Naruto llevaba enamorado desde toda su vida de un chico con cabello azabache, mirada profunda, súper cool, del cual todas las chicas del colegio suspiraban, vivía en la aldea de konoha, sabía que su amor no era correspondido, ya que ellos eran tan diferentes, además ambos eran chicos y una relación como esa no prosperaría, estar enamorado solo de esa persona era súper doloroso, mirarlo a solas desearlo tanto era casi un pecado, su amor imposible latía en su pecho dándole una vida dolorosa y vacía.
El solo contaba con trece años, siempre deseando ese chico, el un torpe rubio que solo deseaba probar esos labios aunque solo fuese una vez, aunque sentía que eso nunca pasaría, ya que su amor era muy frio con el, apenas lo notaba, aunque naruto buscaba siempre las maneras de pelear con el, competir, molestarlo, pero el no veia mas que solo una linda amistad hacia el cosa que le dolia bastante, su amor nunca seria real, solo era un sueño en su cabeza, desearlo tanto hasta el momento de dormir, era lo que hacia a diario.
Era sábado en la mañana y naruto estaba practicando en el bosque con sus kunais, lanzándolas en un árbol cercano, tratando de olvidar ese amor tan intoxicante que sentía por su compañero de equipo, debía olvidarse de él, ya que este tenía una relación, con su otra compañera sakura, el verlos juntos le lastimaba tanto, se sentía muy cansado, se sentó en un pequeño tronco, tomando algo de agua lentamente.
Noto una hermosa rosa blanca, algo seca por la falta de agua, se sintió mal por ella, tomo su cantimplora llena de agua, vertiendo un poco sobre ella, hasta humedecerla lo suficiente, para que esta bebiera agua, de la nada la bella rosa se transformó en un bello muchacho de cabello plateado, vestido con una larga túnica blanca, que le sonreía dulcemente-no temas naruto, gracias por darme de tu agua, lo necesitaba, por tu buena acción, hare que tu amor se enamore de ti, no entenderás al principio pero al final, el será tuyo-le dijo moviendo sus manos en su dirección, desapareciendo rápidamente.
Naruto lo vio irse sin comprender, lo que había pasado, lentamente se sintió mareado, cayendo sobre la grama completamente inconsciente.
Al despertar, ya no estaba en el bosque, estaba en una habitación que no era la suya, mirando el techo, donde estaba, se levantó de esa cama que no conocía mirando su reflejo ante el espejo-que es esto, no soy yo?, que ha pasado-dijo mirando su reflejo muy sorprendido sin podérselo creer.
Sus ojos veían el espejo, ¿Por qué le había pasado aquello?, ¿habría solución?, ¿esto sería real o solo sería un raro sueño?, no entendía porque pero algo le decía que todo esto era de algo que debía aprender, que si esto le estaba pasando era por un bien mayor, o que su subconsciente le estaba diciendo que fuese sincero consigo mismo, que fuese valiente y gritara su sentir, que nada era tan malo si podía decir las cosas, que hasta lo más imposible sería posible si podía creer que así era, suspiro intentando analizar cada detalle de ese día, ¿Qué había hecho de distinto?, algo en ese día tenía la respuesta a su reciente predicamento, ¿pero qué?, debía pensar con claridad, aunque su aspecto no le ayudaba a mantener la cordura.