-Ah... Aoi-shii-
Aquí nos encontramos, nuevamente juntando nuestros cuerpos haciéndonos uno con el amor
-Más, Aoi-shii más rápido -
Nuestros cuerpos se acaloran al compartir estas sensaciones, cada vez necesito más de él
-A-Aoi... -
Cuando dice mi nombre en un suspiro siento mi mundo estremeser, mis manos temblar y mi corazón palpitar con locura
-Ah... ¡Aoi! -
Esa sensación exquisita embarga mi cuerpo, ví su rostro de satisfacción, besé su frente mientra regulamos nuestra respiración me acosté a su lado e inmediatamente recostó su cabeza en mi pecho
-Aoi... Debo hablarte de algo- Noté su nerviosismo, hacia pequeños círculos invisibles en mi pecho
-¿Qué ocurre? - Acaricié su cabeza para tranquilizarle y brindarle confianza
-Es un tema complicado... -Su rostro había cambiado, se mostró adolorido
-Dime qué pasa -Se aferró a mí cuerpo con fuerza, lo escuché sollozar, me preocupe, lo levante de mí cuerpo para sentarnos, cubría su rostro con ambas manos mientras su respiración se hacía más fuerte- Shima, ¿Qué pasa?
-Terminamos... -Dijo con su voz quebrantada-
-¿Qué? -Fue lo único que pude contestar, esa frase me tomó por sorpresa
-M-Me voy a casar- Dijo con un hilo de voz, con un rostro lleno de tristeza
-¿Qué...? -Volví a decir sorprendedido
-Mis padres lo acordaron... Me prepararon un matrimonio con una chica... -Bajó su cabeza, permanecía demostrando el dolor que sentía
-¿Eh? -Estaba sin palabras ante la situación
-Yo te amo... -Lloró tomándome de la mano, estaba asustado las lágrimas comenzaban a brotar de mis ojos, le miraba sin decir nada- Lo siento - Cada palabra me lástimaba el corazón
*~*~ *~*~ *~*~ *~*~ *~*~ *~*~ *~*~ *~*~ *~*~
(Seis años después)
-Pero, Yuu, lo estas haciendo mal -Mi mejor amigo y yo intentábamos arreglar un amplificador hace unos minutos atrás
-¿Entonces por qué no lo haces tú?- Le regañe hastíado de sus constantes quejas
-Porque no sé hacerlo, tonto- Rió ampliamente sacandome una sonrisa
-Akira, tú jamás cambias -Me fije en su mirada atenta, tratando de aprender, mirando cada detalle de lo que yo hacía en aquel aparato
-Es tu culpa por dejar caer ese vaso con agua-Me golpeó fuertemente en la cabeza
-Es tu culpa por meterme el pie para que me cayera, iguana maldita -Le devolví el golpe con más fuerza
-¿A quién llamas iguana? Estúpido cara de mono- Alzó la voz
-¿Ya comenzaron a discutir otra vez?-Dijo el pequeño castaño entrado a la habitación con un trapeador
-Taka, me llamó iguana -Habló Akira yendo hacia los brazos de su novio
-Sabemos que chibi-chan reconoce que eres una iguana- Recibí una mirada asesina por parte de Takanori
-¿Quien demonios es chibi-chan?-Me lanzó una almohada con forma de luna en la cabeza
-Taka, pero si tú eres pequeñito- Le dijo Akira e inmediatamente notamos a nuestro pequeño y castaño amigo rabiar
-¡Abstinencia! -Gritó sin más soltandose de los brazos de Akira, caminó ferozmente y salió de la habitación
-Pero Taka... Shiroyama Yuu... Me las pagarás, ¡Esto es tu culpa! -Corrió fuera de la habitación para alcanzar a su novio
-Bueno, a trabajar-
Me quedé arreglando el amplificador, que no fue una tarea fácil ya que era imposible concentrarme al escuchar la pequeña discución que la pareja tenía en la planta baja. Mi teléfono empezó a sonar lo busqué en los bolsillos de mi pantalón, vi que era Kai, por lo cual contesté de inmediato
-Kaichu~ -Hable alegremente
-Aoi, ¿Podrías dejar de inventarle motes extraños a la gente? -Escuché su voz seria haciéndome reír
-No puedo, se perdería mi estilo -Escuché un leve sonido en señal de desaprobación
-Bueno, te llamaba porque... Espera... Miya, espera un momento ¿quieres? Hablaré con Aoi sobre ese algo importante... No amor, no te estoy engañando con Aoi... Te lo prometo... ¿Tengo que hacerlo?... Esta bien, te amo -Me esforze para no dejar escapar mi risa, Kai sólo llegaba a escucharse tan amoroso cuando se trataba de su Miyavi- Como te venía diciendo, te llamo para avisarte que no habrá ensayo durante unos días, un asunto importante se me presentó ¿Le avisarias a los demás?
-Esta bien, les diré a Ruki y a Reita que Miyavi apartó una suit de hotel para ustedes -Reí esperando la reacción de Kai
-¡O-oye! No es nada como eso... Es algo muy personal- Su reacción era realmente predecible
-Vale, Kai suerte en la segunda luna de miel -Volví a reír
-Aoi, que no es eso... Ah, como sea... Adiós -Cortó la comunicación entre ambos, definitivamente se trata de una segunda luna de miel
-Abstinencia, ya hablé- Entró la pareja nuevamente a la habitación concluyendo la pequeña discución que se había formado
-Es inhumano que me hagas esto- Akira agarró su pecho trayendo un poco de drama consigo
-Chicos tengo dos cosas que decirles -Anuncie captando su atención de inmediato- La primera es que he logrado reparar este amplificador y la segunda... Kaichu irá a una segunda luna de miel, por lo tanto no habrá ensayos durante unas semanas
-¡Vacaciones!- Gritó Akira triunfante- Esperen, en vacaciones y tú declarandome la muerte -le señaló a Taka de forma acusadora
-Sufre- Le dijo Taka a su novio, quien se lamentaba una y otra vez
(Unos días después)
Las pequeñas vacaciones habían comenzado, era primavera, los árboles de Sakura habían florecido en todo su esplendor, yo me encontraba dando un paseo en mi parque favorito donde solía caminar con él todo el tiempo... Me senté en una pequeña banca junto al árbol más grande de ese lugar, sentía su aroma, su sombra, la armonía que me transmitía
Suspiré cansado, lo extrañaba había pasado ya seis años sin él, sin escuchar su voz, sin sentir su rostro, sin poseer su cuerpo, realmente me hacía falta
-Señor, señor -Viré mi rostro encontrándome con un niño que halaba mi pantalón
-Hola peque... ¿qué pasa?- Le sonreí, era un pequeño muy lindo, de cabellos rubio ceniza, con ojos oscuros, su sonrisa era realmente hermosa, su piel era demasiado blanca pero sus mejillas sonrojadas
-Es que mi pelotita quedó atrapada allá- Señaló hasta el árbol - Y mi papá esta muy lejos para avisarle...¿Podría ayudarme? Se lo agradecería -Tomó su manos acariciandolas
-Claro, espera aquí- Me levanté de la banca y comencé a trepar hasta la rama donde se encontraba aquel baloncito rojo, lo alcanze y baje con cuidado de no caerme- Aquí está -Me dirigí hacia él con una sonrisa para entregarle su juguete
-Gracias señor -Me tomó de la mano y la estrechó como si estuviésemos cerrando algún trato, reí ante eso
-¿Cómo te llamas? -Me agaché hasta su altura
-¿Yo? -Se señaló a si mismo
-Sí -Sonreí ampliamente
-Yo me llamo Yuu -Me sonrió tiernamente
-¿De verdad? Yo también me llamo Yuu, te felicito tienes un lindo nombre- Acaricié su cabello, él sonrió con timidez
-¡Yuu!- Ambos volteamos, me sorprendi, nunca imaginé verlo aquí después de mucho tiempo, él pequeño corrió hacia él abrazandolo
-Mira papá, ese señor de ahí se llama igual que yo, me ayudó a alcanzar mi pelotita -Me levanté de donde estaba y caminé hasta ellos
-Shima... -Susurré nervioso, hace mucho quería verlo, estar frente a él
-Aoi-shii -Me abrazó con cariño, sentí su cuerpo pegado al mío otra vez- Mira, él es mi hijo Yuu
-Papá, ¿lo conoces? -El pequeño lo miro confundido
-Por él es que te llamas así- Alzó su vista hacia mí, sonreí enternecido- Él es importante para papá, amor -Acarició su cabeza -Ve a jugar ¿Si? -El pequeño asintió y corrió para seguir jugando a la pelota
-Vaya Shima, hace mucho tiempo no nos veíamos -Nos sentamos juntos en la banca
-Sí... No tenía el valor de verte, pero henos aquí -Tomó un pequeño pétalo que caía con suavidad hacia nosotros
-Con que el pequeño Yuu... ¿Cuantos años tiene? -Le miré como jugaba con él pequeño pétalo rosado
-Cuatro y medio, ¿Es hermoso cierto? -Sonrió viendo a su pequeño con amor
-Se parece mucho a ti Shima... ¿Como está tu esposa? -Desvió su mirada rápidamente hacia mí
-Ella... Ella se aburrió de mí y del pequeño Yuu, nos dejó hace más de seis meses... Igual no me hace falta- Sonrió ampliamente volviendo la mirada hacia su hijo
-Vaya... Bueno, la mayoría de parejas arregladas no funcionan-Le dije compartiendo su sonrisa
-Papá papá, ¿puedes comprarme un helado-El pequeño corrió hacia nosostros
-Amor, ya te dije que me he olvidado de la cartera en casa, tampoco traje dinero suelto en los bolsillos -Revisó sus bolsillos para confirmar lo que había dicho
-Pero papá, yo quiero un helado...-Dijo Yuu con tono de tristeza
-Yuu ¿Podría regalarte yo el helado? -El pequeño asintió muchas veces, él me miró yo le sonreí
-Gracias Aoi -Saqué mi billetera dándole el dinero suficiente para su helado -Amor, no vayas a comprar de chocolate- Me sonrió y tomó el dinero
-Bueno pá- Corrió hasta el carrito de helado
-¿Qué hay de nuevo?- Me preguntó sonando sus dedos
-Kai y Miyavi se casaron hace un año, son una pareja divertida y están planeando en adoptar un bebé- Me miró sorprendido
-¿Se casaron? ¡Bien por ellos! Después de todos, se aman -Acomodó su camisa
-En cuanto a Reita y Ruki, ellos finalmenta son pareja- Asintió
-Yo sabía que ambos quedarían así ¿y tú? -Me preguntó incómodo
-Yo no tengo pareja -Vi su mirada de intriga, reí alto -No... No me he vuelto a enamorar
-Vaya- Bajo su rostro acariciando sus manos
-Estaba esperando por ti- Cubrí mi boca ríendome de su reacción
-¿Eh? ¿Ah? ¿qué? -Me miraba sin entender
-Quería verte... Me hacías falta- Sonrió alegremente acomodando su cabello
-¡Yuu, amor! Ven acá-Él no podía ocultar su sonrisa, el pequeño se acercaba dándole lámidas a su helado- Cariño, mira cómo te has ensuciado -Arregló la camisa de su hijo, intentando quitar aquellas manchitas que reposaban en la camisa blanca de Yuu
-Shima... -Lo llamé, volteó su rostro hacia mí- ¿Lo intentamos de nuevo?- Su sonrisa se amplió, contestó un leve sí, llenandomé de felicidad
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-¡Papá!, mamá me molesta de nuevo -Se quejó un niño de seis años dando fuertes pasos con las manos cruzadas
-Yuu, ¿Cuántas veces te voy a decir que no soy "mamá"? -Le repetí obteniendo como respuesta una negación
-Si no eres mi mamá, entonces ¿Qué eres? -Me señaló con su pequeño dedo y mejillas infladas
-Soy tu otro padre, Shima y yo somos tus "papás"-Lo cargué con cariño hasta la altura de mis hombros
-No, no, eres Mamá Aoi-Me abrazó del cuello, solté un bufido
-Aceptalo cielo, él siempre te considerará como madre- Shima, quien hace tiempo veía divertido la escena se acercó hasta nosotros dándonos un beso a cada uno
-Que hermosa es mi familia -Dijo el pequeño Yuu uniendo a su padre al abrazo
-Te amo Shima...-Le susurré en el oído a mi prometido mientras aprisionaba más su cintura
-También te amo Yuu- Acarició el brazo que rodeaba su cintura
-Vamos niño lindo, a dormir- Comencé a caminar con el pequeño en mis brazos hacia su habitación, llegamos y lo recoste en su cama con cuidado, lo cubrí con su cobija amarilla dándole un beso en la frente -Dulces sueños- Le susurré con suavidad
-Duerme bien mamá- Sonreí con pesadez y salí de la habitación cerrando la puerta del niño con pestillo
-Aoi~ te necesito ahora- Caminé rápidamente hasta la habitación, entré y cerré la puesta tras de mí con seguro
-Dime amor -Él estiró los brazos pidiéndome que me acostara, me tendí en la cama junto a él, lo abracé con cariño
-Te amo de verdad Aoi-shii- Besé sus labios con suavidad, demostrandole todo el amor que le había profesado desde hace once años; cinco que habíamos estado juntos y seis que no, pero que le seguía amando.
-Te amo...-Le dije mientras el beso se fue tornando a un beso con lujuria y deseo, acaricié su cuello, sus manos, sus piernas con frenesí, Tomó mi camisa para halar de ella deshaciendose de aquella prenda, hice lo mismo dándole ocasionales besos en el cuello
-Ah...-Su cuerpo comenzaba a reaccionar ante mis caricias y mis besos, soltaba suaves suspiros de placer que iba incrementando cada vez más
-Shima- Le llamé besando su pecho, con mi lengua probaba cada parte de él recordando su espléndido sabor, llevé mi lengua hasta uno de sus botoncitos rosados, le di un pequeño beso en la punta y comencé a lamerlo, succionarlo para luego darle pequeños mordiscos
-Uhmm- Suspiraba acariciando mi espalda con dedicación, cuando sus lindos botoncitos quedaron completamente rojos, besé su abdomen mientras zafaba los molestos pantalones, los baje junto con su ropa interior, note que su miembro aclamaba ayuda que pedía ser antendido, lo tome entre mis dos manos y lo metí a mí boca
-Ahhh -Gimió alto, comencé con el sube y baja lento, lo lamía simulando pequeñas envestiadas contra mi boca -Más ra-rápido- Me dijo con los ojos cerrados, llevé a cabo su petición subiendole el ritmo él posó sus manos en mi cabeza aumentandolo, supe que llegaría a su límite por lo cual me detuve, me miró inpaciente y yo le sonreí
-Tranquilo amor -Bajé mi pantalón junto con mi boxer, allí entendió lo que quería hacer, le puse tres dedos de mi mano entre sus labios -Lámelos...-Le pedí y obedeció sin titubeos, lamía aquellos dedos con dedicación. Cuando sentí que estaban los dedos lubricados adecuadamente, los saqué de su boca, abrí sus piernas dirigiendolos a su entrada, metí el primer dedo
-Ahh...-Daba pequeños círculos en su interior para dilatarlo, el segundo dedo entró sacandole un gemido de dolor -¡Gaah!
-Shh, Yuu podría escucharnos -Metí el tercer dedo con dificultad, él estuvo a punto de gritar pero cubrió su boca con ambas manos, al sentirlo dilatado por completo mis dedos salieron de allí, le mire por última vez, tomé mi miembro y lo adentré de una estocada
-Ahhhh- Estalló en un gemido de placer y dolor como reflejo tomó mi mano con fuerza, al acostumbrarse a la intromisión movió sus caderas indicando que podía seguir, el exquisito vaivén había comenzado cada vez más rápido -Ah... Aoi-shii, ah... Más, más -Nuestros cuerpos chocaban con placer y necesidad, cada suspiro, cada gemido hacía incrementar la excitación, tomé su pierna apoyandóla en mi hombro para penetrar con más profundidad
-Ngh... -Estaba a punto de llegar a clímax
-Me voy a...-Pronunció con dificultad, Shima se corrió y al hacerlo contrajo su entrada haciendo que yo también llegara al límite
-Ah... -Suspiró por última vez, salí de él con cuidado mientras el hacia quejido de molestia, Se recostó en hombro con tranqulidad
-Te amo...- Le dije dándole un pequeño beso en la frente
-Y yo a ti- Se durmió cansado al instante mientras yo admiraba su belleza, me sentía feliz de tenerlo nuevamente para mí, lo amo y así lo haré hasta el final de nuestros días. Seguiremos adelante juntos, con nuestra pequeña familia: Él, Yuu y yo.
Fin~