Cuando llegamos a su habitación me aventó contra la puerta cuando la cerro.- ¡Eso dolió!- En cuestiones de segundos desabrocho mis pantalones y los bajo junto con mi ropa interior. Estrello su mano izquierda aun lado de la puerta mientras su otra mano bajo hasta mi pene. Se me corto el aire cuando empezó a jugar con mi cosa... Dios, me empecé a poner duro con su toque, ojos amenazantes y sonrisa diabólica.- ¿Qué tan lejos llego Jin en tu cabeza, bebé?
Me dio un beso con un de toque de lengua. Cuando se alejó la paso por sus labios. Lo vi bajarse hasta llegar a mi miembro. Agarro con fuerza mi cadera y metió mi pene en su boca. La humedad, la temperatura. Si el orgasmo que estaba sintiendo era el cielo, ¿la succión que hacía que era, el infierno?
-Y..yongi... ahm para... mmmh voy a correrme.- Sus ojos penetrantes voltearon a verme mientras de su boca salía una pequeña sonrisa maliciosa. Su acto vino seguido de movimientos más bruscos. Él quería que me viniera en su boca.- ¡Demonio!- Sentí como salió mi semen y las piernas me flaqueaban. Si no hubiera sido porque Yoongi me tenía agarrado hubiera caído.
Cuando me soltó, se paró y limpio su boca. Termine por caer recargado en la puerta mientras recuperaba el aliento. Al verlo salir del baño cepillándose los dientes un aura de maldad lo rodeaba. Sabía en lo que estaba pensado.- Si ya aprendí mi lección, no volveré a fantasear con nadie más que no seas tú.- Cuando dije mi juramento de niño Scout me regalo un giño mientras entraba nuevamente al baño.- ¡Por cierto!, ¿tú estás bien? Me refiero haya abajo- Claro que no iba a estar bien. Con solo verlo salir en bóxer y esa sonrisa traviesa me prepare para lo que venía.
-¿Pensaste que esto acababa aquí? Por si no lo recuerdas el mocoso de tu hermano nos interrumpió en la mañana.- Para mi suerte ya me había librado de Taehyung, la única cosa que me molestaba... Santo cielo, ¿Han visto como los depredadores casan a los herbívoros? Con su paso lento, ojos fijos en la presa en caso de que escape. Así se encontraba Yoongi frente a mí.
Me tiro en la cama terminándome de quitar la ropa. Debajo de su almohada saco un lúbricamente.- ¿Por qué eso estaba ahí?- Me sorprendió cuando abrió de golpe mis piernas haciéndome gemir al sentir el líquido frio.
-Cuando se trata de ti tengo que dejar varios trucos preparados.- sus dedos empezaron a jugar en mi interior mientras gemía y apretaba las sabanas. Abrí levemente los ojos y mire la expresión de Yoongi. La palidez de su piel combinaba con el tono rojizo de sus mejillas.- No me mires así Jimin, joder me aras que mande al diablo la preparación.- Yo también quería probar el sexo con un demonio. Apreté mis piernas en su cintura, incitándolo a lo salvaje. Cuando escucho mi risa traviesa saco sus dedos y empezó a empujar su pene. Era un dolor tan placentero, y más cuando se trataba de Yoongi.
-Yoongi, ven aquí y bésame de una maldita vez.- Empezó a reír mientras me jodía con todas sus ganas. Sus labios jugaron con los míos. Los lambia como dulces y los chupaba dejándolos hinchados. ¿Yo? Bueno, era un mar de gemidos.
Al sentir su semen en mi interior me vine en su mano que masturbaba. Ambos jadeamos entre nuestras bocas.- No sabes cuánto te amo Jimin.
Deje que cayera aun lado de mi en la cama y lo abrace.- Lo sé.- Y yo también lo quería decir pero, me daba algo de miedo confesar que amaba alguien así. Estuve huyendo toda mi maldita vida de alguien como él y ahora... ¿qué es lo que quería ahora?
-¿Jimin?- Me miraba como si esperara algo de mí.- ¿No dirás nada?- Él estaba esperando a que lo dijera.
-Yo...- Algo estaba mal conmigo porque se interrumpió la transmisión en mi cerebro.
Yoongi se levantó de la cama y se empezó a vestir. Me sentía algo confuso así que yo también me empecé a vestir. Me asustó cuando golpeo su escritorio.- ¿Enserio no dirás nada?-Juro por mi vida que el mono que tocaba los platillos en mi cerebro no era una respuesta. Me estaba volviendo loco.- Sé que me acerque de la forma incorrecta a ti y que en parte es culpa de mi forma de ser, pero quiero saber si sientes amor por mi o solo es atracción física. Hasta entonces creo que lo mejor será tomarnos un tiempo.
¿Por qué un tiempo? Yo no quería separarme de él. Me gustaba pero, ¿Qué hago con este terror que me invade cuando me pide amor? Cerró con fuerza la puerta asustándome y sacándome de mis pensamientos. –El demonio dos de mi vida acaba de dejarme en paz, igual que él demonio uno.- Paso mis manos por mi cabello calmando mi frustración, esto no había acabado.
Después de dos días de lo sucedido había entrado en un estado de depresión. Yoongi no venía a buscarme, se la pasaba la mayoría del tiempo con el chico de labios carnosos.
-Son solo amigos no es necesario mandar laser.- Dijo Taehyung quien se encontraba acompañado de Jungkook.
-Sí, son solo amigos, Jimin Hyung. Se conoces desde pequeños.
-Como Namjoon hyung y tú... Pero, ¿Por qué rompieron tan rápido?- Miro con odio a Taehyung quien fue el que preguntaba como si él no fuera el culpable.- ¿Fui yo?
-¡Siempre serás el causante de mis males Park Taehyung!- Fue mi grito de retirada cuando le lance con ello mi mochila y me fui de ahí.
-Chico malo creo que este es el momento en que aniveles tu Karma.
-Pensé que no iba a ser necesario.
No veía por donde caminaba así que acabe chocando con alguien. Mi trasero dolió cuando choco con el piso.- ¡Fíjate por donde vas!- ¡Esperen! En las películas y animes japoneses siempre que pasaba algo así empezaba el romance. Entonces esto significaba un nuevo comienzo para mí. No lo había visto aun, pero esa persona probablemente era mi destino, era el amor de mi vida, era...- ¿Yoongi?
-El que no miraba por donde iba eras tú.- Me dijo mientras me ayudaba a levantarme.- ¿Estas bien?- ¡Claro que no estaba bien, y tú eras el culpable dos! Me levanto haciendo de lado su mano y me voy sin dirigirle la palabra.- ¿Enserio Jimin? ¡El que debería estar enojado soy yo, no tú!
Me devolví y camine hacía él. Ahora estaba jodidamente enojado.- ¡No entiendes nada!
-¡Entonces dime que pasa!
-¡No es fácil!
-Por el amor de dios, deja de actuar como un estúpido...- Me sentí una nena por haberle dado una cachetada en vez de usar los puños.
-Tal vez me deje mangonear por ti y Taehyung y caiga en sus trampas, pero al menos hay una diferencia entre ustedes. Él nunca me insulto como tú lo hiciste, y es lo que menos espere que hicieras.- Estaba hecho un mar de lágrimas. No deje que Yoongi hablara, o más bien él no quiso hablar. Cuando lo vi congelado me aleje de él. Conclusión, mi relación acababa de terminar.
Lo que restaba del día me la pase en mi habitación fundido con mi cama. Namjoon vino a visitarme pero se fue cuando me vio dormido, o eso es lo que le hice pensar. Prendi mi celular, no tenía ninguna llamada perdida.
Solté mi teléfono cuando la puerta se abrió con una fuerte patada.- ¡Pero qué diablos te pasa Taehyung!- El demonio uno había entrado acompañado de Jungkook.
-Pudimos haber tocado.
-Si entrabamos como la gente normal se hubiera hecho el dormido. Lo mismo hizo cuando murió Chimmy, nuestro pomerano.
Jungkook negó con la cabeza y se sentó a un lado de mí.- ¿estás bien? No quiero parecer alguien chismoso pero escuchamos y vimos todo lo que pasó entre tú y hyung en la mañana.- Negué con la cabeza y me puse a llorar en sus brazos cuando me abrazo.
-¡Hyung deja de llorar, no lo soporto!
-¿Y de quien es la culpa?
-¡Tuya!- Su respuesta me hizo enfurecer.- ¡Si, enójate si quieres, pero sigo pensando que el único culpable eres tú! –Respiró profundo y calmo su ira cuando Jungkook le dio una mirada amenazante.- Yoongi hyung te pregunto si te amaba, ¿Por qué no le contéstate?
-Él es como tú. Su personalidad es igual de retorcida que la tuya.
-Pero contigo es diferente, ¿no es así?- Iba a contestarle pero ahora que lo pensaba tenía razón.
-Al principio lo hizo para llamar mi atención, pero cuando empezamos a salir cambio. Me lleno de...
-Amor.- Nunca pensé escuchar esas palabras del demonio uno.- No me veas así, para que lo sepas los demonios también podemos enamoramos.- mi pequeño hermano fue la persona que me calmo con tan sencillas palabras.
-Jimin hyung creo que deberías ir a ver a Yoongi hyung, está encerrado y no ha querido abrirle a nadie desde lo sucedido de esta mañana.
-Pero no sé qué decirle.
-¡Haaaa, ustedes dos son un asco!- Taehyung tomo mi brazo sacándome de la cama. Me llevo arrastrando por todo el pasillo hasta que llegamos a la habitación de Yoongi.- Sostenlo por mí, no dejes que se escape.- Taehyung me aventó a Jungkook mientras agarraba vuelo para patear la puerta.
-¡Pero qué diablos!- Dijo Yoongi mientras se levantaba del piso.
-¡Park Taehyung!- El encargado de los dormitorios salió de la oficina como toro eufórico.- ¡A detención!
-Con esto ya están saldadas las cuentas, Jimin Hyung.- No sé qué me conmovió más, el hecho de quererme ayudar a arreglar mis problemas con mi pareja, o el que fuera jalado de la oreja por el encargado hasta llegar a su oficina, donde sería castigado.
-Iré con él.- Jungkook corrió hasta la oficina pasando y a mi parecer aligeraría el problema. Mi hermano había encontrado a una buena pareja.
-¿Jimin?- Escuchar mi nombre de sus labios me estrujo el pecho.
Entre a la habitación y cerré lo que quedaba de puerta. Me senté aún lado de él, mirando hacia el frente. Sus ojos estaban clavados en mi persona.
-¿Tienes algo que decirme?- Cuando tuve el valor de encararlo pude verlo todo. Sus ojos carismáticos y llenos de orgullo y poder se encontraban rojos e hinchados de tanto llorar.
-Perdón por decirte estúpido, no quería insultarte.- Su mano iba a tomar la mía, pero dudo en hacerlo dejándola donde la tenía.- Entenderé si quieres terminar en definitiva conmigo.
-No eres el único culpable Yoongi. La mayoría de este problema fue culpa mía.- Suspire profundo y solté todo.- Me imagino que ya te abras dado cuenta del tipo de persona que es mi hermano menor... hablo de su personalidad demoniaca.- Yoongi asiente.- Es igual... de que hablo, es un poco más pequeña que la tuya.- Yoongi sonríe y asiente. Eso aligero un poco el pesado ambiente que nos rodeaba.- Esa personalidad me persiguió toda mi vida ahogándome en mi casa. Fue por eso que hui y me interne aquí, quería dejar de ser intimidado. Hasta que llegaste tú, un chico con la misma personalidad pero ofreciéndome una relación romántica, ¿Cómo le diría a alguien peor que Taehyung que lo amo?
-Comprendo.
-Pero no me di cuenta que había algo diferente. Tus maldades venían con amor.
-Es porque te amo.- Asiento y tomo sus manos.
-Yo también... Te amo Yoongi, y mucho.- Cuando me jalo y me llevo a sus brazo sentí que pude volver a respirar. El miedo se había ido, ahora me sentía a salvo en los brazos de un demonio.- ¿Tendremos sexo de reconciliación?
Yoongi empezó a reír con fuerza.- ¿Estás seguro que no me pediste volver solo para tener sexo conmigo?
-¡No me culpes, eres adictivo Min Yoongi!- Me termine de subir arriba de él y lo bese con lujuria.
A veces el amor viene de lo que más escapamos. Yo, al querer escapar de lo malo me encontré amando algo peor, pero a fin de cuentas fue lo mejor.
Fin.