Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Tácticas de Seducción por Kim Jong In [Three-shot] por PinkuPiinkiSoo

[Reviews - 9]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Esta historia es completamente ficticia. Las personas mencionadas aquí no me pertenecen y con esto, no se pretende ofender o dañar la imagen de dichas personas, es simplemente ficción.

Notas del capitulo:

 

 

Tácticas de Seducción por Kim Jong In

Capítulo Uno

 

 

 

Paso Uno

Acércate a él sin temor y con total confianza; Coquetéale, hazlo reír, sentir cómodo, halágalo diciéndole lo lindo o hermoso que luce y después, si lograste lo anterior dicho, serás un galán para él y sin chistar te dará su número telefónico para seguir con el contacto.

Sí no lo haces bien, lo más probable es que crea que eres un acosador y llame a la policía.

Abalado por Kim Jong In

 

 

 

Kai quería diversión es noche, caminaba casualmente entre la multitud buscando a su próxima víctima. Esa noche en especial no estaba en buscaba de presas fáciles, más bien retos. Chicos que mientras más difíciles mejor. Para su puta mala suerte no había encontrado nada, eso sí, muchas chicas habían ofrecido un trago, le habían coqueteado y una se atrevió a decirle que estaba buenísimo y que quería coger con él toda la noche.

Lástima que a Kai es más gay que la chingada.

Declinó todas las propuestas, estaba decidido a encontrar un objetivo y no se rendiría por un par de tetas. Eran alrededor de la una y media y aún no encontraba nada hasta que se le ocurrió mirar a las mesas del fondo como último recurso. ¡Aleluya que se le ocurrió echar un vistazo!

Justo en un rincón vio a la cosita más linda de todo el puto lugar, definitivamente ese bello joven le ganaba por knockout a cualquier chica o chico que ha visto en toda la noche…

Estaba distraído con su celular y la poca luz que se proyectaba en su cara era suficiente para notar ciertos rasgos como sus grandes ojos, cejas gruesas y lo que más captó su atención fueron sus labios; Abultaditos y carnosos. También, conforme iba avanzando inspeccionaba su vestimenta: Pantalón ajustado de mezclilla color negro, tenis Adidas negro con franjas blancas y una camiseta de cuadros negro y rojo. Su cabello estaba algo esponjado de arriba y un flequillo acomodado sutilmente cubría su frente.

El chico era una cosita suculenta y no se daba cuenta, Kai tuvo la necesidad enfermiza de masturbarse sólo con verlo. ¡Era endemoniadamente precioso! pero logró controlarse bien. No lo pensó ni dos veces, fue hacia su mesa y se sentó justo en frente. El chico alzó la mirada al igual que una ceja.

Era momento de cortejar muy al estilo de Kim Jong In.

—Hey lindura, ¿A qué horas vas por el Jjajangmyeon?  —Kai esperó la respuesta del otro, quien únicamente regresó la mirada a su celular.

—Aléjate.

Bingo, Kai había dado en el blanco.

—¿Tú crees? Yo me considero de lo mejor que hay en este antro de quinta. Si deseas divertirte soy el indicado.

El bajito sexy (Así lo llamó de momento) Suspiró ruidosamente y bajó su celular de golpe a la mesa. ¿Estaba enojado? ¡Esto le encantaba aún más!

—¿Qué parte de Aléjate no comprendiste?

—Grrr, con carácter. Me gusta.

—¿Te vas a alejar o no?

—Ok, ok. Tranquilo hermosura, sólo quiero platicar con alguien.

—Yo no. Así que piérdete.

—Me llamo Kai. ¿Y tú hermosura?

—Como chingas.

—Qué precioso nombre, ¿Es exótico?  —Sonrió Kai, a lo que el otro rodó los ojos.

—Sí. Adiós.

—¿Se puede saber qué hace un lindo chico como tú solo en esta pocilga?

—Vine para contar cuantos pendejos se acercan a hablarme. Oh que suerte, eres el número uno.

—¡Jajajajajaja! ¡Qué buen sentido del humor tienes amor! ¿Por qué no mejor dejas que este pendejo te invite un trago?

—¿Por qué no mejor te vas a chingar a tu madre?

—¡Jajajajajaja!  —Kai casi se estaba cagando de risa. No, no estaba fingiendo para simpatizar, lamentablemente son de esos idiotas que se ríen por cualquier pendejada.

Tenía razón respecto a ese sexy bajito (El cual por cierto lo miraba en una extraña combinación de asco, enojo y pena ajena) era un chico difícil y grosero además, el pack completo.

No, Kai no se daría por vencido.

—Si tan solo me dijeras tu nombre, éste pendejo se iría rápido a chingar a su madre  —Sonrió.

—¿No te vas a largar cierto?

—Nop. Así que ríndete de una vez~ 

—Lo que me faltaba, otro acosador. Yeih~  —Agitó sus manitas, como si estuviese emocionado.

—Oye tranquilo, no soy un acosador, soy más bien un asechador de chicos lindos.

—Es lo mismo imbécil  —Contradijo guardando su celular.

—Eres muy dulce~ Amo a los chicos dulces.

—A ver, ¿Qué es lo que buscas de mí? ¿Sexo? Si es así lárgate antes de que te arranque las bolas por pensar que soy una de esas putitas fáciles  —De nuevo, Kai comenzó a reír como pendejo.

—Ah~ Sí que eres muy dulce —Suspiro como niño de 5 años que ve pasar a la niña que le gusta— Creo que me estoy enamorando~

—Mira, o te vas o-

—¡Aquí estas!  —Otro chico apareció, interrumpiéndolo. Este era alto y de cabello castaño claro ondulado  —Te estuve buscando y-

—¿Qué mierda haces aquí? —El bajito sexy se levantó alarmado, se le veía enojado y lo que hizo fue llevarse al recién llegado como a 10 pasos de la mesa— ¿Me volviste a seguir?

—¡T-Tenia que cuidarte! —Dijo nervioso y agitado. Luego, este mismo observó detenidamente a Kai— ¿Tú quién eres?

Sin ningún interés o temor, Kai miro como ese extraño tipo se iba acercando.  

—Hey, hey. Mírame —El pelinegro se interpuso y con solo ver la gran diferencia de estatura daba ganas de comprarle una paleta y alborotarle el cabello, ¡Era muy pequeño! ¡Aww!— Lo que yo haga y con quien yo este, no es asunto tuyo. Lárgate, no quiero que arruines mi noche.

—¿Quién es el Soo? ¿E-Es tu amigo? ¡¿T-Tu nuevo novio?!

—¡Lárgate dije! —El bajito sexy que al parecer se llamaba Soo, empezó a empujarlo.

—¡No te lo permitiré! ¡S-Si yo me voy te vienes conmigo! —En un rápido movimiento, el histérico hombre lo sujeto de la muñeca— ¡No estás seguro aquí!

—¿Qué crees que-? ¡Suéltame!  —Soo intentó soltarse a jalones— ¡Déjame no quiero ir...!

Por suerte para Soo, su príncipe azul (O negro en este caso) estaba justo ahí para salvarlo. Kai se metió en el forcejeo y logró zafarlo, Soo inmediatamente se apartó del alto y se colocó detrás de Kai. Kai se sintió como un Lobo Alpha protegiendo lo que es suyo.

—Tranquilo, dijo que no quería ir, será mejor que lo respetes o me harás enojar.

—¿Que mierda te pasa estúpido?  —Aquel idiota estaba que no se aguantaba su propio enojo.

—Yo debería preguntarte eso, se nota a kilómetros que no le agradas.

—¿Que dijiste imbécil?

—¿Aparte de pendejo no escuchas o qué?

—¡Alto, ya!  —Intervino Soo mirándolos con molestia.

 —¿Que vas hacer eh, enano? ¿Vas a golpearme?

—Por supuesto que lo hare... —Kai avanzo decidido. El otro, seguía sonriendo de forma prepotente.

Lo que nunca se esperó el idiota ese, fue que Kai le arrojara la bebida que tenía consigo a los ojos. Esa fue suficiente distracción para que el moreno tomara de la mano al bajito.

—¡Corre!  —Gritó Kai al mismo tiempo que lo jaló.

Increíblemente Soo comenzó a correr, Kai se lo agradeció mentalmente mientras empujaba y se metía entre las personas que bailaban y se restregaban en el lugar. Lógicamente, el tipo los venía siguiendo, gritando quien sabe que tantas mamadas. Afortunadamente Kai conocía bien ese lugar, así que no tardaron mucho en perderlo y lograron salir por la puerta trasera.

Corrieron y doblaron un par de cuadras más hasta que sus piernas cedieron y se detuvieron. Kai estaba un poco agitado pero como siempre hacia ejercicio no se cansó tanto. El bajito sexy, de lo contrario, estaba agotado, se encorvó y apoyando sus manitas en sus rodillas para lograr estabilizar su respiración.

—Perdón por jalarte hasta aquí  —Dijo Kai—  Pero no podía dejarte con-

—¡¿Estás loco?! ¡Casi me matas de un puto infarto de tanto correr! Nunca había corrido tanto en mi puta perra maldita vida —Gritó aun con la respiración cortada. ¿De dónde salían tantos insultos?

—Solo intentaba ayudar… —Se defendió como pudo— Te estaba jalando, no me podía quedar de brazos cruzados, se tratara de quien se tratara.

—¡C-Cállate! ¡Por idiotas como tu es que mi vida es una mierda!

—Oye tranquilo, en serio lo siento.

—¡Eso no basta! ... ¡Ahh! ¡Tengo sed, maldita sea!  —Soo pisoteo el suelo repetidas veces lloriqueando. ¿Acaso eso era un berrinche? Kai se quedó embobado viéndolo y sí, estaba haciendo un berrinche. ¡Era tan lindo!

—Creo que es el momento de aceptar la bebida que rechazaste hace poco, precioso  —Sonrió—  ¿Qué dices?

El pelinegro frunció las cejas un poco junto con un puchero. Luego miró al suelo como si estuviera pensando y al final suspiro ruidosamente, aflojando sus hombros.

—Tienes mucha suerte de que tenga sed.

—¡Así se habla!  Anda ven~

Inconscientemente Kai le sujeto la muñeca otra vez y jaló de él, obviamente con más calma y caminando. Cuando se dio cuenta notó que Soo no le había dicho nada o soltado de inmediato.

Kai sonrió y se conformó con sujetarle la muñeca con cuidado, no quería arruinar este avance.

 

 

 

 

Bastó solo un minuto para que Kai saliera del pequeño lugar que estaba abierto las 24 horas del día con dos botellas de agua, jugo y una bolsita de dulces. Kyungsoo se había quedado afuera, al parecer quería comunicarse con sus amigos por teléfono pero cuando Kai salió lo vio haciendo otro berrinche. ¡Sí que era lindo!

—¿Ocurre algo?                                                 

—Los hijos de puta no me contestan, ¡Ninguno! ¿Puedes creerlo? Sí alguna vez me pasa algo o mi vida depende de ellos ya me hubiera muerto y para acabarla de joder mi porquería de celular se descargó. ¡Qué noche perfecta estoy teniendo!

—Lo sé cariño, conocerme fue una fortuna.

—¿Te gusta cagar las cosas, verdad?  —Kai rió.

—A veces  —Kai sacó las bebidas y le dio una junto con la bolsita de dulces.

—No te pedí dulces…  —Comentó el bajito ahora mirándolo con curiosidad y sospecha.

—No, pero quise obsequiarte algo  —Kai sonrió y le guiño un ojo.

—Que detallazo. Me halagas.  —Soo sonrió sin mostrar los dientes y Kai admiró como sus labios formaban un delgado corazón.

—De nada lindo. ¿Ya estás más tranquilo?

—Algo.

Comenzaron a caminar sin rumbo fijo y lo único que se oía era el ruidito que hacia la bolsita cada que Soo buscaba una gomita. Al parecer estaban sabrosas y cuando Kai vio que Soo se metía una gomita y después bebía el jugo, sonrió. Dedujo que no era la primera vez que hacia esa rara combinación de sabores.

—Supongo que debo darte las gracias.

—¿Eh?¿ Porque?

—Me libraste del idiota de mi ex novio  —Dijo antes de beber de la botellita de jugo.

—¿Ese idiota es tu ex? ¿No crees que esta algo loco?

—Por algo es mi ex, ¿No? Aun no supera la ruptura y me acosa todo el tiempo.

—Lo que necesitas es un nuevo novio para que te deje en paz~   —Bromeó.

—Ya lo intente y no sirvió —Dijo sin ganas—  Pero no fue un novio, me ayudaba un amigo y fingía que era mi novio.

—Vaya… Has llegado hasta ese extremo. ¿Cómo lo soportas?

—Mi situación es tan triste y pendeja que termine acostumbrándome.  —Rio a secas y comió otra gomita.

—Deberías solicitar una orden de restricción.

—Tiene orden de restricción.

—¿En serio?  —Soo asintió—  ¿Y entonces por qué sigue?

—¿Por qué está loco?

—Mmm cierto…  —Kai se detuvo y Soo hiso lo mismo—  Deberías ponerle un alto.

—¿Y qué hago? Ya hice de todo y sigue igual. Lo único que me queda es mudarme.

—¿Por qué debieras hacerlo? El del problema es él no tú. ¿Quieres que me haga cargo?

Soo lo miró y sonrió leve.

—¿Qué harás? ¿Matarlo con tu coqueteo intenso?

Kai comenzó a reír.

—Si no me queda de otra sí. Soy un experto en eso. 

—Uy si  —Soo rio a modo de burla—  Resultaste ser agradable maldito imbécil.

—¿Eso es un cumplido?  —Pregunto Kai, Soo se encogió de hombros.

—Tómatelo como gustes.

—Entonces será un cumplido.

Soo rodó los ojos.

—Como sea, seguramente mis amigos deben estarme buscando. Son como sanguijuelas no se apartan de mí, si no fuera porque pongo el seguro en la puerta entrarían conmigo al baño para verme cagar.

—Mmm, has ocasionado una imagen mental.

—¿Asquerosa?

—Más bien sexy  —Kai le guiñó sacándole una risa. ¡Ese chico era perfecto!

—Maldito enfermo…  —Sonrió negando.

—Es verdad, ahora que lo pienso, ¿Qué rayos hacías sólo en ese lugar?

—¿Ya te comente que tengo amigos idiotas?

—Más bien les dijiste hijos de puta.

—Lo que sea. Los malditos me obligaron a ir a ese cochino lugar, según ellos me haría bien pero los hijos de puta no llegaron temprano y me dejaron ahí con gente pendeja y rara. Luego apareciste tú.

—¿Cómo pueden dejar a alguien tan lindo como tú en un lugar así?

—Ya me las cobraré.  —Dijo ignorando el cumplido del moreno—   Es cierto, ¿Podrías prestarme tu celular? Seguramente deben estarme buscando.

—Seguro cariño.

Kai le entregó el aparato y el simple roce de sus dedos fue suficiente para hacerlo sonreír, el moreno vio atento como Soo tecleaba la pantalla, al parecer mandaba un mensaje de texto. No pasó ni diez minutos cuando una camioneta azul eléctrico se estacionó de golpe justo en frente. De ella se bajó un tipo extraño y anormalmente alto de cabello rojizo, él  corrió (Y tropezó por cierto) hacia ellos y abrazó a Kyungsoo al llegar, casi sofocándolo.

—¡MI pequeño, lindo e inofensivo Soo!  —Lloriqueó dramáticamente moviéndolo de un lado a otro—  ¡Casi me da un ataque!

—Más bien te dio un ataque.  —Kai vio a otro chico acercarse, él también había bajado de la camioneta—  Lo importante es que ya te encontramos.

—¡S-Suéltame C-Chanyeol que pinche asco hueles a sudor!  —El pobre Soo tenía la cara pegada al pecho del alto y sacudía sus brazos para que lo liberaran.

—¡Hyung es tan lindo cuando finges odiarnos! Anda no seas malo, estábamos preocupados por ti… —El segundo chico, el de cabello negro sonrió como idiota y a las risas.

—¡Vaya, cuanto amor!  —Exclamó Kai fingiendo felicidad. Sólo hasta ese entonces notaron al moreno. Soo aprovechó para soltarse del alto.

—¡WAAAA! ¡ME MORDÍSTE MI PECHITO!   —El tal Chanyeol se encogió y se llevó las manos a la zona afectada haciendo muecas.

—Y lo haría otra vez si vuelves hacer eso.  —Sonrió con malicia y escupió. Luego respiró ruidosamente y se acomodó su cabello mirando hacia Kai—  Primero lo primero, Kai ellos son los hijos de puta de los que te hablé; El idiota de cabello rojo se llama Chanyeol y el otro idiota Sehun.  —Los señaló y luego se dio la vuelta—  Chicos, él es Kai y al igual que ustedes es un idiota. 

Kai se rió por la peculiar forma de presentación.

—Qué tal Kai  —Sehun le saludó agitando su manita de lejos en total, ignorando por completo el hecho de que su amigo lo había insultado.

—¡Soo! ¡¿Qué dijimos sobre hablar con extraños?!  —El pelirrojo de nombre Chanyeol lo regaño frunciendo sus cejas.

—¿Y yo que te dije sobre decir pendejadas?

—¡Kyungsoo!  —Le volvió a regañar solo que ahora haciendo un puchero.

—¡Awww! ¿Es tu nombre completo?  —Kai se agarró las manos sonriendo dulcemente—  Kyungsoo… ¡Qué bonito!

—Adiós…  —Harto de escuchar tanta pendejada, Kyungsoo comenzó a caminar hacia la camioneta.

—¡No, no, espera!  —Kai logró colocársele en frente.

—¿Qué quieres?

—Anda no seas así, al menos dime que podemos reunirnos otra vez. De verdad me la pasé genial contigo bebé. ¡Hasta te di gomitas!  —Kai no solía hacer esto, pero hizo un puchero—  Por fis.

—Bien, bien. Admito que no eres tan desagradable y tu desesperado intento de coqueteo me divierte y bueno, te debo mucho por ayudarme  —Kyungsoo lo observo un largo tiempo y sonrió—  De acuerdo, ¿Cuándo nos vemos?

—¡¿QUÉ?!  —Chanyeol llegó escandalizado a su lado pero ni Kyungsoo ni Kai le hizo caso.

—El día que tú quieras amor.  —Kyungsoo rio por el comentario.

—De acuerdo, yo te aviso entonces Kai.

—Llámame JongIn.  —Sonrió con picardía.

—¿JongIn? Suena mejor que Kai… —El bajito sonrió y le dio un par de palmaditas en el hombro—  Nos vemos, JongIn.

Kyungsoo se dio la vuelta y siguió con su corto camino hacia la camioneta y al parecer Chanyeol seguía advirtiéndole de los peligros de hablar con extraños. Sehun pasó a su lado y le sonrió a modo de despedida. Kai sonrió al ver la enorme diferencia en la estatura de Sehun y Chanyeol con la de Kyungsoo. Los dos se pusieron a los lados de Soo y él quedó en medio, es como si protegieran a Kyungsoo, ¿Pero de qué exactamente?

Vio la camioneta marcharse y luego se reprimió al darse cuenta de que no le había pedido su número. ¡Felicidades Kai, la has cagado!

Tan pronto se reprimió recordó que le había prestado el celular al bajito, tal vez y el mensaje con el número estaría ahí, seguramente el numero sería del neurótico de Chanyeol pero eso no le importaba, sea como sea le sacaría el número de celular de Kyungsoo. Mala suerte, el bajito había sido astuto y borró el mensaje.

Puta vida.

Kai estaba a punto de hacer una rabieta cuando su celular vibró. Era un mensaje con un número en él y seguido de eso un par de letras.

 

Espero una enorme bolsa de gomitas cuando te vea, idiota.

Kyungsoo.

 

Kai sonrió como nunca lo había hecho mientras leía el mensaje y guardaba el numero con el nombre de Amorsh <3. Esa noche no tuvo una aventura casual, sentía que había conseguido algo más grande y la idea le gustó.

 

 

Fase de Seducción número uno: Lista.

 

Notas finales:

¡Hola! nwn/ ¿Cómo se la están pasando en sus vacaciones? Yo de lo mejor afortunadamente <3

 

¿Les gusto el cap? Apoco Kai no es un galán XD Ya tenía ganas de publicar esta mariguanada que comencé a escribí a finales del año pasado. Ojalá les haya gustado~ Por cierto, ya tengo cuenta en Wattpad, no le entiendo a esa chingadera pero allá también subiré mis mamadas. Tengo el mismo nickname por si quieren seguirme <3

 

Eso es todo por ahora, gracias por leer y comentar, si es que alguna lo hace :3 Besos~!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).