Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

ENGAÑO por Yelmar Doker

[Reviews - 57]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Espero que disfrutes este capítulo, también lo pueden encontrar en Wattpad y en Fanfiction, aunque normalmente suelo actualizar antes en Wattpad porque es más sencillo jajaj

*Capitulo 10




ENGAÑO


HONESTIDAD


By Yelmar Doker




*Una semana antes de que la unión matrimonial entre su hermano y Naruto se llevara acabo, el mayor de los Uchiha recibió la inesperada visita del rubio Uzumaki; a quien no veía desde un largo tiempo. Había estado tan ocupado viajando de ciudad en ciudad por culpa de las negociaciones empresariales, que su estadía en Japón se había reducido a venir solo en fechas especiales.


Sin embargo, él se había hecho la promesa de asistir a la boda de Sasuke, aunque para ello tuviera que postergar varias reuniones importantes. Además, se enteró hace poco de que su cuñado estaba pasando por una situación similar; organizando la fiesta de compromiso, los preparativos de la boda, los detalles de la recepción, entre otras cosas.



Pero verle en su puerta siendo tan tarde, fue una verdadera sorpresa.


—¿Naruto?


—¡Hey! ¿Qué tal, Itachi?— lo saludó con su habitual entusiasmo, más esa sonrisa deslumbrante que enamoraba a todo el mundo— Eh... ¿interrumpo algo?


—No...— Itachi le analizó con la mirada por un breve momento. De inmediato notó la forma ligeramente abultada de su vientre. Se sorprendió un poco. Ahora tenía más sentido tanta insistencia por parte de su hermano por apurar la boda. Naruto estaba embarazado.


¡Así que Sasuke iba a ser padre! Y él iba a ser tío... vaya. Sin embargo no comentó nada al respecto.


—¿Pero qué haces aquí? ¿Pasó algo?


—¿Yo?— apoyó la mano izquierda en el marco de la puerta. Había tenido que subir las escaleras porque el ascensor estaba descompuesto y le dolían un poco los pies— ¿No puedo venir a visitar a mi cuñado favorito?


—Permiteme que de corrija, pero soy tu único cuñado— sonrió levemente.


—¡Ah! ¡Se me había olvidado! — hizo una mueca que pretendía ser una sonrisa.


Naruto... No había cambiado nada en todo el tiempo que se conocían. Aunque, de hecho, estaba más alto y su vientre lo hacía lucir un poco más gordito. Algunas pecas salpicaban la punta de su nariz, pero a penas son perceptibles por el tono de piel que tiene.


—Entonces, ¿A qué se debe tu visita, Naruto?


Pasó algo extraño. De pronto la cara del rubio adoptó una expresión seria. Algo que no pasaba a menudo. Para Itachi, aquella faceta lo hacía verse mucho más maduro que el niño alegre y de personalidad abierta que solía ser siempre.


—¿Naruto...?


—La verdad es que... Yo vine porque, es...— tartamudeó una vez, inseguro de hallar la palabras correctas. Eso era algo nuevo, Naruto solía ser mucho más directo con la gente—... es sobre Sasuke. Últimamente a estado actuando muy raro.


—¿Raro?— levantó una ceja— ¿En qué sentido?


—Pues... para empezar anoche no llegó a casa— dejó salir un largo suspiro— y esta mañana me mandó un mensaje diciéndome que tenía mucho trabajo en la empresa. Sin embargo, para estar seguro llamé a Sakura. Y entonces...


—¿Y que te dijo?— a éste punto Itachi estaba empezando a preocuparse.


—Nada. Nunca me contestó...


—Bueno... ¿No lo llamaste a su teléfono privado?


—Si lo hice, pero no...— de pronto su voz lo traicionó y sus ojos empezaron a cristalizarse— lo siento...


—Naruto...— no sabía qué hacer. Nunca había sido bueno para consolar a la gente.


—No es nada, en serio— se secó las lágrimas con la manga de su chamarra— pero no sé, tengo miedo... Crees... Tú crees... ¿Qué Sasuke este arrepintiéndose de casarse conmigo?


—Naruto, seré honesto contigo— vió con mucha pena al rubio, quien en esos momentos estaba cabizbajo por lo que sus ojos estaban ocultos. No le gustaba verlo así, no era el mismo Naruto que venía a iluminarlo todo— Sasuke es muy especial para ciertas cosas, eso tú lo sabes mejor que nadie. Tiene sus días buenos y sus días malos como cualquier persona. Además, su principal defecto es el orgullo. Pero Naruto, si de algo estoy seguro, y créeme que no exagero, es que mi hermano te considera la persona más importante de su vida.


—¿De verdad?


—Claro, ¿No dije que estoy seguro? Naruto, Sasuke te quiere mucho. Y eso es innegable.


—Pero entonces... —dudó un poco— ¿Porque a estado evitandome estos últimos días?


—¿Lo a hecho? ¿Se lo has preguntado?


—No... — levantó la cabeza e Itachi vió muchos sentimientos confusos en esos ojos azules — pero no puedo ir y reclamarle su actitud. ¿Qué tal si decide que no quiere casarse conmigo? Tengo miedo, Itachi. ¿Y si lo espanto?


—Mi hermano no hará eso.


—¿Cómo lo sabes?


—Simple. Él te ama, Naruto.


Y solo eso bastó para que el ánimo decaído del rubio se marchara, siendo sustituida por una calidez reconfortante en el pecho. Sonrió. El moreno también sonrió. Ambos se miraron el uno al otro como si estuvieran compartiendo algo importante. Y es que lo dos tenían algo en común: amaban a la misma persona.


Pero ese momento se rompió con la aparición de otra persona. Alguien que había visto toda la escena y que no se había atrevido a interrumpir por razones que solo estaban en su cabeza, hasta que vió el momento en que esos dos se sonreían.


—¡Naruto!


Esa voz llamó la atención de Naruto, que rápidamente torció el cuello en esa dirección. Lo reconoció al instante.



—¿Sasuke?


—¿Qué rayos haces aquí?



 

 

 




000

















Todos estaban especialmente silenciosos ese día. Sobretodo Sasuke, que lo único que lo mantenía de pie y después de dos noches sin dormir, era su fuerza de voluntad. Además de poder estar al lado de Naruto.


Puede que suene hipócrita, si. Pero Sasuke realmente se siente culpable por haber golpeado a Naruto. Tanto así, que el mismo pensaba en entregarse a las autoridades.



—¿Ya despertó?— preguntó la voz de Minato. Hace una hora, los padres de Naruto le había permitido estar a solas con el menor, ya que Sasuke en un principio se había quedado en estado de shock cuando vió el estado en el que se encontraba Naruto.


Además, ellos confiaban ciegamente en Sasuke. Si alguno de ellos tuviera aunque sea una mínima sospecha de que el culpable por el cual su hijo estaba así estaba con ellos, ya habrían llamado a la policía y Sasuke sería llevado a la comisaría de inmediato.


Sasuke negó una vez con la cabeza.


—No. Aún no.



"¿Qué estaría soñando?" Se preguntó Sasuke, viendo detenidamente el sereno rostro de su Naruto. Tan pacífico. Pero aquellos moretones y cardenales lo arruinaban todo. Además, no le gustaba nada esa palidez que tenía. Lucía enfermo.


¿Porque...?



¿Porque tuvieron que ser así las cosas? ¿Porque no había podido controlarse? ¿Porque había tenido que golpear al dobe? ¿Porque justo ahora? ¿Porque no antes? Cuando le sacaba de quicio con sus estupideces...


¿Porque justo ahora que se había embarazado?


Un hijo que ya no estaba. Un niño que jamás vería la luz del día. El tenía la culpa de todo. De eso era cien por ciento consciente. Y nada de lo que hiciera podría disminuir ese dolor.


¡Nada!



—¿Y tu hermano? — Kushina cortó de pronto todo el hilo de sus pensamientos y Sasuke se sintió agradecido por un momento.


—Creo que se fue al baño— contestó su marido, que terminaba de servirse un café bien cargado— por cierto, todavía no me has dicho porque golpeaste a Itachi, Sasuke. ¿Acaso tienen problemas en la empresa? ¿Algo que debamos saber? O se trata de algo personal.



—No, no es nada— hizo una corta pausa y después agregó—: Es un asunto entre él y yo. No se preocupen.




—Esta bien, no vamos a meternos en sus asuntos— concedió Minato, pero luciendo muy inconforme— pero no nos pidas que no nos preocupemos. Itachi y tú son parte de mi familia también, ¿Recuerdas? Lo dije el día que te casaste con mi hijo.


—Si... Como olvidarlo.


—Asi que, si tienes algún problema con tu hermano, ya sabes que puedes hablarlo conmigo cuando quieras. Podré darte un consejo si eso necesitas.


—Muchas gracias, Minato...



"!Lo único que necesito es arreglar todo esto...!" Gritó mentalmente Sasuke. Tan frustrado e impotente; y sin que su orgullo pudiera permitírselo, también muy temeroso. ¿Qué pasaría cuando Naruto despertara y lo contara todo? Era casi un hecho de que iba a ir preso. Pero le temía más a la reacción de Naruto.



—¿Sasuke?— Kushina dijo repentinamente.


—¿Si?


—Perdona que lo pregunte, pero tienes una herida en tu mejilla. ¿Te pasó algo de camino hacia aquí? Además... — hizo una pausa, parecía estar dudando— tienes un olor extraño. ¿Acaso has estado bebiendo anoche?


—...


Sasuke no supo que responder. Ni siquiera tuvo el valor de mirarla a los ojos y decirle toda la verdad. Mucho menos ahora, no era el momento.


—Tome alguna copa antes en la oficina— admitió a medias.


—¿Tan tarde?


—Si...— mintió otra vez— fue para celebrar el trato con otra empresa muy importante.


—Ah, entiendo...— se le quedó mirando un largo rato, el tiempo suficiente para poner muy nervioso al Uchiha— ¿Olvidaste que Naruto estaba en estado? ¿Porque no estuviste con él ayer? Si tú hubieras estado allí, Naruto no estaría en esta situación. Qué clase de esposo hace...


—Kushina, es suficiente— la cortó su marido, antes de que soltara otra nueva imprudencia. La mujer tuvo que obedecer.


—Lo siento, Minato. Disculpa Sasuke, es solo que... — desvió la mirada a otra parte— soy muy tonta a veces. No es que trate de culparte, tú tenías obligaciones en la empresa y lo entiendo. Lo que pasa es que soy yo quien se siente culpable. Talvez si le hubiera dicho a Naruto que viniera a casa para que pudiera cuidar de él, mientras dure su... — negó varias veces con la cabeza— pero ahora eso no tiene importancia.


Uchiha asintió luciendo muy comprensivo. Esperó que Kushina no hiciera alguna otra pregunta que lo pusiera a él entre la espalda y la pared. Tenía ya suficiente con sentirse un monstruo.


Pasó el tiempo. Kushina había salido del cuarto y del mismo hospital para ir a su casa y traer algunas pertenencias que le servirían de mucho a su hijo. Minato por su parte había ido al baño hace solo un instante, así que en esa habitación solo quedaba Sasuke acompañando al rubio.


De pronto, éste último comenzó a reaccionar. Primero fue una suave queja, luego un fuerte suspiro que atrapó la atención completa del Uchiha.


—¿Naruto?


—Ah... ¿Qué? ¿Donde...?


—¿Naruto, me oyes? ¿Puedes oírme? —tomó su mano entre la suya, y la apretó gentilmente — ¿Cómo te sientes?


Naruto pestañeó varias veces. Volteó a ver el rostro pálido enmarcado por varios mechones de pelo, y lo primero que llamó su atención fueron las pupilas muy negras de aquel hombre.


—¿Ah?


—¡Naruto!— Uchiha no pudo contenerse más y le medio abrazó con cuidado de no lastimarle demasiado— Naruto... Naruto...


—¿Qué...? ¿Qué pasa?


"¿Quien es este sujeto?" Pensaba Naruto, cada vez más desorientado. Por segunda vez había despertado y se topaba con un hombre al que no conocía de nada. ¿Y dónde estaban Minato y esa mujer de largo cabello rojo? ¿Donde habían ido? ¿Porque le había dejado solo?


Uchiha se quedó allí solo un momento más y luego deshizo él mismo el abrazo. No iba a perder más tiempo. Tenía que disculparse.


—Naruto. Lo siento.


—¿C-cómo?


—Perdoname. Te juro que no quise hacerte daño. Créeme, te lo juro. Quiero arreglar todo y haré lo que sea para que me perdones. Pero por lo que más quieras, no me odies...


—¿Odiar...?


"¿Quién es este sujeto?" Por más que forzaba a su mente, no lograba acordarse de nada.


—Escucha Naruto. Sé que te mentí...— tragó saliva con pesadez— y te engañé. Pero necesitas saber la verdad. Y la verdad es que yo no siento nada por ella. Todo era un truco para que el viejo de mi abuelo no se quedara con lo que es nuestro. Solo intentaba proteger nuestro futuro y el futuro de nuestro hijo.


"¿Hijo?"


—¿De qué estás hablando?


—Por eso dormí con ella, dos veces—confesó luciendo muy arrepentido — Te juro que solo fueron dos veces. !Y no se como rayos sacó esas fotos, o como las recibiste! Pero yo nunca quise que te enteraras de ésta forma.


Cuando Sasuke finalmente terminó, Uzumaki miró al extraño sin ninguna expresión en concreto. Frunció el ceño y después dijo:


—Disculpa... ¿Tu quien eres?






Esperaba gritos, esperaba llanto, esperaba golpes, y esperaba insultos. Pero Sasuke nunca esperó esa respuesta. En el rostro del rubio no habian rastros de odio o rencor. Todo lo contrario. Usó una voz tan hueca para hacer esa pregunta y lucía tan despreocupado que por un instante creyó encontrarse en un sueño.


—¿Naruto?


—Asi que eso pasó.



De pronto alguien entró por la puerta. Sasuke reconocería esa voz en cualquier lado. No necesitó voltearse para saber quién era. Lo malo de todo es que esa persona lo había estado escuchando todo a través de la puerta. Y ahora conocía todos los detalles de lo que había sucedido.


Mierda.


De todas las personas que habían en ese hospital, ¿Tenía que tratarse precisamente de él?



—Itachi.
















 TBC





Notas finales:

jN/a: ¡Hola! Hace tantos meses que no actualizaba. Supongo que fue porque me dio pena dejarlas en suspenso con este fic xD nha. Pero bueno, muchas personas me pidieron que continuara, así que me decidí a seguir y finalizar esta historia. 




¡Espero que hayan disfrutado el capítulo! No olviden que pueden hacerme saber sus opiniones o preguntas con respecto al fic. Yo responderé todo. Y enserio, ya no quiero volver a esta página, me saca de quicio con sus anuncios T.T


Nos vemos pronto.


¡Bye!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).