Capitulo 8: Te amo, Onii-san.
(Habitacion de Natsu)
-¿como que no iras con nosotros? ¿piensas dejarme de nuevo? ¿entonces porque me pediste matrimonio?-le gritaba furioso. el castaño trataba de resguardarse de todo ataque manteniendo una distancia prudente.
-no es eso Kyoya no voy a dejarte. ya te lo explique no puedo irme.
-¿y porque me pides que me vaya yo?
-Kyoya tu vida esta en Namimori, amas Namimori a la escuela, ni siquiera has terminado tus estudios. yo...
-en ese lugar ya no me importa nada, tu estas aqui, mi vida esta aqui ahora ¡contigo! ¡estudiare aqui no le veo el problema!
-¿estas seguro?
-¡si! ¡ya te lo dije! ¡voy a quedarme lo quieras o no!
-yo quiero que te quedes... pero no queria hacerte elegir entre Namimori y yo, amas ese lugar, es tu hogar.
-ya no. este es mi hogar... contigo. te amo mas a ti que ha nada, no seas tonto.-seguia molesto y se le notaba en su tono de voz, su mirada irradiaba enojo-mas del habitual-el castaño temeroso por su vida se disculpo con Kyoya y se retiro dejandolo solo para que se calmara.
era tanto asi el enfado del azabache, que la pequeña avecilla se habia ido acurrucada y temblorosa entre los cabellos castaños del Decimo Vongola.
-tranquilo, Hibird-dijo acariciando al ave sobre sus cabellos para calmarla, esta se froto contra sus dedos tiernamente.-eres tan lindo-sonrio complacido.
-"Natsu... Natsu"-piaba acurrucandose para dormir, esta vez mas calmado.
*
caminaba por el pasillo hacia la habitacion de cierto pelirrojo, se detuvo al escuchar ruidos extraños dentro. sonrio de lado, abrio la puerta y entro.
-¡buenos dias, Enma!-exclamo.
-¡Nii-san, sal ahora!-le grito su Tsu-kun molesto por interrumpir su momento con su novio. este ultimo se sonrojo a mas no poder al verse descubierto en aquella situacion por el castaño mayor. se levanto como pudo saliendo del agarre del oji-miel.
-buenos dias, Natsu-san-saludo acercandose a el con una sonrisa. el castaño sonrio acariciando los cabellos rojizos del mas bajo quien se sonrojo nuevamente. Tsuna molesto por la familiaridad y cercania de ambos hecho a su hermano de la habitacion sin importarle los reclamos de su pareja por ser tan grosero.
-¡largo!-exigio empujandolo afuera.
-tranquilo, Tsuna-decia riendose el mayor de los castaños.
-Tsuna-kun, no seas grosero.-reclamaba el pelirrojo.
pero al final el oji-azafran termino siendo hechado de la habitacion por su pequeño y celoso hermano menor.
*
luego de molestar a su hermano, se fue a un lugar mas tranquilo. alejado de la mansion, entre los frondosos arboles del jardin, adentrandose mas y mas en aquel lugar, llegando al fin a su destino, un prado donde se podia respirar la paz a plenitud, se acerco a aquella lapida donde tantas veces lloro la perdida de la persona mas especial en su vida, a la cual nunca olvidaria y amaria por siempre sin importar que.
se sento entre las flores blancas mirando con ojos llenos de lagrimas la lapida y el nombre inscrito en esta, delineando las letras con sus dedos mientras una sonrisa melancolica se formaba en su rostro. se recosto lentamente entre las flores, admirando el basto cielo azul recordando a su Onii-san.
Inicio del Flash Back.
-¡No!-grito el pequeño castaño de 5 años.
-vamos, "peluchito", debes quedarte.
-¿por que?-grito sin soltarse de la pierna de su Onii-san.
-vamos, "Peluchito". tu hermano volvera por ti mas tarde.-intento convencer al pequeño una mujer la cual seria ahora su maestra.
-¡no me digas asi! ¡Onii-san es el unico que me llama asi!-se quejo mirando mal a la mujer, a lo cual su hermano lo reprendio.
-disculpate, Natsu.-dijo mirandolo seriamente. ante ello el pequeño lo miro extrañado y asustado por esa mirada. ademas de que le habia dicho "Natsu" y no "Nat-kun".-ahora-ordeno viendo que el pequeño no hacia ademan de disculparse. este se separo del mayor y con la cabeza gacha se disculpo.
-lo siento.
-esta bien, Natsu.-dijo la mujer sonriendo.-¿porque no vas con los demas?-dicho eso, el niño se encamino a su aula sin siquiera despedirse de su hermano. aunque Giotto sabia que habia hecho bien en corregir al pequeño, tambien sintio que habia hecho algo mal.
*
Escuela.
una vez llego a recoger a su pequeño peluche de ojos calidos, se dirigio al aula, se topo con la maestra de Natsu, hablo con ella y esta le conto que se habia comportado, jugado con otros niños y hecho todo bien.
-pero ¿donde esta?
-salio hace unos minutos con otros niños. deben de estar cerca.
ante lo dicho por la mujer peli-negra el rubio salio del aula, buscando con desesperacion a su pequeño, ¿y que si se habia ido solo? ¿aun seguiria molesto?, esas y muchas otras preguntas se hacia asi mismo. se vio ahora en el patio central casi al borde de un colapso por no encontrarlo, mas un tiron en su ropa llamo su atencion.
-Onii-san.
-¡Nat-kun!-exclamo feliz y lo abrazo como peluche.
-¿por que lloras?-cuestiono preocupado.
-lamento haberte regaño antes, pero debes entender que fuiste grosero con tu profesora.-dijo el mayor, ganando un puchero de parte del castaño oji-anaranjado.
-es tu culpa.
-¿por que mi culpa?
-solo tu me dices "Peluchito" nadie mas. si fuese asi no seria especial-dijo sonrojandose. ahi fue cuando el mayor entendio la molestia de su pequeño "peluche".
sonrio.
-lo lamento, mi "Peluchito".-dijo cargandolo en sus brazos.-¿que te parece si preparo tu comida favorita como disculpa?
-esta bien.
Fin del Flash Back.
Sonrio mientras unas lagrimas se escapan de sus ojos, cubrio los mismos con su antebrazo y, se quedo alli, en aquel lugar que le traia tantos recuerdos, aquel lugar que lo hacia sentir nostalgico, aquel donde el y su Onii-san jugaban juntos, donde dormian sus siestas alejados de todos los de la mansion.
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z88;
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(Dentro de la Mansion)
la melodia de un piano resonaba en aquel salon, una pieza melancolica. mientras el de cabellera plateada tocaba, su acompañante se mantenia encimismado en aquella melodia.
Shoichi y Hayato eran totalmente opuestos. las unicas dos cosas que los unian por poco, eran su amor a la musica, el amor que sentian hacia una misma persona, y ahora el dolor del rechazo y la decepcion. pero gracias a esto se habian acercano el uno al otro. quizas por despecho, quizas por apoyo, quizas por una nueva oportunidad de amar. pero ahora eso no importaba, el tiempo hablaria por si mismo.
la noche anterior mientras charlaban en el balcon del salon. por alguna razon que el mismo Hayato desconocia, le pidio a Shoichi seguirlo para mostrarle algo. lo llevo hasta la sala donde ahora se encontraban, y toco algo que le gustaba interpretar cuando no se sentia bien.
Shoichi amaba la musica, tanto que cuando Hayato toco aquella melodia, sintio que todos sus problemas se habian esfumado de un momento a otro. solo guardo silencio y cerro sus ojos con una sonrisa.
un mismo dolor que los atormentaba fue el comienzo para ayudarlos a curar el mismo.
la musica se detuvo.
-fue muy hermoso, Gokudera-san.-menciono el pelirrojo.
-.......-no comento nada. solo sonrio ligeramente.
*
z88;
*
"Natsu... Natsu"
piaba el ave sobre sus cabellos. abrio los ojos con pesades, divisando una silueta conocida sobre el. lo vio, sus ojos azules, su cabello cenizo, era Alaude-san, el hermano mayor de Kyoya.
-hola, Alaude-san.-saludo reincorporandose. bostezo.-¿hace cuanto esta aqui?
-lo suficiente como para saber que tu herida sigue viva-hablo con sensilles, despues de todo el poseia la misma herida. se sento junto al castaño.-¿Kyoya se molesto?
-si. sabia que lo haria pero, crei que lo entenderia.-comento riendose ligeramente.
-¿sabes?, Kyoya te ama, incluso esta dispuesto a quedarse aqui contigo. ¿porque simplemente no lo dejas que se quede?
-Alaude-san, la vida de Kyoya esta en Namimori, yo no podria...
-ya lo se, no podrias hacerlo elegir entre su hogar y tu. pero deberias tener en cuenta que tu eres mas importante para el que cualquier cosa, ya estuvieron separados una vez hace 4 años, ¿no crees que Kyoya a sufrido bastante?-hablaba de tal forma que el castaño creyo por un momento que hablaba con alguien mas que ahora controlaba a Alaude-san. su sinceridad, su manera de haber dicho todo aquello.
-Alaude-san-llamo al mayor.
-¿si?
-me esta asustando-menciono temblando ligeramente sin dejar de ver al mayor, quien ante el comentario simplemente revolvio los cabellos del mas bajo, se recosto en el cesped y cerro sus ojos sin decir nada mas.
el castaño penso que lo mejor era dejar al otro en paz, despues de todo ese era el unico lugar en el que podia tal como el dijo; sentirse en calma.
"yo amaba a Giotto... aun lo amo, y aunque ya no este una parte de el siempre estara conmigo, yo lo se y pensar en ello me hace feliz. durante el tiempo que estuvimos juntos fui feliz. el venir aqui me hace sentir mas cerca de el, me hace sentir la misma tranquilidad que sentia al estar a su lado"
*
(Estancia)
-Nii-san-llamo el castaño sentandose al lado del mayor.
-¿si, Tsuna?-respondio sin dejar de mirar por la ventana.
-Enma me lo conto todo. Nii-san, quiero que hablemos de Onii-san. no quise arruinar la noticia de que te casaras con Hibari-san, por ello te lo digo hoy, quiero que hablemos de Onii-san.
-..........-trago grueso. ese tema era un Tabu legitimo para el.
-hable con Alaude-san, ya te lo habia dicho ayer.-hizo una breve pausa-Alaude-san tampoco sabia nada de la enfermedad de Onii-san, y cuando se entero no podia creerlo. Nii-san, te perdono porque... Te amo, y porque Oka-san ya me habia dicho lo que sucedia mucho antes de que tu me lo dijeras-confeso sorprendiendo a su hermano quien le presto total atencion.-¿te sorprende?, no eres el unico con secretos-dijo limpiando sus lagrimas y comenzo a reir ligeramente.
-lo lamento, Tsuna.
-habria deseado que todo fuera mentira, habria deseado pasar mas tiempo con Onii-san...-comenzo a llorar nuevamente-..*Sniff*. pero supongo que no habia nada que pudieramos hacer. solo lamento no haber podido decirle a Onii-san que lo amaba por ultima vez.-rompio en llanto total, no podia mas.
Inicio Del Flash Back.
11 años atras.
el castañito corria por la casa, vestia solamente una camisa muy grande de mangas largas, se veia tan lindo con ella puesta, reia mientras se ocultaba detras del sofa.
-oh, Tsu-kun. ¿donde estas?-llamo su rubio hermano mayor entrando a gatas a la sala divisando al pequeño detras del sofa.
-*rie*-el pequeño castañito reia divertido.-¡aqui estoy!-grito saliendo de detras del sofa.
-ya te vi, ven aqui-dijo acercandose a el. mas el niño de apenas 4 años salio corriendo para escapar del mayor, pero como la camisa le quedaba muy grande tropezo con la misma dandose de lleno en su frente, y comenzando a llorar desconsoladamente.
-¡Buaa! ¡Gio-nii!-grito llorando.-¡Buaa!
-oh, ya, ya Tsu-kun todo esta bien-dijo cargandolo dandole un cariñoso beso en su frentesita.-ves... ¿ahora como te sientes?
-*Sniff*... estoy bien. pero me duele aqui tambien-dijo señalando su mejilla. el mayor sonrio ante la inocencia y ternura de su hermanito, beso su mejilla haciendolo sonrojar.
-Te amo, Tsu-kun.-dijo frotando su mejilla con la del infante.
-*rie*.. yo tambien te amo, Gio-nii.
Fin del Flash Back.
-Onii-san te amaba.-dijo abrazando a su pequeño hermano.-no sabes cuanto te amaba.