--¡¡Aahhh!!, no espera no lo metas todo—Se escuchaba la suplicante y avergonzada voz de Cody—s-se siente raro si leo haces así.
--Entonces no te muevas tanto.
Le regaño cariñosamente Kido.
--¡Ah! Pero…
--¿No fuiste tu el que me dijo que le hiciera esto?
--Si, p-pero…
Se quedo callado sin poder dar una razón, por lo que Joe continúo encantado con su tarea sin ninguna queja. Los minutos comenzaban a transcurrir solamente pudiéndose escuchar la respiración levente agitada del menor, ruborizándose y moviéndose inquietamente sin poder acatar la petición del mayor.
--Ya casi voy a terminar, espera un poco más.
Le dijo Joe con voz apacible y formando una sonrisa.
--Si, p-pero… ¡Ha!
--Vez, ya termine.
--No tenias por que acostarme en tu regazo, para limpiarme los oídos—Le regaño Hida levantado la cabeza del cálido regazo de su senpai, se sentó en la cama aun lado de Kido mientras se sostenía la oreja izquierda que era la que le habían limpiado—se… sintió un poco extraño.
--Lo siento ¿Te dolió?
Le pregunto el chico de lentes sosteniendo un cotonete en su mano derecha.
--No, no fue eso—Contesto el niño de ojos verdes acomendase un poco de color rojo en sus mejillas—solo se sintió raro.
--¿Raro?
El menor solo asintió con la cabeza, ¿Por qué Joe no lo entendía?, bueno la verdad es que él tampoco sabia que tenia los oídos tan sensibles ya que no pudo evitar sentirse bien, como un cosquilleo por todo el cuerpo, de hecho últimamente había sentido su cuerpo un poco mas extraño de o habitual cuando estaba muy, muy cerca del chico de cabello azulado.
--¿Qué pasa?
Pregunto el chico ignorando todo lo anterior.
--No, nada.
Negó Cody con la cabeza y ofreciendo una sonrisa, tal vez solo eran ideas suyas.
--Esta bien—Kido comenzó a levantarse de la cama—bueno es hora que continuemos estudiando—Sin embargo el niño de ojos verdes loe detuvo jalándolo de la camisa verde que traía puesta, a lo que voltea y dice—entiendo no quieres estudiar hoy.
--No, no eso es que hace mucho tiempo que nos quedábamos solos en casa y yo quería platicar.
--Cierto, lo siento hace mucho que no hablamos de otra cosa que no sea de la escuela.
Dijo el chico de gafas poniendo una mano detrás de la cabeza, sonrió y volvió a sentarse a una lado de Cody el cual le devolvió el gesto alegremente.
Comenzar a charlar tranquilamente sobre las cosas que les pasaban en el día o de las cosas que tenían organizadas por hacer, por ejemplo de cómo Hida planeaba quizás entrar a una competencia de kendo o de cómo su madre le insistía presurosa para que escogiera la secundaria a la que asistiría terminado este año escolar o en el caso de Joe, de cómo este se preparaba para sus exámenes para ingresar a la Toudai en la siguiente primavera e incluso de los extraños amigos que tenia en su escuela y como solían molestarlo con sus comentarios inoportunos.
--¿Inoportunos? ¿Cómo que?
Pregunto Cody interesado.
--No, de nada importante, no quiero hablar de eso—Le desvió la mirada Joe levente ruborizado recordando los disparates que estos mismos le habían dicho en la mañana--¡Yo nunca seria capas de hacer cosas como esas!
Exclamo el chico de lentes en voz alta sin querer.
--¿He?
Exclamo el pequeño un poco confundido, a pesar de siempre ver al mayor tan serio, calmado y maduro sabia que había otro lado de él que era un poco infantil y divertido, le agradaba pensar que él era de las pocas personas con las que Joe solía mostrar esa otra faceta suya.
--No, olvídalo. No es nada.
Termino diciéndole el muchacho con un tono de que cierta manera trataba de cambiar el tema, s levanto y se dirigió al escritorio de Hida que se encontraba a un lado de la cama, jalo la silla, se sentó en ella y tomo un libro que abrió de inmediato.
--¿Quieres que ya comencemos a estudiar?
Le pregunto Cody un poco desilusionado ya que le hubiera gustado terminar su plática de diferente manera, al notar esto Joe volteo a verlo y también pregunto.
--¿Qué ocurre?
El menor solo agacho cara colorada.
--E-es que yo…
--Si.
--Q-quiero un beso.
Dijo dando a entender su deseo.
No tardo en ponerse de pie y caminar asta donde se encontraba con su senpai colocándose frete a este, Kido por su parte al ver esto sonríe ligeramente acercándose cautelosamente depósito un beso suave en la mejilla. Una vez separados Cody le dice algo enfadado mientras toma su mejilla acariciada.
--No en mi mejilla, quiero un beso de verdad.
--Si claro, ¿Verdad?
Le dijo el mayor sonriendo ingenuamente.
Y tomando delicadamente el rostro de su pequeño entre sus largos dedos le ofrece un cándido beso en la calidez de sus labios. Poco a poco se fue alargando el beso, ambos estaban saboreando, disfrutando el momento ya habían serado los ojos como si nada pudiera interrumpirlos en ese instante…
Lentamente el mayor fue deslizando su mano hasta ese momento inmóvil, alrededor de la cintura de el pequeño el cual se sobresalto un poco no esperaba eso, sin embargo le parecía algo verdaderamente interesante sin olvidar el echo de que le estaba fascinando tanto fue entonces que sintió la otra mano de Joe presionar en su nuca tratando de profundizar el beso; instintivamente Hida comenzó a acercarse, recargando sus manitas en los hombros de su sempai tratando de seguir el ritmo de sus labios, cuando de repente se vio sentado en el regazo de Kido, el cual al sentir a Cody corta abruptamente el beso.
--Estar de esta manera…
Pensó en voz alta.
--¿Esta mal? ¿No esta bien así?
Pregunto inocentemente el niño pensando en la comodidad de ambos para continuar el beso.
--N-no, olvídalo.
--Parece como si estuvieras muy concentrado.
Comento el menor bajando un poco la mirada, él también estaba avergonzado por la posición que él mismo había adoptado.
--Umm… bueno estoy nervioso, hace mucho que nos besamos, no, lo que quiero decir es que tengo muchos deseos de besarte, me gustaría mucho.
--¿En serio?
Pregunto Hida con una sonrisa.
--Si…
Contesto el chico de cabello azulado ruborizándose, sin querer ocultar su deseo mientras se acercaba a Cody para volver a besarlo.
Permanecieron un instante, unidos en otro beso tratando de recuperar el momento que habían abandonado apenas hace un par de segundos, esta vez era Cody el que parecía ansioso, era algo raro pues nunca se habían besado de esa manera, pues no era su costumbre pero… no dejaba de sentirse de esa manera. Por su lado Joe se estaba dejando llevar, no había mentido, en verdad estaba ansiando besar tanto a su pequeño de esa manera, apretando un poco mas el delgado cuerpo de Cody entre sus brazos instintivamente se estaba olvidando por algunos segundos de su forma tan precavida de ser.
“Estoy realmente feliz, estoy asiendo a Joe muy feliz”
Pensaba el niño de ojos verdes para si mismo, mientras sentía como el mayor le chupaba los labios con dulzura y los recorría con la punta de su lengua como si tratara de meter algo en su boca.
Se separaron para tomar aire en cuanto se sintieron sin este.
--S-saca la lengua un poco.
Le dijo el mayor titubeando.
--Si.
Contesto el castaño agitado mientras sacaba levente la punta de su lengua y cerraba los ojos nuevamente.
--Mantenla así y no te muevas.
Le dijo Kido acercándose de nueva cuenta hacia él y besándolo profundamente iniciando a juguetera con la pequeña lengua de Cody que se le ofrecía gustosa.
“¿Esta chupando mi lengua? ¿Qué s esto? Se siente tan bien” Pensó Cody avergonzado, pero sin dejar de querer continuar ”Siento el cuerpo extraño otra vez, no importa, me gusta mucho que me lama y me toque”
Sintió entonces como el chico de ojos negros comenzaba a acariciar la espalda de arriba hacia abajo con ambas manos; en verdad estaba feliz por fin el chico de cabello azulado dejaba de tratarlo como un niño pequeño y estaba tratándolo como su pareja, sin embargo hacer algo así…
Por su parte Joe.
“Esto es malo, no puedo detenerme” Empezó a preocuparse el mayor”No sabia que besar se pudiera sentir, que fuera tan dulce”
Para Kido de cierta manera esto era malo, se estaba dejando llevar y le estaba encantando, no estaba bien Cody aun era muy pequeño para besarlo de esta manera, pero aun así no dejaba de ser placentero, pero no debían, Pero a Cody parecía gustarle tanto como a él, pero aun así no debían…
Su cabeza comenzó a revolverse sin saber que era lo correcto. Fue entonces que Cody separo rápidamente su boca y pegando su frente contra su hombro, agitado; así fue como se dio cuenta que tenia sus manos debajo de la camisa del menor.
--Joe…
Le dijo el niño agitado, temblando.
Joe se quedo quieto un par de segundos antes de sacar rápidamente sus manos de la prenda del menor, el cual no decía nada estaba sorprendido un poco perplejo ante la situación, cosa que no se podía decir de Kido el cual comenzó a avergonzarse de si mismo y de lo que estaba asiendo, se sentía culpable pensando que estaba obligando a Cody a hacer aquello a pesar de no haber llegado muy lejos.
En cuanto se calmo bajo a Hida de si, se levanto de la silla y tomo sus cosas que no estaban muy alejadas.
--¿Qué pasa?
Pregunto el niño de ojos verdes sin entender del todo lo que había ocurrido.
--R-recordé que tenia una tarea que hacer, tengo que irme ya—Contesto Kido nervioso—ah si, mañana nos vemos en la estación de Odaiba a las 11:30 am.
--Si, entiendo.
Le dijo Cody acercándose de nuevo a Joe para abrasarlo antes de que se fuera, sin embargo el mayor lo detuvo poniendo una mano en su hombro.
--Tengo que irme, s-se me hace tarde.
Le dijo el chico d gafas desviándole la mirada y con esto ultimo se marcho, dejando al niño solo y sin entender del todo lo que habían hecho ese día.
Continuara....