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Aprendiendo a cocinar por Daramyui

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Notas del capitulo:

No estoy muy conforme con las escenas de lemon que escribí en los fics anteriores, la mejor manera de mejorar es practicar por lo que aquí os dejo un pequeño relato solamente de lemon, basado en una de mis fantasías sexuales mas recurrentes

¿Quién no querría tener a semejante cocinero?

 

 

 

   El bol temblaba en las manos de Eunhyuk, lo inclinaba peligrosamente amenazando con tirar el contenido al suelo. Cuando HanGeng se dio cuenta de lo que hacia no pudo evitar soltar un pequeño grito para advertirle pero con esto lo único que logró fue poner aun más nervioso al menor.

 

   -Así no- dijo HanGeng un poco nervioso, la cocina ya acababa bastante sucia, no hacia falta la ayuda del pequeño.

 

   Le quitó el bol de las manos y lo colocó en la encimera, le obligó a colocarse frente al mueble y, sujetándole por detrás, le indica como hacerlo.

 

   -No levantes el plato, hazlo aquí o tiraras todo- Eunhyuk movía la cabeza de arriba a bajo imitando los movimientos que había hecho HanGeng con el tenedor intentando mezclar bien los ingredientes, intentaba hacerlo despacio-ahora si lo estas haciendo bien.

 

   Eunhyuk respiraba hondo en un vano intento de calmar sus nervios. …l no solía cocinar pero se había propuesto sorprender por su hermana, hacia mucho tiempo que no la veía y le hacia ilusión su inesperada visita, esa misma mañana había recibido su llamada diciéndole que iría a su casa al día siguiente y Sungmin le dio la idea del pastel pero el muy cabrón se escaqueo diciendo que tenia una cita de trabajo o algo así. No tuvo más remedio que acudir a HanGeng pues sabia que le ayudaría.

 

   Hangeng estuvo un rato más en esa posición observando como lo hacia. Debía armarse de paciencia o terminaría matándole. Eunhyuk se esforzaba mucho en todo lo que hacia pero este no era uno de sus puntos fuertes. Había que admitir que le ponía ganas. Se separó del pequeño y comenzó a preparar las demás cosas.

 

   Al cabo de un rato Eunhyuk se sintió más confiado y comenzó a hablar explicándole primero porque lo estaba haciendo para continuar después hablándole alegremente de su hermana. Se le notaba muy ilusionado y un poco nervioso y no dejaba de sonreír en ningún momento.

 

   Seguía fielmente todas las instrucciones que el chino le daba moviéndose nerviosos de un lado a otro de la cocina contagiándole su nerviosismo al mayor y en más de una ocasión tuvo que sujetar a Eunhyuk por la espalda inmovilizándole contra la encimera y, sujetándole las manos, le guiaba. Por culpa de su nerviosismo los delantales y todos los muebles de la cocina habían terminado manchados. Caso a parte era el mismo Eunhyuk quien, por decirlo de alguna manera, estaba más blanco de lo normal.

 

   Al principio Eunhyuk se sentía incomodo cuando el mayor le tomaba por la espalda pero sentir el calido aliento de HanGeng en la nuca le hacia cosquillas, el calido pecho sobre su espalda le estaba produciendo un calor un poco extraño y no pudo evitar fijarse un sus mano, un poco ásperas.

 

   Finalmente llegó le hora de decorar el pastel y fue donde Eunhyuk, en un alarde de creatividad y nerviosismo, terminó manchando la cara de HanGeng, la suya propia, un par de muebles, la pared y la nevera, eso si, en el pastel quedo un gracioso y abstracto dibujo. Hangeng tenía los ojos cerrados y respiraba profundamente calmando los instintos asesinos que sentía en estos momentos.

 

   Al verle así, Eunhyuk se mordió el labio con una sonrisita controlando las enormes carcajadas que amenazaban con escapar de su boca. HanGeng abrió los ojos y vio la expresión de Eunhyuk. Aunque al principio estaba un poco enfadado ver esa traviesa sonrisa en el rostro manchado del menor provocó que una pequeña sonrisa se dibujase por unos instantes en su rostro.

 

   Eunhyuk se acercó hasta él y con un dedo le limpió parte de la crema bajo la curiosa mirada del mayor. Eunhyuk se chupó el dedo probando la crema con una sonrisa.

 

   -Ahora si que se puede decir que eres muy dulce.

 

   Una pequeña sonrisa se escapó de los labios de HanGeng quien volteó la cara para que el menor no lo notase. Eunhyuk se reía a carcajadas. Volvió a repetir quitándole un poco más de crema.

 

   -No me malinterpretes, pero estas muy bueno.

 

   Ante este último comentario no pudo aguantar más y estalló en carcajadas. Este chico era increíble, había logrado esfumar su mal humor con un solo comentario. Eunhyuk miraba el pastel con ojo crítico doblando el cuello en un gracioso gesto. Le dirigió una sonrisa a HanGeng en señal de aprobación.

 

   -No hagas eso- grito Eunhyuk al ver que HanGeng había cogido un trapo y se lo pasaba por la cara quitando los restos de crema.-Menudo desperdicio.

 

   -¿Querías comerte mi crema? Empieza chupando la nevera- dijo quitándose todo lo que quedaba.

 

   Eunhyuk hizo un gracioso puchero y HanGeng pensó que pasaba demasiado tiempo con Sungmin, pues había logrado parecer adorable.

 

   Guardó la tarta en lugar seguro y comenzó a recoger y limpiar los cacharros. Eunhyuk le ayudaba aun con el puchero.

 

   -¿No te vas a quitar la crema nunca?-pregunto HanGeng mirando de reojo al menor quien levantó la cabeza en un gesto bastante orgulloso.

 

   -No, es mi pintura de guerra.

 

   Había una fiera mirada en los ojos del rapero que le hizo querer probar su espíritu guerrero. Servilleta en mano le atacó intentando borrar su "pintura" y éste se resistió como pudo corriendo de un lado a otro de la cocina dando pequeños grititos. Acorralado contra la encimera que el mismo había manchado y limpiado, intentaba sujetar las manos de HanGeng que amenazaba con quitarle su preciada marca

 

   Forcejearon entre risas, HanGeng no era capaz de apartar las manos del menor. Estaban muy cerca el uno del otro por lo que aprovechó y acercando su rostro aun más al suyo pasó su lengua por la mejilla del fiero guerrero borrando parte de la crema. Eunhyuk cerró los ojos fuertemente ante este inesperado acto. HanGeng le tenía completamente inmovilizado contra el mueble y no podía más que sentir la lengua del mayor recorrer su rostro.

 

   No sabia como ni porque pero sus labios buscaron dócilmente los del chino quien se sorprendió al notar el roce de los suaves y mullidos labios de Eunhyuk, quien tenia los ojos cerrados y las mejillas comenzaron a teñirse de rojo.

 

   Cuando se dio cuanta de lo que estaba haciendo notó como sus mejillas se encendían y, aun con los ojos cerrados, se apartó de HanGeng soltándole y esperando a que el otro reaccionara, un grito furioso, una pregunta estúpida en plan "¿Qué has hecho?". Algo.

 

   Abrió los ojos tímidamente y vio la aturdida expresión del chino. No sabia porque lo había hecho y eso le ponía nervioso pero la mirada atónita de HanGeng le ponía aun más nervioso. Intentó apartar al mayor murmurando una disculpa pero este no se movía.

 

   HanGeng sujetó el rostro de Eunhyuk con ambas manos y volvió a unir sus labios en otra caricia dulce y suave. Ahora era el turno de Eunhyuk para sorprenderse. El mayor tenía los ojos cerrados y comenzó a mover sus labios lentamente envolviendo los del menor. Este se sorprendió aun más al notar como sus propios labios se abrían dejando paso a la lengua de HanGeng.

 

   ¿Estaban besándose? No podía creer lo que estaba haciendo. La lengua del chino acariciaba lenta y tímidamente la de Eunhyuk, quien notaba unas revoltosas mariposas en el estomago.

 

   Por mucho que lo intentase hoy no lograba controlar su cuerpo. Su lengua parecía haber despertado de su letargo y sus manos fueron a parar sobre la cintura del mayor acercándole instintivamente más contra su cuerpo.

 

   Ese beso se convirtió rápidamente en una voraz y ardiente muestra de deseo. Ninguno de los dos pensaba en lo que estaban haciendo solo se dejaban llevar por las deliciosas sensaciones y el dulce sabor de sus bocas. Ya dejarían los juicios morales para luego.

 

   El beso terminó de una manera un poco brusca pues ambos se quedaron sin oxigeno. HanGeng apoyó la frente contra la de su compañero, ambos estaban en la misma situación: los dos con los ojos cerrados, la respiración agitada y las mejillas sonrojadas. Aun tenía las manos en el rostro de Eunhyuk, las deslizó con suavidad por su cuello hasta llegar a sus hombros.

 

   HanGeng estaba bastante sorprendido por todo aquello, no habría esperado ese atrevimiento de Eunhyuk en ningún momento y la verdad es que resultaba adictivo. Acababan de separar sus labios y ya deseaba besarle otra vez.

 

   El cerebro de Eunhyuk no podía pensar en otra cosa que no fuera el nuevo y apasionado beso de HanGeng, notaba sus cuerpos pegados y las manos del chino recorrer su espalda con un poco de fuerza, daba la impresión de querer partirle la espalda. Pero, contrario a lo que pensó en un principio, le empezaban a gustar mucho esas bruscas caricias.

 

   Eunhyuk metió sus manos dentro del jersey de HanGeng acariciando su espalda con las yemas, prestando especial atención a los costados pues le hizo cosquillas, le hizo gracia ver como HanGeng interrumpía el beso dejando escapar una carcajada, había olvidado que el mayor tenía muchas cosquillas. Aprovechando el descuido del chino lamió y mordió suavemente su cuello continuando con las suaves caricias que hacían que HanGeng soltase pequeñas carcajadas en su oído. Eunhyuk fue subiendo por su cuello hasta su oreja donde se entretuvo un rato. El calido aliento mezclado con los pequeños mordiscos estaban haciendo temblar a HanGeng quien se aferraba fuertemente a la espalda del menor. Notar la húmeda lengua de Eunhyuk recorrer todo su lóbulo hacia que sus piernas parecieran gelatina. Sus piernas no eran lo único que estaba reaccionando con los besos y caricias del menor. Sus cuerpos estaban completamente pegados y le daba un poco de vergüenza que el otro notase como despertaba su anatomía pero no podía dejar de abrazarle. Le necesitaba cerca.

 

   -Espera-dijo Eunhyuk separándose un poco sus rostros. HanGeng estaba aturdido y miraba al sonrojado Eunhyuk con curiosidad- te manche- dijo esto en un susurro y, sujetándole la cara con las manos como había hecho antes con el, paso la lengua por su rostro quitándole los restos de crema.

 

   HanGeng desato el delantal de Eunhyuk y lo arrojó al suelo y se deshizo también del suyo mientras el menor continuaba con su tarea. Eunhyuk le quitó con un poco de torpeza el jersey a HanGeng, ya estaba cansado de su cuello, quería probar toda la piel del mayor.

 

   El mayor metió las manos dentro de la sudadera de Eunhyuk acariciando su pecho y vientre mientras le besaba el cuello, succionando y mordiendo sin importarle las marcas que aparecieran después. El menor giró su rostro echando la cabeza hacia atrás dejando más piel al descubierto. Ante este gesto HanGeng delineo con su lengua la nuez del menor.

 

   Eunhyuk apartó al mayor con una mano logrando que este soltase un pequeño gemido de frustración seguido de una exclamación de sorpresa al notar como algo manchaba su pecho. De pronto vio a Eunhyuk con una traviesa sonrisa, con su mano untaba el pecho y el vientre con el resto de crema.

 

   HanGeng se retiro un poco y miraba al menor lamerse la mano quitando la crema que había en ella, ver como hacia eso le excitaba mucho. Eunhyuk se agachó y, con una rodilla en el suelo, miraba a los ojos a HanGeng. Puso sus manos en las firmes caderas del chino y continuó mirándole con esa traviesa sonrisa. HanGeng no podía apartar la vista del menor, este estaba a la altura de su entrepierna. Su rostro tan cerca de su ombligo que notaba su calido aliento.

 

   Eunhyuk, aun en esa posición, comenzó a quitarle la crema, saboreando lentamente cada centímetro de su piel. Empezó con su vientre para ir subiendo lentamente. Sonreía satisfecho al ver las reacciones de HanGeng. El mayor se mordía el labio en un intento de controlar sus gemidos y había tenido que apoyarse en el mueble pues tenia la impresión de que sus piernas no resistirían.

 

   Todo aquello le estaba excitando tanto que su propia entrepierna le pedía a gritos un poco de atención pero quería seguir saboreando a su hyung. Estaba delicioso, y no solo por la crema.

 

   HanGeng no aguanto más, Eunhyuk estaba incorporado lamiendo su pecho. Sujetándole por los hombros le empujo contra la encimera y le beso salvajemente, manchando, sin querer, la sudadera de Eunhyuk con los restos de crema de su pecho. Eso le dio la excusa para quitársela. A la sudadera le siguieron los pantalones dejando al descubierto la más que notable erección del menor, al darse cuenta de lo que HanGeng miraba intentó cubrirse avergonzado.

 

   Eunhyuk se sentía muy avergonzado, estaba llegando demasiado lejos. El nunca lo había hecho con un hombre y todas sus acciones habían sido por instinto pero al verse semidesnudo frente al chino recuperó la compostura y la vergüenza. Todos los besos y caricias le habían gustado mucho, no hacia falta más que mirar un poco hacia el sur, pero al ser observado tan detenidamente por el mayor se sentía avergonzado y desorientado. Le habría encantado continuar con todo aquello pero tampoco sabia como.

 

   Esa mezcla de picardía y timidez en el carácter de Eunhyuk le estaba haciendo llegar al límite de su paciencia. No era lo mismo que con Heechul y eso, a su parecer, era lo mas excitante.

 

   Sujetó las muñecas de Eunhyuk con suavidad mientras buscaba sus labios. Esta vez fue mucho más suave, besaba lentamente el labio inferior del menor. Ya había llegado muy lejos y no quería que se echase atrás en eso justo momento, sabia que lo único que necesitaba era un poco de apoyo y ternura para ganar confianza y continuar.

 

   Eunhyuk ya no parecía tan tenso y pudo retirar sus manos al fin, las llevo a cada lado de su cintura mientras dejaba que el menor profundizara el beso lentamente. Dejó que el rapero explorara cada rincón de su boca. La actitud de Eunhyuk era realmente curiosa, al principio se mostraba tan salvaje que tuvo la impresión de que quería dejarle sin aire y ahora movía su lengua con timidez dentro de su boca.

 

   Por suerte para HanGeng el beso se volvía rápidamente mas necesitado y apasionado pues las lentas y suaves caricias que repartía el menor en su espalda y torso le estaban haciendo perder el control.

 

   Sin necesidad de separar sus labios en ningún momento, Eunhyuk le quito el cinturón y desabrocho el pantalón. Metió una de sus manos dentro de la ropa interior de HanGeng percatándose que su entrepierna no era la única que se encontraba en semejante estado.

 

   HanGeng no podía creer lo que estaba viendo, un momento antes casi tenia que sujetar a Eunhyuk para que no saliese corriendo avergonzado y ahora se atrevía a hacer algo así. El menor interrumpió el beso y las caricias en su miembro para quitarle las prendas tan molestas e innecesarias en un momento así. Una vez desnudo, Eunhyuk atrapo sus labios en un voraz beso mientras sus manos recorrían desvergonzadas toda su anatomía.

 

   Eunhyuk dejo escapar un gemido de frustración al notar como HanGeng le apartaba, tanto sus manos como sus labios. ¿Acaso no lo estaba haciendo bien? No tuvo mucho tiempo para protestar pues el mayor le llevo hasta la mesa donde le sentó y le quitó los calzoncillos. Le dio un dulce beso en la frente y acerco una silla. No sabia que quería hacer el mayor pero sentía mucha curiosidad por lo que observo en silencio como se sentaba en la silla frente a el. Se volvió a cubrir avergonzado al ver como HanGeng le hacia separar las piernas y se situaba en medio. El mayor intento retirar sus manos pero se negó a dejarle. Le daba mucha vergüenza estar en esa posición.

 

   Un suspiro frustrado se escapo de los labios del chino. A ver si se decidía de una vez. No podía ser atrevido y vergonzoso a la vez porque le estaba desquiciando. El segundo intento de retirar las manos tuvo el mismo resultado que el primero. Al estar justo en medio le impedía cerrar las piernas.

 

   HanGeng comenzó a depositar pequeños besos en la cara interna de los muslos de Eunhyuk. Empezó cerca de la rodilla para ir subiendo lentamente haciéndole separar las piernas aun más. El menor dejaba escapar pequeños suspiros. La lengua de HanGeng sustituía a ratos a sus labios y sus manos tampoco se estaban quietas, sentía como el mayor le separaba las piernas cada vez más.

 

   Con un pequeño gemido se echo hacia atrás apartando las manos al fin y las apoyó en la mesa a modo de soporte. Aunque HanGeng ya tenía vía libre prefirió jugar un poco más y continuó con sus muslos. Eunhyuk, en un acto involuntario, se acercó hasta el borde de la mesa en una muda suplica por unas caricias más intimas. HanGeng sonrió triunfante, no era el único que perdía la paciencia con aquel jueguecito. No le hizo esperar más.

 

   Los brazos de Eunhyuk temblaron al notar la boca de HanGeng en una zona tan intima. Se tumbó completamente sobre la mesa pues sus brazos no le sostenían. Aquello lo estaba disfrutando de verdad, el chino era todo un experto. Lamía y besaba su entrepierna con diligencia y no era capaz de acallar los gemidos y suspiros por mucho que lo intentase.

 

   Eunhyuk estaba llegando al limite y, aunque HanGeng lo notó, continuó con lo que hacia hasta que ya no pudo más y estallo soltando un pequeño grito. Aun con los ojos cerrados notaba como su respiración volvía a la normalidad pero no se dio cuenta de que HanGeng se había levantado hasta que abrió los ojos y le vio de pie observándole con una sonrisa lasciva que le hizo ruborizar de nuevo.

 

   HanGeng le obligó a incorporarse y le besó, otra vez apasionadamente. Una vez más, los besos de HanGeng le hacían olvidar la vergüenza. Intentó bajar de la mesa para recompensar de la misma manera al mayor pero este no le dejó. Mientras le besaba las manos de HanGeng bajaros por su espalda. Sin dejar de besarle en ningún momento le recostó de nuevo sobre la mesa. Eunhyuk notó como algo rozaba sus nalgas y supo enseguida que era, se estaba imaginando lo que el mayor quería hacer y se empezaba a asustar.

 

   -Hyung...yo- intento decir Eunhyuk pero HanGeng le puso un dedo en los labios para que callase. Habría seguido protestando de no ser porque ahora le miraba con ternura.

 

   Sus dedos recorrieron los labios del menor incitándole a abrirlos, este los abrió por inercia y lamió los dedos de HanGeng una vez dentro de su boca. Eunhyuk no tenia ni idea de lo excitante que resultaba en aquel momento, con sus mejillas encendidas, su cabello revuelto y los restos de crema pero le estaba costando mucho ser paciente.

 

   Cuando creyó que ya era suficiente volvió a besarle mientras tanteaba su entrada. Todos los sonidos que Eunhyuk pudiera emitir eran acallados por los labios de HanGeng.

 

   Eunhyuk arqueo la espalda ante la primera intromisión. Era extraño notar un dedo de HanGeng "ahí" y un poco molesto. Lo doloroso fue un segundo dedo. Intentaba protestar pero HanGeng no le dejaba decir nada y continuaba con su tarea.

 

   -Relájate o te dolerá más- murmuro HanGeng en su oído.

 

   Eso era algo muy fácil de decir pero no tan fácil de cumplir. Intentaba relajarse pero debía admitir que tenía miedo, nunca había hecho eso y si solo dos dedos le habían dolido no quería ni imaginar lo que le dolería después.

 

   HanGeng dejó lo que hacia y, elevando las caderas de Eunhyuk, le introdujo su miembro de una sola embestida haciéndole gritar y arquear la espalda pegándose más a su cuerpo. HanGeng se arrepintió un poco, había sido un poco bestia pero él no tenia mucha paciencia para aquello y ya bastante lento había ido hasta entonces. Besaba todo su rostro de Eunhyuk con pequeños y dulces besos sin moverse, esperaba a que el menor estuviese preparado para continuar.

 

   Eunhyuk respiraba con dificultad intentando relajarse. Había dolida más de lo que imaginaba pero se estaba acostumbrando. Se dio cuenta de que le estaba clavando las uñas a HanGeng en los hombros. Una dulce sonrisa en los labios de Eunhyuk le indicó que ya era el momento y comenzó a balancear las caderas lentamente. Notaba en su vientre como la entrepierna del menor volvía a endurecerse y comenzó a acariciarle al ritmo de las embestidas.

 

   Nunca imagino que hacer aquello con otro hombre fuese tan placentero. El dolor había dejado paso al placer rápidamente. El ahora frenético movimiento de caderas de HanGeng junto con sus caricias y besos le estaban llevando al limite nuevamente y mas rápido que antes.

 

   HanGeng notó como las paredes de aquella oscura cavidad se estrechaban comprimiendo aun más su miembro cuando Eunhyuk manchaba su vientre y su mano alcanzado el clímax. Acto seguido el también llego al orgasmo dejándose caer sobre el menor. Se retiró con suavidad intentando hacerle el menor daño posible.

 

   HanGeng deseo que la hermana de Eunhyuk le visitase más a menudo para poder disfrutar de aquel delicioso postre. Le dio un pequeño y casto beso en los labios antes de incorporarse e ir en busca de la ropa. Eunhyuk, aunque avergonzado, tenía una brillante sonrisa en el rostro. Nunca imagino que aprender a cocinar fuese tan divertido, debería hacerlo de vez en cuando.

 

   Ambos muchachos miraron la cocina con cara de pena. Lo malo seria limpiar todo aquel estropicio.

 

 

FIN

Notas finales:  

 Espero que os haya gustado, intentare practicar más estas escenas, soy demasiado perfeccionista y no creo que las escriba bien, según mi opinión le faltan soltura.


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