Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

EL ACTOR Y EL CONDE [CHENMIN] por solokik

[Reviews - 42]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Llegó, esta aquí, este es el último capitulo de la historia.

Gracias a todos por leer, pero en especial a esas 4 o 5 personas que se tomaron el tiempo de dejar su rw.

Minseok había sugerido que la mejor manera de celebrar su primer año de casados sería hacerlo con la familia, sin que la mitad de los nobles de Seúl invadieran la mansion Kim pero Jongdae desestimó directamente la idea, y por eso Minseok estaba en ese mismo momento teniendo una pequeña charla con el señor Yoo Jaesuk, sin duda unos de los miembros más aburridos en el país.

—El problema con las anguilas —Hablo el señor Jaesuk hinchando el pecho como si estuviera a punto de ofrecer un gran conocimiento—, es que tienen un montón de huesos ¿Y quien quiere pasar su tiempo en la mesa sacando huesos de anguila de su boca?

—Sí, puedo ver la preocupación —dijo Minseok cortésmente preguntándose si podría escaparse haciendo sucumbir a Sohee en otro desmayo.

—Lamento tener que arrancarte de tu conversación querida —dijo Jongdae, magnífico como un caballero de brillante armadura—, pero hay algo urgente que necesito hablar contigo.

—Oh, por supuesto, le pido disculpas señor Jaesuk pero parece que mi marido no puede vivir sin mi consejo.

Unieron sus brazos y caminaron a un lugar apartado, fuera del alcance del oido de las personas que daban un paseo por los jardines disfrutando de un día sorprendentemente cálido para principios de primavera. —Mi héroe —dijo Minseok —, pensé que me aburriría hasta morir.

—No podemos permitir eso porque entonces tendría difícil la tarea de encontrar un nuevo cuerpo complaciente sobre el que saciar mi gran deseo.

—Y ¿dónde encontrarías uno? Todos en la corte deben saber que estás loco por esa extraña mujer tuya y si la pierdeses te consumirá una locura tan grande que nadie se acercará a ti.

Jongdae se echó a reír. —Razón de más para mantenerte vivo entonces.

Siguieron caminando, estaba contento por un momento de paz lejos de los invitados y sus felicitaciones. —Creo que una buena parte de la gente que está aquí en secreto se sorprende por el cambio en tu comportamiento.

—Algunos no tan en secreto, el señor Kang me preguntó directamente si tus habilidades en la cama marital eran tan grandes que me había alejado de otras mujeres, más bonitas.

Supuso que debería escandalizarse pero lo encontró bastante refrescante que alguien expresara lo que la mayoría de la corte estaba pensando realmente. —¿Y tu respuesta?

—Que no hablaría de una dama de esa manera.

—Vamos, eso no lo puedo creer.

Jongdae se echó a reír. —He ensalzado tus virtudes por supuesto, dando a entender que nunca he estado tan saciado.

—Si no tienes cuidado seré yo quien consiga ofertas de la corte y entonces ¿que harás?

—Simplemente tendré que encerrarte en mi dormitorio, lo que creo que sería una buena idea, incluso si no tienes proposiciones.

—Al menos, eso significaría que para nuestro próximo aniversario de boda no tendría que soportar estas multitudes.

Jongdae dejó de caminar y se quedó callado, pensativo, Minseok se preguntó si dijo algo incorrecto. —¿Jongdae?

—Estuvimos de acuerdo en un año o dos —dijo después de lo que pareció una eternidad.

—No entiendo.

—Cuando estuviste de acuerdo en representar a Sohee, dijimos un año o dos.

El gran peso de inseguridad del que había estado libre por meses se recostó sobre sus hombros, se volvió para mirar la residencia, a la gente pululando felizmente en los jardines de un lugar que él había llegado a considerar como su casa. Parpadeó para contener las lágrimas que se negaba a derramar y pese a la espesura en su lengua, le pregunto —¿Quieres qué me vaya?

—¡No! —Jongdae lo agarró, girándolo para afrontarlo—. ¿Cómo puedes preguntar tal cosa?

—Tú eres el que mencionó nuestro acuerdo.

—Simplemente estaba reflexionando sobre cómo llegamos a estar donde estamos. —Descansó la mano en su mejilla—. A tenerte hablando con cariño sobre el futuro, tan lejos de donde empezamos.

—Oh.

—Ah, por cierto, nunca ha habido nadie como tú Minseok, nadie que haya capturado mi corazón completamente, la corte está llena de caras bonitas pero no son nada para mí, prefiero morir antes de que me dejes y voy a pasar los días que me quedan asegurándote que no hay razón para que te vayas. —Besó su frente—. Pero si bien no puedo pedirte que interpretes a Sohee por el resto de tu vida, voy a luchar con uñas y dientes para mantenerte en la mansión Kim.

—Estaría más seguro si Sohee fuera victima de una enfermedad, hay días en que me pregunto si la suerte nos abandonará y me empujaran contra la pared para quitarme la cabeza.

—La muerte de Sohee podría arreglarse, tengo suficientes amigos en los que se puede confiar si es necesario —dijo Jongdae y Minseok pareció oír un toque de tristeza en su voz.

—¿Es eso lo que quieres?

—Lo que quiero es a ti, no me importa si viene de la mano en un corsé o pantalones, quiero asegurarme que eres feliz y no tengo ningún deseo de que te vayas, la decisión final debería ser tuya ¿Qué eliges mi amor?

—Prefiero seguir desempeñando el papel de Sohee, a que la corte crea que una vez más estás disponible —admitió—. Ya es suficientemente malo que algunos todavía piensen que pueden tentarte.

Jongdae resopló divertido. —¿Y crees qué no tengo los mismos celos cuando las mujeres miran a Minseok con un ojo puesto en el matrimonio, o la mirada lasciva de los hombres ante un joven con el que debe ser fácil acostarse? Tengo que apretar los dientes y aplastar mi impulso de arrancar sus corazones por atreverse a codiciar lo que es mio.

—Entonces está decidido.

—¿Lo está?

Minseok le dio un casto beso. —Cuando decidamos, juntos, que ya es hora de que parta Sohee, entonces Ahn Minseok seguirá acompañándote como tu cuñado, pero hasta entonces, la dama Sohee seguirá siendo la devota esposa del Conde Kim Jongdae.

—Y no dejes que ningún hombre o mujer intente separarlos. —Jongdae sonrió y lo besó profundamente.

—Debemos volver con nuestros huéspedes —dijo cuando escucharon un grito de triunfo de la dirección de la partida de bochas.

—De acuerdo, creo que si jugamos juntos podemos borrar esa sonrisa petulante de la cara de Kyungsoo y darle a tu prima Seohyun otra cosa para burlarse de él.

Cogidos del brazo, se acercaron de nuevo al césped y Minseok sonrió feliz consigo mismo. Todavía necesitaban ser cuidadosos y sabía que tendría que mantener sus celos a raya, pero estaba más que dispuesto a seguir desempeñando el que se había convertido en el mejor papel de su vida.

Notas finales:

Si, eso es todo.

El interes en una segunda parte no se vio, no solo lee una persona, o eso quiero pensar, así que este es el final hasta que encuentre algo mas que quiera compartir.

El libro se llama "El actor y el conde" la autora es Rebecca Cohen, pertenece a una trilogía sin nombre, esta completa para quien la quiera buscar, creo que esta de mas, pero lo pondré de todas formas, la lectura no va a ser la misma, pero igual la recomiendo.

Eso es todo.

Hasta la próxima.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).