-¿Y ahora por donde empezamos?
-…
Tenían que ordenar la sala y esta vez Saitama decidió colaborar un poco más en la limpieza estando en medio de aquel desorden en el que se encontraban; al despertar ambos observaron la habitación hecha un desastre.
De la ventana –la cual ya no estaba- quedaban sólo trozos de vidrio esparcidos por el suelo además del polvo y el clima no ayudaba puesto que vivían en uno de los apartamentos altos se sentía más la corriente de aire frio; parecía que en cualquier momento llovería por lo que Genos se apresuró a limpiar la sala recogiendo restos de vidrio roto mientras que Saitama tomó la firme decisión de ir por algo que cubriese el enorme hueco –por así decirlo- que había quedado.
-Ahora vuelvo veré si encuentro algo barato que sirva… –aviso al menor mientras se rascaba la nuca- aunque no tengo idea qué.
-¿Quiere que lo acompañe?
-No, tú termina aquí.
El menor asintió viendo como el otro se ponía los zapatos y su típico buzo “OPPAI” para salir del lugar cerrando la puerta detrás de sí.
El joven cyborg al quedar completamente sólo en aquella sala se preguntaba que había sido aquello.
-Pero esto es extraño…
“¿Cómo no pude ver al culpable? ¿Y si vuelve? Sensei podría defenderse sólo pero…”
Entre tanto pensamiento termino de ordenar todo, ya sólo faltaba cubrir con algo el ventanal y al acercarse pudo observar como el cielo estaba más nublado; parecía de noche de tan obscuro que estaba.
“Hoy tendremos un día muy complicado ¿Qué le deparara a Ciudad Z y alrededores con respecto al clima? Traemos a uno de los mejor meteorólogos para que nos explique con detalle.”
“Bien para hoy se espera un hermoso día soleado con leves vientos del norte que-”
“Espere, espere ¿Qué diablos dice? ¡Esta todo tan obscuro que no veo ni mis cataratas!”
“o-oh… creo que me confundí de fecha, la verdad no tengo idea de lo que pase.”
“¡LÁRGUESE!”
Se podía oír el parloteo de ambos hombres pero él ya no estaba prestando atención a lo que sucedía en el programa, su mente sólo pensaba en porque el mayor tardaba tanto.
-Sensei… Me preocupa, al parecer se vendrá una gran tormenta ¿Habrá encontrado algo?
***
“Ah hombre ¿Qué es esto?”
-Apenas cubre la mitad, moriré de frío.
El héroe caminaba con un gran pedazo de vidrio bajo un brazo pero no lo suficiente grande como tapar todo el ventanal.
Aburrido de buscar llegó hasta una de las pocas tiendas que quedaban en la ciudad y antes que cierre entró en esta; al parecer tenía alguna que otra oferta la cual no desaprovecharía.
4x2 EN FRAZADAS DE POLAR.
“Me servirá de algo.”
-¡Señora! Me podría dar esto…oh, esto también.
-¡Claro que sí! ¿Desea algo más?
La mujer se veía feliz al parecer tenía muy poca clientela; además de él había un hombre con una chica quien lo atendía con mucha devoción al igual que la anciana.
-Mmm… creo que no-
Al girar la vista algo llamo su atención por un momento y al ver el precio no dudo en llevárselo.
-Quiero esta prenda también ¿Cuánto es todo?
La joven que atendía al hombre lo observo sorprendida e iba a preguntar algo pero al cruzar miradas con la anciana prefirió callar, les convenía vender lo más posible si deseaban salir de la Ciudad.
-¡Bien aquí tiene! ¡Espero que le guste a su esposa!
-¿Eh? Ah, sí gracias.
Salió un tanto confundido del lugar ¿Esposa dijo? El no estaba casado… no aún.
Al menos pudo comprar un par de sabanas más gruesas y calentitas para esa noche –a un buen precio- junto con la prenda nueva la cual no observo con detalle.
“Supongo que a Genos le servirá.”
*** Minutos después en la misma tienda***
-Mamá… debiste haberle avisado al muchacho sobre lo que en realidad estaba llevando tal vez se confundió, él vive con su amigo y no tiene esposa.
-¿Y tú que sabes?
-Bueno, es una de las pocas personas que vive por aquí y no tiene familia…. O eso creo.
-¡Eso no interesa! El la quiso además “el cliente siempre tiene la razón”.
-Mamá, ¡deja de engañar a los clientes!
-¿Qué? Tal vez a su amigo le entre el vestido y no le quede tan mal.
La mujer sonrió contando el dinero e ignorando todo reclamo que la joven hiciese mientras que Saitama llegaba al departamento con bolsas en ambas manos.
-¡Sensei! ¿Por qué tardo tanto?- el menor se acerco hasta donde estaba tomando las cosas que llevaba el héroe sin hacer esfuerzo alguno.
-Encontré algo para arreglar eso –apuntó en dirección a la alcoba- pero no cubrirá demasiado, tuve suerte en encontrar una tienda de ropa.
-¿Ropa?
El joven cyborg observo dentro de las bolsas; era cierto, había frazadas de un grosor y tamaño adecuados para cubrir a cualquiera contra el frío.
-Oh, también te compre algo ya que estaba en oferta…-al decir aquello saco una bolsa no muy grande del buzo canguro para entregárselo al menor- creí que lo necesitarías para los quehaceres, póntelo a ver si te queda.
El joven cyborg lo recibió ligeramente emocionado, era la primera vez que su sensei le regalaba algo.
- Gracias… ¿Qué es?
-Un delantal nuevo.
El mayor camino hasta la cocina buscando las herramientas que tenía para reparar aunque sea una parte del ventanal mientras Genos espiaba dentro de aquella bolsita pero lo que vio lo dejo sin palabras.
-¿Eh? ¿Qué sucede? Ve al baño a cambiarte, tengo que terminar aquí.
-S-si…
Obedeció entrando al cuarto de baño un poco confundido saco la prenda para observarla mejor.
-…esto no es… un delantal…
Un pijama de dormir con forma de vestido color rosado era adornado con una doble tela siendo una más transparente que la otra pero del mismo color que la anterior; aquello parecía más una prenda para estrenar en esos casos “especiales” de los cuales el joven cyborg poco sabía, que un delantal para hombre ¿Enserio su sensei lo había escogido? Tal vez se confundió pero… ¿Quién podría no diferenciar un delantal de un pijama “así” para mujer?
Además de que era un distraído Saitama se dejó llevar por el precio, pero Genos jamás pensaría mal de él por lo que se quito las prendas que llevaba y se dispuso a probarse la nueva vestimenta.
-Bien, terminé.
El mayor volvió a la cocina dejando las herramientas donde estaban y al no oír ningún ruido proveniente del baño se acerco a la puerta tocando un par de veces- Oye Genos ¿Estás ahí todavía?
-Si.
-¿Te probaste el delantal? ¿Te queda?
-… - el menor se observo y aquel vestido le iba perfecto, era de su talle- Si.
-Oh, ¡qué bien muéstrame!
-…
-¿Genos?
-…
-Hey…
-…
-Me estoy cansando ¡Sal de ahí! ¿Qué pasa? Quiero ver.
-No, sensei no puedo salir.
-¿Qué acaso también se rompió la puerta?
Apenas Saitama presionó un poco la misma logro entreabrirla pero fue cerrada de un golpe por el menor el cual apoyo todo su peso contra la misma.
-Ah, ¡Eso lo hiciste apropósito!
-Lo siento.
Iba a gritarle pero recibió un mensaje y al leer el remitente lo abrió estando aun en medio del pasillo.
Este era de King diciendo que iba de camino a su casa con Puri puri prisoner para mostrarle un par de juegos que quería probar aunque “no sabe” porque el otro se había integrado sin invitación por lo que Saitama no pudo negarse, ya estaban llegando aunque con el clima peligroso asomándose se veía venir aquello.
“Será una noche pesada” –suspiró rascándose la nuca volviendo a persuadir al menor a que saliera-
-Tarde o temprano tienes que salir, King y el otro… Esto…¿Cómo era? Ah, pri prisioner vienen en camino.
-¿Por qué vienen?
-A probar un par de juegos.
-Ya veo.
-“Ya veo” ¡nada! ¡Te dije que salgas!
-Pero-
-Ahora.
Saitama no solía repetir las cosas pero su aprendiz provocaba que lo esté llamando con un tono de voz más serio logrando que el menor no tenga de otra más que obedecer, aunque Genos siempre fue un chico muy obediente ahora se estaba comportando un tanto extraño según el héroe.
Abrió un poco la puerta y al asomar su rostro pudo ver con vergüenza la mirada que tenía su sensei, se veía bastante irritado por lo que opto por salir de su escondite por completo pero…
Un trueno y algo derrumbarse dio paso a más obscuridad.
Así es, se quedaron sin luz o gran parte de Ciudad Z más bien; no sólo fue un ruido estruendoso.
Al parecer más de un trueno cayó en los alrededores y cerca del departamento provocando la desconexión del servicio.
-¿Eh? Que mala suerte, sólo espero que con esto ese par no aparezca.
El mayor no llegó a ver la vestimenta que portaba el de orbes doradas pero este si pudo obtener su ubicación en medio de esa obscuridad busco sus prendas para cambiarse escuchando como tocaban un par de veces a la puerta.
“No puede ser…”
-Oh.
Chocando con un par de cosas tiradas en el suelo Saitama llegó hasta la puerta y al abrir la misma se encontró con dos figuras de gran porte frente a él.
-Aquí estamos.
-Hola ¿Genos vive aquí también? ¿Dónde está?
-Pasen de una vez tengo frió.
Al permitirles el paso Puri puri prisoner entró emocionado a aquella sala pero no podía ver nada; se maldijo internamente al no encontrar a ese ser tan atractivo para él.
Por otro lado Genos observaba toda la situación desde una distancia prudente sin hacer ruido alguno, no le agradaba la presencia de esos dos entrando al departamento donde ellos vivían como si fuesen los mejores amigos.
Mucho menos King quien le quito todo el crédito a su sensei haciendo que lo nombraran como “el hombre más fuerte del mundo” siendo el cobarde que era.
¿Qué decir del de apariencia extraña? No le interesaba en lo más mínimo y aún así le era molesto que este ahí sin invitación previa.
-¿Genos-chan? ¿Acaso no saludas a las visitas?
“Que desagradable”
-Oye Genos ven un momento.
-¡Si, sensei!
Al oír la voz del mayor no dudo en acercarse olvidándose que aún permanecía con “aquella” prenda.