Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Obsesión. por NennyCx

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

   Los personajes de Junjou Romantica no me pertenecen, solo la historia que se presenta a continuación es de mi autoría.

Notas del capitulo:

¡Hola!


Les saluda NennyCx.


Este fanfic ha sido publicado con anterioridad en otra plataforma, pero siempre he querido compartirla aquí. Espero sea de su agrado. c6;

—¡No por favor, no quiero! –pataleaba un joven castaño tratando de zafarse del agarre de un hombre mayor.

—D-dejeme ir, n-no le diré a nadie.

—No. –fue la fría respuesta de un pelinegro de ojos azules.

Entre sollozos el menor empezaba hablar.

—¿Por que hace esto sensei? Yo de verdad lo admiraba. –las lágrimas no paraban de salir de los ojos esmeralda de Misaki.

—¿Por qué?, dices... Porque yo amo a Takahashi-kun mas que a nadie. –contesto con una sonrisa que daba miedo mientras besaba a la fuerza a quien alguna vez fue su fan incondicional.

Muchos días antes.

El sol se colaba por la ventana con una intensidad que molestaría a cualquiera. Por si no fuera poco, una molesta alarma empezó a sonar impidiendo que, durmiera de más.

Entre estiramientos y bostezos en la cama un joven castaño intentaba despertar de su pesado sueño.

Quiera dormir un poco mas pero ya es hora... –pensó.

Aún adormilado, Misaki trataba de buscar sus pantuflas. Al momento de encontrarlas se dirigió a la cocina, abrió la puerta de su cuarto y bajo las escaleras entre bostezos.

Tomó un mandil que ató a su espalda y se dispuso a hacer el desayuno.

—¡Bien! –se dijo así mismo Misaki, con una sonrisa al estar satisfecho con el desayuno que había preparado. —Esto si es un verdadero desayuno japonés –decía mientras observaba la mesa en la que se encontraban dos platos grandes de arroz, acompañados de unos rollos de huevo, pescado frito y dos vasos con jugo de naranja. —Espero que a Usagi-san le guste. No tarda en venir. –su vista se dirigió a la oficina de Akihiko.

Al momento de terminar aquella frase se oyó un golpe muy fuerte en la parte de arriba de la casa, era él, su casero y con el cual llevaba casi cuatro años de relación, el gran Usami Akihiko.

—¡Buenos días! –saludo amablemente Misaki, con una sonrisa ya característica de él.

—Bue...nos días –apenas contestó Akihiko, un gesto no muy agradable pues la noche anterior se la había pasado sin dormir ya que tenía demasiado trabajo acumulado.

Bajo con dificultad las escaleras y se dirigió donde su amante lo esperaba para comer.

—¿Otra vez la misma historia? ¿No entiendes Usagi-san? Si sigues así vas a caer enfermo, y además perjudicas a Aikawa-san en el trabajo –Lo regaño Misaki.

—Caer enfermo no me preocupa tanto ya que así tu podrías cuidarme y consentirme como es debido –Akihiko hizo una pequeña pausa para dirigir su mirada coqueta a Misaki. —Además te podría comprar un lindo uniforme de enfermero –dijo mientras se acercaba a la mesa y agarraba su plato.

—¡N-Ni lo sueñes! –ruborizado hasta las orejas, contestó alterado el castaño mientras se sentaba a comer.

—Pero seria buena idea... –seguia molestándolo Akihiko. Con una sonrisa en su rostro al ver las reacciones de su uke.

Entre platicas y un par de risas comieron su desayuno.

Una vez que terminaron, Misaki se dispuso a recoger los platos para llevárlos al fregadero, estaba lavandolos cuando de pronto sintió como unos brazos le rodeaban fuertemente la cintura, enseguida volteo y Usami se le quedo viendo fijamente.

—U... ¿Usagi-san? ¿Que te sucede? –dijo el joven con voz temblorosa al momento en que se sonrojaba, pues presentía la respuesta de su amante.

—Me falta Misaki –le susurro al oído que al momento mordio con delicadeza. Lentamente poso sus labios sobre los de Misaki besándolo con suavidad. Conforme el tiempo pasaba el beso se volvia mas apasionado.

El menor correspondio el beso y lentamente la lengua del mayor iba introduciéndose a su boca. Después de unos segundos el joven poso sus manos en el pecho de Usagi para poder alejarlo. Si continuaban así terminarían en el cuarto del conejo y Misaki tenia muchas cosas que hacer.

—U...Usagi-san, dejame, se me hará tarde para la escuela –decía totalmente sonrojado, con la mirada perdida en el suelo mientras ponía su mano en la boca, tratando de recobrar el aire. Sin saberlo, esa imagen de Misaki alimentaba más la lujuria de su amante.

—No te preocupes Misaki, yo te puedo llevar o si lo prefieres puedes faltar pero de mi no te salvas el día de hoy –le respondió Akihiko con voz dominante mientras lentamente cargaba a Misaki estilo princesa y se dirigían al cuarto.

—¡Oye Usagi sueltame, escucha cuando te hablan! Usa... –este último no termino la frase ya que el mayor lo calló con un beso. Akihiko subió las escaleras con Misaki en brazos mientras lo besaba.

Al llegar al cuarto lo aventó a la cama. Una vez ahi, Misaki muy inocentemente trataba de huir de él gateando hacia el otro lado de la cama. Akihiko veía divertido a su amante y a la vez eso le fascinaba. Le gustaba lo adorable que podía ser con sus actitudes. Se subió a la cama con él y dejo caer todo su peso encima para que ya no huyera.

—¡Wah! Usagi... Pesas –le avisaba el castaño mientras trataba de quitarlo de encima. Mientras pataleaba y trataba de huir de ahí, lo único que hacia era frotar su trasero en el miembro de su amante. Inconscientemente lo estaba incitando a seguir.

Pronto Misaki se dio cuenta de su error y dejo de hacerlo pero ya era demasiado tarde. Sentía como un bulto estaba muy peligrosamente cerca de su trasero. Akihiko en un movimiento rápido lo volteo para que lo viera a los ojos y otra vez comenzó a llenarlo de besos. Siguió con su cuello al cual mordía y daba pequeños besos.

—U...Usagi... –Apenas podía articular palabra alguna, el castaño ya estaba perdiendo el control y poco a poco comenzó a ceder.

Akihiko le arrebato la camisa en cuestión de segundos. Fue dejando un camino de besos desde su rostro hasta sus pezones, los cuales comenzó a succionar, y en ratos mordía levemente.

—Ahh... Usagi... No...

Fue recorriendo su cuerpo con su lengua hasta llegar a su vientre. Lo despojo de sus pantalones y de su boxer al mismo tiempo.

En un movimiento rápido, pero a la vez cuidadoso, volteo a Misaki dejándolo en cuatro y rápidamente se acerco a un cajón sacando una pequeña botella de crema que le serviría de lubricante. Vacío un poco en su mano y empezó a prepararlo insertando un dedo.

—Ahh... –gimio un poco el castaño.

Akihiko no desaprovechó la oportunidad de molestar un poco a su uke. Mientras su dedo seguía en acción se acerco al oído de Misaki y comenzó a susurrarle.

—Hace unos momentos dijiste que no querías. –solto una risita que puso más avergonzado a Misaki.

—Estupido Usa... ¡Ahh!

No pudo terminar de hablar porque ahora no solo era un dedo el que se encontraba dentro suyo si no que otros dos se habían sumado. Pero eso no era suficiente para él.

Quería que Usagi entrara ya, quería sentirlo pero ¿Como decirlo? Simplemente no podía.

Por suerte, pudo oir como Akihiko se quitaba su pantalón, era como si leyera su mente, pero también le hacia quedar como un pervertido y se sonrojo aún más por lo que había pensado hace un momento. Sin avisarle entro a él.

—¡Usagi! Espe-pera...

Le había dolido un poco ya que el mayor había entrado muy rápido. Para que olvidara el dolor su Misaki, Akihiko empezó a masturbarlo al mismo tiempo que lo penetraba. Primero lo embestia lento pero poco a poco fue más rápido.

Finalmente acabaron de igual manera, Akihiko dentro de Misaki y Misaki en la mano de su amante. Su respiración era acelerada y entrecortada, ademas, sus cuerpos estaban sudados y agotados. Se recostaron un momento en la cama y el mayor empezó a susurrarle las palabras que hacían estremecerlo y acelerar su corazón a tal punto que pensaba que se iba a salir de su pecho.

—Misaki, te amo. –el peligris abrazo con fuerza el cuerpo desnudo de su uke, mientras, éste se inquietaba cada vez mas. Despues de alejarlo de él, Misaki tomo una ducha rápida. En menos de 5 minutos ya estaba listo y Akihiko lo llevo a la Universidad en su deportivo rojo. Tardaron menos de 10 minutos en llegar. Antes de que el menor se bajará, Usagi lo tomo de la mano.

—¿Tienes trabajo en la tarde? Si quieres podríamos ir a cenar o a donde quieras. A Misaki le encantó la idea y sonrió un poco pero esa sonrisa se le borro a los pocos segundos.

—Lo siento Usagi-san tengo trabajo –contestó un poco desilusionado Misaki.

—Ya veo... entonces nos vemos en la noche.

—Esta bien, nos vemos Usagi-san –se despidió de él con una sonrisa.

—Misaki... –le detuvo Usagi mientras jalaba su mano.

—¿Que pasa? –pregunto el menor intrigado.

—Te amo –contesto el mayor con una sonrisa en el rostro. Misaki no sabía que contestar solo se sonrojo y le volvío a decir "Nos vemos en la noche"

***

El día paso rápido para Misaki y ya era hora de volver a casa.

Pasaba de las seis de la tarde y empezaba a oscurecer. La luz del sol apenas se notaba.

Tomó el metro y se dirigió a su departamento, donde Akihiko lo esperaba.

Tardo alrededor de treinta minutos en llegar a su casa.

Tomó la llave del departamento y entro en el.

—Ya estoy en casa –aviso al entrar.

—¡Bienvenido! –una voz femenina le contesto.

—¡Ah!, Aikawa-san –contesto un poco asombrado por su repentina visita, pero no se había percatado de alguien más.

—¡Oh, Chibi-tan! –dijo una voz de un hombre, pero no era Usagi-san, solo una persona le decía así.

—Ah, hola Isaka-san –contesto en tono confundido.

Y al final escucho esa frase de la persona que más esperaba.

—Bienvenido –dijo Usagi-san viéndolo de re ojo mientras tomaba un sorbo de café. Misaki se dirigió a los intrusos que habían entrado a su casa.

—Ehmm... ¿Q-Qué hacen aquí? –preguntó aun confuso. Isaka-san fue el primero en contestarle.

—Vine a visitar a mi amigo Akihiko –contesto con su típica sonrisa.

Akihiko solo lo volteo a ver extrañado. Isaka-san continuo hablando.

—Y a invitarlo a la fiesta.

—¿Fiesta? –pregunto Misaki.

—¡Si! La editorial Marukawa quiere hacer una fiesta por motivo de su aniversario, en el cual estarán los autores más sobresalientes e invitaremos a la prensa ¡Sin duda será una de las fiestas más importantes!

—¡Pero como siempre el señor Usami Akihiko no quiere ir! –interrumpió en un tono alterado Aikawa.

—Esas son tonterías, pareciera que la empresa no tiene en que gastar el dinero –contesto con indiferencia el autor.

—¡Sensei! Esta fiesta es muy importante, por favor apoyenos, o es que... ¿Acaso tiene algo mejor que hacer? –preguntó Aikawa.

—¡Claro! Tengo que salir con Misaki.

—¿Y por qué no lo dijo antes? si ese es el caso ¡Que él también venga! –contestaron al mismo tiempo Isaka y Aikawa.

—Piensalo Akihiko, es un gran hotel lujoso, rara vez se puede ir a uno así y dudo que Chibi-tan te lo pida de manera directa.

—¿Eh? –Misaki quedo mas confuso que antes. ¿Acaso estas personas estaban pensando por él?

—Hmmm... Viendolo de esa manera... –hubo un pequeño silencio.

—Esta bien, ¿Cuando y a que hora es?

—Deje se lo anoto sensei –dijo Aikawa sacando una hoja y un lápiz.

Y como si la estuvieran persiguiendo escribió todos los datos a la velocidad de la luz.

—Aquí esta –Aikawa le entregó un papel a Akihiko y este con gusto lo acepto.

—Esperen ¿Qué? –preguntaba aún confundido Misaki pero nadie le hacia caso.

Ya era muy tarde así que Isaka y Aikawa se despidieron.

—Nos tenemos que ir, ¡Sensei contamos con usted! –Y un portazo es lo último que se escucho.

Misaki solo quedo ahí parado viendo como hacían planes entre ellos y como se marchaban sin tomarlo en cuenta.

—A mi nadie me pregunto si yo quería ir –murmuro con un tono un poco decepcionado.

Notas finales:

¡Muchisimas gracias por leer hasta acá!


Regresen pronto(? Supongo... :p


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).