Finalmente Sehun tenía en sus manos un gran bubble tea, estaba sentado frente a JongIn quién no dejaba de mirarlo en ningún momento. No es que a Sehun no le gustase que lo mirara, pero sentía que el moreno ni siquiera pestañeaba, Sehun desvió su vista hacia otro lugar tratando de ignorar el sonrojo que se asomaba en sus mejillas. JongIn rió quitándole el bubble tea de las manos al menor para dar un gran sorbo.
— ¡JongIn! No es mi culpa que no hayas querido comprarte uno.
— Solo fue un sorbo nada más —Rió dando otro sorbo al té de burbujas del menor sin quitar su vista de él.
— ¡JongIn! —A esto Sehun se levantó de su asiento acercándose al mayor intentando arrebatarle el bebestible de sus manos, pero JongIn no se dejó, más aprovechó de poder tener más cerca el cuerpo del menor. Finalmente Sehun había terminado sentado al lado del moreno, su brazo izquierdo estirado queriendo alcanzar su té de burbujas, pero sus rostros sumamente cercas.
— Eres tan lindo… —JongIn habló fijando los ojos en el perfecto rostro del blanquito, sonrió al notar más de cerca aquel rubor en las mejillas del susodicho. En ese momento JongIn se había inclinado para arrebatarle un beso pero Sehun se echó atrás.
— JongIn no.. —Negó un par de veces Sehun pudiendo por fin tomar de vuelta su bubble tea.
— Lo siento… —El moreno suspiró desviando su vista hacia el contrario, extendió su mano para tomar la contraria, comenzó a acariciar con su pulgar para luego entrelazar sus dedos. — No aguanto más Sehun, quiero tenerte de nuevo para mí, quisiera que fueses mi novio otra vez con la diferencia de que esta vez no te haré daño, pero tú estás con Luhan y todo se complica… Dime.. ¿Qué sientes por él? —Sehun no lo estaba mirando, tenía su vista perdida en sus manos unidas.
— Es complicado, yo lo quiero ¿si? Y lo quiero mucho, fue un pilar fundamental luego de que te fuiste, él me ayudo bastante a salir adelante y siempre voy a estará agradecido, puede que haya cometido un error en comenzar una relación con él, pero yo jamás creí que tú volverías.. Y ahora que estás y te veo.. —En ese momento Sehun elevó la vista hacia JongIn encontrándose de inmediato con los oscuros orbes ajenos. — Me doy cuenta que sigo estúpidamente enamorado…
— Sehun.. —JongIn sonrió tras escuchar lo último, aunque moría de ganas por besarle debía poner mucha resistencia y aguantarse. Continuó acariciando su mano intentado entregarle tranquilidad y calma. — Yo.. siempre he estado enamorado de ti, como un estúpido también, por eso voy a esperarte.. lo que sea necesario.
Luego de que Sehun por fin terminara su bubble tea JongIn por fin aceptó devolverle sus prendas en una pequeña bolsa, aunque en el fondo Sehun quería seguir compartiendo su tiempo con el moreno. JongIn lo fue a dejar al paradero esperando que el menor tomara algún autobús, pero para sorpresa del moreno, Sehun antes de subirse le robó un fugaz beso en los labios dejándolo más que atontado. Se despidió moviendo su mano sin borrar su sonrisa, y Sehun también sonreía, era hermoso.
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Encerrado en su habitación, bajó las mantas de su cama, dejando la almohada completamente húmedas por sus lágrimas, así estaba Tao después de enterarse del segundo engaño de Kris. No quería hablar con nadie, ni siquiera con sus padres, pues sí, el menor aún vivía con sus progenitores, aunque éstos viajaban bastante seguido, justo ahora se encontraban en casa.
Tao revisó su celular encontrándose con casi 30 llamadas de Kris y unos cuantos mensajes del mismo.
Para: Tao
De: Mi Kris♥
Tao por favor contesta, tenemos que hablar, no es lo que parece.
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Para: Tao
De: Mi Kris♥
Déjame explicarte todo por favor, todo tiene una explicación.
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Para: Tao
De: Mi Kris♥
Tao en verdad yo te quiero mucho, perdón, por favor perdón.. Contesta ¿dónde estás?
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Para: Tao
De: Mi Kris♥
No quiero perderte otra vez más maldita sea.
Tao lanzó el celular bien lejos, no quería saber nada de Kris, nada de nada. Simplemente no podía explicar lo mal que se sentía en ese momento, no podía creer que había caído de nuevo en el juego de Kris, ahora solo quería estar solo, absolutamente solo, no le importaba si su celular se había roto o algo contra el golpe al suelo, no le interesaba nada ahora.
Por otro lado Kris seguía llamando desesperadamente a Tao, odiaba el hecho de haberle hecho daño de nuevo al menor, sabía que todo esto había sido su culpa, él no saber decir la verdad desde un principio y lo estaba pagando bien caro, pues se lo merecía. También quería hablar con Yixing y explicarle todo, pedirle perdón por no haberle contado todo como debería, haberla dejado las cosas claras de un comienzo. De alguna forma esto también le había servido a Kris para despejar su mente, es decir, saber a quien de verdad le importaba, y ese era Tao. Ya lo había perdido una vez y nunca lo había podido superar, pero esta vez no se iba a quedar con los brazos cruzados como la primera vez, ahora haría todo lo posible para poder conquistarlo de nuevo, para recuperarlo y ahora sí que haría todo de manera correcta.
Al día siguiente Kris se levantó bastante temprano y antes de dirigirse a su trabajo fue a una florería, compró un gran ramo de flores puesto en una canasta, en ella dejó un pequeño sobre con una carta dentro. Tras eso fue hasta la casa de Tao, dejó el canasto en la puerta y tocó el timbre, en eso volvió rápido a su auto esperando ver al menor, pero para su sorpresa fue su mamá, ella tomó la sorpresa y la llevó dentro. No tenía idea que los padres de Tao habían vuelto, solo esperaba que viera que el regalo era para su hijo y no para ella. No tuvo otra opción más que ir a su trabajo, de todas formas debía contarle todo a su gran amigo.
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Sehun al volver a casa se dio cuenta que Luhan no se encontraba en ella, algo bastante extraño ya que el mayor siempre le avisaba cuando iba a salir, y no se le ocurría tampoco hacia donde habría ido. Decidió llamarlo pero para su sorpresa el mayor no contestaba, esto comenzaba a preocupar al menor, además tampoco podía ir a buscarlo dado que no conocía por completo Beijing, y lo más probable es que terminaría perdiéndose en el intento.
Fue a su habitación recostándose en ella, más continuaba llamando al mayor algo más desesperado, pero debía mantener la calma, Luhan era grande y sabía cuidarse solo.
Mientras Sehun daba vueltas en su cama sin saber muy bien que hacer, Luhan se había hecho un nuevo amigo, era Yixing. El pobre chico estaba todo mojado puesto que se había caído dentro de la pileta, Luhan se ofreció amablemente a llevarlo el mismo a su casa, pero el chico no quería, decía que podía ir solo, y Luhan no pensaba dejarlo solo. Finalmente ambos fueron al baño de un centro comercial, ahí Yixing se encerró en uno de los cubículos y comenzó a secarse con el papel, claramente eso no servía de mucho.
El celular de Luhan vibraba cada cierto tiempo y era Sehun quien llamaba, Luhan no quería hablar con él así que solo dejó el móvil en silencio. Esperó tranquilamente que Yixing saliera del baño, en eso lo acompañó hasta su casa, seguía con la chaqueta que le había prestado puesta y tampoco tenía pensado pedírsela.
— En verdad no era necesario que vinieras hasta aquí. —Comentó Yixing adentrándose a su propia casa, dejando también entrar a Luhan.
— No es nada, además creo que fue por mi culpa que te caíste.. No podía dejarte caminar solo de esa forma.
— Puede que sí.. Gracias ¿Luhan?
— Si, es Luhan..
— ¿Puedo preguntarte algo? —Yixing cerró la puerta invitando a que Luhan tomará asiento en el sillón.
— Ehm si, claro.
— Espero no incomodar.. Pero por casualidad ¿tú también estabas llorando? —Luhan abrió los ojos sorprendido estando también nervioso, pero no servía de nada mentirle, así que solo asintió con lentitud. — Pero no estés triste.. Yo también lo estaba, supongo que te diste cuenta.. Lo siento.
— No tienes que disculparte, ambos estábamos llorando como nenas ahí en el parque. —Soltó unas leves risas intentando alegrar el momento, por suerte Yixing también rió junto a él.
— Si tienes razón, además ni siquiera debería estar llorando por un idiota. —Yixing guardó silencio, no tenía idea si su ahora nuevo amigo fuese gay o peor, un homofóbico. — Que diga una idiota, si, si eso..
— ¿Sabes? Yo también estaba llorando por un ‘’idiota’’, creo que tenemos algo en común.
— ¿Tú también eres..?
— Si, soy gay.
— ¿No te da miedo decirlo así como así?
— ¿Miedo? ¿Por qué? Yo ya estoy asumido.. Lástima que mi novio no me corresponda.
— ¿Es heterosexual?
— No, no, solo que.. creo que volverá con su ex.
— Aush.. bueno mi idiota no era mi novio por suerte.. solo hoy lo vi besándose con otro.. creo que me ilusioné demasiado rápido.
— Eso igual duele.. Ambos estamos con el corazón roto, otra cosa en común..
— Si.. demasiadas cosas en común en tan poco tiempo. —Yixing rió por lo bajo viendo al contrario, extendió su brazo para rodearlo por sobre sus hombros atrayéndolo, continuó a él. — Ya pasará..
— Pasará… —Luhan no se opuso a la cercanía, más necesitaba un abrazo así que con cuidado se acurrucó en el pecho del menor, cerró los ojos y se dejó llevar por el silencio de ambos. A pesar de que Yixing seguía algo helado, no se alejó por ningún motivo.
Tras unas horas Luhan había vuelto a casa donde Sehun, el menor se había quedado dormido sobre la cama con la televisión encendida, eran cercano a las 9 horas de la noche. Luhan observó desde la puerta a Sehun dormir plácidamente, suspiró con pesadez sin quitarle la vista de encima, Luhan seguía triste, no era algo fácil de olvidar y tampoco estaba seguro de lo que iba a hacer. Con cuidado fue dando pasos hasta la cama donde se recostó intentando hacer el menor ruido posible, pero parece que no fue suficiente.
— Luhan.. Al fin llegas. —Sehun se sentó en la cama extendiendo el brazo para acariciar su espalda pero sorpresivamente Luhan se alejó.
— ¿Cuándo tenías pensado decírmelo?
— ¿Eh? ¿De qué hablas?
— Por favor no te hagas Sehun, sabes perfectamente de lo que hablo.
— Luhan.. No entiendo.. ¿qué pasa?
— Jongin, ¿te suena? ¿tu amigo? ¿con quién dormiste en su casa el otro día?
— Luhan.. ¿C-Cómo lo sabes?..
— Los vi, hoy los vi… Te seguí hoy día y jamás creí que sería él..
— Te lo iba a decir, de verdad lo iba hacer pero no sabía cómo… —Sehun tomó la mano de Luhan con fuerza pero no bastó puesto que el mayor la alejó con brusquedad.
— ‘’Volví a ver a mi ex’’ ¿Tanto de costaba decirlo Sehun? ¿Hace cuánto tiempo que hablas con él? —Luhan lo miró a los ojos sentado en la cama también, Sehun pudo notar como los ojos del mayor se ponían cada vez más húmedos, sabía que lloraría.
— Me costaba ¿bien?, no era fácil porque ni yo era capaz de creerlo. Al comienzo yo ni siquiera quería verlo, no quería nada con él, pero él insistió en buscarme..
— ¿Cómo dio contigo?
— ¿Recuerdas el restaurante japonés al que me llevaste ese día? Él trabajaba ahí como mesero, nos encontramos en el baño… de ahí que ha estado buscándome, y poco a poco he accedido.. —Sehun suspiró llevándose las manos a su cabeza. — No quería Luhan, no quería hacerte daño…
— Pero lo hiciste igual… Quiero dejar lo nuestro hasta aquí Sehun, y es más que seguro que tú también… —La voz de Luhan poco a poco fue quebrándose, respiró profundo para continuar hablando.— Es porque te amo que lo hago… No quiero amarrarte a algo que ni tú mismo te lo crees.
— Luhan espera yo…
— Te dejo el camino libre Sehun.
— Perdóname…
— Solo duerme ¿sí?
— Perdóname Luhan… —Luhan se recostó en la cama dándole la espalda al menor, no quería seguir hablando del tema, solo quería cerrar los ojos y que fuese otro día, ya no soportaba más.
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— ¡¿QUÉ TU QUÉ?!
— Tal como lo oyes, ¡y no grites!
— Pero Kris, te dije que debías decir la verdad.
— Lo sé ¿sí? La cagué bien feo, ahora ninguno de los dos quiere hablarme…
— Ahora.. ¿quién te importa más?
— Tao.. le hice daño de nuevo, no sé qué hacer ahora, él no me va a perdonar.
— Hey, hey, hey.. ¿Ya te vas a rendir? Va a costar pero estoy seguro que Tao te dará otra oportunidad…
— No lo sé JongIn.. lo veo bastante difícil..
— Solo no te rindas, mírame a mí.
— Hablando de ti, ¿cómo van las cosas con tu Sehun?
— Genial, es maravilloso todo lo que me dijo ayer..
— Y empezaron a salir corazones flotantes de la nada. —Kris bromeó riendo al ver a su amigo tan enamorado, pero también le alegraba. — ¿Qué fue lo te dijo ayer?
— Que seguía enamorado de mi.. —JongIn sonrió como un verdadero bobo para seguir hablando. — Le dije que le daría todo el tiempo necesario, que lo esperaría.
— ¿Va a terminar con Luhan? Wow~
— No me lo dijo así, pero es lo más probable.
Tras esa conversación de amigos, ambos volvieron al trabajo, pues volvía a llenarse el restaurante y no le quedaba de otra que atender sus mesas. En ese transcurso Kris decidió mandarle un mensaje a Tao esperando que esta vez sí contestara.
Para: Pandita♥
De: Kris
¿Te llegó mi regalo? Sé que te encantan las flores y son solo para ti. Te extraño mucho pequeño Panda..♥
Tao estaba en su cuarto sin querer comer nada, y a un lado de la puerta estaba el regalo que Kris le había entregado, fue su madre quien entró a su pieza llevándole aquello, a cambio de él su madre estaba bastante contenta, solo quería saber quién era el famoso pretendiente de su hijo. Ella si sabía la orientación sexual de su Tao y aunque al comienzo fue algo complicado, poco a poco fue acostumbrándose y no era nada fuera de lo normal. Pero Tao se negó por completo a contarle la historia, no quería hacer memoria de algo que no le agradaba, en ese momento su celular vibró con un mensaje de Kris, pero no quiso responder, tampoco sabía que decir “¿Un gracias?” Pues para qué, si Tao sabía que todas esas flores iban a llegar al cesto de la basura.
Kris por su parte aún mantenía la esperanza de que Tao le respondiera, pero mientras pasaban las horas eso se hacía más difícil, luego del trabajo iría a su casa, aunque lo echara a patadas él necesitaba verlo y explicarle todo, porque no se iba a rendir tan fácil, necesitaba recuperar a su Panda ahora.
Al término de su horario de trabajo, Kris no tardó en ir a casa de Tao como lo había planeado, se despidió con rapidez de JongIn y voló a su lugar de destino, se pasó varios semáforos en rojos pero valió la pena. Tocó el timbre y fue la mamá de Tao quién le abrió, la señora no tenía idea de quien era él pero cuando le dijo que él había sido quién dejó las flores ésta mañana, no tardó en dejarle entrar, además de encontrarlo sumamente guapo. En eso Kris se dirigió a la habitación del menor, golpeó unas tres veces y no oyó respuesta alguna, creyó que la puerta estaría con seguro pero no fue así, poco a poco fue abriendo ésta, Tao estaba durmiendo sobre las sábanas, su vista observó toda la habitación y pudo ver su regalo en la basura, suspiró cerrando la puerta por dentro, caminó despacio hasta sentarse a un lado de él, con su mano comenzó a acariciar la mejilla del menor, apartó unos mechones de su rostro y se dedicó a mirarlo, era demasiado adorable mientras dormía. En ese momento Tao se removió abriendo sus ojos, dio un pequeño gritó y se apartó con rapidez del mayor.
— ¿Qué haces aquí? ¿Cómo entraste?
— Tú mamá me dejó entrar, es bastante amable.
— Ándate, quiero que te vayas ahora, no quiero verte Kris ¿qué no entiendes?
— Si entiendo… Pero no me iré, necesito hablar contigo, por favor deja que te explique todo.
— ¿Explicar qué? ¿Qué estabas a otro mientras estabas conmigo? Eso ya lo sé, no hay nada que explicar.
— Yixing se llama Yixing, yo estaba con él antes de volver a estar contigo, en realidad no era mi novio pero si estábamos en algo. Luego volví a hablar contigo y mi mundo dio vueltas porque creí que te había superado pero no fue así, aún me gustabas, quise dejar a Yixing o mejor dicho dejarle las cosas claras, contarle que mi ex había vuelto a aparecer en mi vida, y que no quería que se fuera de nuevo… Pero supongo que fui bastante cobarde y tampoco quise herirle, y acabé hiriendo a ambos, soy una mierda lo sé… Tao yo no quería hacerte daño de nuevo, de verdad que no estaba en mis planes hacerlo. Pero me di cuenta que tú de verdad me gustas y es más que eso, siento que.. siento que te amo.. —Tao lo miró mientras contaba todo su relato, aunque tenía ganas de pegarle una de sus patadas ninja, solo se quedó en silencio, su corazón no tardó en aumentar sus latidos cuando lo oyó pronunciar ese ‘’te amo’’ tan sincero, porque así lo sintió, Kris no era mucho de mostrar sus sentimientos y agradecía haberlo oído.
— Kris… También te amo..
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Sehun no había podido dormir como hubiese querido, se sentía mal por Luhan, se sentía culpable pero debía admitir que también le agradecía, ahora no tendría ningún obstáculo para estar con JongIn, aun así no dejaba de pensar en el daño que le había causado al mayor.
Al día siguiente cuando Sehun despertó se percató de la ausencia del mayor a su lado, y una nota en la pequeña mesa de noche “Sehun saldré, nos vemos más tarde, no llames”. Sehun suspiró ante eso, lo más probable es que Luhan ahora lo estuviera evitando, aunque era entendible, pero Sehun no quería perder a Luhan, era un verdadero amigo. Se quedó en casa sin muchas ganas de salir, miraba su celular a cada instante queriendo recibir un mensaje de JongIn o algo, pero nada, quería contarle lo que había pasado con Luhan pero debía esperar, él sabía que el moreno saltaría de alegría cuando le contara.
Sehun no quiso esperar más y fue él quien llamó a JongIn.
— Nunca creí que llamarías bonito, ¿pasó algo?
— Uhm.. muchas cosas, quiero verte JongIn.
— Ven a verme entonces, salgo tarde hoy pero… puedes quedarte de nuevo a dormir en casa. También quiero verte.
— ¿Debería ir? Te aprovechas de inmediato bobo.
— ¿Aprovecharme? Yo sé que también quieres dormir conmigo otra vez, así que ven.
— ¿Me estás mandando? Cuidadito…
— ¿O qué? —JongIn rió divertido escuchando también las risas del menor, eso definitivamente alegro su día. — Ven.
— Iré, solo porque yo quiero, no porque me mandes.
— Te espero entonces.
— Te iré a buscar cuando salgas ¿sí? Ahora sigue trabajando.
— Oye..
— Dime..
— Te amo. —Sehun sonrió al escucharlo, se llevó una mano al corazón sintiendo los fuertes latidos de este.
— Te amo más.
— Mentira yo más.
— No, yo más y punto. Sigue trabajando ya no te distraigo, cuídate bobo.
— Está bien, te veo en unas horas, adiós.
— Adiós bobito. —Y cortó.
Las horas pasaron y Luhan aún no llegaba, decidió no más ir donde JongIn y escribió bajó la nota que el mayor le había dejado “Volveré mañana, espero te encuentres bien, Adiós”. Luego de escribir fue en busca del mayor a su trabajo como lo había planeado, no demoró más que unos breves minutos. Prácticamente había llegado justo a la hora puesto que cuando llegó, JongIn estaba saliendo, al comienzo el moreno no había visto al menor pero como Sehun le hizo unas señas, el mayor fue casi corriendo a su búsqueda.
— ¡Ya llegaste! —JongIn lo abrazó alzándolo de suelo, dejando sus pies en el aire, Sehun se aferró a su cuello procurando no caer además de haber dado un pequeño grito.
— Si, aquí me tienes bobo. —Sehun no tardó en juntar en sus labios en un tierno beso separándose con rapidez.
— Hey, dame otro.
— No, ya vamos a casa. —Rió por lo bajo tomando la mano del mayor y entrelazando de inmediato sus dedos.
— No hasta que me des otro beso. —En eso JongIn extendió sus labios cerrando los ojos, parecía un pequeño niño. Sehun no pudo resistirse a esa imagen frente a sus ojos, así que con velocidad tomó el rostro del mayor y plantó unos varios besitos en su boca.
— Tramposo. —Musitó robándole un último beso para ahora sí comenzar a caminar sin él.
— ¡Espérame!
Cuando llegaron a casa de JongIn, Sehun aún no le contaba lo que había pasado con Luhan el día anterior, y además JongIn tampoco preguntaba el hecho de que le dieran ‘’permiso’’ de quedarse a dormir con él. JongIn estaba cansado, hoy había sido uno de sus días largos, se recostó en su cama la cual mágicamente estaba hecha, a eso no tardó en hacerle compañía Sehun, ambos se abrazaron sobre la misma quedando realmente pegados el uno al otro.
— Debo contarte algo. —Empezó Sehun a hablar, sus rostros bastante cerca.
— ¿Sí? Anda cuéntame. —JongIn por alguna razón tenía miedo, así que fortaleció el abrazo quedándose en silencio esperando que el menor comenzara a hablar.
— Pues… Ayer Luhan terminó conmigo.
— ¿Q-Qué? ¿Bromeas? ¿Pero cómo?
— Nos descubrió, nos siguió el día de ayer y bueno… Cuando llegué a casa él no estaba, no sé a donde habría ido, y cuando volvió me lo dijo, y decidió terminar la relación, dijo que me dejaba el camino libre…
— Pero.. ¡Eso es genial! ¿Te das cuenta? Ahora podemos estar juntos Sehun. —Antes de que Sehun respondiera a eso, se vio atacado a besos por parte del moreno, eran tantos que casi no lo dejaban respirar, pero JongIn se dio cuenta que Sehun no le correspondía los besos como hubiese querido. — ¿Qué pasa? ¿No te gusta la idea?
— No es eso JongIn… me gusta la idea de estar juntos, pero no me gusta la idea de haberle hecho daño a Luhan.
— Bebé… No es tu culpa, iba a pasar tarde o temprano, y Luhan de seguro encontrara a alguien, tu tranquilo ¿si? —JongIn acariciaba la mejilla del menor a medida que hablaba, dejó un beso en su frente y lo acurrucó en su pecho. — No te sientas mal…
— Solo abrázame, contigo siempre me siento bien. —Sehun se dedicó a dejar uno que otro beso en el pecho del mayor, una sonrisa se formó en sus labios al sentir los brazos de JongIn abrazarle con tanta fuerza.
Sin darse cuenta ambos se había quedado dormidos, JongIn fue quien despertó primero ya que su celular comenzó a vibrar a mitad de la noche, no tenía idea quien llamaba a estas horas de la madrugada. Aprovechó también de cubrir ambos cuerpos con las mantas, así luego tomó su celular, era un número desconocido quien lo llamaba, no tenía ganas de contestar menos a un número que no tenía guardado entre sus contactos, pero volvió a vibrar a los segundos después.
— Alo, ¿quién habla?
— ¿JongIn? ¿eres tú?
— ¿Mamá?
— Si, llamo para avisarte que iremos a Beijing, necesitamos verte hijo.
— ¿Cuándo?
— Mañana.