Lo cierto era que aquel castaño conocía el nombre de dicho pelinegro, porque se había quedado anonadó por el mismo, no sabia realmente que era lo que le pasaba pero le encantaba verlo a escondidas y después corría cual niño pequeño.
Se sentía mal consigo mismo aquel día pues el mayor lo había visto haciendo algo que sabia perfectamente que estaba mal e incluso le había seguido para reprenderlo.
Sabia que el mayor se había ido complacido al ver que las cosas no eran para el sino para la pequeña victoria.
El admiraba al mayor pues para ser rico, no era tan estirado como la familia Kim y eso lo agradecía.
No sabía el porque dios era injusto con muchos, el había sufrido mucho en su infancia y no había obtenido nada de el, mientras que otros nacían nadando en dinero y lo desperdiciaban.
Quería investigar que era aquello que le ocurría al ver al pelinegro desde lejos, no entendía el porque se ponía colorado como las manzanas..
Todo era confuso para el.
Aunque claro sabia que aquello del amor posiblemente era imposible por las clases económicas, pero imaginando no perdía nada.
Había aceptado aquel billete que el mayor estiro, para poder verlo una vez más.
Quería poder cruzar palabra con el aunque fuera poco..
Le había gustado que el mayor no había criticado sus prendas o aspecto y realmente por lo que recibió regaño fue por sus acciones mas no por apariencia.
Sonrió como tonto y negó con la cabeza.
Era momento de volver a casa, bajo de esa pequeña barda y comenzó a caminar de regreso.
Entro a una tienda e intento comprar.
-Kyu tu padre me debe 1 kilo de arroz.- Dijo el dueño de dicho lugar.
-Mmm toma.- Dijo tendiendo el billete.
-Kyu tu padre me debe rábanos.- Dijo una señora recién entrando.
-Por favor tome lo que sobre..- Dijo con una mueca.
-Aun falta.- Dijo la señora.
-Prometo pagar esta semana, mañana trabajaré y de verdad que les pagare.- Dijo inclinándose completamente.
-Yah hijo, ponte de pie, felicidades por el trabajo y esperaremos.- Dijo la señora.
-G..Gracias.- Dijo en menor.
-Suerte muchacho..- Dijo el sueño y coloco su mano en el hombro del menor, haciendo que este se retirara bruscamente y comenzara a temblar.
-Lo siento Kyu, lo olvide..- Susurro arrepentido el señor.
-Eres un idiota!!- Dijo molesta la señora.
-¿Kyu estas bien?- Pregunto preocupada la misma señora.
-S...Si debo irme...- Dijo y salio corriendo a su casa.
Al llegar a ella se tiro en el piso y comenzó a llorar mientras enterraba su cara en sus rodillas e intentaba no hacer ruido para no despertar a su appa.
Cosa que no sirvió pues el mayor se levanto y lo abrazo.
-Ya paso, estas a salvo a mi lado..- Susurro acariciando aquel cabello castaño.
-Appa..- Susurro sin dejar de llorar.
-Shhhh tranquilo, duerme pequeño, shhh duerme..duerme.. has lo ya, que hyung te cuidara...sueña, sueña y duerme ya 🎶- Dijo cantando para tranquilizar al menor.
El castaño se quedo dormido en sus brazos y fue acomodado en la cama por el mayor.
d35;d35;d35;d35;
El menor despertó rápidamente tras una pesadilla , aquella que se repetía desde años.
Lavo su cara, buscó su ropa menos vieja y salio dejando una nota.
Camino a lo largo de las calles, veía dormir a muchos en la calle y eso le recordaba un poco su pasado, sin duda su vida era una mierda.
Toco aquella cicatriz que le habían hecho de pequeño y movió su cabeza quitando esas imágenes.
Grito fuerte y pateo una lata en su camino.
Estuvo un tiempo viendo el cielo, recordaba voces, recordaba personas, pero todo era confuso.
Corrió a su nuevo empleo o llegaría tarde, observó dicha mansión y se veía demacrada, incluso las personas dentro.
-Pobres..- Susurro antes de entrar.
-¿Quien eres?- Pregunto un chico de su misma edad con cabello rojo.
-Yo estoy aquí por el nuevo empleo.- Dijo nervioso.
-Entra, appa Won te atenderá..- Dijo el pelirrojo quitándose de la entrada.
"¿Won?" se pregunto el menor y camino dentro.
-¿Quien eres?- Pregunto frío un rubio.
-Y..Yo vine por el empleo.- Dijo dudando tierno.
-Teuk camina tengo que ir a ver si es mi bebé, quitate!!.- Dijo otro rubio golpeando el hombro del chico y lo hizo caer en la misma acción.
-No debes ser así!!- Exclamo el rubio tendiendo la mano al chico.
Es servidumbre, mi bebé esta en una comisaria!!- Grito y salio.
-Lo siento.- Dijo el otro rubio y salio.
-Así sera siempre aquí, deberías no quedarte.- Dijo el pelirrojo.
-Yo no puedo irme .- Sentenció.
-Appa Won, vendrá Yesung para que firmes los papeles de su padre.- Grito el pelirrojo.
-Appa Kangin quiero ver a Suho, date prisa!!- Grito de nuevo.
”Suho"..Pensó el mayor y siguió andando.
-Oh ya has llegado, tus tareas son simples, Servirás a todos en esta casa, cada uno tiene su carácter así que espero aguantes mas que los otros y trates con respeto a todos, por ahora traeme un café.- Ordeno Donghae.
-S..Si.- Ordenó el castaño y salio en busca de la dichosa cocina.
El menor tardó un poco en encontrar y preparar aquello, salio y corrió al despacho pero choco con otro hombre.
-Lo siento, lo siento..- Dijo haciendo varias inclinaciones.
-¿Trabajas aquí?- Pregunto aquella voz rasposa que conocía bien y sonrió.