Zelo (como solían llamarlo sus compañeros) estaba escondido tras una pared, observando hacía el tumulto de estudiantes que gozaban de la fiesta de final de año. Todos estaban vestidos para pasar una noche llena de mucho baile.
-¿Qué haces aquí?
Se sobresaltó al sentir una mano en su hombro. Respiró cuando vio que su amigo Jong Up era el que estaba ahí.
-¡No me asustes así!
-Pero no hice nada. Sólo te toqué el hombro. ¿Qué miramos? -se paró justo detrás de su amigo y miró también hacia el grupo.
-Ay -exclamó JongUp, alargando la palabra y dándole un empujoncito a su amigo. -Estás viendo a tu crush~ Te gusta el profesor, te gusta el profesor -canturreo.
-¡Cállate! -le tapó la boca, mirando en todas direcciones-. Ya hablamos de esto. No lo digas tan alto.
-Bien, hoy me deberás una. Te tomarás una foto con él.
-¡¿Qué?! Apenas y puedo estar de pie a su lado y fingir que no siento nada, cómo crees que estaré para una foto.
Se encogió de hombros.
-Mira, es fácil -señalo hacía unas chicas que fácilmente se acercaban a Yong Guk y le pedían una selfie. -Hazlo así.
-Mejor vamonos a otro lado.
-Espera -le tomo del brazo-. De aquí no te vas sin esa foto. Y no es cualquiera, es una con el gran maestro Bang Yong Guk por el que se te cae la baba durante la clase y...
-¡Que no más! -lo volvió a callar tapando su boca.
Jong Up aprovechó y jaló a su mejor amigo por entre la cantidad de estudiantes. Se acercaron lentamente hacía el docente. Mientras, Zelo estaba que se iba al baño.
-¡Profe!
-Jong Up, Jun Hong, ¿disfrutan de la fiesta? -les sonrió. Estaba cruzado de brazos y de vez en cuando le daba un sorbo a su bebida.
-Sí, está muy buena. ¿Se toma una foto con nosotros?
-Claro -sonrió.
No tardó en acomodarse entre los dos chicos y usar su brazo para acercar a Zelo, quien estaba algo distante. Sacaron varias fotos, en todas mostrando a unos alegres Yong Guk y Jong Up con Jun Hong sobresaltado.
-A ver, sólo conmigo -Jong Up corrió el brazo para solo enfocarlo a él y al profesor. Disimulo una sonrisa traviesa cuando se apartó y cambió el lente de la cámara para enfocar de cuerpo completo a los otros dos. -¡Sonrían!
Todo paso tan rápido que no supo en qué momento pasó. Zelo sólo se recuperó cuando estuvo de nuevo tras la pared en la que había estado escondido. Rápidamente, tomo el celular de su amigo para desbloquearlo y ver.
En la foto estaban él y su amor platónico, sonriendo, abrazados, haciendo con sus manos la señal de V. Era simplemente una foto perfecta. Sus mejillas enrojecieron y su cuerpo comenzó a arder con el toque del maestro en su cintura.
-Otro día me lo vas a devolver -Jong Up sonreía orgulloso de si mismo. Había hecho su buena acción del día. -¿Bailamos?
Zelo asintió, sonriendo contento.