Ojos castaños,cabello oscuro,rasgos marcados y varoniles,buen cuerpo,amable,inteligente,capitán del equipo de hockey y popular entre las chicas. Aquello había hecho que Eve volviera sus ojos a Enzo en primer curso. Tenía toda su vida futura planificada. Primero empezarían a salir en el instituto ,serían coronados rey y reina del baile de fin de curso e irían a la misma universidad donde Enzo comenzaría a jugar en la liga profesional y le pediría matrimonio. Eve abriría un negocio de moda y vivirían en una de las zonas de lujo de la ciudad donde se codearían con actores,cantantes y diseñadores. Alrededor de los treinta años tendrían su primer hijo. Nada podía salir mal. Al menos eso pensaba ella hasta que se dio cuenta de que el joven no mostraba interés alguno en ella. ¿Es que acaso no tenía sangre en las venas? Y cuando por fin le parecía que sus esfuerzos podían empezar a dar resultado aparecía aquel patinador y lo monopolizaba de mala manera. Pero ella no iba a perder. Se desharía de sus rivales porque el chico más popular debía estar con la chica más popular. Aquel era el orden natural de las cosas y así debía ser. Se miró al espejo,peinándose con esmero y comenzó a maquillarse. Después eligió su ropa con un objetivo claro. Ningún chico en su sano juicio podría resistirse a ella con aquel look.
Como todos los días se reunió con sus amigas en la puerta de entrada y se desabrochó el abrigo al entrar en el interior del instituto. Iba a por todas. Vio a Enzo con la puerta de la taquilla abierta y se acercó a él con paso firme.
_Hola,Enzo...
El joven dio un bote al oírla,momento que ella aprovechó para colocar los brazos estratégicamente para hacer que sus pechos destacaran todavía más cuando él se volvió.
_Hola,Eve. ¿Qué querías?
¿A los ojos? ¿La estaba mirando a los ojos? ¡Ni siquiera una triste mirada a su escote. No sabía si era tonto o demasiado respetuoso para hacer eso. Asumiría que la segunda. Pasó el peso de su cuerpo de una pierna a la otra.
_¿No me notas nada raro?
_Eh...
Enzo la observó de arriba a abajo sin comprender muy bien que debía buscar. Él la veía tan descocada como siempre.
_Te has...¿cortado el pelo?
_No... -le respondió con una encantadora sonrisa.- Mira mejor.
_Eh... No sé...
Pasó la vista de la ajustada camiseta con el exagerado escote a la minifalda y los tacones altos. Siempre se había preguntado como hacían las mujeres para andar con aquellas armas mortales en los pies. Aunque aquello también podría aplicarse a sus patines. Pensar en aquello le hizo buscar a Noah con la mirada. Le localizó enseguida por su inseparable cazadora negra. Le sonrió y él le correspondió a la sonrisa. Enzo no pudo evitar fijarse en el suéter con amplio cuello de pico que el menor llevaba aquel día.
_Oh por dios esa clavícula tan sexy...-susurró,tapándose la cara con las manos mientras se sonrojaba.
Eve evitó dar un salto.¡Acababa de conseguir un piropo! No el que ella esperaba pero algo era algo. Se sacudió el cabello y se despidió de Enzo a todo correr para ir a cotillear de aquello con sus amigas. Noah se acercó al mayor,ladeando la cabeza.
_¿De que hablabas con esa?
_¿Eh?
_Con la pelirroja.
_¿Eve?
_Sí. Tu cara está como el color de su pelo.
_Ah,no... Yo... Solo quería que me fijara en algo. Pero no sé en que.
Noah se giró hacia el grupo de chicas y observó a Eve con atención un momento.
_Probablemente en su pecho.
_¿Por qué?
_Bueno,es una de las partes femeninas que más gustan a los hombres.
_Y...¿a ti?
El chico se limitó a encogerse de hombros y avanzar por el pasillo.
_Vamos. Llegarás tarde a clase si no te espabilas,Enzo.
***
Noah posó el mentón sobre una de sus manos mientras el profesor explicaba el nuevo trabajo de dibujo que debían hacer en parejas. Personalmente él no tenía demasiada habilidad para dibujar. Y tampoco es que supiera cual de sus compañeros tenía aptitudes para ello. Supuso que elegir uno al azar estaría bien. Vio como el grupo de chicas que comían con él desde el primer día cuchicheaban y señalaban mientras se reían a una chica gordita de la segunda fila y ella bajaba la mirada algo avergonzada. Quizá era hora de tomar cartas en el asunto. Se levantó de la mesa en cuanto el profesor dio permiso para seleccionar un compañero. Las jóvenes le llamaron pero él ignoró todo aquello y se acercó a la chica con una leve sonrisa.
_Hola. Eres Natasha ¿verdad?
Ella levantó la mirada hacia él con la boca muy abierta mientras las gafas se resbalaban hasta la punta de su nariz. Era bastante mona,o al menos a Noah se lo parecía. Además tenía unos bonitos y expresivos ojos.
_S...sí..
_¿Quieres que hagamos el trabajo juntos?
_Yo... Sí.
_Perfecto. Iré por mi silla.
***
_Tío... Eh,tío.
Enzo recibió un golpe en el brazo por parte de Ed que lo hizo volver a la realidad. Pero es que no podía dejar de pensar en lo de aquella mañana. ¿A Noah...le gustaban las chicas? Se había encogido de hombros,pero ¿qué significaba? ¿Qué prefería otras partes del cuerpo antes que los pechos? Tenía ganas de llorar.
_¡Enzo!
_¿Eh...?
_Espabila a elegir menú,tío. Que esto es como una película de zombies muy hambrientos. Mira ese...creo que está pensando en pegarle un bocado al que está delante...
El joven colocó un plato de pasta y una pechuga con ensalada en su bandeja, suspirando. Cuando ya se habían reunido con los demás del equipo en su mesa habitual vio entrar a Noah...de la mano de una chica de cabello castaño. Cuando le vio sonreírle no pudo evitar hervir de celos. Y parecía ser que no era el único. Había visto antes a aquellas chicas, siempre se sentaban con el joven patinador a comer y,aunque intentaban ligar con él a toda costa,él no les hacía ni caso. Ed le dio un codazo, insinuando que Noah se había echado novia y Enzo se limitó a gruñirle y meterse en la boca un buen bocado de carne y pasta. Novia. ¿En que lugar lo dejaba a él eso?
La chica se adelantó a Noah,buscando una mesa libre cuando una de las chicas a las que no les quitaba ojo le puso el pie delante para que se cayera. Todo el comedor se quedó en silencio al oír el ruido de la caída y el estropicio que se había formado en el suelo para después estallar en sonoras carcajadas. Noah se adelantó con una fiera mirada y le vació el plato de pasta encima a la culpable de la caída de la otra chica, que pegó un chillido al ver su camisa teñirse de rojo por la salsa. De nuevo el silencio. Enzo se levantó de la silla y agarró un puñado de tortellini de su plato,lanzándolo a otra mesa y acertándole de lleno en la cabeza a Drake que se volvió a mirarlo con odio. Debía mejorar su puntería.
_Mierda...fallé.
_¡Guerra de comida!-gritó Ed,subiéndose a la mesa.
Pronto el comedor se convirtió en una auténtica batalla campal. Enzo se metió bajo la mesa,observando como Noah hacia lo mismo con la chica unas mesas más lejos. Sus miradas se cruzaron y el joven le sonrió ampliamente. Enzo también le sonrió,al menos hasta que la cara de Drake se coló en medio de ellos.
_Vas a pagar por lo de antes...
***
_¿Sabéis que necesita esta sala?
Enzo suspiró,apoyando la frente sobre la mesa del aula de castigo mientras Ed hablaba sobre la música de harmonica y que le iba que ni pintada a aquel encarcelamiento. Al final la directora había intervenido mientras Drake y él forcejeaban en el suelo lleno de salsa de tomate. Aquello pareció no hacerle mucha gracia y los había mandado a la sala de detención,Ed incluido por ser identificado como el detonante de todo aquel estropicio. Volvió el rostro hacia Drake que se encontraba sentado en la silla con los brazos cruzados sobre el pecho y los ojos cerrados.
_Hey..
_¿Qué?
_Oye,lo de ayer...¿por qué llorabas?
_No creo que mi vida sea asunto tuyo.
_Ya,pero...
_Deja de hacerte el buenecito y pasa de mi ¿quieres? No soy tu obra de caridad del mes.
_Aún así. Si te preocupa algo puedes hablar conmigo. El deber de un capitán es cuidar de los suyos.
Drake no volvió a dirigirle la palabra en toda la hora. Tras despedirse de su mejor amigo en la puerta del instituto se dirigió a todo correr al pabellón. Noah debía haber acabado ya el entrenamiento pero no importaba. Al menos le acompañaría a casa.
***
_Creo que se meten conmigo solo porque no tienen personalidad ¿sabes? Es decir,actúan en grupo y todas con el mismo chip. Como...
_¿Los marcianitos de Toy Story?
_¡Exacto!
La chica se echó a reír a carcajadas mientras revolvía el azúcar de su descafeinado y alzó la mirada hacia Noah.
_Oye,Noah...
_¿Sí?
_¿Siempre eres tan serio?
_Supongo.
_¿No te ríes nunca?
_A veces...
_Te llevas muy bien con ese chico de tercero.
Una sonrisa se dibujó en los labios del joven haciendo que ella parpadeara algo confusa. Le había visto sonreír pocas veces de aquella forma y la mayoría,por no decir todas,cuando aquel chico estaba rondando.
_Puede que esto te suene muy brusco y no quiero que te ofendas pero,ese chico... ¿te gusta?