Los días y las noches pasaron como si fueran las páginas de un libro, un libro con páginas delgadas que con un leve soplido de viento avanzaba una tras otra. El sentimiento de angustia se acrecentaba al interior de Derek al notar que Stiles no tenía mejorías, pero de una u otra forma, aquella terrible emoción le permitía ver las cosas más claras que antes. Le gustaba y no podía negarlo, por más que intentara evadirlo o colocar excusas no había otra razón por la cuál estaba tan preocupado. Nunca había actuado de una forma tan protectora y con notar la constancia que demostraba era más que evidente. A base de risas, peleas y momentos difíciles aquel muchacho se había colado dentro de su corazón como una hoja puede entrar a través de una ventana abierta gracias al soplido del viento. Y ahí estaba esa hoja; Stiles.
-Scott... Quiero despierte... Necesito... Decir que lo quiero.
- Wow... Jamás pensé que escucharía eso de ti.
-¿Puedes colocarte serio?
-No lo decía de chiste.
-Así sonó.
-Él despertará.
-¿Qué sabes tú?
-Es fuerte. Yo sé que despertará como si nada y comenzará a decir cualquier estupidez.
-Ha pasado un mes en coma... Y la única vez que abrió los ojos no estaba -Dijo e inmediatamente golpeó un árbol al punto de marcar su puño.
-Te estás desesperando. Eso no es bueno.
-¿Hay algo bueno? ¿Una buena manera de actuar?
-Derek, es mi amigo, mi mejor amigo. Estoy tan preocupado como tú.
-Tú no sabes nada.
-¿Qué no sé? -Derek permaneció en silencio.- Responde. No creas que nadie más la está pasando mal. Porque déjame decirte que yo tam...
-Tú no eres culpable.
-Tú tampoco.
-Stiles iba a verme cuando tuvo el accidente.
-... Derek... Dios, lo siento, no fue mi intención.
Scott se acercó a Hale al notar que estaba por romper en llanto, pero este le evitó como si no pasara nada.
-Iré al baño, luego seguimos hablando.
El alfa suspiró y luego dejó soltar un leve "De acuerdo".
El lobo mayo caminó directo al baño del hospital sin tomar en cuenta a nadie más. Estaba tan absortó en sus pensamientos que volvió a estar consciente de dónde estaba cuando se estaba mirando en el espejo.Sin duda lo peor de todos las sensaciones que se agitaban en su cabeza, la que más eclipsaba su razón era la fatídica idea de que Stiles jamás despertará y partiera a la otra orilla sin saber que su apreciado lobo en realidad lo quería. Y en el peor de los casos, Derek quería que despertara al menos un segundo para poder decirle "Sí. Claro que sí. Quiero estar contigo, aunque sea darnos una oportunidad para intentar ser felices juntos". Él se arrepentía profundamente por no haber querido escuchar a su corazón de buenas a primeras.
Pero bueno. La vida era una hija de puta y eso lo tenía claro desde hace mucho tiempo.
-Maldito... ¿Por qué estabas tan nervioso?... ¿Por qué no despiertas? Nunca pude oír decir ninguna de esas cosas que sentías. "¿Hablando solo? Siempre creí que estabas loco, pero nunca lo creí tanto" imaginó que respondía Stiles atrás de él.
Si hubiese sido por el lobo solitario, jamás habría salido de ese baño hasta que se hubiesen ido todos, pero no pudo evitar salir de la madriguera al sentir el gran alboroto que ocurría en la sala de espera. Especialmente cuando escuchó con sus oídos desarrollados el pequeño verbo conjugado "despertó".
Tanto el alguacil como Scott y Lydia estaban esperando que se abriera la puerta para que pudiera pasar a ver al paciente. Cuando llegó Hale Lydia lo miró con una sonrisa y sin decir nada. Él ya no soportaba más la emoción y cuando ya estaba por perder el control y entrar a la fuerza, el enfermero les permitió entrar, no sin antes advertir que no saturan de información al paciente pues acababa de despertar.
Apenas entraron a la habitación se dibujó una sonrisa en el chico que estaba recostado en la camilla. Sin embargo, justo cuando sus ojos se detuvieron en Derek, la bella mueca se desfiguró.
Antes de que hicieran cualquier cosa Stiles le preguntó a su padre y sus amigos "¿Quién es él?" mientras señalaba a Derek.
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