POV Jin.
Jin: Me gusta el sexo.
Yoongi: ¿Y a quién no?
Jin: Por lo visto a ti, ¿Cómo es que te enamoraste? Tú, la persona que no quería nada serio; la que disfrutaba el placer de torturar psicológicamente a los demás con el miedo. Y aun no comprendo por qué Jimin.
Lo escucho reír, haciéndome sentir más confundido.- Jimin es... algo incapaz de dejar ir. Cuando lo conocí, me sentí atraído físicamente a él. Su cuerpo era perfecto para devorar y dejar ir.
Jin: Lo obtuviste y aun no lo dejas ir, ¿Cómo después de tener sexo con él, le pediste una relación?
Yoongi: La verdad, le propuse matrimonio, pero el solo acepto un noviazgo. -Ahora si no podía comprender a Yoongi. Era la primera vez que su vida tenía algo serio.- Además, tener a Jimin en la cama es como tener a diferentes personas. Es refrescante la forma en la que obtengo algo nuevo de él cuando hacemos el amor.
Ruedo los ojos ante su romance empedernido.- Estas perdido, demonio.
Yoongi: Los demonios también pueden caer... Solo es cuestión de conocer al ángel perfecto que te haga probar la luz. Y tú Jin, no eres la excepción.
Suelto una risa sínica, haciendo que negara a mi acto.- ¿Quieres que te recuerde porque no asistí a clases por varios meses?
Yoongi: No digas que no te lo advertí.- Los ojos de Yoongi rápidamente se dirigieron hacia el frente, seguido, mordió su labio inferior ante el deseo de querer decir algo obsceno.- ¿Alguna vez has visto una carne tan deliciosa?- Sus ojos brillaban cuando veía a Jimin pasar por los pasillo junto con Jungkook. No podía mentir, Jimin era realmente bello, y que decir de su cuerpo lechoso y marcado. Incluso yo quería probar un poco de él.
Sentí los ojos de Jimin en mí. Mire sus labios cuando paso su lengua en ellos.
Jimin: Buenos días, Jin hyung. –Estaba a punto de contestarle, cuando Yoongi lo tomo de la chaqueta del colegio y lo arrastro por los pasillos.
Yoongi: Lo siento Jin, pero debo enseñarle a este niño a no pensar cosas calientes al menos que no sea yo el que este en esos pensamientos.- Jimin agrando sus ojos como si lo que dijo Yoongi fuera la verdad.
Jungkook se acercó a mí, dándome una reverencia, acompañado de otro joven que se veía demasiado ardiente. Pero por alguna extraña razón su aura marcaba cierto aire de peligro si te acercabas lo suficiente a él.- Buenos días, Jin hyung.
Jin: Buenos días.- Le doy una sonrisa al pequeño Jungkook, el cual conozco desde que tengo memoria debido a que Yoongi siempre lo sobreprotegía y traía siempre a su lado.- ¿Es tú amigo?
Jungkook: mmm... ¿Algo así?
Taehyung: Soy su novio. –Jungkook se sonrojo, sin la intención de desmentir al oscuro joven.
Jin: Te pareces a Yoongi.
Jungkook: Hyung, Taehyung es el hermano menor de Jimin.- Y ahora comprendía porque Jimin no le temía a Yoongi.
Taehyung: ¿Y tú eres?
-Acomodo el mechón que resbalaba por esos bellos ojos oscuros, que se alumbraron un poco cuando le regale un guiño.- Soy Jin hyung para ti, bebé.- Jungkook carraspeo su garganta, llamando la atención de Taehyung, que había vuelto a la realidad.
Taehyung: Mucho gusto en conocerte, Jin hyung.
Jungkook: ¿Hyung, sabes que soy una buena persona, verdad? –Asiento, mientras la expresión de Jungkook se volvió sombría, tomando la mano de Taehyung marcando su propiedad.- Déjame seguir siendo una buena persona.
Tal vez Jungkook era un lindo niño que parecía un ángel... pero, debía recordar que no era uno. Después de todo, era familia de Yoongi.
Taehyung: Oh, Namjoon hyung.
Fue entonces que comprendí las palabras que una vez me dijo mi madre cuando tenía 16 años y mi padre me llevo a su primera reunión de trabajo.
Madre: ¿Hay algún chico que llame tu atención?- Le lanzo una mirada de confusión, haciendo que ella sonriera por lo bajo.- Soy tu madre, ¿Crees que no me iba a enterar?
-Miro hacia enfrente, ruborizado, negando a su pregunta.- ¿Puedo decirte algo sin que te lo tomes a mal?
Madre: Nunca te has privado a hablar, no entiendo porque lo haces ahora.
Jin: No sé cómo lo tomaras.
Madre: Ha estas alturas creo que puedo tolerarlo.
-Suspiro, mirando hacia enfrente, con una sonrisa falsa saludando a los que se acercaban. Al igual que mi madre.- Yo... no creo en el amor y lo que ello contrae. No pienso que pueda tener una bonita relación.
-La sonrisa de esa mujer se torció un poco, volviendo segundos después a su normalidad.- ¿Puedo saber el por qué?
Jin: Sé que tú no amas a padre, y padre no te ama a ti. Sé que tienes a alguien y padre igual. Pero...- Observo a los invitados, mirando la hipocresía de los Chaebol. – Por deber y estatus siguen juntos.
Madre: Jin... lamento que te involucraras en este tipo de vida.
-Alzo hombros- No me importa.
Madre: Pero sabes, llegara un momento en que tus ojos no puedan dejar de ver a alguien. No sabrás la razón, simplemente lo harás. Entonces, cuando hablen por primera vez no podrás ocultar esa chispa que delate tu felicidad por cruzar un par de palabras.
Jin: Eso suena cursi.
Madre: Lo será, pero lo disfrutaras como no tienes idea. Después, vendrá algo peor.
Jin: Lo que me dices ya suena escalofriante.
Madre: Cuando tome tu mano; cuando lo beses; cuando hagan el amor, tendrás unas ganas inmensas de vivir el resto de tu vida con esa persona, porque solo una vez de cada esas cosas serán insignificantes.
Iba a decirle a mi madre que todo lo que había dicho se escuchaba como una película romántica o un cuento de hadas, pero calle cuando vi por primera y última vez una verdadera sonrisa en ella.
Al día siguiente mi madre había escapado con su amante, dejando mi patria protesta a mi padre. Las palabras que había recibido a mis 16 años fueron su consejo de despedida.
Jungkook: ¡Jin hyung, despierta!- Salgo de mi ensoñación, recibiendo miradas penetrantes de los tres presentes.- Namjoon hyung te acaba de saludar.
-Miro al chico que tengo frente a mí, haciéndome sentir nervioso. Extiendo mi mano para saludarlo.- Mucho gusto en conocerte, Namjoon.- Le regalo una sonrisa, haciendo que su rostro se torne serio. Él me da una reverencia, dejándome con la mano en el aire.
Namjoon: Mucho gusto en conocerte, Jin hyung.- Sus ojos ahora se dirigen a Taehyung, ignorándome.- ¿Han visto a Jimin?
-Sentí una leve opresión en el pecho. El tal Namjoon me había ignorado.- Yoongi lo tomo prestado.- Digo de forma juguetona, coqueteando sínicamente con él.
-El suspira cansado, volviéndome a ignorar.- Tendré que cubrirlo otra vez en clases. Nos vemos luego.
-Mis pies empezaron a moverse, delatando mi ansiedad.- ¿Sucede algo, hyung?
-Le sonrió a Jungkook.- No es nada. Bueno, en realidad me preguntaba: ¿Quién es él?
Taehyung: Es el mejor amigo de mi hermano, Kim Namjoon.
Jin: ¿Tiene pareja?
-Taehyung niega.- No es homosexual.
-Río irónicamente.- Esto tiene que ser una broma.
Mi vida dio un giro singular. Cada vez que Yoongi se topaba con Jimin, ahí estaba él. En un mundo que quería entrar sin éxito alguno.
Jimin: ¿Sucede algo, Jin hyung?- El pequeño Jimin se había acercado a mí cuando descubrió como observaba a Namjoon irse.
Jin: No lo comprendo. Intento entablar una conversación pero soy inexistente para él.
-Jimin se cruza de brazos mientras me acompaña por los pasillos.- Namjoon es un chico serio.- Jimin me observa de forma afilada.- ¿Qué estas tramando? ¿No estarás pensando en acercarte a mi ángel con esa aura de tensión sensual que tienes?
-Suelto una leve risa, mientras Yoongi jalaba nuevamente a Jimin.- Yo te enseñare lo que es una verdadera tensión sensual, Park.
-Jimin empezó a forcejar sin tener éxito.- ¡No te atrevas a tocar a Namjoon! ¡Moriré en el infierno si corrompes a mi ángel!
-El que estaba muriendo era yo, pero de risa, y es que, como no hacerlo al encontrar a mi amigo disfrutando su vida después de tanto tiempo.- En verdad le gusta Jimin.- La sonrisa de Yoongi era imborrable cuando se trataba de Jimin. Aquel chico que nunca mostro una expresión relajada a quien lo rodeaba había dejado caer su máscara al chico que lo besaba y acariciaba con cariño.
Jungkook: ¿En qué piensas?- No me di cuenta el momento en que Jungkook había llegado, observándome.- ¿Es sorprendente, no es así?
Jin: ¿Yoongi?- el asiente.- sinceramente sigo sorprendido lo mucho que ha cambiado. Aún puedo recordar cómo había jurado encerrar todos sus sentimientos.
Jungkook: Años atrás él me llamo diciéndome "Jungkook, creo que estoy enfermo" Me asuste al punto de salir corriendo de mi habitación, listo para tomar un taxi. Pero no pude parar de reír cuando continúo "Hay un chico nuevo que no puedo dejar de ver"
Jin: Conoció a Jimin.
Jungkook: Se volvió loco por Jimin. Cada vez que me llamaba o mensajeaba era "Jimin esto" "Jimin aquello" hasta que un día soltó la bomba "Estoy saliendo con Jimin"
Jin: déjame adivinar, ¿Fue por eso que entraste a este colegio? –Kookie, apenado asintió.- Comprendo. Yo también hubiera querido conocer a la persona que cambio nuestro demonio.
Taehyung: Pero no todo fue miel para ellos.- el hermano menor del nombrado nos estaba escuchando desde los pasillos, acercándose a nosotros.- Una vez me dijiste que me parecía a Yoongi. No te equivocaste. Jimin hyung puede que no muestre el miedo, pero cuando éramos pequeños forme cierto traumas en él, haciéndolo dudar de sus sentimientos por Yoongi.
Jungkook: Jimin hyung no podía aceptar que le gustaba alguien igual... o peor que su hermano. –Mis ojos se dirigieron nuevamente a Yoongi y Jimin. Ambos mostraban confianza y amor hacia el otro.- Yoongi hyung perdió contra Jimin hyung.
-Taehyung empieza a reír, tomando la mano de Jungkook, haciéndolo sonrojar.- Y Jimin hyung perdió contra un demonio.
-Igual que ellos. Podía ver como el pequeño demonio Taehyung había perdido contra Jungkook y viceversa.- Vaya historias de amor.- Se escucha el timbre. Me despido de los chicos para ir a mis clases.
Solo habían pasado algunos meses desde que me fui... y las cosas terminaron cambiando extremamente.
Ken: Hola, Jin.- Le sonrió al chico con él que una vez tuve una pequeña aventura... hasta que me aburrió.- ¿Tienes tiempo hoy? –Iba a contestarle, pero la presencia de alguien llamó mi atención.
Jin: Hablamos luego. –Me acerco a Namjoon que parecía buscar a alguien.- El profesor aun no llega.
Namjoon: No buscaba al profesor, te buscaba a ti.- Mis ojos se agrandaron, haciendo reír a Namjoon ante mi sorpresa. Mi cuerpo tembló cuando lo vi sonreír por mí.- Tengo algo para ti.- Me sentí un maldito loco. Iba a recibir un regalo de su parte.
Jin: ¿Qué es?- Me sentí tan avergonzado de lo melosa que se escuchó mi voz.
-Lo vi sacar una carpeta, haciendo que mis emociones se apagaran.- El profesor me pidió que te entregara estas notas. Has estado muy atrasado en clases que me mando a que repasaras lo básico conmigo.- La expresión de Namjoon se tensó cuando me vio llorar.- ¿Estas bien?
Jin: Claro que no, idiota.- Lo empujo saliendo de ahí ¿Por qué estaba llorando? ¿Por qué me sentía como la mierda cuando se trataba de él? ¿Por qué quería que me siguiera? Cuando pude dar con la enfermería, me topé con el doctor en ella.
Doctor: ¿Sucede algo?
-Tapo mi cara con mis manos.- ¿Podría dejarme solo por un momento? –El hombre suspira saliendo. Solo que alguien más entra en su lugar.- Vete, no quiero que nadie me vea así.- ¡No te vayas, quédate!- Eres el que menos quiero que me consuele.- ¿por qué eres el único que deseo que me abrace?
Namjoon: Si eso es lo que quieres, eso hare.- Mis manos empezaron a temblar. Desde que lo conocí, sabía que no le importaba.- Pero... tengo la extraña sensación que eso no es lo que quieres.- Quito las manos de mi cara, viendo su rostro. Lo veo suspirar, rascando su cabeza ante su vergüenza.- Siento que quieres que me quede.
No sé porque lo hice, pero corrí hacia él, besándolo como si no hubiera un mañana.
Sabía a miel; no, era como probar mi helado favorito sin arrepentimiento; era como subir a una montaña rusa golpeando mi cuerpo ante la adrenalina; era una droga... quería más.
Namjoon: Jin hyung... para.- Apenas y lo dejaba gesticular palabra cuando nuevamente estaba devorando sus labios.- Vas arrepentirte si no paras.- No quería hacerlo, fue por eso que cruce mis manos en su cuello, acercándolo más a mi cuerpo.
Jin: Te quiero.- Solté sin siquiera pensarlo. Abrí mis ojos de golpe, observando a Namjoon que se tensó entre mis brazos. Me aleje ante el miedo.
-Namjoon camino hacia la puerta. Me congele en mi lugar teniendo la sensación de que nunca más lo iba a volver a ver... Y fue entonces que escuche el seguro de la puerta.- Te dije que te arrepentirías.- La expresión de Namjoon era sombría, ruda, escalofriante... excitante, a tal punto de hacerme retroceder cuando una sonrisa vocifera adornaba su boca.- Lo niños buenos como tú nunca entienden.- Namjoon empezó aflojar su corbata, quitándosela, caminando hacia mi como si fuera su presa.- ¿Sabes cuánto luche por no tocarte? –Me jalo al punto de tirarme boca arriba en la camilla. Tomo su corbata y ato mis manos.- No quería destrozarte tan rápido.- Mis pantalones fueron jalados hacia abajo junto con mi ropa interior.- El juego de la persecución es aburrida si la otra persona no pone de su parte.
-Namjoon empezó a lamber sus dedos, metiéndolos en mi entrada haciéndome gemir.- ¿Qué eres? – Su otra mano se escabullo en mi camisa, haciéndome gemir abiertamente cuando roso mis tetillas.-
Namjoon: Kim Namjoon, el mejor amigo del ángel de Park Jimin... ¿Tercer demonio en la lista, mi lindo ángel? – Sentí como hundía su pene en mí después de que sus dedos jugaron previamente.- Un demonio que no deja escapar tan fácilmente a sus presas, Kim SeokJin.
No podía hablar. Mi trasero fue levantado más para poder sentir enteramente la extensión su extensión.
Quería pensar que era cualquier sesión de sexo que había tenido antes. Error. Me sentí completo cuando me beso; cuando su ritmo que acoplo con él mío; cuando besaba mi oreja y me susurraba lo sensual que era para él... quería más.
Jin: D-desátame.- Quito su corbata de mis manos. Salí de él y lo empuje en la cama subiéndome en él, haciéndolo reír.- Déjame probar tu infierno, Kim Namjoon.- Me empecé a moverme nuevamente. Lo besé con parsimonia, gemimos a tal punto de cercar nuestras gargantas y saciar nuestra sed con la lengua del otro. Por primera vez me sentí completo con alguien... Era tan adictivo que quería más, más... quería mucho más de esto. Hasta el punto de desgastarnos.
Cuando abrí los ojos me di cuenta que seguía en la enfermería. Volteé a ambos lados sin encontrar a Namjoon. Me había dejado.
Salí de la enfermería y me dirigí a los dormitorios.- Mi trasero duele como los mil demonios.- Eso sentía, pero, ¿Por qué no podía borrar mi sonrisa al seguir escuchando en mi cabeza la voz de Namjoon repitiendo una y otra vez "mi lindo ángel"?
A la mañana siguiente, me encontré en los pasillos a la pequeña pareja. Por primera vez no los envidiaba ni un poco.
Jungkook: Buenos días, Jin hyung
Taehyung: Te vez cansado.
Yoongi: ¿Quién está cansado?
Jin: Tu mejor amigo, idiota.- Yoongi se acercó a mí. Su expresión sería cambio a una risa burlesca.
Yoongi: Te dije que tarde o temprano ibas a caer.- Un escalofrió recorrió mi cuerpo ante su declaración.- Después me dirás quién es él.- Dijo cuando vio a Jimin acercarse por los pasillos.
Tuve que morder mis labios ante el deseo que calmar mis emociones cuando vi la mirada de Namjoon en mí. Mi cuerpo aún temblaba ante su presencia.
Jimin: Buenos días niños, buenos días Jin hyung... Buenos días Yoongi.
Yoongi: ¿Creí haber recibido tus buenos días hace unas horas en mi cama? –Reí ante el sonrojo de Jimin.- Namjoon, me gustaría que de vez en cuando desaparecieras del lado de Jimin.
Namjoon: Yoongi hyung, por milésima vez. No me gustan los hombres.
-Yoongi rodo los ojos, jalando a Jimin.- ¡Espera un momento Yoongi! –Jimin quito las manos de Yoongi de su saco.- P-puedo irme contigo bajo mi propia voluntad.- Yoongi rio cuando Jimin lo siguió.
Taehyung: Es la primera vez que no lo arrastra.- Jungkook y Taehyung se fueron al mismo tiempo, dejándonos a los dos solos.
Jin: Entonces... ¿No te gustan los hombres? –Digo en tono juguetón, mientras sostenía su corbata, la misma con la que me había atado ayer.- Esos suena interesante para mí.
-La expresión sería de Namjoon se quebró un poco al ver que no había nadie a nuestro alrededor. Me empujó hacia la pared, metiendo su muslo en mi entrepierna, haciéndome gemir.- No me gustan los hombres.- Su lengua paso por mi oreja, cortando más de la cuenta mi aire, haciéndome reír ante el mar de emociones que podía ocasionar en mí.- Pero adoró devorar ángeles como tú.-
Jin: ¿Me estás diciendo que tengo competencia? –Se aleja de mí, besando mis labios como si fueran su postre favorito.-
Namjoon: Tú no eres competencia para nadie, Jin. –Mi sonrisa se ensancho, besando nuevamente aquel demonio.-
Jin: Eso suena como si fuera tu primer amor.
Namjoon: Llámalo como gustes. –Lo sentí empujarme a un salón vació, cerrando la puerta.
(...)
Jimin: Siento que no te agrada Namjoon.
Yoongi: Es porque él es alguien peligroso.
Jimin: ¿De qué hablas? Namjoon es mi ángel de la guarda.
-Yoongi pasa su mano por la mejilla de Jimin.- ¿Qué tienes que atraes a la maldad pura, amor mío? –Jimin frunció el ceño.- Algún día te darás cuenta que nadie puede esconder lo que es.