Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Why me? por SPatt

[Reviews - 13]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Vayan a ver el video de la canción "Perfect" de Ally Brooke <3 mi solecito la canción es simplemente hermosa y perfecta <3



Ese día después de cenar "Ally" volvió a desaparecer.

 

No la he visto en dos días y parece que las "locas" también me han dejado en paz pues no he sido perseguida por ellas durante este tiempo.

Lo que sea que haya hecho esa tal pseudo hada aquel día funcionó.



Me siento tranquila, estoy mejor así, sin ser acechada por unas locas.



Percibo una vibración en el bolsillo y saco mi celular, me llegó un mensaje de Vanessa.



"Te espero en nuestra antigua escuela, quiero mostrarte algo."



Vuelvo a leer extrañada el mensaje.

 

¿Para qué me citaría ahí?

 

No le doy tanta importancia y me dirijo al lugar.

 

Llego luego de algunos minutos pero no veo por ningún lado a Vanessa.

 

Tal vez me ha jugado una broma, ella sabe lo asustadiza que soy.

Los letreros con advertencias de "prohibido el paso" me dan desconfianza, ver las instalaciones acordonadas, como si se hubiera cometido algún asesinato, comienza a inquietarme.

 

Empiezo a retroceder pausadamente.

 

Hace algunos meses que no pasaba por aquí, sin embargo, no esperaba encontrarme con esto.

 

Dejo de caminar hacia atrás al momento de chocar con alguien, siento el temor invadiéndome; giro lentamente y...

 

-¡Idiota!- Empujo a mi mejor amiga quien sólo sonríe por haber logrado su objetivo.

 

Menos mal no soy cardíaca.

 

-No aguantas nada Pao.- Dice burlona.

 

Maldita...

 

-Debí imaginarme que harías algo así.- La miré feo.

 

-Ya, no te enojes, mejor sígueme.- Sin esperar una respuesta de mi parte, toma mi mano y me jala hacia el callejón que está al lado de la escuela.

 

-Vane... no me gusta este lugar.-Susurro temerosa.

 

-Tranquila, ya casi llegamos.- Anuncia sonriente.

 

-¿Por qué estaba cerrada la prepa?- Ella vive por estos rumbos así que supongo debe saber algo al respecto.

 

-La están restaurando. ¿Quieres entrar? Conozco un túnel "secreto" que nos llevaría a los salones F.- Murmuró orgullosa de su "gran sabiduría".

 

-¿No eran esos salones donde las "parejitas" hacían sus "cosas"?

 

-Exacto.- Confirmó mis sospechas.

 

Entrecierro mis ojos.

 

-Ok no quiero saber.

 

-Sólo lo averigüe, fue por curiosidad, no es como si yo haya estado ahí antes.-

Se defendió.



-Jaja no tienes que darme explicaciones.

 

-Pero yo quiero hacerlo.- Se detuvo y me miró directo a los ojos mientras entrelazaba nuestros dedos.

 

Okey... ¿De dónde salió esta seriedad nada característica en mi amiga?

¿Por qué de repente la situación se tornó "extraña"?

 

Esto era inusual, Vanessa estaba actuando muy rara.

 

-Vanessa me estás asustando.



-Ya llegamos.- Musitó cambiando completamente su expresión.



Observo el edificio, es uno de esos en los cuales viven estudiantes universitarios.

 

Subimos al segundo piso, ella abre la puerta de un pequeño cuarto y me deja pasar primero.

 

-Es mi departamento de soltera, yo misma lo compré.- Menciona entusiasta.

 

-¿Ya no vas a vivir con tus papás? ¿Por qué lo compraste?- Preguntó perdida.

 

No entiendo sus razones para querer "independizarse" tan joven.

 

-Aún no abandono la casa de mis padres, simplemente quiero un lugar privado y exclusivo para mí, como si fuera mi "guarida secreta".- Sus ojos brillan de forma especial al decir aquello, su discurso fue emotivo. -Además, está cerca de la universidad.- Agrega contenta.

 

-Tú casa también.- Debatí.

 

-Pero es aún más cerca.- Defendió.

 

-Lo que digas.- Terminé la "discusión", si no lo hacía seguramente pasaríamos horas en lo mismo.

 

-Bueno, debemos "bautizar" este sitio.- Comentó en un tono que no supe descifrar, movió sus cejas sugestivamente cuando me mostró una botella de lo que supuse era licor.



-Así que venías preparada.- Imito su gesto.

 

-Yo siempre.- Se auto aduló. -¡Es hora de iniciar la diversión!- Exclamó enérgica mientras levantaba la botella y la agitaba en el aire.

 

Me sirvió una cantidad considerable de aquel líquido.



Creo que mi imaginación anda muy activa ahora, acabo de "ver" como mi amiga roció un polvito de dudosa procedencia en mi bebida.

No puede ser cierto, seguro me confundí.

 

-Gracias.- Recibo el vaso que me ofrece.

 

-Hagamos un brindis, por nosotras.- Choca su copa con la mía sonriendo ampliamente.

 

-Por nuestra amistad.- Digo yo y ella hace una mueca extraña.

 

-Sí, claro... hasta el fondo.- Indica retomando su anterior postura alegre.



...



¿Cuántas van?

Siete, ocho, quizá diez.

 

He perdido la cuenta de las veces que Vanessa ha rellenado mi vaso.

 

Tengo la impresión de que yo he tomado lo doble de ella.

 

Incluso la botella se terminó y ella sacó otra de no sé dónde.

 

-Ya... no.. puedo... más.

 

-Tómate otra Pao, te hará bien.



Estoy a punto de vomitar, ya perdí por completo mi equilibrio y con trabajo mantengo mi razón "despierta"... Vanessa está loca, otra copa es lo que menos necesito en este momento.



-¡No!- Doy un manotazo provocando que la bebido quedara regada en el suelo. -Sorry... no me... siento... bien..



Ella no luce muy contenta por lo que hice, pero de la nada cambia su expresión por una "más" tranquila.

 

-No importa, te llevaré a la habitación.- Avisa antes de intentar levantarme; le está costando mucho esfuerzo y eso me hace sentir gorda, aunque ella es algo debilucha.

 

Pasados algunos minutos me encuentro recostada en un colchón de aire, a pesar de la incomodidad que me provoca este "mueble" el sueño empieza a vencerme.

 

-Aún es muy pronto para dormir Pao.- Susurra en mi oído.

 

Pero ya no me siento capaz de responderle, estoy en el "sueño consciente" y pronto entraré al "sueño profundo".

 

 

 

Estoy teniendo una "alucinación" bastante extraña: Vanessa besa mi cuello con delicadeza y de forma suave, dulce.

 

Mmm...

¿Por qué lo hace?

 

Supongo que este es uno de esos raros sueños húmedos.



¡¡Ouch!!

¡Me mordió!

Eso duele.



Abro los ojos, porque el fuerte dolor volvió a repetirse.

 

-¿Qué haces?- Cuestiono perdida.

 

La situación que observo apunta a que lo de hace un momento no era sueño.

 

Efectivamente, Vanessa está encima de mí con sus piernas puestas a mis costados y sus labios pegados en mi cuello.

 

-Algo que es obvio deseamos las dos.- Murmura sin retirar sus labios de donde están.

 

-No sé de qué hablas.

 

-Por favor Paola, no soy ingenua.- Alza el tono de su voz sonando un poco molesta. -Sé que te gusto y tú también a mí, ¿cuál es el problema?- Musita despacio tratando de calmarse.

 

-¿Qu..?



Me interrumpe con corto un beso.

 

-Oye...- Trato de protestar pero ella vuelve a besarme ahora por más tiempo, dejándome sin respiración.

 

De nuevo posa sus labios en mi cuello.



No entiendo qué está pasando, todo es muy confuso.



Ella coloca sus manos en mi trasero y lo aprieta, eso me hace reaccionar, así que la empujo con fuerza logrando quitarla de encima.



Me tambaleo mientras avanzo con lentitud hacia la puerta.

 

Todavía no se me pasa por completo el efecto del alcohol; pienso que estoy algo drogada porque si sólo hubiera sido licor no seguiría sintiéndome tan mal y débil.



Consigo abrir la puerta, sin embargo ésta es abruptamente cerrada por Vanessa.

 

-Aún no hemos terminado.- Declara, se escucha enojada.

 

-No tenemos nada pendiente, déjame ir.

 

-No puedes marcharte en esas condiciones.- Comenta preocupada.

 

-¿Y culpa de quién es?- La miro resentida.

 

No estoy muy contenta con lo que ella hizo y trataba de hacer.



-Lo siento... yo sólo...- Agachó su cabeza. -Me comporté como una idiota... lo lamento... sabes que soy muy impulsiva y me dejo llevar por mis emociones... de verdad me importas, no quiero perderte, me gustas mucho Pao.- Confesó mirándome a los ojos.



-No sé qué decir...- Murmuré.

 

-Está bien, no pienso presionarte.- Dijo algo desanimada. -Pero te advierto que no te librarás de mí, buscaré la forma de que correspondas mis sentimientos.- Añadió con una sutil sonrisa. -Déjame llevarte a tu casa por favor, no deseo que nada malo te pase y menos por mi culpa.- Pidió apenada.

 

-De acuerdo.- Le sonreí.



No podía ser tan dura con ella, después de todo, Vanessa es mi mejor amiga.










  


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).