Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Last Letter por sweet_sasusaku

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

La idea es completamente mía, escrita por mi.
Cualquier parecido con alguna persona, viva o muerta, es mera coincidencia.
Por el momento solo esta públicada aquí

¡No al plagio!

Notas del capitulo:

¡Hola! Sé que tengo proyectos que aun no termino y ya estoy aquí públicando otra tontería, pero no puedo evitarlo, me llegan de pronto ideas. Pero no se preocupen, esta idea es corta. :)

Una melodía que dibuje en un sueño, la canto para ti infinidad de veces. Cuando tristemente se dispersan las flores, podrá llegar a tu corazón…

 

 

Caminaba alegre, saltando en todos los charcos de agua que la lluvia nocturna había dejado. Le encantaba salir con sus botitas amarillas a explorar el bosque. Recién se habían mudado a aquel pequeño y maravilloso pueblo, alejados del ajetreo de la ciudad. Todo le era fantástico a Adrian, aquel pequeño castaño de ojos verdes.

Llego hasta su lugar secreto y preferido del bosque, bajo aquel árbol de flores rosadas y blancas, no había ninguno igual, solo ese, y Adrian lo sabía mejor que nadie, ya había recorrido todo el verdoso lugar.

De su pequeña mochila anaranjada saco el cuaderno que su mami le compro para dibujar, al igual que su caja de crayones, aquellos que eran tan especiales para el pequeñito castaño.

Pese a sus cortos siete años de edad, Adrian ya era atraído por la belleza del arte, amaba dibujar y escribir, de esto último hacía poco, al igual que leer, ya que recién había aprendido aquellas habilidades.

Dibujo nuevamente-como casi todas las hojas de su cuaderno-aquel precioso árbol que tanto le encantaba, con las flores que caían de vez en cuando sobre su cabeza. Aprovecho también los colores del amanecer, el sol ya había salido desde poco antes que llego, y aun así los preciosos colores en el cielo permanecían.

Su madre solía decirle que era un prodigio en eso de dibujar y pintar. Adrian no sabía muy bien lo que significaba, por lo que solo asentía y sonreía a su madre.

El ruido de los arbustos lo alerto, dejo su cuaderno y crayones de lado, levantándose del suelo y sacudiendo un poco la tierra de sus pantaloncitos cortos color azul. Camino a paso lento y movió aquel arbusto que se agitaba, asustándose un poco al ver salir un conejito blanco. Sonrió al verlo irse saltando, después su mirar fue a dar con el pequeño niño que se levantaba justo del otro lado del arbusto.

Adrian, se sorprendió al ver aquel niño, un poco más alto que él. De cabellera color negro como el carbón y ojos azules como el mar.

-¡Hola!-saludo efusivamente al acercarse, y su felicidad fue mayor al ver que el niño traía entre sus manos un cuaderno casi idéntico al suyo- Vaya… ¿también te gusta dibujar?

Se quedo de pie, sonriéndole al chico, sin embargo este ni siquiera lo miraba, y en su rostro no se mostraba gesto alguno. Adrian parpadeo confundido y se acerco un poco más a él.

-¿Qué pasa, tienes miedo? Tranquilo, yo no hago nada malo… mi nombre es Adrian, ¿Y el tuyo?

Sus brazos pasaron tras su espalda, moviéndose ligeramente de un lado a otro, esperando una respuesta, sin embargo el chico tan solo abrió su libreta y escribió un poco con su lápiz, mostrando después la hoja al castaño

-Yo…no puedo…hablar…-la lectura del pequeño Adrian era pausada, después de todo apenas había aprendido a hacerlo- ¿Y por qué no?

El castaño volvió a observar, con curiosidad, como el pelinegro volvía a escribir en su cuaderno para mostrarlo nuevamente.


Simplemente no puedo”


-Hm… ya veo…

El pequeño castaño entristeció un poco, atravesó el arbusto nuevamente hacia su lugar preferido, bajo el árbol de flores. El niño pelinegro pensó que tal vez había espantado al chiquillo efusivo, sin embargo se sorprendió al verle regresar con su cuaderno y cajita de crayones en mano.

Mi nombre es Adrian, ¿Y el tuyo?”

El peli negro mostro una radiante sonrisa al leer lo que el pequeño Adrian había escrito. Fue un lindo detalle que hiciera eso al igual que él, escribir en sus cuadernos.


“Me llamo Gabriel”


-¡Bonito nombre, Gabriel!

 Adrian tapo con ambas manitas su boca, soltando una leve risita. Comenzó a escribir nuevamente, se le había olvidado que debía hacer eso en lugar de gritar.

“Bonito nombre Gabriel… ¿Quieres ser mi amigo?”

Gabriel por su parte se sentía conmovido, una sensación extraña y única… era como cuando te llevan de paseo a tu lugar preferido o cuando te preparan un delicioso postre… Sentimientos parecidos a eso comenzó a sentir al hablar con Adrian.

“Sí, somos amigos ahora”

Y su mañana paso así, entre pequeñas y divertidas palabras en los cuadernos de cada uno, así como dibujos y juegos. Ambos pequeños se volvieron muy amigos en tan poco tiempo, tanto, que intercambiaron cuadernos, Adrian le regalo el suyo, lleno de dibujos, a Gabriel. Este por su parte hizo lo mismo, solo que su cuaderno tenía más letras que dibujos, era algo así como un cuento… un cuento que ahora regalaba y compartía con su mejor amigo, Adrian.

-Espero vernos luego, Gabriel-dijo alegre el castaño, tomando sus cosas para guardarlas en su mochila- Espero que te gusten mis dibujos. ¡Hasta luego!

Y así, el pequeño Adrian se dispuso a marcharse, no sin antes ser detenido por Gabriel, quien lo acerco y planto un beso en su mejilla. El pequeño castaño se sorprendió un poco, observando al pelinegro, quien tan solo se tiño de un color rosado, así estaban sus mejillas… Adrian sonrió y supo que tenía un color favorito ahora… Devolvió el gesto, sonrió y se fue.

Y así fue como Gabriel, conoció aquel sentimiento que siempre se mencionaba en los cuentos que su mamá compraba para él.


“Amor…”

Notas finales:

¿Merece algún comentario?
Espero que sí, aunque mi intención es compartir esta idea en la que quise plasmar un poco de mis sentimientos, ando medio sentimental estos días :P

Sin más hasta lueguito!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).