-Solo quería saberlo, aunque ya me lo esperaba pues siempre tus mejillas se sonrojan.- Dijo acariciando su mejilla.
-hyung..- Susurro tímido el menor.
-Y bien Kyu.. ¿Deseas ser mi pareja?- Pregunto sonrojado el pelinegro aun sin soltar al menor.
-Yo hyung.. No podemos, tu eres de una familia adinerada y yo pues soy de la basura de la sociedad..- Dijo el menor bajando la mirada.
-No digas eso..- Dijo el mayor abrazando al castaño.
-Hyung es verdad, yo posiblemente mendigue por dinero o comida a partir de mañana hasta encontrar un nuevo empleo.- Dijo el menor.
-Eso no hace falta, ya te dije que no me interesa de donde vengas.- Dijo uniendo sus labios a los del menor, lento y suave.
-Tal vez a ti no, pero a tu familia si..- Susurro el menor a separar un poco su rostro.
-Mi padre es mi única familia y el también se unió junto a mi madre de un humilde hogar y lo hizo sumamente feliz hasta que falleció, el odia a los ricos prepotentes como su antigua pareja Zhoumi.- Dijo el mayor.
-¿Un Kim?- Pregunto.
-Si.- Dijo serio.
-ohh ya veo..- Dijo agarrando la camisa del mayor y escondiendo su rostro.
-¿De verdad quieres estar conmigo?- Pregunto con ojos de cachorro.
-Dios, si.- Dijo seguro el mayor y el pequeño sonrió.
-Eres raro hyung..- Dijo el menor riendo.
-¿Porque?- Pregunto alzando una ceja.
-Puedes tener a quien quieras y te aferras a la basura..- Dijo el menor con la mirada abajo.
-Y sigues con eso..- Dijo tomando el rostro del menor y haciendo que este le viera, prosiguió -Escuchame bien, para mi tu no eres nada de eso, al contrario, eres un chico lindo, curioso, amable y perfecto.- Sentencio con firmeza.
-Te quiero hyung..- Susurro el menor abrazando al mayor.
-Yo te amo.- Sentenció este besando de nueva cuenta al menor.
Ambos pasaron un par de horas juntos en aquel lugar hasta que el menor recordó a su padre y sus respectivos problemas.
-Hyung tengo que ir con mi appa..- Dijo el menor intentando separarse del mayor.
-Te acompaño.- Dijo apretando el botón de sus llaves para abrir su auto.
-No, tu nos mataras si entras a este lado de la ciudad con ese convertible.- Dijo el menor con miedo.
-Pues vamos caminando.- Dijo el mayor volviendo a apretar el botón haciendo que las puertas se cerraran.
El pelinegro tomo la mano del castaño y este se sonrojo levemente.
-Me da pena que tu veas el lugar donde vivo.- Dijo el menor
-Puedes venir conmigo.- Dijo Yesung seguro.
-No, tengo a mi appa.- Dijo este.
-El también puede venir.- Respondió el pelinegro.
-Seriamos una carga muy pesada o una molestia.- Dijo con una mueca.
-Serian luz, la que necesitan todas las familias ricas.-Respondió Yesung.
-Hyung vamos..- Dijo quitando esas ideas.
Caminaron un par de calles hasta que a lo lejos el menor vio a Shindong afuera junto con sus cosas en bolsas.
El menor soltó a Yesung y corrió hacia su appa.
-¿Qué paso hyung?!!- Pregunto el menor.
-Coff.. Nos sacaron por no pagar renta, coff..- Habló torciendo pues desde hace tiempo esta no desaparecía a pesar del medicamento.
-Todo esta bien.. - Susurro el menor al ver temblando a Shindong.
-Viviremos en la calle..- Susurro Shindong llorando.
Yesung tomo la mayor parte de las bolsas en sus hombros y hablo.
-Vamos.- Dijo sonriendo.
-¿Eh?- Preguntó Shindong.
-No dejare a mi pareja y suegro vivir en la calle, vamos a mi casa.- Dijo sonriendo.
-Supongo que gracias..- Dijo el menor besando su mejilla.
-Ya te dije que no debes agradecer, solo vamos.- Dijo comenzando a caminar siendo seguido por los otros.
Subió sus pertenencias en la cajuela y le abrió la puerta a ambos Cho.
-Adelante.- Dijo y el menor metió a su padre y después subió.
Arranco su auto y en el transcurso a su "casa" conoció al padre del menor.
Ambos Cho eran sumamente agradables y el pelinegro sonrió complacido.
Llego a casa y les dijo a los otros que podían bajar.
El padre de Kyu se asombro por semejante mansión mientras que Kyu fingió sorpresa pues ya había visto aquella mansión cuando espiaba al mayor.
Entraron lentamente a aquella mansión y dentro fueron recibidos por el padre del pelinegro.
-Oh apuesto a que eres Kyuhyun.- Dijo el señor amable y con una gran sonrisa.
-Si, yo bueno perdone que demos molestias en su casa..- Dijo apenado.
-Tonterías, sientanse como en casa, de verdad que no es molestia ni mucho menos.- Respondió sonriendo el mismo rubio.
-Te lo dije..- Dijo el pelinegro revolviendo el cabello del castaño.
-Bueno yo creí que tu padre era ...bueno ya sabes..- Dijo el menor encogiéndose de hombros haciendo reír a los Lau.
-¿Como los Kim?- Pregunto riendo el rubio y el menor asintió.
-No se si Yesung te dijo pero mi esposa fue quien me enseño que el dinero no compra felicidad ni vida, no debes juzgar pues al final morirás y no te llevaras ni un peso.- Dijo Henry animado.
-Te lo dije..- Susurro de nuevo el pelinegro.
-Yesung dale una recamara a cada uno y prendas secas, los espero para cenar y conversamos.- Dijo sonriendo.
El pelinegro obedeció a su padre y le dio la bienvenida a ambos en aquella enorme mansión.
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