El no era el tipo de persona desorganizada, claro que no, pero hubo un problema con el hecho de que su alarma no sonara, tenia un vuelo a corea, un vuelo que perdió por haberse dormido, en conclusión, su día empezó con el pie izquierdo.
KyungSoo quiso tirarse de un puente por haber perdido el vuelo y tener que esperar dos horas para el otro. Era realmente frustrante.
Él no tenía tiempo para eso, él tenía que ir a una de las galerías de corea a llevar lo que su padre le pidió, y claro, de paso, ver un poco. El no conocía los artistas de corea, para nada. El solo conocía a los de Estados Unidos y parte de Francia.
Bueno después de todo estudio en el extranjero y luego de haberlo hecho durante cinco años podía volver feliz y orgulloso de tener un gran título. Do KyungSoo, el gran escultor, hijo de uno de los más grandes famosos en la cerámica, su padre que tallaba con barro grandes obras que para el eran pasión, todos utensilios de cerámica. Su madre por otro lado era una gran dibujante, normalmente contratada por gente de alta sociedad y modelos. Dibujaba lo que los demás artistas en su mayoría no captaban, la expresión, la emoción, los sentimientos, todas actitudes abstractas reflejadas en el ser humano.
Se podría decir entonces que KyungSoo, era ante todo, el hijo nacido en talento, sus manos eran la adicción misma, desprendían poder y manipulación, D.O KyungSoo era uno de los más grandes escultores en su universidad, conocido por sus obras maestras de alta calidad. Tallando en barro al ser humano.
La familia D.O desprendía talento. Y KyungSoo fue la unión de ambos.
Y ahora ahí se encontraba, corriendo con todas sus fuerzas, luego de haber viajado y tomado un taxi para llegar a la galería.
-WAIT!, WAIT! (¡espere!, ¡espere!)- exacto ese era D.O KyungSoo, corriendo con todas sus fuerzas a la entrada de la galería que al parecer estaba por ser cerrada, y una vez llego ahí los guardias frunciendo el ceño sin entender-Shit do not understand me (mierda no me entienden)- era obvio después de todo el estaba hablando en inglés- But what an idiot I am, it is true that I also speak Korean (Pero que idiota soy, es cierto que también hablo coreano)- puede que haya olvidado que se encontraba en su país natal, puede que sea culpa de que corrió sin pensar sabiendo que la galería cerraría en cualquier momento, o puede que se deba a su idiotez.
Escucho varios ruidos de fondo y los guardias de un momento a otro dejaron de respaldar la puerta y se fueron, por lo que pudo ver el pelinegro, se trataba de muchos fotógrafos.
-Créeme me paso lo mismo- un chico de sonrisa de gato se apareció frente a el- Sin querer empecé hablando inglés, cuando es obvia que aquí no mucha gente va a entender. Me llamo JongDae, Kim JongDae.
-D.O KyungSoo.
-¡Oh! Eres el hijo de Hyuk- el chico frente a él tenía los ojos bien abiertos, un tanto sorprendido- Tu Padre me dijo que vendrías algo tarde.
-Lo siento
-No te preocupes, espera aquí y voy por unas llaves.
Estuvo alrededor de unos treinta minutos charlando con el tipo, y se dio cuenta de que era bastante carismático, divertido, por no decirle payaso o idiota, y al parecer era un administrador de esa galería y caza talentos, bien podría decir, que ya tenía una buena oferta, solo debía encontrar un buen modelo, y KyungSoo ya tenía en mente cual sería ese modelo.
…………….
No estaba escuchando absolutamente nada, no, claro que no, no después de lo sucedido, y después de haber sido ignorado por sus supuestos amigos. Claro además estaba el hecho de que no le creyeron y se burlaron de él.
-JongIn, ya entendimos, deja de estar molesto- obviamente eso fue dicho con tono burlón. MinSeok definitivamente no le creía esa historia.
-Es cierto, principalmente la parte en donde, dices que pudiste sentir a primera vista miles de sentimientos y emociones- esta vez fue Sehun quien se burló, JongIn realmente está considerando la idea de matarlos y enterrarlos sin culpa alguna en algún lugar.
-Y así se hacen llamar amigos- JongIn soltó un bufido- me voy, no tengo ganas de aguantarlos, no ahora- con eso último se fue del despacho.
El moreno le había contado como se sintió y lo frustrado que estaba con respecto a eso, estaba pidiendo ayuda para entender que mierda estaba sucediendo, pero entonces lo que recibió fueron puras burlas, sus amigos realmente eran los mejores.
A lo largo de su vida hasta ese momento, el jamás se enamoró, nunca sintió la necesidad de hacerlo, pero le había prometido a su mama, antes de que ella muriera, que encontraría eso llamado amor, sin embargo el no quería hacerlo, él estaba más preocupado buscando colores, que buscando el amor, pero ese día, cuando vio al chico, ese chico de figura pequeña, vestido de negro, ojos grandes, piel pálida, y unos labios de corazones, dudo, porque él no quería encontrar el amor, pero a veces la situación se invierte, y él aunque no quiera, tiene que aceptar el hecho de ahora es demasiado tarde, el amor y los colores aparecieron juntos delante de el, comprimiéndose en un ser, ese pequeño ser.
Si, estaba jodido, realmente jodido.
……….
Llevaba una semana en corea, ya se había instalado, tenía un bonito departamento, uno bastante cómodo, tenía su propia sala de talla, ahí podría tallar a sus musas.
D.O KyungSoo aparte de ser conocido por sus grandes esculturas, era conocido por sus manos, se podría decir que por cada trabajo necesitaba una musa, a veces le pedían una diferente y él tenía que aceptarlo, lo malo de la situación residía en el hecho de que D.O KyungSoo se convirtió en el chico nada profesional, ese chico que se acostaba con sus musas, claro que solía tener solo una, la misma chica de siempre, pero cuando los profesores le empezaron a pedir esculturas con diferente figuras, las cosas cambiaron, Sulli de repente ya no era su única musa y paso a segundo plano, Sulli fue su primer amor, y el por idiota lo arruino.
Pero eso quedo en el pasado, se volvieron amigos, a pesar de ambos saber que algo de cariño quedo entre ambos.
Se podría decir que el poder de KyungSoo descansaba en sus manos, las mujeres que pasaron por sus manos fueron, mujeres con suerte, el pelinegro no elegía a cualquiera, el hacia la propuesta y dependiendo de la expresión de sus rostros las elegía, no quería a una acosadora o a una loca obsesiva, no claro que no, tampoco a una de esas chicas que se ponían serias.
El tema ahora era elegir una modelo, porque para hacer la propuesta antes tendría que elegir a unas posibles chicas.
Su celular empezó a sonar sacándolo de sus pensamientos.
-Hola
-KyungSoo ¿?
-si
-Me olvide decirte que la escultura tiene que ser de un hombre, bien solo era eso. Adiós.
-Espera ¡¿Qué?!
Fue demasiado tarde para refutar el tipo ya le había cortado además del hecho de que él ya anteriormente había aceptado la oferta.
Él nunca había trabajado con hombres, no sabía si iba a ser incomodo o no, al menos para la otra persona porque KyungSoo hasta cierto punto llego a tener algo con hombres, no llego al final porque perdería su orgullo si lo hacía, pero si unas cuantas sesiones de felaciones.
Pero ahora estaba ese hecho de no saber que carajos hacer, conseguir modelos hombre le resultaría difícil, necesitaba uno que no sea homofóbico, y no estuviese alerta todo el tiempo, porque eso sin duda jodería su trabajo en la escultura, estaba en un debate mental cuando recibió un mensaje.
De: JongDae
Hora: 09:30
Por cierto para hacértelo más fácil ya sometí a uno de mis amigos para que sea tu modelo, así no tendrás que frustrarte buscando uno. Te mandare en seguida su número y dirección.
Cuando leyó el mensaje, sintió que se le quitaba un gran peso de encima. Bien la situación mejoro un poco, ahora solo tenía que conocer a su modelo.
…………
Una semana y media había pasado, una semana y tres días, y por más que insistiese a Luhan por las cámaras de seguridad este no se las daría, no a menos que distraiga a Sehun por una semana, pero él no podía hacer eso, esa era una tarea más que difícil. Luhan claramente no se libraría fácil de su amigo. Así que no podría cumplir esa tarea.
Pero él no se resignaría claro que no. No es idiota, no es como si estuviera locamente enamorado, tampoco era eso, pero sí por su presencia pudo sentir tan cerca los colores, lo buscaría, la sensación que en ese momento lo embargo era asfixiante pero la necesitaba de nuevo, porque en ese momento, el no solo vio los colores, vio sus colores, los colores de ese pelinegro tan hermoso. Sonaba tonto, puede que si, pero no se retractaría haría hasta lo imposible por hallarlo.
Lo feo de la situación fue que no pensaba hallarlo así, y por impulso hizo lo que hizo.