-¿A si que tienes novia, eh Peregrin?
-Si padre.
-Pues... ya era hora. Ya comenzaba a tener miedo de que hayas salido mariconsito.
-No padre, jamás.
Paladin miraba a su hijo serio. Pippin había decidido que era mejor decirle que tenía "novia". Hacía ya un mes que estaba "saliendo" con Diamante. Al igual que hacía ya un mes que no se hablaba con Merry. Desde que había presenciado esa escena de el y Estella, hacía un mes atrás. Había decidido, por algún motivo, no hablarle. Lo cual no había sido tan difícil puesto que Merry también había dejado de hablarle. No entendía que le pasaba a su primo como tampoco entendía que le pasaba a el. ¿Por que no se alegraba de que Merry este con Estella, si es que estaban juntos? ¿Y por que Merry estaba enojado con el? ¿Había hecho algo malo?
-Mañana te la presentaré padre.
-Eso espero. Como también espero que tener novia te aleje un poco de ese Bolsón y el otro Gamyi. Como también del estúpido hijo de mi estúpida hermana. Es el peor de todos. Esos tres son una muy mala influencia para ti. Siempre lo dijo y siempre lo diré.
Pippin apretó los dientes-. Si padre.
-Ve a hacer las compras. Y no tardes-. Dijo Paladin dándole unas monedas-. ¡Apresúrate que tengo hambre!
-Si padre.
Pippin salió de la casa rumbo al mercado. Era un hermoso día de fin de semana y estaba muy caluroso. A pesar del calor, el caminaba rápido. No quería tardarse tanto y que su padre lo golpeara por eso. Hacía casi un mes que no le pegaba y quería seguir así.
Pero en el mercado, luego de comprar toda la comida y meterla en su bolso, se disponía a irse cuando se encontró con quien menos quería encontrarse.
Su cabello rubio, su mentón bien formado, sus ojos, su nariz grande, todo esto inundo la mente de Pippin.
No podía dejar que Merry lo viera. No después de un mes sin hablarse. Pero ya era tarde.
-Pippin...
Merry estaba feliz de ver ahí a su primo. Pensó en saludarlo como lo haría todos los días pero luego recordó que estaban peleados por alguna extraña razón. El se había alejado, sin entender por que, cuando Pippin dijo que estaba saliendo con Diamante. Pero Pippin también se había alejado de el. ¿Por que? ¿Había hecho algo malo?
Pippin se dio la vuelta y lo miro a los ojos.
-H-Hola Merry.
-¿Como has estado? Hace mucho que no hablamos.
-Si... hace bastante. Es que he estado mucho con Diamante. Ya sabes... mi novia es mi prioridad.
Para Merry, esto fue una punzada profunda en el corazón. Y lo peor de todo es que no entendió por que le dolió tanto. Pippin sabía que esto era una gran mentira, pero obviamente no se lo diría a Merry.
-Me alegro de que sean felices-. Dijo Merry con esfuerzo.
-G-Gracias. También me alegro por ti-. ¡Ya esta! ¡Lo había dicho! Era mejor saber con seguridad si el estaba con Estella, lo cual era muy probable.
-¿Que?
-Pues... tu y Estella...
Merry se rió-. ¿Yo y Estella? ¿De donde sacaste eso?
Pippin se enfureció. Si había algo que le molestara mas que nada, era que su mejor amigo (¿o debería decir ex amigo?) le mintiera. Entonces estalló.
-No te hagas Merry.
-Enserio Pippin, solo tuvimos sexo una vez. Es verdad que desde ahí que la tengo pegada como chicle, pero no es mi novia.
-Desearías que lo fuera...
-¿Que te pasa Pippin? ¡¿Acaso te molestaría se Estella y yo estuviéramos juntos?!
-¡¿Por que tendría que molestarme?!
-No lo se. Pero... si no te conociera bien, diría que estas celoso.
-¿Celoso de ti? Por favor Merry... como si a mi llegase a gustarme la perra de...
-No Peregrin. Celoso de ella.
Pippin se quedó totalmente mudo. Eso no se lo esperaba para nada.
-¿Quieres saber la verdad, Meriadoc?- Pippin ya no sabía que decía. Solo pensaba que cometería un error muy grande, pero ya todo le importaba una mierda-. La verdad, es que este último mes he intentado alejarme de ti, luego de haberte visto comiéndole el pecho a esa perra-. Merry abrió mucho los ojos-. ¡No entendía por que, pero ahora lo se, Merry. Ya lo entiendo todo-. La voz se le comenzaba a quebrar y las lagrimas ya aparecían por su rostro-. ¡¡Estoy celoso de Estella Bolger!! ¡Me costo tanto aceptarlo! ¡¡Pero ya no me importa nada!! ¡¿Oíste?! ¡¡Nada!! No vuelvas a aparecer en mi vida y yo no apareceré en la tuya. Eso me hará bien.
-¡Pippin, espera!-. Pero ya era tarde. Pippin ya había salido corriendo, y no era lo que se dice lento. Merry suspiró. Deseaba correr tras el, pero había muchas cosas que no entendía, y decidió dejar las cosas así, hasta que pueda entender por que Pippin estaba tan enojado.
Se fue caminando hasta el lago. Era el mejor lugar para pensar, pero un chapoteo lo hizo esconderse detrás de un árbol. Eran Sam y Frodo. Ambos estaban en el agua jugando a salpicarse. No vio la ropa al costado del lago, por lo que supuso que se había metido con ropa. Frodo tomó a Sam y comenzó a hacerle cosquillas, lo cual terminó en un apasionado beso. Merry nunca los había visto besarse de una manera tan... intima. Estaban casi haciendo el amor ahí en el agua. El y Pippin siempre pensaron que Frodo y Sam eran bastante descuidados tratando de ocultar su relación. Muchas veces los veían tomándose de las manos por debajo del asiento en la escuela, o en la calle, cuando nadie veía se daban un pequeño beso, entre otras cosas. Ahí en el lago podía ir cualquiera y verlos.
Ambos salieron del lago para sentarse en el borde.
-¿Como esta mi pareja favorita?
Sam y Frodo voltearon para ver a Merry y sonrieron.
-Merry, ¿hace cuanto que estas aquí?-Preguntó Frodo.
-Lo suficiente como para saber que Sam es muy cosquilludo.
Sam se sonrojó.
-¿Por que se metieron con ropa?
-Sucede que estábamos muy tranquilos caminando por el borde, cuando al gracioso de Frodo se le ocurre empujarme al lago. Menos mal que puedo hacer pie. Mientras el se tronchaba de risa, yo lo tomé y bueno... así terminamos.
Merry se rió, pero luego recordó lo de la discreción.
-Chicos, creo que deberían empezar a ser un poco mas discretos-. Dijo Merry sentándose al lado de Sam-. Hoy tuvieron suerte de que sea yo el que apareció. ¿Pero y si era alguien mas?
Sam y Frodo se vieron y tuvieron que reconocer que no estaban siendo muy discretos.
-Es que estamos felices. No tienes idea de lo que es amar a alguien con locura y no ser correspondido-. Dijo Sam tomando a Frodo de la mano.
Ahí fue cuando Merry lo supo: Supo que eso era lo que el quería. El quería una pareja. Alguien a quien poder tomárle de la mano, darle un beso. Alguien con quien hacer el amor. a quien abrasar. Alguien a quien amar. Pero ese alguien... tenia que ser...
Se sintió enfermo unos segundos. No solo porque ambos eran chicos, si no también porque ambos compartían lazos de sangre, y eso nadie lo podía cambiar.
También se sintió un idiota por haberse comportado tan mal. No sabía como había dado la casualidad de que justo iba a su casa y se encontraba a el y a Estella haciéndolo. Sentía lo mismo, eso era obvio. Pero entonces, ¿por que estaba con Diamante? tantas preguntas y tan pocas respuestas.
Pero una cosa si tenía clara. Ya no le importaba que ambos eran chicos. Ya no le importaba que ambos eran primos. Ya no le importaba la sociedad, ni el padre de el. Solo le importaba eso que había descubierto:
Estaba perdidamente enamorado de Peregrin Tuk.
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