Tezuka Kunimitsu se encontraba en su habitación tratando de hacer un trabajo de química junto con Fuji Syusuke, pues aunque estaban en grupos diferentes les habían dejado el mismo trabajo y habían acordado hacerlo juntos para que no se les hiciera tan pesado; pero había un pequeño inconveniente, pues ya llevaban más de tres horas en la investigación y apenas si llevaban pagina y media, Tezuka sospechaba que tal vez se debía a los “recesos” que tomaban.
-Debemos de ponernos a trabajar ahora si –dijo Tezuka sentado al pie de su cama tomando un libro de química dispuesto a avanzar con la investigación.
-De acuerdo –dijo Fuji sonriente tomando sus apuntes en busca de algo que pueda ayudarles.
Pasaron unos minutos en silencio, Tezuka estaba haciendo unos apuntes del libro, mientras que a Fuji le parecía más interesante observar de reojo acierto chico de lentes que la química, al parecer no era muy sutil.
-Deja de hacer eso –dijo Tezuka aun con la vista en el libro.
-¿Hacer qué? –pregunto inocentemente Fuji subiendo a la cama de Tezuka y besando el cuello de Kunimitsu.
-Debemos tra-trabajar –dijo Tezuka tratando de no perder la cabeza ante los actos de Fuji, quien ahora buscaba sus labios.
-¿Qué tal un receso? –dijo Fuji mientras hacía que Tezuka se recostara en la cama y empezaba a desabrocharle la camisa.
Tezuka ya no aguanto más cuando sintió las manos de Fuji recorriendo su abdomen, boto el libro y correspondió a las caricias del castaño.
-Ya basta de estos recesos tenemos que acabar con la investigación –dijo Tezuka poniéndose los pantalones.
-Pues no creo que te hayan disgustado los últimos tres recesos, en los que jugamos más de un set –dijo Fuji terminado de vestirse –pero estoy de acuerdo ahora si vamos a estudiar.
Tezuka estaba por terminar de abrocharse la camisa cuando Fuji quien estaba sentado a su lado se agacho por el libro que momentos antes había botado el chico de lentes.
-Bueno volvamos al trabajo –dijo Fuji levantando el rostro, las miradas de ambos se encontraron.
Tezuka al parecer se había extraviado en aquellos zafiros que le devolvían la mirada, ni siquiera lo pensó y cuando se dio cuenta ya estaba besando con gran pasión a Fuji quien le correspondía con la misma intensidad; el libro una vez más había sido botado en el piso y su camisa fue desabrochada una vez más, dispuestos a tomarse otro “receso”.
-¿Has visto mis bóxers? –pregunto Fuji mientras se vestía otra vez.
-¿Qué? –dijo Tezuka quien no creyó oír bien.
-Mis bóxers no encuentro mis bóxers –repitió Fuji.
-¿Yo como voy a saber donde están?
-Tú me los quitaste –dijo sencillamente Fuji dirigiéndole una sonrisa.
No vio los bóxers de Fuji, estaba desesperado por deshacerse de aquella estorbosa prenda que en lo último en que se fijo fue en donde la había arrojado, Fuji pues termino de vestirse olvidándose de los mencionados bóxers.
-Ahora si basta de recesos –dijo Fuji tomando el libro de química.
-De acuerdo.
Tezuka tomo su cuaderno empezando a redactar, sobre las reacciones de sustitución, Fuji curioso hecho un vistazo a la que Tezuka escribía.
-Eso está mal, lo pusiste al revés la reacción SN1 es por intermediario de reacción, la SN2 es vía estado de transición además de que se favorece sobre sustratos primarios.
-Lo que tú digas Suke.
Tezuka soltó una pequeña risita, y siguió escribiendo sin hacer caso a la corrección de Fuji, esto no le cayó en gracia al tensai, su sonrisa se borro de su rostro y sus ojos se abrieron amenazadoramente.
Tezuka volteo a verlo y otra vez sintió una gran atracción por aquellos zafiros que parecían llamarlo, se acerco a los labios de Fuji, pero este retrocedió impidiendo el beso que tanto deseaba Tezuka.
-¿Qué pasa?
-Basta de recesos, terminemos para que me pueda ir –dijo Fuji levantándose de la cama para ir al escritorio del chico de lentes.
-¿Qué sucede?, ¿Por qué estas molesto? –pregunto un confundido Tezuka.
-No deberías de preguntarlo, anda ya hay que acabar.
-¿Qué paso?, hace un instante estábamos bien tu y yo…
-Parecíamos conejos recién salidos de prisión –a completo Fuji, aunque tal vez esa no era la frase que Tezuka iba a utilizar.
-Bueno…si, ¿Qué te molesta?
Fuji estaba usando gran parte del autocontrol que poseía para no darle un buen golpe a Tezuka, pues este no entendía porque estaba molesto, estaba bien que Tezuka fuera alumno modelo pero hasta el tenia que cometer algún fallo.
-Pues ya que lo ignoras te lo diré, y para que sepas no es la única cosa que ignoras, te dije que tenias mal lo de las reacciones y tú en lugar de aceptar tu fallo, que cualquiera puede cometer, pues varios se confunden y lo ponen al revés como fue tu caso, me ignoraste olímpicamente y no corregiste, claro el perfecto Tezuka Kunimitsu no puede equivocarse, lo sabe todo –dijo un enfadado Fuji.
-Syusuke yo no quise ignorarte, solo estaba concentrado en el trabajo.
-¿Harás la corrección?
-¿Corrección?, pero si está bien no le hace falta –dijo Tezuka defendiendo su trabajo, la sola idea de que él se hubiera equivocado no era posible.
-No es posible que no admitas un error, ¿te parece imposible que yo sepa algo de química?, no soy retrasado, ¿sabes?
-No te pongas así –dijo Tezuka empezando a molestarse –me sé el tema bien y no hay error.
Fuji ya estaba exasperado, así que tomo su cuaderno y lo hojeo con algo de rudeza buscando un apunte, cuando lo encontró se lo extendió a Tezuka, este lo recibió con algo de escepticismo.
-Y por si no le crees a mis apuntes aquí está el libro, pero tal vez el libro también está equivocado así que aquí están tus apuntes –dijo Fuji extendiéndole el libro de química y la libreta de Tezuka –digo creo que si puedes confiar en tu letra a no ser que hayas sido manipulado por telequinesis para escribir información falsa.
No fue necesario para Tezuka, leer también el libro con solo los apuntes de Fuji se dio cuenta de su error.
-Me confundí, lo estaba poniendo al revés –susurro Tezuka.
-Un error perfectamente comprensible, pero tu ego no puede permitirte la idea de que estés equivocado.
-Cálmate, ¿quieres? –dijo Tezuka molesto –me equivoque, ¿estás contento?
-Mira el hecho de que no quieras admitir tu error es hasta cierto punto comprensible a nadie le gusta reconocer sus errores, pero me ignoraste, actuaste como si no tuviera idea de lo que hablaba, no me gusta que me trates como si no supiera, como si fuera tonto.
-No pienso eso de ti –dijo Tezuka defendiéndose –hace rato trataba de concentrarme, quería avanzar para cuando quisieras otro “receso” y me distrajeras…
-¿Distraerte?, ¿distraerte yo?
-Pues si no resulta fácil concentrarse cuando te lanzas a besarme el cuello y quieres que lo hagamos.
-Déjame recordarte que tomaste la iniciativa en varios de los “recesos” que tuvimos.
-Sí, pero si fuera por ti no saldríamos de la cama.
-Pues si tanto te molesta dejemos de hacerlo –dijo Fuji furioso.
-Bien no lo haremos mas –dijo Tezuka convencido de que Fuji se retractaría.
-Bien –dijo Fuji aceptando.
Tezuka por un momento deseo haber oído mal, pues Fuji había aceptado, el ya estaba a punto de besar a Syusuke, pues el momento estaba cargado de tensión y estaba seguro que aquel beso hubiera sido el éxtasis, sin embargo no dejo que aquello se reflejara en su rostro y se mantuvo impasible como siempre, sin embargo jugo una carta.
-Como gustes, sé que esto no durara mucho, pedirás estar conmigo.
-Te equivocas Mitsu serás tú quien lo pida –dijo Fuji empujando a Tezuka de la cama.
Fuji quien de por sí ya estaba que echaba humo por las orejas sintió que la sangre le hervía, aquello iba a ser la guerra, e iba a perder el primero que quisiera tomar un “receso”.
-Encontré tus bóxers –dijo Tezuka sacando la prenda que estaba debajo de la cama.