras, su padre al saber del embarazo de la chica no quiso casarse con ella pero siempre estaría al tanto de él, después su padre se casó y tuvo una hija pero su esposa no podía tener ms hijos, el decidió acercarse más a su hijo poco después su madre muere en un accidente, mientras lo defendía de un hombre que trato de abusar de él, su padre lo llevo a su casa pero su madrastra si lo quería pero su medio hermana y su demás familia no, así que él tuvo que marcharse de esa casa porque sus primo, su abuela y sus tíos trataban de acecinarlo, por dos simples razones la primera porque su abuelo lo había dejado como el único heredero y la segunda porque era un bastado.
Dominick al recordar todo estaba llorando, lo abrace, se sentía tan cálido, era lindo a pesar de todo lo que le había sucedido, a pesar de mí que tenía todo y poco a poco mi corazón se pudrió de tanta crueldad en mí.
-lo siento por preguntar-dije tristemente
-no te preocupes-dio
-te diré de a mí, pero no me odie por lo que te diré-dije
Estaba decidido a decirle todo sobre mi, pero tenía miedo que mee terminara odiando por todo mis errores que había hecho tras mi infancia y mi adolescencia. Me arriesgaría a perderlo pero al menos sabría que ame a alguien.