Sin daños a Terceros.
Su prometida había insistido tanto en ir a ese estúpido evento que no pudo negarse, todo por no escuchar sus quejas después, el lugar era admirable, el corredor parecía la antigua estructura en cruz de una catedral, el largo corredor de tres naves, separadas por columnas de cantera cubiertas por esas vaporosas cortinas blancas, miles de espejos en los murales que le devolvían su imagen y al tiempo hacían parecer el lugar más grande de lo que ya era, una ilusión óptica como en un laberinto de espejos, todo era iluminado por reflectores de luz azul y rosa, al fondo podía observarse la entrada al salón donde en el centro descansaba un piano de cola blanco y un atril que sostenía un violín también blanco con adornos dorados, un evento de caridad, algo insoportable a su forma de ver, pero no tenía escapatoria por esa ocasión, tomó una copa de vino blanco de una charola que le ofrecía un mesero, mientras Sakura se entretenía platicando con unos conocidos, en lo que la primera llamada para ingresar en el salón se escuchaba por las bocinas, en el momento que Sakura le tomaba la mano para ingresar al salón, escuchó la plática que sostenía con una de sus amigas.
- Has oído hablar de Sabaku no Gaara?
- Sí, el rico excéntrico no?, pelirrojo de ojos verdes, muy buen partido hasta donde me platicaron.
- Sí, pero es un desperdicio, se casó con un hombre.
- Un hombre? – preguntó Sakura en voz baja, poniendo más énfasis a modo de chisme.
- Sí, que desperdicio, si de por sí hay pocos hombres en el mundo y ahora resulta que pueden casarse entre ellos, es ridículo, que fin podría tener casarte con alguien que no puede darte hijos, ni una familia, además de dejarte en ridículo en la sociedad claro.
- No seas mala, hasta “ellos” tienen su corazoncito. – se burló Sakura. – Pero si es triste perder a tan buen partido. – agregó sacando un poco la lengua. – No lo crees Sasuke? – preguntó la chica pero en ese momento Sasuke se encontraba volteando hacia otro lado, aunque había escuchado la conversación prefería no opinar al respecto.
La verdad es que él había escuchado los rumores que circulaban respecto a la relación de Gaara, pero también había conocido al pelirrojo cuando iban a la secundaria y sabía que en parte lo hacía para vengarse de la presión que su familia imponía sobre él con respecto a si nunca pretendía casarse, así que, qué mejor que darles gusto aunque de la manera más inesperada, si lo sabría él, que ahora se encontraba comprometido con su mejor amiga de la infancia por cuestiones parecidas, quien mejor que ella que lo conocía desde el jardín de niños, nunca había encontrado a nadie que le llamara de sobre manera la atención, así que dándose por vencido aceptó a quien parecía más la opción lógica que otra cosa, y en dos días serían legalmente marido y mujer.
- Ya van a comenzar. – sonrió Sakura jalando su mano para guiarlo hacia uno de los lugares de primera fila donde tomaron asiento frente al piano, pero en el trayecto sus ojos habían encontrado a la pareja antes nombrada, Gaara sostenía de la mano a un joven que de espaldas sólo podía admirar su cabello rubio.
“JUSTAMENTE AHORA”
El concierto había dado comienzo, con las notas que el artista daba en su piano llevando la canción con un ritmo lento.
“IRRUMPES EN MI VIDA”
Tranquilas notas de piano le hicieron desviar su mirada del instrumento justo para encontrarse con la mirada un par de zafiros.
“CON TU CUERPO EXACTO Y OJOS DE ASESINA”
Terror esa es la palabra perfecta para describir el sentimiento que le golpeo el pecho en ese momento y le oprimió el corazón al punto de sentir que moriría de un infarto.
“TARDE COMO SIEMPREEE”
“NOS LLEGA LA FORTUNA”
El esposo de su antiguo conocido de la escuela, un niño de mirada de cielo y dorados cabellos.
“tu ibas con ella”
“yo iba con él”
Nunca antes le había costado tanto respirar, la mano que sostenía a Gaara le había comenzado a sudar, cuando la voz de la cantante había comenzado con su estrofa, y le pareció que le hablaba a él, al dueño de esas preciosas obsidianas que no le quitaban la vista de encima.
“jugando a ser felices por desesperados”
“por no aguardar los sueños”
Necesitaba aire y lo necesitaba ya, o de lo contrario en cualquier momento colapsaría y dejaría de respirar, su respiración se aceleró y soltó lo más tranquilo que pudo la mano de su esposo, “Enseguida regreso” le susurró al tiempo que se levantaba desviando su mirada de la de su compañero.
“por miedo a quedar”
“solos”
“Enseguida vuelvo Sakura” sonrió el chico y se levantó de su asiento, se deslizó sigiloso hacia el pasillo principal, se encontraba vacío, todos estaban dentro del salón, a excepción del chico de ensueño que corría por una de las naves laterales perdiéndose entre las vaporosas sedas que flotaban por la brisa que llegaba desde el jardín, así que lo siguió corriendo por la nave principal.
“PERO LLEGAMOS TARDE”
Llegó el momento que corrían a la par y nuevamente el contacto de miradas se hizo presente y se detuvieron uno frente al otro.
“TE VI Y ME VISTE” “te vi y me viste”
“NOS RECONOCIMOS ENSEGUIDA”
Aparecían y desaparecían sus figuras detrás de esa juguetona tela que parecía querer dar la ilusión de irrealidad a ese encuentro.
“PERO TARDE” ”pero tarde”
“MALDITA SEA LA HORA”
“QUE ENCONTR… LO QUE SO—…” ”que encontré lo que soñé”
“TARDE”
Nunca había creído en el amor a primera vista, siempre se había burlado de los que decían estar perdidamente enamorados de alguien a quien sólo habían visto una vez, Gaara había tardado mucho tiempo en convencerlo de dar el paso decisivo, pero ahora se encontraba frente a la única persona que había logrado echar por tierra todas sus estúpidas burlas, clavándole la estocada más certera, como si de su karma se tratara por haberse mofado del amor.
“TANTO SO—ARTE Y EXTRA—ARTE SIN TENERTE”
“TANTO INVENTARTE”
Irreal, fuera de lógica, estúpidamente inapropiado, rayando en la locura eso era lo que le cerraba la garganta y lo que veía que empezaba a poner cristalinos ese par de azules ojos.
“tanto buscarte por las calles loco”
“sin encontrarte”
El amor se había vengado de la peor manera, le había acertado la puñalada directo al corazón arrancándoselo de tajo.
“Y AHÍ VA UNO DE TONTO”
“por desesperado”
“CONFUNDIENDO AMOR CON COMPA—ÍA” “con compañía”
Como vivir ahora en compañía de su pareja, como decirle a él/ella un “te amo” que sonara convincente, como entregar tu cuerpo sin sentir que traicionas a todo mundo pero sobre todo a ti mismo.
“Y ESE MIEDO IDIOTA DE VERTE VIEJO Y SIN PAREJA”
“TE HACE ESCOGER CON LA CABEZA”
“LO QUE ES DEL CORAZ”N” “lo que es del corazoooón”
Sí, amor, has acertado un golpe perfecto, acabas de destruir cuatro corazones de un solo arponaso, Cupido ha flechado a la pareja equivocada, ha permitido que el día y la noche se conozcan sabiendo que no deben juntarse.
“y no tengo nada contra ellos”
“LA RABIAS ES CONTRA EL TIEMPO”
Como decirle a tu esposo o a la persona con la que estas por casarte que te has enamorado de tal forma de alguien de quien ni siquiera sabes su nombre, sin sonar banal, superfluo y falso.
“por ponerte junto a mi” “JUNTO A MI”
En otro tiempo, en otra circunstancia, en otro lugar, pero no ahí, no ahora, no así.
“TARDE.”
“tarde”
Extendió su mano tratando de tocar a ese espejismo.
“QUE GANAS DE HUIR”
Necesitaba comprobar que no era una ilusión, pero el chico retrocedió tratando de escapar, por lo que se vio obligado a abrazarlo por la espalda.
“DE NO VERTE NI LA SOMBRA”
- Suéltame... – Dijo el rubio sintiendo que moría con ese contacto.
- Sasuke. – respondió el otro haciéndolo reaccionar.
- Naruto. – terminó lentamente el rubio dando su nombre en respuesta al que se había convertido en su amor prohibido.
“DE PENSAR QUE ESTO FUE UN SUE—O O UNA PESADILLA”
Dio la vuelta y se miraron de frente, Sasuke colocó una mano sobre su mejilla y al verlo cerrar los ojos sintió como una de las lágrimas que trataba de detener había escapado hasta caer en esa mano de piel blanca.
“QUE NUNCA APARECISTE”
Levantó su rostro con la mano sintiendo la tersura de su piel, dibujando con los dedos las marcas de sus mejillas que parecían ser de nacimiento, que dato tan más curioso había encontrado de cerca.
“QUE NUNCA HAS EXISTIDO”
Lo había cautivado, lo había perseguido, lo había conquistado y ahora qué debía hacer?
“ganas de besarte”
“de coincidir contigo”
Rodeó el cuello de Sasuke con los brazos, mientras él lo abrazaba por la cintura, sus ojos mirando los labios de su compañero, abrió un poco la boca y su compañero aprovechó para robarle el beso por el que ambos estaban rogando, sintiendo sus respiraciones contra la mejilla de su compañero, se abrazaron con más fuerza como si trataran de fundirse el uno con el otro.
“de acercarme un poco y amarrarte en un abrazo”
“de mirarte a los ojos”
“y decirte "bienvenido"
Y de pronto la cordura regresó a ambos de golpe y se separaron, si continuaban... si continuaban... cómo podrían continuar...?
“PERO LLEGAMOS TARDE”
“TE VI Y ME VISTE” “te vi y me viste”
Sus ojos llenos de terror al comprender la magnitud de sus sentimientos, de sus actos, de la situación, de sus parejas, de sus vidas, de todo.
“NOS RECONOCIMOS ENSEGUIDA”
“PERO TARDE” “pero tarde”
Naruto bajó las manos por el pecho de Sasuke y se recostó contra él, necesitaba ese contacto, porque sabía que no sería eterno, y su compañero necesitaba su presencia que sabía que nunca sería suya después de eso.
“QUIZÁS EN OTRAS VIDAS”
“QUIZÁS EN OTRAS MUERTES” “en otras muertes”
Abrazados sin intenciones de separarse, Naruto escondió su rostro en el pecho de Sasuke embriagándose de su perfume hasta sentirse completamente mareado.
“que ganas de rozarte”
“QUE GANAS DE HUIR”
“que ganas de tocarte”
“QUE GANAS DE BESARTE”
“de acercarme a ti y golpearte con un beso”
“DE FUGARNOS PARA SIEMPRE”
- Naruto – La voz de Gaara lo hizo reaccionar y apretar los puños escondidos en el pecho de Sasuke.
- Gaara – Sasuke volteó a ver con una sonrisa a su antiguo compañero.
- Sasuke, qué le ocurre a mi esposo?
- Se mareo, por poco cae al suelo, así que traté de ayudarlo, espero no te moleste. – contestó aunque nunca en su vida se había sentido tan hipócrita, Gaara se acercó y separó lentamente a Naruto mirándolo a los ojos.
- Te sientes bien. – Naruto sólo negó con la cabeza. – Descansa, sabes que mañana debemos volver a casa, así que mejor regresamos al hotel. – Naruto asintió, Gaara lo levantó en brazos y el rubio se aferró a su cuello, mientras se dirigían hacia la salida, no pudo evitar mantener su mirada fija en Sasuke, al tiempo que el chico apretaba los puños con fuerza.
“SIN DA—OS A TERCEROS.”
“sin daños a terceros.”
- Sasuke? – Sakura se había acercado por la espalda.
- Sakura, no me siento bien, podemos regresar a casa?
- Te duele el pecho? – preguntó la chica al ver que el chico mantenía una mano sobre este.
- Cómo nunca, pero no te preocupes no es nada grave. “sólo acabo de morir en vida” – pensaba mirando desaparecer a la razón de su existencia en brazos de otra persona.