Golpeó la cabeza contra la mesa de madera, tras un par de golpes una mano se poso suavemente sobre su hombro. Levantó la cabeza y se encontró con la dulce sonrisa de Ryeowook, aquella sonrisa lograba calmarle siempre que la veía, el menor tenia una sonrisa tan serena que era capaz de controlar a las bestias si quisiera. Retiro la silla de al lado y se sentó mirando fijamente a su desquiciado compañero.
-¿Aun no lo has logrado?-preguntó en voz baja apoyando los codos sobre la mesa.
Sungmin negó con la cabeza volviendo a golpearse la cabeza contra la dura tabla sobre la que estaba apoyado el ordenador portátil. La calida risa del menor llego hasta sus oídos haciéndole estremecer, adoraba esa risa y, aunque no le miraba en aquel momento, se lo podía imaginar cubriendo su boca con el dorso de la mano y los ojos cerrados. Suspiro resignado, con el cerca seria imposible escribir nada. Hacia unos días apostó con Yesung a que podría escribir un fanfic mejor que el suyo. Ambos habían estado mirando varias páginas de Internet y les hizo mucha gracia encontrarse a ellos mismos y a los grupos amigos descritos por las fans en distintas historias inventadas por ellas. Algunas eran de una calidad excelente y quedaron asombrados por las capacidades literarias de algunas de aquellas fans. De alguna manera que ya no era capaz de recordar habían terminado apostando bastante dinero, el que escribiera la mejor historia ganaría el dinero. Para determinar quien escribía mejor utilizarían a un jurado neutro, es decir, las mismas fans de aquella pagina. Con un seudónimo falso colgarían las historias y el que recibiera mas comentarios positivos ganaría. Sabía que Yesung ya había terminado la historia, pues el mismo se lo dijo, y estaba esperando a que el menor también terminase para poder dejarlas en aquella página y esperar. No sabia de que trataba, pues Leeteuk la tenia guardada esperando a que Sungmin le entregase la suya. Para evitar que hicieran trampas las dos historias pasarían primero por las manos de Leeteuk quien les pondría un titulo que ninguno de los dos supiera y las colgaría con dos nombres falsos para que ninguno pudiese leerlas ni escribir ellos mismos los comentarios, además de que todos sus compañeros les vigilarían para que no entrasen en la pagina.
-¿Has leído la de Yesung?-pregunto Sungmin.
-Si-respondió dubitativo Ryeowook.
-¿Qué tal es?
-¿La verdad?-Sungmin asintió, aunque no estaba muy seguro de querer saber el nivel al que competiría-es bastante buena.
-Estoy jodido ¿verdad? ¿Quién me mandaría a mi apostar tanto dinero?-pregunto golpeándose de nuevo la cabeza contra la mesa.-No puedo perder.
-Es solo un poco de dinero-comento Ryeowook alzando los hombros sin darle importancia.
-No es solo dinero. Se trata de orgullo. No puedo perder contra Yesung, no en esto. Pero no se me ocurre nada-protesto con un leve quejido.
-No esperes a que tu inspiración venga a visitarte para escribir algo, es mejor que cuando llegue te encuentre trabajando-sonrío Ryeowook.
-Hablas raro-se quejo Sungmin alzando al fin la cabeza de la mesa-no entiendo lo que quieres decir.
-No esperes a encontrar una idea genial. Comienza a escribir y veras como se te ocurre algo-explico Ryeowook sin dejar de sonreír.
-Pero si no se sobre que escribir no se a que teclas darle-respondió con ironía.
-Haber-Ryeowook suspiro armándose de paciencia-tu que has visitado la pagina ¿Cuáles eran las historias que tenían mas comentarios?
-Las historias largas.
-Me refiero a las cortas ¿Cuáles eran las mas leídas?
Sungmin miro al techo intentando recordar aquel detalle, no se había fijado mucho en aquello, la verdad era que si se había fijado, las mas leídas eran sobre el kangtuek y era sobre eso mismo que había estado intentando escribir pero no había sido capaz, conocía tanto a sus dos compañeros que nunca se los lograba imaginar juntos. Eran muy buenos amigos pero se notaba a la legua que no había ese tipo de química.
-Sobre el kangteuk-respondió finalmente-y las que solo tenían escenas de sexo. He intentado sobre el kangteuk pero no soy capaz.
-Si no eres capaz con esa pareja ponte con la otra cosa que también se leía mucho.
-¿Sobre sexo?-pregunto incrédulo-¿Cómo voy a escribir una escena de sexo entre dos de mis amigos? Si al menos fuese con una chica seria más fácil, pero entre dos tíos...
-No pienses como si fuesen dos amigos, intenta imaginarte que son solo dos cantantes. Intenta imaginar que escribes una historia sobre dos hombres aunque tengan los mismos nombres que tus amigos. Se que es difícil pero creo que empezando por eso ya tienes algo mas.
-Es decir...me estas aconsejando que escriba una historia solo de sexo ¿es eso?-Sungmin continuaba sin salir de su asombro.
-Si. Así te ahorras el tener que inventarte un argumento. En cuanto a lo del sexo piensa en lo que te gustaría hacerle a una chica e intenta trasportarlo a la historia. Evita comentar que tiene tetas y ponle algo que cuelgue entre las piernas. Nada más.
Tal y como lo comentaba el menor parecía muy fácil, aunque el tema de lo que quería hacer con alguna chica estaba de mas. Ryeowook se marcho dejándole pensativo mirando la pantalla en blanco del ordenador. Quizás tenia razón y no era tan difícil. Pero no utilizaría lo que le gustaría hacerle a una chica sino al mismo compañero que le había aconsejado. Utilizaría todos aquellos sueños en los que Ryeowook se le aparecía para hacerle gritar y gemir de placer. Comenzó a escribir recordando cada detalle de Ryeowook, dejando por escrito una de sus fantasías sexuales que más le había gustado. Redacto con mucho cuidado todo lo que soñaba durante las noches con hacerle al pequeño. Siempre en primera persona recordando lo que le hacia sentir cuando le abrazaba y acariciaba e imaginándose que no eran solo gestos amistosos sino algo mas. Sonreía alegremente al ver que las palabras salían cada vez con mas facilidad, al principio escribía lentamente y con algo de timidez pero ahora la rapidez con la que las ideas se agolpaban en su cabeza le hacia cometer graves errores ortográficos y gramaticales. Al cabo de unas horas el relato estaba completamente terminado y le releía corrigiendo los pequeños errores que pudo cometer y quedando muy satisfecho con el resultado. A las fans les gustaría mucho lo que había escrito, o al menos eso esperaba. El rubor inundo sus mejillas al recordar que aquello tenia que pasar primero por las manos de Leeteuk. Bueno, no importaba, ya estaba escrito y estaba segurísimo de que ganaría el por lo que, dejando la vergüenza a un lado, fue en busca del líder.
El mayor estaba tumbado sobre su cama con un libro en las manos y Yesung, con el que compartía habitación desde hacia bastante tiempo, todo por culpa de Donghae y Eunhyuk, los cuales se pusieron muy pesado en que querían volver al eunhae, metafóricamente hablando, hicieron un gran hincapié en aquello pues no querían que ninguno pensase nada raro, estaba sentado en la otra cama con algo entre las manos, aunque no llego a ver lo que era.
-Hyung, ya he terminado la historia-dijo con timidez tras dar un par de golpes en la puerta-esta en mi portátil.
-La leo ahora mismo.
-Cuélgala esta misma noche-dijo Yesung rápidamente.
-En cuanto la lea, no te preocupes.
Leeteuk busco en su cartera el pequeño pendrive color azul oscuro que apenas ocupaba un minúsculo espacio. Allí dentro tenia información guardada bastante personal, incluida la historia que Yesung había escrito. Allí dentro estaba la única copia de esa historia hasta ese momento, pues en unas horas estaría a disposición de todo aquel que quisiera leerla.
Sungmin sentado en el sofá miraba a Leeteuk fijamente mientras este la leía. Se mordía las uñas con fuerza al ver el color en las mejillas del líder, sabia que no había sido muy buena idea el escribir aquello, solo esperaba que no le dijese nada de sus inclinaciones sexuales. Hasta aquel momento todos pensaban que le gustaban solo las chicas cuando no era del todo cierto, le gustaban las chicas pero estaba enamorado locamente de Ryeowook. El problema era que el menor no sabia nada de aquello. Ni el pequeño ni nadie del grupo, o eso esperaba.
-¿Estas seguro de que quieres que publique esto?-preguntó Leeteuk con un extraño gesto en el rostro.
-Si-respondió convencido-se trata de una apuesta y a las fans les gusta esas cosas.
-Si tu estas seguro adelante. Solo os voy a pedir un favor, no me utilicéis de juez nunca más, al menos si vais a escribir estas cosas.
Le dedico una sonrisa nerviosa y se marcho a su habitación dejando a Leeteuk a solas. Esperaba que realmente gustase o le habría hecho pasar un embarazoso momento al líder solo por una tontería. Leeteuk les iría informando sobre los avances de las historias y de los comentarios. Esperaba que no tardasen mucho tiempo en decir algo.
* * *
Cierro los ojos y le vuelvo a ver, otra vez esa sonrisa que cuando va dedicada a mi siento que me derrite. Cada una de sus pequeñas caricias me hace estremecer. Abro los ojos y una enorme sonrisa se dibuja en mi rostro al ver que por fin no es un sueño que terminara al sonar el despertador. Esta vez es real, esta entre mis brazos, sonriéndome y suplicando por otro beso que no le pienso negar. Juntamos nuestros labios otra vez y siento su calidez, su perfume, su sabor. Es dulce, sabia que era dulce, aunque no lo había probado hasta hoy estaba seguro de que seria así de dulce. Sus besos son lentos pero firmes, sabe como moverse para hacerme sentir en el cielo. No quiero que este beso acabe nunca, me da igual que alguien pueda vernos, solo con tenerle entre mis brazos soy feliz y el resto del mundo podría irse a la mierda, pues a mi ya no me importa nada. Mientras tenga a Ryeowook así, besándome con dulzura nada mas tiene importancia. Nunca pensé que esto podría llegar a ocurrir realmente pero estoy feliz de que así sea. Desde que le conocí he deseado poder hacer esto y tengo miedo de hacer algo mal y romper la preciosa atmosfera que nos rodea.
Me obliga a sentarme sobre el sofá y estuve a punto de quejarme pero el se sentó encima con las rodillas a cada lado de mi cuerpo. Su cuerpo esta tan cerca que puedo sentir hasta el mas pequeño rincón de su piel. Yo solo llevo puesto una toalla, pues acabo de salir de la ducha y el viste su pijama. Estamos solos en el apartamento, los demás se han ido, ahora no recuerdo nada. Sus labios sobre los míos anulan todo signo de inteligencia y pensamiento, solo puedo atender a su cuerpo y a sus traviesas manos recorriendo mi torso. Nunca imagine que sus manos serian tan calidas ni que unas simples caricias despertarían mi entrepierna tan rápido. Sentado donde esta debe de notarlo ya pero no dice nada, no hay ningún indicio en su rostro que me diga que lo esta notando. No quiero ser un simple observador por lo que retiro lentamente su camiseta dejando al descubierto su pálido pecho. Beso su torso prestando especial atención en los dos lunares que tiene bajo el pezón izquierdo, me encantan esos lunares y por los besos y mordiscos da la impresión de que realmente quiero borrarlos de su piel. Con las manos en su trasero le obligo a levantarse un poco para poder llegar bien a su ombligo, al hacerlo su cuerpo queda aun mas pegado al mío y noto que su entrepierna también despierta con las caricias. No lo dudo un instante y, mientras mi lengua recorre toda la piel de su torso y una de mis manos masajea sus nalgas, con la mano presiono su virilidad sobre la ropa haciéndole soltar un suspiro. Aquel suspiro es el mejor sonido que puede existir. Mi mano se ve alejada de aquella codiciada piel, pero casi es mejor, pues lo que hace Ryeowook me deja sin aliento. Me obliga a separar las piernas y se arrodilla quedando entre ellas. Retira la toalla lentamente sin dejar de mirarme a los ojos y mi erección queda al descubierto. Baja lentamente hasta aquella palpitante piel y sopla levemente sobre la punta, aquello me hace cerrar los ojos y echar la cabeza hacia atrás. Me estiro dejándole mejor acceso a toda mi piel y el no pierde el momento. Un ronco gemido escapa de mis labios al sentir como engulle mi entrepierna, su lengua se enrosca en la punta haciéndome estremecer. Sus manos, su lengua y sus labios dándome placer al mismo tiempo es algo que pensé nunca sentiría. Estoy cerca del clímax por lo que le aparto con delicadeza. Me sonríe de aquella manera que es capaz de enamorar a las cientos de fans que le ven. De pie frente a mi le bajo los pantalones y la ropa interior deprisa y, con las manos en las pequeñas caderas, le atraigo hasta mi y mis labios buscan su entrepierna, la cual encuentro en un estado similar al mío. Era la primera vez que hacia aquello pero no lo dude en ningún momento, deseaba hacerle gritar de placer y sabia que con aquello al menos lograría algún gemido. Y no me equivoque, no intenta reprimir ningún sonido y apoya una de sus manos en mi cabello en un vano intento de mantener el equilibrio.
Hace lo mismo que yo hice, cuando estaba cerca del limite me aparta y se sienta de nuevo a horcajadas sobre mi. Aunque no lo había hecho nunca con un hombre sabia mas o menos lo que había que hacer. Desde que me fije en el me dedique a buscar información para así poder complacerle plenamente el día que estuviésemos juntos. Con dos de mis dedos humedecidos en saliva busco su entrada y me dedico a dilatarla para poder penetrar en ella y así fundirnos en un solo ser, como todas aquellas veces que lo había soñado. Cuando le escucho suplicar sonrío feliz, no esperaba aquello. Retire mis dedos y me acomode buscando su entrada, esta vez con otra cosa. Me introduje lentamente atento al daño que pudiese causarle.
Nunca olvidare su piel, aquellos sonidos que involuntariamente dejaba escapar, el hipnotizante vaivén de sus caderas, el tacto de su entrepierna. Todo en el me parece perfecto.
Despierto envuelto en sudor y en una completa oscuridad. Busco a Ryeowook con la mirada pero no esta. Nunca ha estado conmigo. Otra vez ha sido un sueño. Me dejo caer en la cama acurrucándome y dejando escapar una lágrima al darme cuenta de que solo era otro sueño. Me tengo que hacer a la idea. Ryeowook nunca será mío, eso lo se, pues el ya tiene dueño y yo solo soy el pequeño violinista que pronto se marchara a su país natal. Ya tiene quien le haga suyo todas las noches, y ese alguien me da miedo. Se que esta enamorado de Kangin por lo que nunca podré ni acercarme y eso me hace llorar una noche mas. Esos sueños son lo único que tengo, es la única forma en que podemos estar juntos y saber esto es lo mas triste. Cuando despierto y la cruel realidad cae sobre mi deseo terminar con este sufrimiento, pero nunca soy capaz. No soy capaz de hacerlo porque el simple hecho de hacerle sonreír es suficiente para vivir. El me da miles de razones para odiar este mundo y desear desaparecer de el pero me da una razón para continuar viviendo. Esa razón es su sonrisa. Aquella sonrisa que no tiene precio. Mientras siga sonriendo podré continuar en este mundo. Pero ¿y el día que deje de sonreír? Cuando ese día llegue no sabre que hacer
* * *
Leeteuk convulsionaba a cada estornudo, su nariz estaba enrojecida y los ojos vidriosos, claro indicio de su estado de salud. Llevaba varios días enfermo y el medico estaba a punto de llegar. Debido a su tozudez ahora se encontraba en un estado pésimo, esa mañana no había sido capaz de levantarse de la cama. Desde el principio Kangin había insistido en que descansara un poco y tomara alguna medicina pero negaba estar enfermo, repetía una y otra vez que estaba perfectamente de salud. Con los ojos medio cerrados daba la impresión de estar semiinconsciente. Siwon entro acompañado del medico al que habían hecho llamar. Todo el tiempo que el doctor le estuvo examinando, Kangin se mantuvo al margen pegado a la pared respondiendo a las preguntas que Leeteuk era incapaz de contestar. Cuando terminó le escribió el nombre de unos medicamentos y se lo entrego a Kangin, quien, tras despedirse del doctor, fue a la farmacia más cercana a comprarlas. En la farmacia le entrego el papel a la farmacéutica, el era incapaz de leer aquellas palabras, las cuales parecían jeroglíficos egipcios. La mujer desapareció en la trastienda y apareció con una pequeña caja y con cara de pena. No sabia a que era debido y se asusto un poco.
-Lo siento pero no tenemos el medicamento en capsulas-informó dejando la caja sobre el mostrador-lo tenemos en otro formato.
-No importa, démelo igualmente-respondió rápidamente sin parase a preguntar nada mas.
La mujer no insistió al ver la prisa que tenia el joven y Kangin salio corriendo directo al apartamento dándole las gracias. Cuando llego a casa saco el medicamento del bolsillo donde lo tenia guardado pidiéndole a Eunhyuk que le llevase a la habitación un vaso con agua. Al principio pensó que serian sobres para disolver en agua, mientras se sentaba en la cama de Yesung, compañero actual de dormitorio de Leeteuk, saco el medicamento de su caja. En el prospecto leyó una cosa que no le hizo gracia.
-Toma-dijo Eunhyuk entrando y extendiéndole el vaso lleno de agua.
-No importa, llévatelo-Kangin no apartaba la mirada del prospecto.
-¿Para que me has hecho traerlo?-la voz molesta de Eunhyuk no le sacaba de su lectura.
Eunhyuk cerró la puerta molesto por la falta de atención del mayor y Kangin miro a Leeteuk con una mueca de horror. El doctor había insistido en que debía tomarlas inmediatamente pero el líder estaba dormido y no podría el solo. Siwon entro de pronto en el dormitorio preguntándole por la salud del cabeza de grupo.
-Fatal. Necesita esto urgentemente y yo tengo unos recados que atender. Con la falta de líder alguien debe asumir sus responsabilidades. Encárgate de esto. Adiós.
Siwon se quedó mirando la puerta por donde había salido el mayor a toda prisa. Se encogió de hombros y miró con una tierna sonrisa a su enfermo compañero. Una expresión de horror cruzo su rostro al ver el medicamento que tenia entre las manos. El líder respiraba fuerte debido a su fuerte resfriado.
-¿Se puede saber que le haces a Leeteuk?-gritó Yesung entrando en su dormitorio.
-No es lo que parece-grito rápidamente Siwon.
Siwon se ruborizo hasta las orejas, era normal que Yesung se asustase. El líder estaba dormido boca abajo con los pantalones bajados y Siwon tras el con una mano apoyada tímidamente en una de sus nalgas.
Yesung ahogo una carcajada al ver lo que Siwon tenia en la mano, la cual no había visto pues no dejaba de moverla intentando convencerle de que no estaba haciendo nada malo. Ryeowook se asomo de pronto y se marcho igual de rápido de lo que había entrado.
-¿Puedes ir a explicarle a Ryeowook que es solo un supositorio?-preguntó Siwon con timidez.
-No. Será divertido que piense que estabas violando al líder-sonrío Yesung con picardía antes de cerrar la puerta.
* * *
EPÍLOGO
-Mierda-exclamo Yesung levantándose de golpe.
-¿Qué ocurre?-pregunto Leeteuk acercándose hasta la pantalla del ordenador donde había estado el menor hasta su pequeña exclamación.-¿Has leído la historia de Sungmin? Te dije que no podías leerla.
-Me la ha dado el-replico el moreno sentándose en la cama-quería que viese que iba a perder antes de que lo leyesen las fans.
-¿Por qué piensas que ganara el?
-Porque ha puesto una escena de sexo. Tendría que haber escrito otra cosa-comento pensativo-quizás si hubiese descrito el día en que me masturbaste en la bañera...
-¿Qué? Ya bastante vergonzoso para mi es lo que has escrito, no me recuerdes eso. Aun no se porque hice aquello-contesto Leeteuk molesto.
-Pues porque estas loquito por mi, eso esta clarísimo-dijo con fingida voz de sorpresa, su tono cambio, con una sonrisa burlona continuo hablando-lo que me gusta es la imaginación de Sungmin. ¡Ryeowook y Kangin! Nadie se creería eso. Ni siquiera hacen buena pareja-exclamo con tono burlón.
-Yo pienso que no hacen tan mala pareja.
-Lo que aun me tiene intrigado-dijo Yesung pensativo ignorando al mayor-es quien puede ser el novio de Ryeowook. Estoy seguro de que alguien más del grupo lo sabe y le ayuda a encubrirlo. Estoy seguro de que son Sungmin y Kyuhyun, pero es imposible sacarles una palabra...
Yesung continuó con su monólogo, el líder se sentó frente al ordenador ignorando lo que el otro decía. Era aburridísimo cuando se ponía con ese tema ¿Acaso no se daba cuenta de que lo sabían todos menos el y por eso no lo descubría nunca? Ryeowook les convenció a todos para ocultar eso y, aunque a Sungmin se le había escapado en su historia, el moreno parecía no darse cuenta de nada.
Fin