Cuando Miyuki llego a la práctica, no pudo evitar un ambiente ligeramente tenso y la ausencia de cierto vice capitán. Frunció el seño y camino hacia las dos personas que seguramente le darían la respuesta. Por suerte para el, Haruichi y Sawamura estaban juntos. Cuando los llamo se sobresaltaron y voltearon lentamente para enfrentarlo. Por sus expresiones estaba seguro que sabían lo que había pasado, sin embargo no entendía la parte del miedo. Aquello le hizo sentirse bastante inquieto y sentía la urgencia de saber lo que fuera que había pasado. Haruichi intento actuar con tranquilidad
-Miyuki-senpai ¿qué tal la terapia? -Por un segundo no comprendió a que se refería, aun que se recupero rápidamente
-ah bien, algo cansado pero ya es normal ¿dónde está Kuramochi? No lo veo por ningún lado
-ah esto... Sobre eso... -antes de que Sawamura pudiera contestar, el entrenador los interrumpió
-Miyuki, ven un momento, necesitamos hablar -Rei estaba a su lado y se le veía muy seria
-bien, ahora vuelvo -los otros dos suspiraron aliviados y cruzaron miradas
Todo el equipo había visto a Miyuki entrar a la pequeña oficina del campo. Diez minutos más tarde lo vieron salir hecho una furia. Era raro verlo molesto pero en ese momento un aura oscura lo rodeaba. No se detuvo en el campo, se dirigió hacia la escuela, paso a lado de Shirasu y Nori pero no hablo con ellos, sus compañeros se limitaron a seguirlo con la mirada. Nori paso del catcher a Shirasu y de regreso, estaba preocupado
-¿crees que estén bien?
-más bien yo me preguntaría ¿con quién estará enojado Miyuki?
-no entiendo por qué se puso así, entiendo que llegue a perder los estribos con facilidad pero hacia mucho que no se comportaba así. Debió ser algo bastante fuerte
-seguramente, yo solo vi salir a Rei y a Mochi
...
Miyuki caminaba por los pasillos, completamente molesto y sin prestar atención a nadie, no se fijaba tampoco a donde iba, solo sabía que tenía que llegar a la biblioteca y no encontrarse con el otro idiota primero. Había salido de la oficina antes de que el entrenador le diera permiso. Ni siquiera estaba seguro que hubiera terminado de hablar, ahora que lo pensaba, solo se precipito en dirección a la biblioteca
Miyuki había seguido al entrenador y a Rei, esperaba que ellos si le explicaran lo que estaba pasando.
-ocurrió una situación, Kuramochi tuvo un percance con Yuta.
-¿percance? ¿Qué paso?
-ese es el asunto, no estamos seguros y Kuramochi se niega a decirnos
-¿dónde está? -solo esperaba que no le dijeran que estaba en la enfermería todo estaba bien
-castigado en la biblioteca. Necesitamos saber que paso, de lo contrario podrían suspenderlo del equipo
Eso basto para que saliera corriendo. Por una estupidez como esa no iba a quedarse sin su vice capitán. Cuando por fin llego a la biblioteca se detuvo con la mano en la manija. Tomo aire e intento tranquilizarse. Empujo la puerta y el lugar estaba vacio salvo por el campo corto que estaba en una de las mesas enfurruñado, con los brazos cruzados y la cabeza gacha. La luz que entraba por la ventana detrás de donde se encontraba le impedía a Miyuki distinguir bien el rostro del otro.
Kuramochi levanto levemente la cara y lo vio parado en la entrada, se tenso y desvió la mirada. Sabía que se enteraría pero aun así no deseaba verlo tan pronto. El otro camino lentamente y se sentó en la silla de a lado, le ponía más nervioso su silencio, a que le estuviera gritando, tenía la cara volteada para que no le viera el rostro. Una vez sentado Miyuki dejo escapar un suspiro, aun hasta la biblioteca se podía oír los sonidos de la practica
-¿se puede saber que fue lo que paso? El entrenador dijo que tuviste un percance con Yuta pero no puedo entender como eso pudo terminar contigo aquí y la amenaza de que seas suspendido-los hombros se le pusieron aun más tensos pero no contesto. Algo molesto con el silencio del campo corto le hablo mas fuerte –¿podrías voltear a verme y darme una maldita explicación? ¡demonios Mochi!
Youichi dejo escapar un suspiro y lentamente giro el rostro para enfrentar al catcher, que tenía una expresión enojada que se convirtió en una de sorpresa al ver que tenía el pómulo morado, el labio y la ceja rota, en esta última ya tenía un parche. Sin pensar en sus actos llevo una de sus manos hasta la mejilla herida y con suma delicadeza la acaricio, el otro cerro el ojo, le dolía. Con un tono más calmado le hablo
-no fue un percance, te peleaste ¿qué fue tan malo para que llegaras a eso? -Kuramochi frunció los labios provocando una nueva punzada de dolor -no voy a dejar de insistir hasta que hables, así que mejor empieza a hacerlo
-te vas a enojar y después seguramente te vas a burlar porque tal vez si fue estúpido -Miyuki levanto una ceja
-ahora tengo más ganas de saberlo -Youichi soltó el aire con resignación
-Yuta es un idiota. Yo no estaba de humor y a él se le ocurrió abrir la boca. Dijo que nos sobrevaloraban y que sobre todo a ti. Que no entendía como al entrenador siquiera se le hubiera ocurrido nombrarte capitán. Que no valías nada como capitán y mucho menos como jugador -mientras hablaba apretaba mas los puños -que era una suerte para el equipo que te lesionaras
-Mochi, no es la primera vez que me dicen algo como eso y nunca ha logrado afectarme, mucho menos ofenderme, no debiste perder el...
-es que eso no fue todo -de pronto se le quebró la voz y las ganas de llorar lo invadieron -el... El dijo que no me sorprendiera si uno de estos días te ocurriera un accidente, que sería una pena que por fin quedaras expuesto como la basura que eras y que tu carrera terminara, que después de todo cuando ocurría una lesión no era raro que ocurrieran otras.
No pudo controlar por más tiempo las lágrimas que rodaron por sus mejillas. Kuramochi se cubrió los ojos dejando ver lo morado que estaban sus nudillos. Miyuki no sabía cómo exactamente reaccionar, definitivamente lo que Yuta había dicho lo afecto bastante como para que estuviera llorando y lo hubiera golpeado sin fijarse como lo hacía, por eso lo nudillos lastimados.
Llevaba días, exactamente desde que se había lesionado, creyendo que su amistad por el campo corto ya había pasado a ser otra cosa pero no se atrevía a decir nada creyendo que el otro no sintiera lo mismo. Pero verlo así, vulnerable y todo por su culpa lo hacía replantearse las cosas. Lo atrajo con cuidado de no lastimarlo y el otro escondió la cara en su pecho
-tan solo de pensar que algo malo te podía pasar me hizo enfurecer y perder el control, ya había sido bastante duro ver como el pitcher gorila te arrollaba. La simple idea pudo más conmigo y me le fui encima -Miyuki le dio suaves palmaditas sobre la espalda que temblaba ligeramente
-ya, ya, no va a pasar nada de eso, todo va a estar bien, tienes que calmarte, además si sigues así vas a arruinar el momento -Youichi se enderezo y vio a la cara de Kazuya
-¿el momento? ¿De qué hablas?
-pues de este, ¿acaso no es esto una confesión? -el otro se sonrojo furiosamente -porque si no es la tuya, entonces es la mía -y sin permitir alguna replica atrajo a Youichi de la barbilla y le dio un beso que sorprendentemente fue correspondido. Se separaron lentamente, ambos estaban sonrojados y Kazuya sonreía honestamente
-¿desde cuándo?
-mmmm desde la lesión, tu mirada de preocupación me provocaba cosas que no entendía -Kuramochi se mordió el labio
-pues no se qué esperabas que hiciera, tampoco yo entendía que me estaba pasando -en ese momento Miyuki entendió que las duras palabras que le había dicho antes de la final habían sido producto de la confusión y la desesperación que el también estaba experimentando
-¿qué voy a hacer contigo?
-nada, solo abrázame -Kazuya así lo hizo, aquello se sentía bien.
Después de varios minutos, Miyuki recordó porque estaban ahí. Dejo escapar un suspiro y levanto a Kuramochi
-aun tenemos un problema, golpeaste a Yuta y te has negado a dar una explicación, si no dices nada te van a suspender. Tanto el equipo como yo, sobretodo yo, necesitamos que mantengas tu puesto como capitán, ¿que no pensaste en eso? -el sonrojo regreso a las mejillas de Kuramochi
-ya te dije que no, solo quería partirle la cara a ese idiota
-y espero que lo hicieras hahaha -con un puchero murmuro
-mmm pues si lo hice
-hahaha ya lo creo. Ahora si le explicas al entrenador sobre la amenaza de Yuta, yo creo que él encontrara la manera de que tu castigo no llegue a la suspensión -Kuramochi no parecía tan convencido, en realidad lo que le preocupaba era que sus sentimientos lo traicionaran. En un acto inesperado para Youichi, Kazuya le dio un beso en la mejilla antes de decirle
-ya te lo dije, todo va a estar bien. Además yo estaré a tu lado.
Y con esa certeza ambos salieron de la biblioteca. En un movimiento de lo más natural Youichi sostuvo la mano de Miyuki por el meñique para recorrer juntos los pasillos de la escuela.