Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

RinHaru week 2017 por Yaoi lovers

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Y aquí me tienen de nueva cuenta con el tercer día, varias veces pensé que no llegaría hasta aquí a tiempo xDDD Pero aquí estoy y esto fue lo que preparé

Su historia estaba marcada por la eterna e imparable competencia, todo entre ellos terminaba volviéndose una lucha por demostrar quien era más rápido, más ágil o más hábil y en esto las cosas no podría ser diferente.

 

-¡Agh! ¡Todo es culpa suya! ¡Es su culpa por ser como es y por dejar que rebasara esa barrera que tiene con todos!-despeinaba su cabello mientras daba vueltas alrededor de su habitación lleno de ansiedad, sintiendo que en cualquier momento terminaría pateando y derribando todo a su paso.

 

-Rin ¿Quieres evitar poner de cabeza la habitación? No tengo intenciones de reparar los destrozos que hagas y de ninguna manera voy a responsabilizarme por algo que no hice. No soy tu madre y no hay manera de que actúe como ella a causa de tus caprichos ¿Qué crees que pensaría todo el equipo al ver al capitán actuando como un niño?

 

-¡Es culpa de Haru! ¡Aquí el único culpable es él! ¡Ve y dile que se haga responsable por lo que hizo!-seguía gritando mientras daba vueltas buscando algo que lanzar.

 

-¿Nanase? ¿Qué tiene que ver él aquí?-se apoyó en el marco de la puerta con los brazos cruzados mientras lo miraba.

 

-¿Y lo preguntas? ¡Es por él que estoy así!-se dejó caer pesadamente sobre la litera frotando su rostro con desesperación-Sousuke... Estoy enamorado-y por primera vez en todo el tiempo que llevaba ahí levantó su vista y la dirigió a su amigo, mostrándole sus ojos ligeramente humedecidos con las pupilas dilatadas.

 

El moreno lo miró confundido aún sin cambiar de posición, intentando descifrar el mensaje, aparentemente oculto, en las palabras del chico. Luego de unos minutos observándolo mientras esperaba que se tranquilizara se sentó a su lado apoyándose sobre su palma mientras lo miraba.

 

-¿Quieres decir que todo este drama tiene que ver con el hecho de que te atrae Nanase?-mantuvo su mirada fija en él mientras asentía un poco cabizbajo-¿Cuál es el problema con eso? ¿Te preocupa el qué dirán o que pueda rechazarte?

 

-¿¡Ah...!? No me interesa la forma en que me vean otras personas, que me guste Haru no tiene nada que ver con ellas y estoy seguro de que no hay manera en que me rechace, no puede hacerlo luego de enamorarme-y de nuevo comenzó a quejarse y reclamar por lo que el otro chico había hecho.

 

Y al menos en eso tenía un punto a su favor, pues si bien no conocía al cien por ciento lo que el más bajo sentía por su mejor amigo, al menos está seguro de que, aunque fuera un poco, la atracción era mutua.

 

-¿Vas a decírselo?-preguntó luego de unos minutos, cansado de tanto reclamo sin sentido y quejas.

 

-¿Bromeas? ¿Después de todo lo que te he dicho crees que permitiré que me derrote?-el más alto lo miró incrédulo, no entendía a qué quería llegar con tanta palabrería si estaba decidido a no hablar de sus sentimientos-Por supuesto que no voy a declararme...-una sonrisa burlona se dibujó en sus labios anunciando el inminente caos, o al menos así lo veía su amigo, que estaba a punto de acontecer-Haré que se sienta tan enamorado de mí que tendrá que pedirme que salgamos.

 

-Supongo que de nada servirá que diga que es la peor idea que has tenido-suspiró de manera cansada evitando su mirada-Que tengas suerte, ojalá no te arrepientas de lo que dices ahora-le dedicó una última mirada, extrañado por el cambio tan repentino de actitud pues ahora se notaba más animado mientras comenzaba a anotar cosas en una libreta que se encontraba sobre el escritorio.

 

Salió de la habitación evitando hacer ruido, sabía que los próximos días serían más que pesados mientras el pelirrojo no dejara de ser tan obstinado y aceptara lo que sentía.

 

-No sé de quién compadecerme más, Rin puede ser tan molesto e irritante como se lo proponga y cuando se trata de él no se rinde tan fácil-rio un poco al ver salir al chico casi corriendo de la habitación sin siquiera preguntar que ocurría-Odio admitirlo pero esta terminará siendo una derrota para él...

 

 

 

 

 

______________________________________

 

 

 

 

 

Los días pasaban y el humor del chico no había cambiado mucho, tampoco había tenido muchas oportunidades de enfrentarse con el de ojos azules salvo unos cuantos encuentros en los que lo esencial era la competencia que tenían dentro del agua.

 

Sin embargo eso no lo desmotivaba, por el contrario, aprovechaba cada una de las oportunidades que tenía para demostrar lo mucho que se esforzaba por mejorar su técnica y las habilidades que ha ido desarrollando durante ese tiempo.

 

Pese a eso, el otro no parecía realmente interesado en los intentos "inconscientes" por llamar su atención pues simplemente tenía muchas cosas más en mente como para pensar en lo que fuera que intentaba hacer.

 

-¿Puedes creerlo? ¡Ignoró totalmente todo lo que hice para impresionarlo!-se notaba totalmente frustrado y no podía ni intentaba disimularlo-Seguro sigue esperando que sea yo quien ceda primero pero no va a conseguirlo, de ninguna manera voy a perder dos veces contra él.

 

-¿Por qué no dejas eso de una vez y hablas sinceramente? Ni siquiera sabes si realmente hizo algo con la intención de conquistarte-intentaba restarle importancia al tema con la finalidad de tranquilizar un poco a su amigo, sabía de sobra lo serio que era cuando de competir se trata.

 

-Nunca has estado de su lado ¿Por qué ahora sí?-lo miró fijamente, esperaba contar con su apoyo para algo tan importante y no verlo tan desinteresado e indiferente-Ya que fui el primero en enamorarse lo justo es que sea él quien se confiese, no permitiré que me derrote dos veces y te lo he dicho.

 

-¿Qué piensas hacer para conquistarlo?-no es que hubiera comenzado a confiar en sus planes o creyera que lograría conmover al otro, simplemente pensaba que era su deber como amigo motivarlo un poco y, en medida de lo posible, ayudarlo a conseguirlo.

 

-Ese es el principal problema-suspiró de manera pesada mientras se apoyaba sobre la litera-No tengo idea de que hacer para enamorarlo. Ama el agua, no come más que caballa con arroz, no está interesado en competir sino en estar dentro del agua y nadar-una pequeña sonrisa se dibujó sobre sus labios sumiéndose entre sus pensamientos al pensar en ello hasta escuchar a su amigo aclararse la garganta-No quiero cocinarle su platillo favorito ni llevarlo a nadar, quiero que sepa lo importante que es para mí y que sepa que nadie podría preocuparse por él como lo hago yo.

 

-Estás en problemas, con alguien como Nanase eso va a ser casi imposible. Pero de acuerdo, ya que quieres que sepa todo eso manos a la obra ¿Por dónde empezamos? Debe haber algo importante para ti y para él que no involucre a nadie más.

 

Dudó por unos minutos, sentía que, pese a tener tantos nexos y lazos que los unen, de una u otra forma alguien más se veía involucrado en ellos, no lograba encontrar esa conexión perfecta entre ambos.

 

Entre el par de amigos idearon unos cuantos planes que no les fue tan sencillo llevar a cabo dado la dificultad que a veces le representaba el poder tener encuentros con los chicos de la otra escuela dado todos los pendientes que tenían.

 

Siguió intentando por ese camino varias veces más sin obtener ninguna respuesta favorable pues el de ojos azules seguía con la misma actitud de siempre y parecía no notar en lo más mínimo los intentos del otro por llamar su atención.

 

Y no tenía nada que ver con su rechazo a algo en particular, sino que simplemente todo el asunto del "Que hacer en el futuro" y la presión que sentía por diferentes partes lo tenía demasiado distraído como para poder entender los mensajes entre líneas que intentaba hacerle llegar.

 

Rin comenzaba a perder la esperanza, creía que no habría manera en que pudiera demostrarle lo que sentía más que decirlo directamente pero seguía empeñado en hacer que el otro cediera antes y nada ni nadie lo haría cambiar de opinión. Pensaba tomarse un descanso con ese asunto y aprovechar para concentrarse de lleno en la competencia que tendría por lo que decidió viajar a Australia, alejarse de todo por un momento para estar listo tras su regreso.

 

Estaba a sólo unos días de partir, aprovechando la semana libre en el club, cuando recibió un mensaje por parte de Makoto. Esto le extrañó un poco pues, aunque se conocen desde pequeños y siempre se han llevado bien, últimamente no habían mantenido mucho contacto salvo en las competencias y prácticas conjuntas que organizaron.

 

En él le hablaba sobre la situación por la que pasaba el azabache y lo preocupados que todos estaban. Sabía lo importante que el chico resultaba para su mejor amigo y pensó que quizá le resultaría más sencillo entenderlo e incluso ayudarlo a recapacitar sobre su actitud.

 

Bastaron esas simples palabras para que, antes de ir rumbo al aeropuerto, fuera a casa del más bajo sin previo aviso y sin pedir su opinión ni darle tiempo a preguntar sus motivos le anunciara que partirían hacia Australia.

 

Tras varias horas de viaje por fin llegaron a su destino, el otro nunca había estado ahí y, si de ser sincero se trataba, estaba un poco desconcertado acerca de lo que ocurría a su alrededor, más aún cuando perdió al pelirrojo de vista.

 

En un principio no entendía que significaba ese viaje tan repentino resultando aún más confuso cuando fueron a casa de quienes acogieran al chico cuando era más pequeño y empezó a escuchar un sin fin de historias sobre él y su particular forma de nado. Le sorprendía bastante el saber que estuviera pensando todo ese tiempo en él, sobre todo porque no podía dejar de culparse de lo que ocurrió tantos años atrás durante su corto regreso a Japón.

 

Cuando por fin llegaron al hotel en que se hospedarían, y tras su gran sorpresa y la discusión que generó el que sólo hubiera una cama, por fin se decidieron a dormir uno a cada lado dándose la espalda hasta que la conversación fue iniciada por el más alto.

 

-Te dije que siempre te admiré ¿No...?-el comentario sorprendió un poco al otro pero se mantuvo en silencio escuchando sus palabras-Quería poder nadar así. Por eso me es difícil no tenerte siempre delante de mí, mostrándome el camino a tomar. Sin ti no tengo hacia donde apuntar-la sonrisa estaba presente en sus labios, no había podido contenerse y le dijo como se sentía respecto a la manera en que se relacionan llegando a mostrar un poco de los sentimientos que acaba de descubrir aún si esa no era su intención. Aún así siguió hablando, no podía detenerse en ese punto-Oye Haru ¿No sentiste algo también en esa carrera?-fue con lo que terminó tras hablar sobre su última carrera juntos.

 

No lo dijo, se mantuvo en silencio sin querer ahondar en el tema pero recordaba a la perfección ese momento y todas las emociones que lo invadieron hasta el final. Los recuerdos de ese y otros momentos comenzaron a llegar a su mente sin dejarlo pensar en más; empezó a entender muchas cosas, incluidas sus propios sentimientos. No podía nombrar o limitar ese sentir pero no le quedaban dudas de que el otro era especial y no de la misma manera que el resto de sus amigos.

 

El proceso no se detuvo sino hasta después de llegar a la piscina donde por fin había tomado una decisión en la que, sin lugar a dudas, el de ojos rojos tuvo un papel muy importante pues lo ayudó a reflexionar y entender que es lo que quería hacer de ahora en adelante. Pero no sólo eso, justo fue hasta ese punto que notó los mensajes que habían intentado transmitirle y que, con tanto que pensar, había pasado por alto.

 

 

 

 

 

_____________________________________

 

 

 

 

 

Una nueva etapa estuvo a punto de iniciar y, que mejor manera de concluir la anterior, que otro encuentro en la piscina. Esa vez no fue con la intención de competir como en tantas otras sino simplemente para convivir un poco más y, por qué no, cumplir el tan ansiado sueño de Rin de nadar entre pétalos de cerezo.

 

Cuando empezaba a caer el atardecer cada uno decidió volver a sus actividades correspondientes, pasaron a los vestuarios para poder limpiarse y vestirse antes de partir. Fue entonces cuando Sousuke tomó la iniciativa para darle un pequeño empujón a ambos haciendo que el resto saliera mucho antes con el pretexto de querer mostrarles algo y que el par los alcanzaría después.

 

-No me lo agradezcas, sólo has lo que sea necesario para que de una vez por todas se confiese y dejes esta absurda competencia-esas fueran sus palabras mientras se alejaba con los demás dejando un poco confundido a su amigo pues, por un momento y con todo lo que había sucedido luego de su viaje, había olvidado por completo como inició todo.

 

Justo estaba por detener a su amigo pues no estaba seguro de querer enfrentarse a sus sentimientos en ese momento pero se detuvo en seco al escuchar a Haru llamando su nombre.

 

-¿Dónde están los demás?-preguntó mirando un poco alrededor mientras tomaba sus cosas.

 

-Sosuke quería mostrarles algo, dijo que volverían pronto y mientras tanto podías terminar de cambiarte sin presiones-se apoyó contra la pared mirándolo de reojo mientras sacudía su cabello contra la toalla para quitarle humedad.

 

De pronto ambos se quedaron en silencio sin saber que decir, de cierta manera cada uno tenía las palabras atoradas y no encontraban la manera de expresarse. De un momento a otro ambos quisieron hablar llamando al otro antes de mirarse.

 

-Será mejor que hables primero, lo que quiero decir no es tan importante-reía un poco para ocultar sus nervios y, de paso, retrasar tanto como pudiera su confesión dejando completamente de lado su orgullo y sus ganas de vencerlo.

 

-Es extraño, sólo...-suspiró profundo antes de dirigir sus ojos azules hacia él-Me diste mucho que pensar luego de ir a Australia-hizo una pequeña pausa, buscando las palabras adecuadas para decir lo que quería-Tras todo lo que pasamos me di cuenta de que no sólo quiero nadar, quiero hacerlo contigo-extendió su mano frente a él mostrando más seguridad de la que nunca había demostrado hasta ese día-Nademos juntos Rin, quiero que siga siendo así por mucho tiempo más.

 

Y sin poderlo evitar y sin ser capaz de articular una sola palabra tomó su mano y la apretó, pero no era como cualquier otro apretón que pudieron darse y ambos lo leían en los ojos contrarios, era una promesa distinta a las demás y con un sentimiento mucho más profundo envuelto en él.

 

 

 

 

 

______________________________________

 

 

 

 

 

-Quizá hayas hecho que lo dijera antes pero definitivamente quien perdió no fue Nanase-sólo quería molestarlo un poco pues no estaba conforme con la manera tan peculiar que tenían esos dos para decir y demostrar lo importante que son para el otro.

 

-¡Eso no es cierto! Prometí que sería él quien lo dijera primero y lo conseguí, por donde lo veas no es una derrota-acababa de enviarle un mensaje a quien ahora era su pareja y mientras esperaba la respuesta terminaba de contar su historia a su amigo.

 

Intentaba argumentar algo a su favor pues no creía haber sido derrotado si consiguió romper la barrera que ese chico ponía con el exterior y lo dejó llegar tan lejos. Buscaba la mejor manera de demostrarle que ganó y por ello quería contarle la respuesta del chico ante su mensaje. Y hubiera resultado un éxito si tan sólo lograra controlar un poco la emoción al leer el mensaje.

 

-Sigue pensando lo que quieras, no hay manera en que logres vencerlo al menos en ese terreno-se burló al leer la última parte de la conversación en que su amigo intentaba disimular lo eufórico que reaccionó tras el "Vayamos a nadar sólo nosotros" que recibió.

 

-¡Es él quien está diciendo cosas vergonzosas y me invitó a salir! Que me enamorara antes no tiene nada que ver…

 

 

 

Y la discusión continuó sólo un poco más, estaba feliz de ver al pelirrojo así de entusiasmado y confiaba en que el de ojos azules se encargaría de seguir sacándole tantas sonrisas como hasta ese momento había logrado aún si no era capaz de usar palabras que todo el mundo pudiera interpretar; además de que el otro no lo necesitaba pues, de alguna manera que no entendía, era un lenguaje que ambos hablaban y sólo entre ellos podían descifrar.

Notas finales:

Y bueno, como se los dije aquí me tendrán el resto de la semana, espero tenerlos por aquí hasta el último día


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).