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ENGAÑO por Yelmar Doker

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Notas del capitulo:

Disfruten!!

Capitulo 17



ENGAÑO


EXPUESTO


By yelmar Doker



















—¿Qué rayos haces aquí, Naruto?


—Sasuke... ¿Tu qué haces aquí?— realmente no esperó encontrar al teme en el mismo edificio donde vivía Itachi— Pensé que estabas en la empresa.


—Responde a lo que te pregunte, Naruto.


—Ah, b-bueno yo... esto...


—Vino a hablar de algo conmigo— interrumpió Itachi, notando lo nervioso que se había puesto el rubio. Y no solamente él, nació de pronto cierta tensión en el ambiente. Por eso decidió cambiar el curso de la conversación—. En realidad no me espera verlos hoy. Hace mucho que no los veía.


—¿Cuando llegaste?— preguntó Sasuke, sin dejar de mirar supicazmente a su hermano.


—Hoy en la mañana— contestó Itachi sin percatarse de que los pensamientos de Sasuke iban por otros rumbos— ¿Fue una coincidencia que vinieran ambos a mi departamento? ¿O se pusieron de acuerdo?


—¿Eh?— el menor se sobresaltó, miró a Itachi y Sasuke repetidas veces. Después dejó salir una nerviosa risita floja— ¡Ah, por supuesto...! ¡Fue una casualidad! Yo no tenía idea de que Sasuke también vendría... Por cierto, ¿Qué haces aquí, teme?


—Vine a visitar a mi hermano, Qué, ¿no puedo?


—¡No, no digo que no!— agitó las manos de un lado a otro— Pero podias haberme avisado antes; pudimos haber venido juntos.


—No te lo mencioné porque estabas ocupado con los preparativos de la boda. Además, solo vine de paso. Quería traerle a Itachi el último informe de las ganancias de la empresa de este mes.


—Entiendo— Itachi tomó la palabra en ese momento y abrió toda la puerta para invitarlos a su hogar— ¿Quieren pasar y tomar algo?


—¡Claro!


—No.


Naruto miró a Sasuke confundido.


—¿Eh? ¿Porque no?


—Porque es muy tarde. Recuerda lo que dijo el doctor.


—Pero solo será un rato...— intentó hacerlo cambiar de opinión— ¿Qué no quieres pasar un tiempo con tu hermano? Hace mucho que no se ven.


—Habrá tiempo para eso— dijo como restándole importancia.


—Ah...— suspiró tristemente— bien, si tú lo dices.


—Nos veremos en otra ocasión entonces— dijo Itachi— Naruto, no olvides lo que te dije— sonrió al nombrado con disimulada complicidad, cosa que para nada le gustó a Sasuke.


—¡Si! ¡Nos vemos entonces, Itachi! ¡Cuídate mu-! ¡Whoah!—no acabó de decir la frase puesto que Sasuke le había agarrado de un brazo y le obligó a caminar hacia la salida— ¡Sasuke, ten más cuidado! ¡Casi me caigo!


—Camina, dobe.


—¡Bien, pero no muy rapido! Me duelen los pies...— hizo una expresión de dolor, pero en realidad no era algo tan grave. Solo que era incómodo caminar al mismo paso que el moreno.


Por otro lado, Itachi estuvo observando toda la escena desde la puerta. Ahora que pensaba... ¿No estaba su hermano un poco de mal humor? No le pareció nada bien que arrastrase al rubio de ese modo, pero prefirió no decir nada, pues a Naruto parecía no molestarle. Esa parecía ser su forma común de tratarse. Sin embargo, su hermano debería considerar más el embarazo de Naruto, ¿no?

Bueno, no estaba muy seguro. Lamentablemente no sabía mucho de esas cosas, así que más adelante tendría que buscar asesoramiento de otra persona.




Dejó de lado ese pensamiento cuando su teléfono empezó a sonar. Lo sacó de su bolsillo y miró el número de la llamada entrante. El remitente era desconocido, pero contestó de cualquier modo.


—¿Diga? ¿Quien habla?


—Hola, Itachi. ¿Qué tal estás?


El corazón del moreno se detuvo a penas por un segundo.


—Tú.


—Veo que todavía me recuerdas. Eso es bueno.


—¿Porque me llamas? ¿Qué es lo que quieres ahora? — por su tono de voz, la llamada de esa persona le desagradó bastante.


—Auch, no me trates con tanto desprecio, Itachi. Yo solo deseaba oír la voz de mi querido hermano mayor*.


El Uchiha se calmó a sí mismo. Honestamente le disgustaba demasiado ser llamado por ese apelativo.


—Escucha, no sé qué es lo que quieres, pero será mejor que me lo digas ahora o voy a colgar.


—Siempre tan directo, hermano. ¿Porque eres tan malo conmigo?


Itachi trató de no caer en su juego. Justo iba a colgar en ese momento, pero la voz del otro lo detuvo. Esta vez se oyó menos despreocupado y más serio.


—Quiero otro millón de dólares.


—¿Qué?


—El dinero que me diste ya se terminó. Quiero otro millón, y solo tienes hasta éste fin de semana.


—Ni hablar— aseveró rotundo—. No pienso darte más dinero.


—¿Oh? ¿Entonces prefieres que hable con tu adorado hermano y le cuente todo lo que has hecho a sus espaldas? ¿Quieres que se entere de la clase de personas con las que se codea? Mal... que mal hermano mayor resultaste ser.


—¡Cierra la boca! ¡No eres quien para juzgarme!


—Mira, dejemonos de discusiones. Yo solo quiero el dinero y tú tienes bastante. Me das lo que te pido y yo te dejo en paz por... ¿Seis meses?


—¿Acaso planeas chantajerame de por vida? ¿Estás loco?


—Si, lo estoy— soltó una risita divertida—. Y sabes que soy capaz de ir con tu precioso hermanito y contarle el tipo de hombre que eres. No creo que le guste nada la sorpresa. ¿O tú que dices?


Uchiha pensó seriamente en ir a buscarlo y arreglar las cosas cara a cara. No le gustaba nada ser chantajeado de esa forma, menos si se trataba de ese sujeto.


Pero solo por esta vez iba a ceder. Buscaría luego una forma de deshacerse de él.


—De acuerdo. Dame una fecha y el lugar.


—Esperaba oírte decir eso.

























000


















—¿Haz estado engañando a Naruto? ¿Desde cuándo?


—Eso a ti no te incumbe — se sentó en una silla que había en el pasillo, muy lejos de la habitación en donde estaban Naruto y su padre— Entonces... ¿Vas a contarle todo a Minato?


Sasuke asumió que esa era la oportunidad perfecta que tomaría Itachi para sacarle del camino y así poder quedarse con Naruto. Pero no iba a dejarle las cosas tan fáciles. Primero muerto antes que permitir que ellos dos estuvieran juntos.


Itachi miró a todas las personas que caminaban por allí. Quería asegurarse de que nadie mas oyera la conversación tan delicada que iba a tener con su hermano.


—No, aún no —contestó Itachi—. Pero considero mejor que deberías de ser tu quien se los diga.


—¿Porque lo haría? —se encogió de hombros— ya descubrí que Naruto no recuerda nada de lo que pasó. Mejor para mí.


Itachi miró muy enojado a su hermano menor. No podía creerlo. ¿De verdad Sasuke pensaba aprovecharse de la situación?, ¿Iba a seguir negando que él había lastimado a Naruto? Y lo peor de todo, es que no le sorprendía nada viniendo de él. Desde adolescente, siempre había sido muy egoísta y frío para resolver sus asuntos.


Pero aún así. Esta vez se trataba de un problema muy grave. No podía dejar que Sasuke hiciera una cosa tan vil. Para él era obvio que algo malo pasaba en la cabeza de su hermano; y si antes no lo había notado, es porque prefirió creer que todo iba bien en la vida de su pequeño hermano. Pero por desgracia no.



La realidad era muy dura.



El mayor cerró los ojos y de su boca salió un suspiro pesaroso. Se dejó caer lentamente sobre la silla que había a un lado de Sasuke.

Desde que se enteró de lo ocurrido no había dejado de sentir culpa. Por todo lo que había pasado y todo lo que faltaba por venir. Pero al mismo tiempo quería ser tolerante con Sasuke. Quería poder comprenderle. Era su única familia despues de todo. Por ningún motivo iba a darle la espalda.


Era su hermano menor y lo quería.


Pero de ningun modo iba a permitir que Sasuke se beneficiara de la pérdida de memoria del rubio. Sasuke estaba loco si pensaba hacer algo como eso. Uzumaki tenía todo el derecho de saber la verdad. Sabía que iba a provocarle un dolor tremendo, pero era lo más correcto.



—Golpeaste a Naruto— afirmó. Sasuke ni siquiera reaccionó, estaba muy ocupado mirando al piso. El mayor se preocupó al ver su expresión tan decaída, lucía triste— ¿Porque lo hiciste?



El menor tardó en contestar.



—No lo se.


—Sasuke...


—¡No lo sé, maldición!— masculló con los puños fuertemente apretados— ¿Crees que lo hice adrede? ¿Crees que quise hacerle daño a Naruto? ¡Por supuesto que no!


—¿Entonces?— el también alzó la voz— ¡No entiendo tu punto, Sasuke! ¡No sé cómo pudiste hacer algo así!


—¡Estaba molesto! ¿¿Bien??


—¿Molesto? ¿Molesto porqué?


Sasuke resopló. Estaba actuando como un niño pequeño e Itachi tomó nota de ello. El menor se mordió el labio inferior, gesto que solo hacia cuando estaba sumamente nervioso. Definitivamente, su hermano no estaba bien. Tampoco lograba entender la actitud de Sasuke. No sabía qué con exactitud, pero había algo raro en él. Parecía otro.


Finalmente, en voz muy baja Sasuke habló:


—Naruto... quería dejarme.


—¿Quería dejarte? —repitió sin entender del todo.


—Naruto descubrió que yo le engañaba—murmuró—. Y él... planeaba irse a casa de sus padres. Yo traté de detenerlo, pero todo se salió de control.


—¿Y?


—Terminé por golpearlo.



¿En serio? ¿Solo por eso había golpeado a Naruto? Aquello le desconcertó. Para él sonaba tan absurdo que en un principio pensó que Sasuke iba contarle algo más. Pero eso no pasó. No dijo nada más sobre el asunto.


Internamente maldijo al hombre muerto al que solia llamar padre. Si Fugaku no hubiera hecho lo que hizo cuando eran más jóvenes, probablemente Sasuke no hubiera obrado de esa forma. Y seguramente, todo habría sido diferente.


Sin embargo, había algo allí que no terminaba de convencerlo.


—¿Eso es todo?


—Si.


"Bien, parece que no va a decirme" pero era comprensible. Sasuke estaba enojado con él por alguna razón, así que no iba a hablar mucho sobre el tema. Eso siempre pasaba cuando su hermano se molestaba. Pero le dolía. De verdad le dolía que Sasuke se cerrara de esa forma con él. A pesar de ser hermanos, la confianza que se tenían parecía haberse esfumado.


¡Pero eso no es importante ahora!


Así que volvió a seguir adelante con su plan inicial.


—Sasuke, tienes que hablar con Kushina y Minato. Todavía estás a tiempo de hacer bien las cosas.


"Hipócrita" pensó Sasuke, reprimiendo el deseo de lanzarse nuevamente contra el mayor. Si éste supiera las terribles ganas que tenía de matarlo, seguramente no estaría allí tan tranquilo hablando con él.


—Cállate, Itachi. Métete en tus propios asuntos— torció el cuello hacia la izquierda y le dedicó al mayor una mirada muy fría—. Yo no tengo porqué hacer nada de lo que tú me digas.


Itachi se cansó de ser paciente.


—¿Porqué de pronto parece que me odias, Sasuke? ¿Qué fue lo que te hice?


—Cómo si no lo supieras.


—Es que no tengo idea de lo que estás diciendo, ¿No podrías ser más claro conmigo?


Sasuke se levantó de golpe. Itachi hizo lo propio pues no quería volver a repetir la misma escena de hace unas horas. No quería ser golpeado por su hermano menor nuevamente.


—¿Quieres saber porqué te odio, Itachi? ¿¿Enserio quieres que te lo diga??


—Adelante, porque no lo entiendo.


El menor negó con la cabeza. No podía creerlo. Itachi era un maldito hipócrita que sabía mentir muy bien. Estúpido, estúpido Itachi.




—A ti te gusta Naruto.


—...







Qué.






Se quedó mudo por la impresión. ¿Había escuchado mal? ¿Sasuke había dicho que a él le gusta Naruto? ¿Naruto? ¿El mismo Naruto que era pareja de su hermano...?


—Veo que te quedaste sin palabras, Itachi. Eso solo me dice que tengo razón, ¿No? Después de todo, el que calla otorga.


—No... — aún no podía salir de su estupor— no es eso.


—¿Ah? ¿Vas a negarlo entonces?


—Sasuke— miró al menor muy perplejo—, no sé de dónde sacaste que a mí me gusta Naruto. Pero estás muy equivocado. A mí no...


—¿Equivocado yo? — soltó una risita falsa— no trates de engañarme, Itachi. Ya lo sé todo.


—¿Lo sabes todo? ¿Sabes qué cosa?— su ceño se frunció profundamente—¡Naruto para mí es como un hermano menor! ¿Cómo puedes pensar si quiera que a mí me puede interesar tener algo con él?


—¿Sabes qué? ¡No soporto más tu hipocresía! No te creo, Itachi. No creeré en nada de lo que digas — se dió media vuelta, con la intención de irse de allí pues ya no sabía si podría controlarse; pero antes de irse dijo unas palabras de las que más adelante se arrepentiría —: tú y yo ya no somos hermanos.


—¡Sasuke!


—Asi que no vuelvas a hablarme.


—¡Sasuke! ¡¡Sasuke!!



Itachi no lo siguió, no fue tras él como se esperaba. Solo vió sintiéndose impotente, como su hermano menor se alejaba más y más.


En primer lugar no pudo seguirle porque sus palabras le habían calado muy profundo. ¿Que a él le gustaba Naruto? ¿Qué no soportaba más su hipocresía? ¿Qué ya no eran hermanos? ¿De dónde había sacado Sasuke todas esas ideas? ¡Era absurdo! ¡Nada de eso era cierto! Sin embargo, le dolía mucho saber que Sasuke pensaba eso de él.




"Realmente, algo va mal con Sasuke..."








000








Llevaba puesto un uniforme de enfermera. La peluca la había comprado en E-bay y el gafete falso lo había conseguido a muy buen precio con uno de sus contactos. Estaba segura que nadie la reconocería ni sospecharía de ella. Despues de todo se encontraba en un hospital.
Todos allí estaban muy ocupados atendiendo a los pacientes; nadie en ese lugar le prestaria atención a una simple enfermera que transportaba un carito con comida.


Sin embargo, no debía perder más tiempo. Solo le dieron dos semanas para arreglar el problema que se originó por su impertinencia. Ahora estaba muy arrepentida de haber enviado esas fotos al correo de Uzumaki. Por culpa de eso ahora estaba internado en un hospital y con su vida totalmente desecha. Y ella pagaba los platos rotos también. No quería ensuciarse las manos, pero no quedaba más opción que esa.


Sabía que iba a ser difícil. No tenía ningún conocimiento clínico sobre la amnesia, ni siquiera sabía si algo como eso se podía arreglar. Pero tenía que intentarlo, no quedaba de otra. De eso dependía la vida de la persona que más quería.

Izumi jamás podría perdonarse que algo malo le sucediera a Itachi. Inclusive, ella sería capaz de matar o dar su vida con tal de asegurar su bienestar.


¿Y que hay de Sasuke y Naruto? ¿Acaso su vida no valen nada?


Por supuesto, ellos también son importantes. Bueno, no tanto como Itachi; pero de todos modos iba a hacer lo que estuviera a su alcance para protegerlos a ellos también. Ya que sabía que eran personas importantes en la vida de su mejor amigo. Y la perdida de uno o ambos sería doloroso para el mayor.


Varios pasillos despues, en medio del personal y la gente que caminaba a su lado, Izumi se concentró en asegurarse que nadie la interceptara. Sabía muy bien el número de habitacion en donde Uzumaki se encontraba. El gran dilema era que su familia estaba acompañándolo.


Menos mal que tenía un plan, o de lo contrario no serviría de nada haber llegado tan lejos. Aún así, estaba nerviosa.


Gracias al cielo, ella aún no se percató de que la estaban siguiendo. De lo contrario, ahora mismo estaría muerta de miedo.

















TBC



N/a: Lo prometido es deuda, un actualización puntual *//*

Muchas gracias a aquellas personas que se tomaron la molestia de leer y dejarme su comentario, de verdad me alegran el día. Así que de corazón espero que les haya gustado este capítulo. También quiero dar el aviso de que en el próximo capítulo se desvelan muchas cosas, como por ejemplo la identidad del enmascarado... ku ku ku.


¡Finalmente aprovecho para desearles un feliz año nuevo! ¡2019! Siempre me pongo nostálgica en estas fechas... TuT. No olviden pasarlo con su familia y amigos. Creanme, valdrá mucho el tiempo invertido.



Eso es todo.



Nos leemos pronto 😉
Notas finales: Disculpen la tardanza,
Algo más que decir, odio la maldita publicidad de Amor Yaoi T.T

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