--¡Claro que es normal! ¡Las personas que esperan un hijo siempre tienen estos síntomas! —exclamo el peliazul, abrazando a Natsu por la cintura.
Espera… ¿¡NATSU ESTA EMBARAZADO!?
--¡Eso es genial, Natsu-san! ¡Felicidades! – exclamo mi jefa, haciendo un movimiento de emoción con las manos.
--G-gracias—dijo este, con un gesto de vergüenza; estaba avergonzado—C-creo que me adelantare, m-mucho gusto en conocerlos—musito, haciendo una reverencia.
--El gusto es nuestro—
El pelirrosa salió del restaurante y subió a una limosina blanca, propiedad de los “Fernández”.
--Felicidades a usted tambien, Jellal-san; debe estar muy orgulloso por su tercer hijo—
--¡Claro que lo estoy! ¡No todos los días te dicen que vas a ser padre! —exclamo este, con una enorme sonrisa.
--¡Qué bien! Cambiando de tema, ¿a qué hora nos reunimos mañana para firmar el contrato? —dijo mi jefa, sin nada de vergüenza.
--Oh… mmm… en realidad, mañana tengo un compromiso con mi familia… no sé si pueda hacerlo…--
--P-pero…--
--¡Tengo una idea! ¿Por qué no me acompañan? A Natsu no le importaría; además, será muy divertido—
--¡Perfecto! Entonces… ¿A qué hora mañana? —
--Enviare un auto a las cuatro de la tarde; por favor, espero su asistencia—dijo el peliazul, inclinándose respetuosamente.
--¡Por supuesto! ¡Ahí estaremos! —
Después de ello; se marchó del restaurante, mientras me daba una sonrisita burlona.
Maldito…
--Erza, no creo poder ir a la fiesta mañana—
--¿Y por qué no? —
--No quiero estar rodeado de gente de la alta sociedad—
--Eso no me interesa; mañana vas a ir y eso es definitivo—
--No iré—
--¿Qué dijiste? —
--¡QUE-NO-IRÉ! –
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--Gracias a todos por estar aquí con nosotros, festejando el futuro nacimiento de mi futuro hijo; espero que pasen una noche excelente—exclamo Jellal-san, quien estaba frente a toda la multitud, con una copa de champagne entre sus dedos.
--¿¡POR QUÉ TUVIMOS QUE VENIR AQUÍ!?—
--Cierra la boca y compórtate; recuerda que es una fiesta, y hay mucha gente de la alta sociedad aquí—dijo mi jefa, reprimiendo mi deseo de escapar.
--Aye…—
Ella se alejó rápidamente de mi lado, dejándome solo, y comenzó a socializar con los demás invitados.
¡¡ES QUE EL MUNDO ME ODIA!!
--Buenas noches, Gray—exclamo una voz irritante detrás de mí.
--B-buenas noches, Jellal-san; l-linda fiesta--
--Gracias, todo sea por MI Natsu—
--Eres un… —
--Por cierto; hay alguien que quiere hablar contigo, ¿Por qué no vienes conmigo a mi oficina? —
--¡Maldita sea! ¡Pero si yo no conozco a nadie! —
--No te preocupes, es una sorpresa –exclamo el, guiñando un ojo; haciéndome un gesto para que le siguiera.
Camine detrás de él, evitando a los camareros que servían bebidas y bocadillos; y una que otra persona con joyas de gran valor; eso sí es ser millonario.
Pronto nos encontrábamos en una habitación finamente decorada; con un gran ventanal, en el cual se veía el jardín frente a él.
--Bien, supongo que volverá en un minuto; ¿Por qué no tomas asiento? –
--No sé lo que está planeando, pero no me da buena espina—
--Hace muchos años que no te veía, Gray Fullbuster; y al parecer no has cambiado—dijo una voz detrás de mí.
Gire rápidamente, y me tope cara a cara con una persona que no quería volver ver en toda mi vida.
--Lucy Heartfilia—
--¿Cómo estas Gray? —dijo ella con una sonrisa en su rostro.
--Los dejare solos, tienen mucho de qué hablar—exclamo el peliazul, cerrando la puerta, dejándonos a la rubia y a mí, solos en la habitación.
Nos miramos unos minutos en completo silencio, esperando a que hablara el otro.
--Veo que por fin lo encontraste—exclamo ella, con una sonrisa burlona.
--¿Por qué no me dijiste? —dijo con un tanto de enojo.
--¿Decirte sobre qué? —
--Sobre Natsu; sabes que lo estuve buscando por todos lados—
--Años de no vernos, ¿y solo vienes a decirme eso? –
Esa persona me desesperaba, no sé cómo Natsu la consideraba su “mejor amiga”.
--¿Qué haces aquí? – exclame con molestia, y de manera cortante.
--Jellal-san me pidió que cuidara a Natsu la semana que viene, mientras él se va en un viaje de negocios—
--¿Por qué nunca me dijiste que encontraste a Natsu? Dijiste que si alguna vez lo veías me avisarías inmediatamente—en mi voz se sentía el dolor, y la melancolía.
--Lo iba a hacer; pero al saber lo que le hiciste, no quise hacerlo—
--Maldita…, si supieras por cuanto pase…--
--¡¡¿Y CREES QUE A EL NO LE SUCEDIÓ NADA!!?; ¡¡NO TIENES NI IDE POR LO QUE HA PASADO!!—
Nunca le había visto enojada; sus ojos me veían con furia y parecían reprimir lagrimas; se veía demasiado molesta.
--Natsu solo vivió conmigo dos semanas, después se fue a vivir a la pensión del hospital; solo dos semanas bastaron para darme cuenta de lo que sufría; parecía que podía romperse en un segundo. Todavía lamento no haber podido ayudarle mucho con ello --
Su expresión parecía dolida; parece que ella tambien sufrió mucho por ello.
--Puede que no te conozca demasiado, pero sé que no me crees—dijo ella, buscando algo dentro de su bolso; sacando un sobre de el—Toma…--
--¿Qué es esto? —exclame, mientras me daba el extraño sobre.
--Es una carta que Natsu escribió para ti; b-bien yo le obligue a escribirla—dijo ella, colocando su mano detrás de su cabeza—Léela, y al fin conocerás la verdad--
Me daba miedo sus palabras; no sabía que era lo que me decía.
Giré el sobre, y vi la preciosa letra de Natsu; puede que haya sido doctor, pero se esmeraba en hacer una legible tipografía.
Cuidadosamente abrí el sobre, y saqué de igual manera la carta.
Me detuve algunos segundos antes de comenzar, no sé por qué; pero mi corazón latía demasiado rápido; sentía como si fuera a pasar algo que cambiaría toda mi existencia.
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Carta
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Para Gray Fullbuster:
Sé que nunca leerás esta carta; pero Lucy me obligo a escribirla.
No sé qué escribir; lo único que viene a mi mente en este instante, son todos esos maravillosos momentos en los que estuvimos juntos. Aun no puedo creer que hayan sido cinco años.
Quiero pedirte perdón; sé que algunas veces no podía estar contigo por culpa de mi trabajo o de tus estudios; y me hace sentí devastado el que no haya podido estar contigo en los momentos en los que más me necesitabas.
Fuiste el único que me apoyo cuando mis padres murieron; y tambien el que me protegía de todo lo que me pasaba, siempre estuviste ahí cuando yo más lo necesitaba.
Fuiste mi primer amigo; y tambien mi primer amor.
Te perdono por lo que me hiciste; sé que estabas demasiado presionado por culpa del fin del semestre, yo ya pasé por eso; siento no haber podido entenderte.
Tambien pido perdón por haber escapado; supongo que, si no lo hubiera hecho, tal vez y hubiéramos seguido juntos hasta el fin; pero culpo a mis descontroladas hormonas por todo esto.
Ahora mismo estoy viviendo con Lucy y su esposo, Sting; y ellos me han ayudado a superar lo que paso, y puedo decir, que estoy avanzando poco a poco.
Hay una última cosa por la que quiero agradecerte; gracias por el ultimo regalo que me hiciste, gracias por el pequeño que llevo en mi vientre.
Sé que nunca te lo dije; pero no quería molestarte con tus estudios; juro que, si traté de decírtelo, pero surgieron muchas cosas y nunca tuve la posibilidad.
Parecerá mentira, pero en este momento tengo cuatro meses de embarazo; y ya me dijeron que será un precioso niño; espero y se parezca a ti.
Su nombre será Yuki, porque nuestro aniversario siempre se celebró en la época invernal.
Gracias por todo, espero y te valla bien en toda tu vida.
Con amor…
Natsu Dragneel
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Fin carta
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Mis ojos estaban llenos de lágrimas; no podía creer lo que estaba escrito en la carta.
--Aki… ¿¡DONDE ESTA!? ¡¡¡¿QUÉ LE PASO A MI HIJO!!!?—no podía pensar bien en estos momentos; seguro y ese bastardo lo dejo en un orfanato, o lo hecho a la calle o…
--Yuki… ahhh… Yuki murió un mes después de que Natsu cayera en coma, aunque era un pequeño de siete meses, hizo falta oxigenación por parte de la madre; y nació con un problema en el corazón; Jellal hizo todo lo posible para salvarlo, pero no pudo lograr nada—exclamo con un tono triste y melancólico.
Ya comprendí lo que quiso decir Jellal-san.
--Entonces… ¿Qué vas a hacer? ¿Vas a seguir persiguiéndolo como loco o vas a dejar que siga su propio camino? —
--P-pero…--
--Ya sé que fue lo que paso; y entiendo que te hayas confundido, pero en este momento debes razonarlo; Natsu está casado, él tiene una hermosa familia; un lugar al que llamar hogar, ¿Quieres quitarle todo eso? —
--No… no quiero…--
--Entonces… ¿Qué vas a hacer? —
--Lucy…--
--¿Qué-vas-a-hacer? –
Sus palabras retumbaban en mi mente; no quería dejar a Natsu, pero tampoco quería hacerle más daño.
--Entonces… ¿Te das por vencido, Gray Fullbuster? —
--Si…--