Primer día de vacaciones, sin embargo no podía descansar, debía encontrar un trabajo. Resopló frustrado frente al ordenador buscando cualquier tipo de oferta, necesitaba el dinero para poderse costear los estudios aunque, sin experiencia, pocos trabajos que pudieran catalogarse como tal y no como esclavitud, lograban llamar su atención.
Era desesperante, los días pasaban y no lograba encontrar nada, todos los días veía las mismas ofertas de salarios miserables y horarios interminables. Finalmente se cansó de esperar aquel trabajo perfecto que había imaginado en un primer momento y decidió presentarse en una entrevista de uno de los primeros empleos que había visto en su pantalla y rechazado mentalmente incontables veces.
Sin embargo allí estaba, siendo aceptado tras un simple y rápido cuestionario. Le sorprendió la rapidez con la que fue contratado, aunque claro, tampoco creía que mucha gente deseara ser el conserje de un parque de atracciones venido a menos y con el salario mínimo. Bueno, llamar a aquel lugar parque de atracciones era ser muy generoso, eran apenas unos cuantos tiovivos y demás atracciones infantiles acompañado de una serie de casetas de juegos de feria. Una modesta feria permanente de tamaño reducido.
El trabajo era sencillo, mantener limpio el lugar, recoger papeleras, limpiar los vómitos de los críos con serrín, ayudar en cualquier fallo mecánico que pudiera tener alguna de las anticuadas atracciones. Realmente desde el primer día pudo comprobar como su trabajo era cualquier cosa que pudiera surgir, lo tenían para todo.
Llevaba ya una semana allí, apenas conocía de vista a los demás trabajadores, salvo al jefe de mantenimiento al que ayudaba prácticamente cada día en una nueva chapuza.
- ChanYeol, ve a la caseta B2, tiene goteras, quien esté allí te dirá exactamente el lugar. La escalera está en el almacén.- ChanYeol asintió y fue en busca de la escalera.
No era la primera vez que le mandaba un encargo de ese estilo, ya sabía exactamente en qué rincón de ese pequeño almacén estaba cada utensilio. Le molestaba ver como ese hombre le había cogido confianza tan pronto, tras halagarle en su trabajo unas cuantas veces cuando le ayudaba, había decidido que ChanYeol era completamente capaz de realizar todo tipo de tareas solo, por lo que cada vez que podía mandaba al joven mientras él se quedaba en el pequeño bar del recinto hablando y bebiendo.
Cogió la escalera bajo el brazo dirigiéndose a aquel lugar mientras maldecía por lo bajo a ese hombre, el mismo que cobraba más del triple que él y se dedicaba a pasar el día bebiendo a la sombra de la terraza del bar. Mientras él se dedicaba a hacer su trabajo bajo un abrasador sol que lo cegaba y hacía que ese incómodo mono de trabajo se pegara a su cuerpo, ¿Qué más daban unas goteras en verano?!
- ¿Es aquí donde se necesita arreglar el techo?- ChanYeol por fin llegó a la caseta B2, un pequeño puesto típico de lanzar anillas y encestar en botellas para conseguir cualquier animal de peluche.
Un muchacho no mucho más joven que él por su apariencia, alzó el rostro del móvil que tenía entre sus manos y lo miró desde el centro de la caseta con rostro curioso. ChanYeol quedó algo sorprendido, no creía que ningún joven trabajara allí aparte de él, en la semana que llevaba solo había visto gente mayor, y el lugar tampoco era tan grande.
- Si, si, aquí es. – contestó rápidamente el muchacho guardando el móvil en su bolsillo.- ¿Tú eres el nuevo no? He oído hablar de ti.- ChanYeol abrió los ojos perplejo, no le hacía gracia ser la comidilla de ese lugar.
- Espero que fuera bueno.- soltó junto con una risa nerviosa soltando pesadamente la escalera sobre el mostrador de la caseta.- Bien, ¿Dónde está esa gotera?
Tras las indicaciones del muchacho se subió al tejado de aquel lugar, sintiendo que se desplomaría en cualquier momento. Realmente pensaba que ese lugar al completo podía venirse abajo a la mínima, todo era demasiado viejo y parecía estar carcomido por el tiempo.
Las pequeñas goteras que había esperado que fueran parecían multiplicarse a cada nuevo vistazo que daba ChanYeol por la superficie del techo mientras luchaba porque un golpe de calor no acabara con él. Acabó por bajarse medio mono quedándose en camiseta de tirantes blanca, mientras retiraba las gotas de sudor que bajaban por su frente, sin embargo apenas sintió frescor, el calor de finales de julio a las cinco de la tarde no perdona a nadie.
Bajó del pequeño techado de la caseta sintiendo que se desvanecería de un momento a otro mientras notaba cada parte de su cuerpo arder. Un silbido llamó su atención, reclamándole.
- Toma, creo que lo necesitas.- El joven de la caseta le tendió una botella de agua helada, siendo recibida por ChanYeol como un regalo de los dioses ofreciendo inmediatamente una enorme sonrisa agradecida.
- Gracias, no sabes cuánto.- Respondió ChanYeol tras un enorme trago intentando recuperar el aliento.- Por cierto, me llamo ChanYeol.
- BaekHyun, bienvenido.- Respondió el joven con una sonrisa amable.
Los días pasaban haciendo a ChanYeol acostumbrarse a aquel lugar y a aquel ritmo incansable de trabajo, aunque en cierto modo se sintiera explotado siempre era mejor que nada. No se relacionaba con nadie en aquel lugar, aunque claro tampoco se había buscado el trabajo para hacer amigos. De vez en cuando veía a BaekHyun con el que escasamente cruzaba algunas palabras, le caía bien aunque apenas conociera nada de él.
***
- Tío ese sitio te roba toda la energía mírate, das asco
Era su día libre se encontraba junto con sus dos mejores amigos, LuHan y JongIn, en la piscina de este último. ChanYeol permanecía tumbado en su toalla sobre el césped a la sombra de uno de los árboles de la enorme parcela que rodeaba la casa del moreno.
LuHan hablaba recién salido de la piscina dejando que el agua de su cuerpo cayese sobre ChanYeol haciendo que se sobresaltara.
- Hombre, gracias.- dijo el alto incorporándose y retirando el agua que había caído en su pecho con cierto aire molesto.- Además sigo teniendo energías para esto.
Rápidamente se levantó y alzó al rubio echándoselo al hombro, y dando una ligera carrera ante las quejas del mayor que intentaba zafarse del agarre y lo tiró de vuelta a la piscina. LuHan salió buscando la venganza corriendo hacia ChanYeol con la boca llena de agua para escupirsela encima, sin embargo el alto fue capaz de esquivarlo a tiempo mientras su risa resonaba.
- ¿Queréis dejar de hacer el idiota?- JongIn salía de la casa cargado de bebidas y comida basura.- Vamos venid que hay que planear que hacer este finde.
LuHan se secaba con la toalla mientras miraba a ChanYeol planeando con que más atacarle mientras el alto ya se había sentado junto a JongIn en la espaciosa terraza frente a la piscina. Finalmente el rubio, frustrado, se sentó con ellos.
- ¿Este finde? ¿Qué pasa?- Preguntó el alto algo perdido.
- Pasa que es verano y estamos de vacaciones.- Dijo LuHan como si fuese lo más evidente del mundo haciendo que ChanYeol rodara los ojos con cansancio.
- ¿Y esa cara? ¿Dónde quedó el espíritu fiestero incansable de Park ChanYeol?- Repuso el moreno con gran dramatismo.
- Murió calcinado en el parque de atracciones mientras engrasaba la ridícula noria de los mocosos.
Sus dos amigos no pudieron contener la risa por el tono de asco con el que habló el alto mientras jugaba con los cubitos de su vaso dándole vueltas.
- Vamos, te despejará, todo no puede ser trabajo.- Dijo LuHan compadeciéndose de su amigo.
- He escuchado que organizan una fiesta en la playa el sábado, habrá de todo, va a ser grande.- Habló JongIn posando un brazo sobre sus hombros incapaz de contener la emoción, y sin dejar que dijera nada añadió mirándole a los ojos mientras lo señalaba con un dedo.- No, puedes negarte, te acosaré y arrastraré si hace falta.
- Inútil, no pensaba negarme.- Pegó un manotazo a la mano que seguía apuntándole mientras reía.- Ya estaba más que convencido, ¿negarme a algo así? Debería estar loco.- Sonrió ChanYeol de medio lado
***
Era jueves, alrededor de las ocho y media de la tarde a punto de cerrar, ya que entre semana en lugar de cerrar a las doce el parque cerraba a las nueve. ChanYeol comenzaba a recoger las papeleras, cuando se le cruzó la idea de decirle a BaekHyun que se apuntara al plan de la fiesta en la playa, eso de que se convirtiera en uno más de su grupo de amigos le gustaba, BaekHyun parecía ser alguien agradable y era una buena oportunidad para hacerse más cercano.
- Pero señor, entiéndalo ha jugado y ha perdido yo no puedo hacer nada.-
ChanYeol llegó a la caseta topándose con BaekHyun intentando razonar con un hombre de avanzada edad en claro estado de embriaguez que gritaba que era un estafador y tenía que darle algún premio por el simple hecho de haber jugado ya que había pagado. El castaño intentaba convencer al hombre mientras el agobio se apoderaba de su cuerpo, dirigiendo una mirada que gritaba ayuda hacia el alto nada más conectar su vista con él.
- Tome, aquí tiene su premio de consolación.- dijo ChanYeol haciendo que el hombre se girara al tiempo que le tendía un mechero de publicidad que poco antes había encontrado tirado al lado de una de las papeleras.
El hombre lo cogió con una sonrisa, satisfecho de haber triunfado en la disputa y se alejó de allí.
- Vaya, gracias, no sabía cómo quitármelo de encima.- el castaño se echaba el pelo hacia atrás con las manos con un largo suspiro de alivio.
- No tienes que darlas. No se puede razonar con borrachos, hay que seguirles la corriente, ya has visto, se conforman con poco- BaekHyun rió nerviosamente aún algo asustado.- y yo que solo venía a invitarte a la fiesta del sábado y me encuentro con semejante panorama.- Continuó ChanYeol riendo.
- ¿La de la playa?- Preguntó BaekHyun haciendo que el alto asintiera rápidamente.- Es que ya había quedado con alguien.- se sonrojó ligeramente.- pero supongo que nos veremos allí de todas formas gracias por avisar.
- ¡Claro! No te preocupes, bueno será mejor que termine esto.- Habló dándose media vuelta despidiéndose.
- Te debo una por lo de hoy. – ChanYeol restó importancia con un gesto de la mano mientras se alejaba.- ¡Y gracias de nuevo!
***
Por fin llegó la famosa fiesta de la playa, nada mas llegar ChanYeol comprobó que intentar dar con alguien entre semejante número de personas sin quedar previamente en algún sitio concreto era algo estúpido. Así que optó por darlo por perdido y disfrutar de la noche con sus amigos. A mitad de la noche sin embargo, sí que le pareció ver al castaño acompañado por otro chico rubio bastante más alto que él y en actitud algo más que cariñosa, vio que no era el momento de ir a saludarle.
La noche fue divertida con sus dos amigos y algún que otro conocido con el que se encontraban, echaba de menos sentir esa despreocupación y pasar una buena con ellos. Estaban a punto de dar las cinco y JongIn ya se encontraba en ese estado en el que declaraba su amor por todo el que encontrase cerca, lo conociese o no.
- Tío, tu camisa es bonita, como brillante, mola. Tú molas. ¿De dónde la has sacado? De cerca es como psicodélica, regálamela.- Ahí estaba acorralando a un pobre muchacho que lo miraba con unos ojos enormes algo asustado por el chico bastante más alto que él que se echaba sobre su hombro hablándole incoherencias demasiado cerca.
- JongIn ven aquí, déjalo tranquilo.- ChanYeol arrastró de un brazo al moreno que seguía soltando chorradas de camisas luminosas.- LuHan vámonos que este ya empieza a dar la chapa y ya mismo no se tiene en pie.
LuHan asintió riéndose mientras se echaba el brazo de su amigo por el hombro y lo agarraba de la cintura para ayudarlo a andar en línea recta. Avanzaron por el paseo marítimo con la voz de JongIn retumbando mientras continuaba hablando de cosas sin sentido.
- LuHan de cerca tienes aún más cara de muñeca, llevas pestañas postizas a mi no me engañas.- decía el moreno mientras intentaba acercar la mano al rostro del mayor recibiendo un manotazo.- Vamos, déjame comprobarlo.
- JongIn deja de decir gilipolleces.
- Vamos Channie no te pongas celoso que tú también eres tan bonito como una muñeca para mi, siempre y cuando no hables.- El moreno hablaba trabándose pero completamente convencido de cada una de sus palabras, causando la risa de sus amigos que ya conocían de sobra sus desvaríos al beber.- Me apetece un vaso de leche con galletas.
- Cuando lleguemos a tu casa te lo prepararé.- LuHan habló entre risas, cada vez era más surrealista.
Caminaban sosteniendo a JongIn cada uno por un lado riendo por sus continúas tonterías cuando ChanYeol pareció reconocer a la figura que estaba sentada en la orilla en soledad.
- ¿Podéis esperar aquí un momento? Creo que lo conozco.- Se adentró en la playa a paso lento.
- ¡Una sirena! ¿ChanYeol conoce a una sirena?
- Si, JongIn, ChanYeol es amigo de una sirena.- Contestó LuHan cansadamente poniendo los ojos en blanco.
ChanYeol continuó acercándose a la figura que permanecía sentada de cara al mar. Definitivamente confirmo que era BaekHyun, se acercó algo más parándose a su espalda tosiendo ligeramente para no asustarlo. El chico se giró con una mezcla de sorpresa y decepción en el rostro, como si esperara a otra persona. Su rostro se volvió sombrío y triste.
- ¿Se puede?- Preguntó el alto en voz baja recibiendo un encogimiento de hombros por parte del castaño.
Se tomó eso como una invitación para sentarse y eso fue lo que hizo.
- ¿Qué haces aquí solo?
- Pensar.- dijo con un apenas audible hilo de voz seguido por un ligero suspiro.- Pensar en lo idiota que soy.- Enterró el rostro entre sus brazos que descansaban sobre sus piernas.
- Vamos, no digas eso.- Apoyó una de sus manos sobre su hombro algo vacilante por si BaekHyun se sentía incómodo por ese contacto, sin embargo no reaccionó.- ¿Qué ha pasado? Si quieres contarlo claro…
- ¿Recuerdas que te dije que había quedado con alguien hoy?- ChanYeol asintió aunque sabía que el castaño no lo había visto ya que su mirada se encontraba perdida en algún punto del mar iluminado solo por los rayos de la luna.- No fue como había esperado.
BaekHyun intentaba retener las lágrimas en silencio, ChanYeol retiró el brazo de su hombro para agarrar su mano y apretarla con fuerza, el más bajo sonrió ligeramente recibiendo ese apoyo que ChanYeol quería trasmitirle y continuó hablando. Necesitaba contarlo para desahogarse y ChanYeol era alguien que le inspiraba confianza, aún habiendo cruzado apenas palabras con él.
- Me invitó a venir con él, todo parecía ir bien, pero se torció. Yo creía que le interesaba pero parece ser que solo era porque le recordaba a su exnovia. Ha sido humillante.- BaekHyun volvió a esconder su rostro entre sus brazos.
- Solo dime su nombre y haré que parezca un accidente.- El castaño soltó una pequeña risa- Ei, no te rías.- dijo ChanYeol intentado esconder su propia risa propinándole un ligero empujón con su hombro.- No merece la pena deprimirse por estas cosas, vamos estamos en edad de divertirnos, ya habrá tiempo de amargarse. ¿Al principio de la noche lo has pasado bien no? Pues quédate con eso.
BaekHyun levantó la cabeza encontrándose con el rostro del alto que lo miraba con una sonrisa amplia y amable. De repente ya no se sentía tan mal.
- Quizá tengas razón.
A sus espaldas pudieron escuchar como LuHan gritaba el nombre de ChanYeol seguido por un “rescátame ya de este pelmazo, no lo soporto más”. Ambos se giraron viendo como JongIn sentado junto al mayor en uno de los bancos de piedra del paseo marítimo jugaba con el pelo del rubio intentando hacerle una especie de coletilla con enorme concentración. ChanYeol sopló una risa negando con la cabeza mientras se levantaba y sacudía la arena de su pantalón.
- Tengo que irme, pero recuerda, nada de depresiones, y si no ¡mi oferta del asesinato sigue en pie! ¡Y gratis!- Dijo mientras se alejaba con una pequeña carrera.
BaekHyun lo siguió con la mirada aun sonriendo mientras veía como se acercaba a sus amigos ayudando al rubio a cargar con el otro que ahora parecía interesarse por el pelo de ChanYeol, el cual le echó un último vistazo poniendo cara de circunstancias mientras BaekHyun lo despedía con una mano sin poder borrar la sonrisa.
***
- ¿Quién era el chico de la playa?- Quiso saber LuHan.
- Trabaja en el parque en una de las casetas.- Dijo el alto despreocupadamente
- Nunca lo habías mencionado, solo hablas del tío ese de mantenimiento. ¿Acaso te pone con su mono de trabajo cubierto de grasa?- ChanYeol le echó una mirada mezclada de odio y asco mientras LuHan se partía.
- No sabía yo que te gustaran los maduritos.- Acompañó JongIn
- Par de inútiles, no me hagáis vomitar. Solo hablo de él porque no deja de encasquetarme su trabajo y a BaekHyun apenas lo conozco de vista.
- Pero te pone.- Añadió de nuevo el rubio riendo.
- Claro y tu madre también me pone.- Contraatacó el alto haciendo que JongIn comenzara a reír sonoramente.
- Tú cállate que tú también le pones.- Contestó LuHan dándole un manotazo en el pecho al moreno.
- Vamos LuHan, no te pongas tontorrón que aquí el único que me pone eres tú, ven aquí.- Se levantó rápidamente de la silla con una sonrisa maligna cogiendo al mayor en volandas y lanzándolo a la piscina, con las risas de JongIn de fondo acompañando a las suyas.
LuHan salió a la superficie soltando maldiciones mientras nadaba a la escalerilla y tosía algo de agua.
- Ya sabes, no te metas con quien no debes.- Añadió ChanYeol.
- No tienes sentido del humor, un día terminarás por ahogarme bestia.- llegó y volvió a tumbarse en la toalla central entre sus dos amigos no sin antes sacudirse el agua sobre ellos a modo de venganza.- Ahora en serio, podrías invitarlo a venirse con nosotros algún día. Nos vendría bien alguien más en el grupo, sobre todo cuando nos toca cargar con este.
- ¡¡Ei!!- se quejó el moreno.- Un día que se le va a uno de las manos y ya te cuelgan la etiqueta de borracho de por vida.
***
ChanYeol refunfuñaba de nuevo mientras intentaba arreglar el motor que movía uno de los pequeños tiovivos de caballitos del parque. Era ridículo, las piezas estaban oxidadas y aquello no parecía tener arreglo, de nuevo cuanto más profundizaba en las atracciones y pequeñas construcciones mayor era su interrogante de cómo aquel lugar contaba con todos los permisos de seguridad en regla. Sintió a su espalda como alguien llegaba, sabía que era su jefe que seguramente le metería prisa para terminar para darle otro encargo. El frescor momentáneo que le proporcionó la sombra que proyectaba su cuerpo sobre él era realmente de agradecer, llevaba más de media hora bajo el sol, estaba convencido de que para finales de verano habría logrado superar el moreno de JongIn.
- ChanYeol.- Sin embargo esa voz no era la de su jefe.
Se giró encontrándose con la sonrisa amable de BaekHyun tendiéndole una botella de agua, como el primer día que lo vio.
- ¡Oh, gracias!- se levantó sorprendido cogiendo la botella tras una ligera reverencia.-¿Qué haces por aquí? ¿Puedes dejar la caseta sola?
- Bah, ¿has visto este lugar? Nunca hay nadie, y no me extraña viendo como está.- dijo echando una mirada significativa al motor despiezado y carcomido.- Vine a buscarte para agradecerte de nuevo lo de la otra noche, conseguiste animarme.
BaekHyun intentaba sonar natural pero era evidente que la situación le avergonzaba
- Sabes que no tienes que agradecer nada, solo te di mi punto de vista.
- Pues me gusta tu forma de ver las cosas.- sonrió agachando algo el rostro.
- Solo hay que ver la parte buena de las cosas, algo de positivismo.
- ChanYeol ¿aún sigues con eso?- Ahora sí que era el jefe.- Menos cháchara y más trabajar, vente, te necesito en los
servicios.
El alto se giró echándole una última mirada de terror a BaekHyun a la vez que se colocaba el mono y se subía la cremallera teatralmente haciendo reír al castaño.
***
Daban las nueve cuando ChanYeol terminaba su turno de trabajo encontrándose en la puerta a LuHan esperándole en la calle apoyado en su coche.
- ¿Qué haces aquí?
- Vengo a recogerte, JongIn ha dicho que nos vayamos esta noche a su casa.- ChanYeol le miró con sorpresa de forma interrogante.- Sí, que se ha quedado solo y está acojonado, lo típico.- Rió el rubio.
Justo en ese momento salía otra persona del parque saludando a modo de despedida a ChanYeol.
- ¿Ese no es el de la playa?- Interrogó LuHan.- Dile que se venga.
- No creo que quiera, no le disteis muy buena imagen.- Se carcajeó ChanYeol recibiendo por parte del rubio que pusiera los ojos en blanco.
- Si ni preguntas claro que no vendrá.- Dijo el mayor volviéndose hacia la figura que se alejaba calle abajo.- ¡Eh, BaekHyun!
El castaño se giró al escuchar su nombre aunque no reconocía la voz que lo había llamado, al volverse vio que el amigo de ChanYeol le hacía gestos para que se acercara.
Finalmente aún sin saber por qué estaba subido en aquel coche yendo a casa de un desconocido, la insistencia de aquel chico que ahora conocía como LuHan le había hecho imposible negarse, de todos modos sería mejor que volver a la soledad de su casa. ChanYeol le caía bien y su amigo también parecía amable.
Llegaron a una zona residencial, la más lujosa de la ciudad parando el coche frente a un enorme portón, LuHan sacó una mano por la ventanilla y tocó al interfono.
- ¿Quién es?- se escuchó a través de él.
- Un psicópata que viene a matarte.- dijo LuHan en tono siniestro mientras se escuchaba reír al otro lado del aparato- Abre ya inútil si nos estás viendo.
El portón se abrió mostrando un gran caserón, BaekHyun miraba alucinado el tamaño de aquel lugar sin contener la sorpresa.
- ¿Aquí vive vuestro amigo? Normal que le de miedo quedarse a solas este sitio es enorme.
- No le da miedo quedarse solo por eso, le da miedo por si los clanes rivales a la mafia de su padre vienen a hacerle un ajuste de cuentas.- Dijo el rubio seriamente mientras terminaba de aparcar el coche a la entrada de la casa mientras BaekHyun lo miraba con ojos desorbitados.
ChanYeol comenzó a reír sonoramente bajándose del coche mientras BaekHyun se había quedado petrificado sin intenciones de salir de allí, el alto le abrió la puerta sin poder parar de carcajearse acompañado de LuHan.
- ¿No te lo habrás creído verdad? Su padre no es más que el dueño de una empresa de electrónica.
BaekHyun miró al alto sintiéndose estúpido por haber creído semejante trola digna de ser el argumento de una película cutre de televisión saliendo rápidamente del vehículo.
La puerta de la gran casa se abrió dejando ver al propietario de esta. El castaño se sentía fuera de lugar por más que le hubiera insistido LuHan en que a su amigo no le importaría no podía dejar de sentir como se había acoplado sin ser invitado. De repente sintió la vista de JongIn clavada en él escrutándole, repasándolo con la mirada de arriba abajo, BaekHyun se sentía realmente incómodo.
- ¿Tú eres el que trabaja en el parque con ChanYeol verdad?- Preguntó algo confundido, tras un asentimiento por parte del castaño sonrió ampliamente. – Yo soy JongIn, bienvenido a mi casa, vamos pasad ya.
BaekHyun finalmente se alegró de haberse apuntado a ir, se lo estaba pasando bien, eran tres chicos realmente divertidos, ChanYeol le había caído bien desde el primer momento que habló con él y ahora le caía aún mejor al igual que sus amigos que no habían dejado que se sintiera como un extraño en ningún momento, parecía ser un amigo más de toda la vida. La noche pasaba, hablaban sin cesar, bromeaban, contaban historias de miedo seguidas o interrumpidas por chistes para quitarse el susto del cuerpo.
- Em… ¿una bruja?... ¿gollum?¿es gollum? ¡ES GOLLUM!¡GOLLUM!- saltaba JongIn de emoción en el sillón convencido de que era la repuesta.
- ¡Tiempo!- Gritó LuHan.
- A ver, si negué que fuese gollum la primera vez…¡¿qué te hizo pensar que pudiera ser las otras cincuenta?!- Regañaba BaekHyun al moreno al cual ya le había cogido la suficiente confianza, mientras los tres reían.- …Y era el jorobado de Notre Dame.- añadió con la boca pequeña.
Todos explotaron en risas de nuevo incluido BaekHyun que intentaba demostrar la diferencia entre ambos personajes con diferentes posturas y gestos haciendo reír aun más a todos.
Ahora era el turno de ChanYeol y LuHan, siendo este último el encargado de adivinar que representaba el alto. ChanYeol se puso en pie frente a sus amigos que permanecían sentados en los sillones del patio de JongIn. El alto comenzó a hacer extraños gestos mientras LuHan lo observaba echado hacia delante en su asiento.
ChanYeol gesticulaba señalando a su muñeca haciendo como si la mordiese “¡un perro!” el alto negó repitiendo el gesto “¡un perro rabioso!” volvió a negar rodando los ojos cambiando de gesto, ahora se señalaba los colmillos y abría la boca haciendo caras extrañas provocando de nuevo las risas del grupo “¡la niña del exorcista!” ChanYeol lo miraba con incredulidad volviendo a cambiar de técnica haciendo como si se clavara algo en el pecho y cerraba los ojos sacando la lengua hacia un lado provocando de nuevo las carcajadas de sus amigos retumbando en la oscuridad “um…¡un ninja suicida!” ChanYeol resopló, definitivamente su amigo era estúpido.
Volvió a cambiar de táctica acercándose a BaekHyun sentado al lado de LuHan, se colocó tras el castaño que miraba había arriba con gesto curioso, se agachó poniéndose a la altura de su cuello mientras simulaba morderlo rozándolo involuntariamente por sus labios.
- ¡Tiempo!
ChanYeol se levantó rápidamente ruborizado mientras que el rostro de BaekHyun estaba del mismo tono rojizo, mientras los demás seguían riendo.
- ¿Cómo puedes ser tan torpe por dios?- Gritó el alto moviendo los brazos mientras se dejaba caer en su silla.
- Sabía que era Drácula desde el primer momento.- dijo LuHan entre las risas que aún no había podido frenar mientras su amigo lo miraba con los ojos como platos.- Solo quería ver que más se te ocurría hacer, ha sido demasiado bueno.- la cara de ChanYeol cambió de la incredulidad a una sonrisa calculadora.
- Ya sabes lo que toca.- Se levantó rápidamente mientras JongIn canturreaba un “al agua, al agua, al agua” mientras golpeaba la mesa.
Poco más de sí dio la noche después de terminar todos en la piscina tras tirarse los unos a los otros para más tarde quedarse dormidos en los sillones del gran salón del interior de la casa.
El primero en despertar fue ChanYeol encontrándose recostado sobre su hombro a BaekHyun mientras en el sillón de enfrente estaban sus dos amigos tumbados como podían cada uno mirando hacia un lado. BaekHyun se retorció a su lado en sueños intentando acomodarse más pasando un brazo suavemente por su cintura, apretándolo como si de un osito de peluche gigante se tratase. ChanYeol sintió su rostro arder quedándose bloqueado mirando el rostro en calma y profundamente dormido de BaekHyun. No sin cierta culpabilidad, puso una mano sobre su hombro y lo meció levemente sacándolo de su profundo sueño. El castaño comenzó a despertar poniéndose en pie rápidamente al darse cuenta de la situación repitiendo varias veces un “lo siento” con las mejillas coloreadas tan intensamente como la noche anterior.
Poco después los demás despertaron, LuHan se encargó de llevar a BaekHyun al trabajo mientras ChanYeol, ya que era su día libre, se quedaba en el gran caserón ayudando a JongIn a recoger los vasos y comida de sobra de la noche anterior.
- Oye, pues BaekHyun es muy majo. Tiene que venirse más veces, me cae bien.-Dijo el moreno alegremente mientras fregaba un vaso.
- Sí, es buena gente.- Respondió ChanYeol algo perdido en su mundo recogiendo el vaso y secándolo.
***
Así fue como BaekHyun acabó uniéndose a todos los planes que el grupo hacía que consistían básicamente en pasar el rato en casa de JongIn ya que prácticamente siempre estaba solo, y si no lo estaba, lo parecía ya que sus padres desaparecían en cualquier habitación del enorme caserón.
ChanYeol, LuHan y BaekHyun salían del gran caserón dirigiéndose a sus respectivas casas tras una tarde de domingo de piscina. Iban a pie ya que al mayor se le había estropeado el coche, una forma sutil de decir que le había reventado los amortiguadores haciendo el inútil al no frenar en los badenes de la carretera alegando que tenía un buen coche y eso era como pasar ligeros baches.
- Bueno yo sigo por aquí, nos vemos mañana – Decía LuHan sonriente despidiéndose de sus amigos.
ChanYeol y BaekHyun continuaron juntos por un mismo camino charlando despreocupadamente. De pronto un móvil comenzó a sonar. BaekHyun lo sacó de su bolsillo miró la pantalla suspiró y colgó volviéndoselo a guardar. Intentó seguir la conversación con el alto cuando a los pocos minutos volvió a sonar. El castaño sacó de nuevo su teléfono del bolsillo descolgándolo esta vez con el ceño fruncido.
- Te he dicho que me dejes tranquilo, ¿Cómo tengo que decirte que no quiero saber nada de ti?- BaekHyun colgó aún con gesto enojado mirando al alto con gesto de disculpa.
- ¿Quién es ese tal Kris?¿era él?- Quiso saber.
A ChanYeol no se le habían pasado por alto las múltiples llamadas que había recibido el castaño a lo largo de toda la tarde y como este las había ignorado deliberadamente. Una de las veces ChanYeol vio claramente ese nombre en la pantalla del móvil. BaekHyun en cambio pareció sorprenderse al escuchar como pronunciaba ese nombre ya que no recordaba habérselo mencionado jamás.
- Sí, era él. Es con quién fui a la fiesta de la playa.- Respondió BaekHyun con un deje de tristeza en la voz mientras continuaba caminando mirando sus zapatos.
- Oh…- ChanYeol recordó al chico que vio junto al castaño aquella noche y lo que más tarde le contó.- ¿Qué quiere para ser tan pesado?
- A mi.- contestó en voz baja mientras el alto lo miraba con sorpresa.- Insiste en verme, tras la noche de la fiesta me dejó tranquilo, pero hace un par de días que volvió a llamarme pidiéndome perdón y asegurándome que no había dejado de pensar en mi.- BaekHyun hablaba con una mezcla de vergüenza y pena en su voz- se cree que soy estúpido y que no se que ese tiempo que me dejó en paz fue el mismo en el que volvió con su novia y ahora que han vuelto a pelearse es cuando de repente me recuerda.- terminó el castaño pateando una pequeña piedra del camino.
- Menudo hijo de… - ChanYeol se cortó a si mismo, rodeó los hombros del más bajo con su brazo apretando ligeramente.- Si llama otra vez me lo pasas a ver si después se atreve a volver a molestarte.- BaekHyun lo miró con ojos curiosos mientras reía ligeramente.
- No será necesario, no creo que tarde en cansarse. Siento darte la chapa siempre.- intentó disculparse haciendo que una sonrisa se asomara a los labios del alto que le revolvió el pelo con un “nada de disculpas, no digas tonterías”.
Los días pasaban y las llamadas no cesaban a pesar de que BaekHyun no contestaba o cuando lo hacía era siempre cortante y claro. ChanYeol se daba cuenta aunque el castaño lo intentase disimular ya que cuando estaba en grupo silenciaba el móvil, sin embargo las miradas fugaces que echaba al aparato apenas sacándolo de su bolsillo y la mirada de frustración que dedicaba, no se le pasaban desapercibidas.
***
Era miércoles, ChanYeol salía del parque tras cambiarse el mono por la ropa de calle. Podía escuchar como había dos chicos hablando a la entrada del recinto aunque no podía verlos ya que parecían estar algo más alejados de la puerta. Una de las voces la reconoció inmediato como la de BaekHyun.
- Es que no sé que haces aquí, te he repetido hasta la saciedad que no quiero verte.- decía el castaño con un claro tono de desesperación en la voz.
- Dime que ya no sientes nada por mi.- le contestaba la otra voz con cierto tono chulesco.
- ¡¿Otra vez?! Te lo he dicho, te lo he escrito, no sé qué hacer para que lo pilles.- decía ahora con tono irritado soltando un largo suspiro.
- Pero quiero que me lo digas mirándome a los ojos.
ChanYeol por fin había llegado a la puerta viendo a quien ya sabía que era, irritado aún más por lo que acababa de escuchar, ese tipo era una lapa.
Se acercó por detrás de BaekHyun haciendo que Kris concentrara su atención en él mirándolo confuso. Al llegar pasó un brazo por encima del castaño que lo miró sin comprender, ChanYeol lo apretó contra su cuerpo inclinándose ligeramente dándole un ligero beso en la comisura de sus labios ante la mirada completamente desconcertada del rubio.
- ¿Nos vamos?- Levantó la vista hacía Kris haciéndose el sorprendido.- Oh! No sabía que hablabas con alguien.- dijo inocentemente.
- Ya entiendo.- dijo Kris concentrando su atención en BaekHyun.- Yo, yo ya me iba.- añadió tartamudeando y desapareciendo del lugar.
Tras pasar algunos minutos desde que Kris se hubiera perdido por la esquina de la calle ChanYeol comenzó a reír.
- ¿Has visto su cara?- Miró a BaekHyun que reía con el rostro aún encendido, sintiéndose de repente algo incómodo.- Perdona si lo que he hecho te ha sentado mal, no se me ha ocurrido otra manera de ahuyentarlo, espero que haya funcionado.
- Habrá valido la pena igualmente solo por ver cómo ha salido corriendo al verte.- Dijo el castaño quitándole hierro al asunto riendo de nuevo con más ganas, haciendo que ChanYeol se uniera de nuevo a ellas.
***
Ya había pasado más de un mes desde el episodio con Kris sin que este hubiese vuelto a dar señales, BekHyun estaba completamente agradecido a ChanYeol, sin su ayuda estaba convencido de que Kris no le habría dejado en paz hasta que consiguiera lo que quería.
***
- Si quieres podríamos quedarnos todos a hacerte compañía en plan acampada.- Dijo JongIn intentando animar a su amigo.
Como ya era normal, ChanYeol era requerido para todo tipo de trabajos en el parque, esta vez le habían encargado hacer de guardia de seguridad nocturno durante el fin de semana.
- Que va, no me fio nada de vosotros. Seguro que acabaríais incendiándolo o algo parecido.- Dijo el alto riendo despreocupadamente, aunque realmente no le parecía tan descabellado que pudiera pasar algo así tratándose de sus amigos.
- Bueno, pues tú te pierdes nuestra maravillosa compañía.- Habló LuHan haciéndose el ofendido.- Si luego tienes miedo…te jodes.- añadió riendo animadamente mientras ChanYeol ponía los ojos en blanco y le daba una colleja.
- Hombre gracias, pero no soy ningún cagueta.
Y era cierto, ChanYeol no era una persona fácil de asustar, le encantaban las películas de miedo hasta llegar al punto de sacarles la parte graciosa que según él todas tenían, tampoco le asustaba estar solo en la oscuridad, o eso creía.
Era ya entrada la madrugada, llevaba alrededor de unas dos horas en el recinto, paseando por los diferentes carriles de casetas y atracciones con su linterna en la mano, de vez en cuando se sentaba en uno de los bancos contemplando el cielo estrellado. Debido a lo retirado que se encontraba el parque del centro de la ciudad unido a la oscuridad reinante del lugar la visión era envidiable. Cientos de estrellas adornaban el cielo acompañando a una brillante luna en cuarto creciente, la temperatura era agradable en contraste con las calurosas tardes de verano, ChanYeol estaba empezando a desear trabajar solo en el turno de noche, solo tendría que pasear por aquel lugar y vigilar que nadie entrara, en comparación con su turno agotador bajo el sol continuo era un regalo, además ¿quién iba a querer entrar en aquel sitio de noche si apenas venía gente de día?
Se levantó del banco desperezándose, el turno de noche realmente le parecía fantástico no tenía que hacer nada, solo permanecer despierto, aunque claro ante semejante oscuridad y tranquilidad, no era tan sencillo. Avanzó hasta la máquina de refrescos dispuesto a conseguir algo con cafeína para espabilarle.
Rebuscaba monedas en su bolsillo cuando le pareció divisar como algo entre las sombras se movía. Su cuerpo entró en alerta rápidamente buscó en su cinturón la pequeña linterna. Justo en ese momento algo sonó a su espalda haciendo que se girara velozmente tratando de encender la linterna consiguiendo solo que resbalara de sus manos, rodando hasta colarse debajo de la máquina.
- Mierda.- Resopló agachándose e intentando alcanzarla.
Se encontraba de rodillas estirando uno de sus brazos por debajo de la máquina cuando sintió algo rozar su pierna. Un escalofrío recorrió su cuerpo paralizándolo, su corazón comenzó a acelerarse, cerró los ojos intentando controlar su respiración a la par que notaba una ligera presión en su pierna. Lentamente fue girándose soltando un largo resoplido de relajación acompañado de una ligera sonrisa.
- Ei, amigo, no sabes el susto que acabas de darme.- Dijo mientras cogía entre sus manos al pequeño gato que lo miraba con curiosidad.- ¿Quieres hacerme compañía?
El gato seguía mirando a ChanYeol una vez ya lo había dejado en el suelo, acercándose y acariciándose con sus piernas con un tierno maullido. ChanYeol acabó sacando un batido de la máquina para dárselo al pequeño animalito en vez de su refresco. La noche pasó sin ningún contratiempo más, ChanYeol siguió con su guardia seguido del gato con el que se paraba de vez en cuando a jugar para pasar el rato.
Su segundo día de guardia transcurría más tranquilo, de nuevo estaba ahí el gato, esta vez sí que le había traído algo de comida, así como un pequeño ovillo de lana para jugar con él, la noche era muy larga y ya tenía entretenimiento para no aburrirse.
Mientras se encontraba sentado en uno de los bancos con el pequeño gato dormido a su lado un ruido lo sobresaltó, esta vez era diferente a la noche anterior, era un ruido metálico.
Se puso en pie dirigiéndose a la cancela de la entrada. Llegó justo en el momento en que una figura vestida con una sudadera con capucha negra bajaba por el interior.
Sigilosamente ChanYeol logró ponerse detrás cogiéndolo por la espalda estampándolo contra la pared apretando uno de sus brazos en su espalda mientras con el otro le hacía una llave al brazo del intruso que soltó un quejido.
- ¡Suéltame!- El alto solo lo apretó más mientras el individuo intentaba soltar el agarre.- ChanYeol, suéltame.
El alto soltó el brazo del intruso haciendo que este respirara aliviado, al tiempo que ChanYeol le retiraba la capucha, descubriendo a un dolorido BaekHyun.
- ¿¡Se puede saber que haces tú aquí!?- Gritó el alto.
- Solamente tengo insomnio y se me ocurrió hacerte compañía, no hacía falta ser tan bestia.- BaekHyun se frotaba su brazo dolorido con un puchero en el rostro.
- ¡¿Y no podías avisar de que venías como cualquier persona normal?! Además os dije que no vinierais ninguno- hablaba aún alterado el alto, intentando controlar sus pulsaciones del susto.
- Lo siento, me iré, no pensé que te lo tomarías así- BaekHyun seguía mirando su brazo con cara de pena haciendo que ChanYeol se sintiera realmente culpable por su reacción, al fin y al cabo la intención del bajo había sido buena.
- No te vas a ninguna parte, perdona por haber reaccionado así.- Justo en ese momento el pequeño gato se acercó a los pies del alto.- Además él necesita una madre.- añadió señalándolo haciendo que BaekHyun lo mirase desconcertado mientras el alto se reía ensordecedoramente.
BaekHyun miró hacia abajo encontrándose al gato agachándose para acariciarlo, mientras el pequeño animal se acercaba a él con ojos curiosos.
La noche avanzó con ambos chicos jugando con el gato y hablando despreocupadamente en la oscuridad de la noche. Se encontraban sentados en uno de los bancos en un momento de silencio, el gato dormía en los brazos de BaekHyun después de haber estado jugando incansable durante más de dos horas.
- ChanYeol… te he mentido, no vine por aburrimiento o insomnio.- habló en un susurro haciendo que el alto lo mirase con el ceño fruncido sin comprender.- Kris vino a mi casa esta noche. – ChanYeol abrió los ojos desmesuradamente.
- Creía que te había dejado en paz, ¿no te haría nada no?!- Habló con rabia.
- Fue mi culpa, comenzó a volver a llamarme hará un par de semanas… seguí ignorándolo, pero finalmente accedí a quedar, soy idiota.- ChanYeol lo miraba sin creérselo.- Me dijo que de verdad quería algo conmigo, que no tenía nada que ver con lo de su ex, le creí, soy idiota y le creí. Hoy estábamos en mi casa y me llamó por el nombre de ella.
El alto atendía con la boca abierta, quería decirle que sí, que era idiota, que como había podido dejarse engañar, quería gritárselo, zarandearlo decirle que espabilara, pero no pudo al ver el rostro de pena de BaekHyun.
- Lo eché, le dije que no quería volver a verlo, no sabía qué hacer y por eso vine aquí, no aguantaba estar en casa solo.- el bajo concentraba su atención en el gato incapaz de mirar a ChanYeol.
- Vaya, yo… yo no sé que decir…solo espero que hayas despertado y no te dejes liar más, tente un poco de más amor propio BaekHyun, no mereces que alguien así se ría de ti, creía que eras más inteligente.- intentó no sonar demasiado agresivo pero la rabia que sentía en ese momento no se lo puso nada fácil.
El bajo se quedó en silencio con la cabeza gacha acariciando suavemente al gato mientras luchaba claramente por aguantar las lágrimas. ChanYeol sintió pena, al fin y al cabo solo había sido demasiado ingenuo, no merecía una charla, sabía que se había equivocado. Decidió que lo mejor sería cambiar de tema.
- Parece que le has caído bien.- Habló el alto con una pequeña sonrisa mirando al animal entre sus brazos.- Me da pena, no sé qué pasará con él, ojalá pudiera llevármelo a casa.- Añadió apenado.
- Podría llevármelo yo, me irá bien algo de compañía.- Dijo el bajo mientras pasaba uno de sus dedos por la pequeña cabeza del animal.
Así fue como BaekHyun acabó llevándoselo con él mientras el alto no cabía en sí de felicidad y no paraba de agradecérselo.
ChanYeol caminaba feliz al lado del castaño que tras la insistencia del más alto lo llevaba a su casa para ver al gato que ya llevaba una semana en su casa. Caminaron alrededor de unos quince minutos llegando a un barrio de pequeñas casas modestas, BaekHyun abrió la puerta invitando a ChanYeol a entrar. Por dentro era una casa con escasa decoración y mobiliario algo anticuado, lo básico. BaekHyun se puso a buscarlo encontrándolo dormido en su dormitorio dentro de una pequeña canasta, ChanYeol se acercó a acariciarlo.
- ¡Vaya! Está enorme! Su madre lo alimenta bien- soltó animadamente ganándose un empujón.
- ¡Para ya de decir que soy su madre!
Justo en ese momento mientras reían alguien llamó a la puerta, BaekHyun desapareció mientras ChanYeol permanecía en la habitación escuchando levemente la voz del bajo a lo lejos. Ese nombre, de pronto escuchó ese nombre de los labios del más bajo, se levantó rápidamente saliendo de la habitación invadido por una rabia que no hizo más que aumentar al llegar a la puerta y ver lo que allí sucedía.
Kris y BaekHyun se estaban besando. Kris levantó la vista encontrándose con la ChanYeol al que le dedicó tras separarse del bajo una sonrisa chulesca de triunfo a la vez que BaekHyun miraba hacia atrás con pánico dándose cuenta de cómo ChanYeol lo había visto.
- ¡Vete! ¡Vete ahora mismo antes de que te arranque la cabeza!- habló nublado por la rabia.
Cogió a BaekHyun del brazo empujándolo dentro de la casa a la vez que daba un portazo mientras Kris ya se daba media vuelta alejándose riendo.
Se apoyó en la puerta respirando pesadamente temblando completamente cabreado.
- ChanYeol.. yo.. - se calló cuando el alto se giró acercándose rápidamente a él empujándolo contra la pared.
Este lo acorraló pegando sus brazos a la pared dejando sus rostros a escasos centímetros.
- ¿ES QUE ERES GILIPOLLAS?! Es que no te entiendo,¡ ¿acaso te gusta que se rían de ti?! ¿Tan poco te valoras?! – BaekHyun temblaba con las lágrimas saltadas.
- Yo… no quiero quedarme solo- dijo con un apenas audible hilo de voz, ChanYeol miraba su rostro respirando agitadamente.
Era inútil, estaba convencido de que era inútil, debería pegarle, hacer que reaccionara, que se diera cuenta de que se estaba humillando solo con esa actitud. Pero, ¿por qué lo único que sentía eran ganas de consolarlo?¿por qué tenía que verse tan frágil? Actuó sin pensar aún con la rabia en el cuerpo, terminó de acorrararlo juntando bruscamente sus labios con los ajenos, no sabía que estaba haciendo ni por qué pero no pensaba parar.
BaekHyun abrió los ojos sorprendido intentando zafarse del alto empujando su pecho, solo consiguió que cogiera sus manos alzándolas haciéndole rodear su cuello a la vez que él ponía las suyas en su cadera pegándolo completamente a su cuerpo sin cortar el violento beso. BaekHyun agarró el cabello de la nuca de ChanYeol tirando para separarlo haciendo que el alto le mordiera el labio inferior y que BaekHyun soltara un pequeño quejido. Esto fue aprovechado por ChanYeol para profundizar el beso, rozando su lengua con la ajena haciendo así que BaekHyun dejara de intentar resistirse, rindiéndose a las caricias del alto y apretándose contra su cuerpo buscando mayor contacto.
En la casa no se oía más que el chocar de sus labios junto con el roce de sus cuerpos y sus respiraciones agitadas. BaekHyun empujó nuevamente al alto que esta vez se dejó guiar, notando como BaekHyun estaba tan excitado como él, anduvieron apenas unos metros sin apenas despegarse más que para coger algo de aire entre besos desenfrenados, llegando finalmente a su destino, BaekHyun empujó al alto haciéndole caer en el sofá con una pícara sonrisa adornando su rostro, enseguida el bajo se sentó sobre su regazo uniendo nuevamente sus labios a un ritmo más calmado y suave. ChanYeol se separó de sus labios bajando a su cuello repartiendo suaves besos por él, ya ni siquiera recordaba su enfado estaba embriagado por la suavidad de la piel BaekHyun así como por su suave olor ligeramente dulzón, ahora que lo tenía entre sus brazos no sabía cuánto tiempo había estado deseándolo, negándoselo a sí mismo. Continuó repartiendo besos por su cuello mientras lo sujetaba por la cintura hundiendo los dedos en su cadera, el bajo permanecía con los ojos cerrados ahogando suaves suspiros en el oído de ChanYeol , comenzando a moverse sobre el cuerpo del alto, buscando mayor roce haciendo que ChanYeol le mordiera el cuello en un acto reflejo acompañado de un ronco gemido ahogado.
- Te creía más inocente BaekHyun- habló en tono ronco soplando sobre su cuello.
- Aún no has visto nada.- susurró en su oído mordiendo suavemente el lóbulo.
BaekHyun bajó sus manos por los costados del alto agarrándolo por el filo de su camiseta cerrando las manos en un puño sobre la prenda impulsando así un mayor roce moviendo su cadera hacia delante soltando un gemido a la par que dejaba caer su cabeza sobre el hombro del alto. ChanYeol volvió a soltar un nuevo y más sonoro gemido ronco volviendo a aprisionar los labios del mayor bruscamente con deseo, BaekHyun soltó una ligera risa correspondiendo el beso mordiendo ligeramente la lengua del alto mientras volvía a agarrar el filo de su camiseta tirando esta vez hacia arriba separándose momentáneamente de los labios ajenos para quitársela completamente.
- Creo que me está gustando demasiado esta parte que no conocía de ti.- ChanYeol habló con una sonrisa nerviosa mientras el más bajo acariciaba su torso y mordía su clavícula para después pasar su lengua ligeramente.
- Yo creo que te gustaría más en mi habitación.- susurró sobre su pecho.
ChanYeol reaccionó rápidamente levantándose del sofá agarrando a BaekHyun por los muslos haciendo que envolviera sus piernas en su cuerpo, el bajo se sujetaba a su cuello soplando ligeras risas mientras repartía nuevos besos por el pecho y cuello del alto. ChanYeol avanzó hasta la habitación dejando caer a BaekHyun sobre la cama acomodándose sobre él inmediatamente tirando ahora él de su camiseta y lanzándola al otro extremo de la habitación.
- No sé si esto está bien.- BaekHyun parecía indeciso de repente avergonzado de mostrar parte de su cuerpo.
ChanYeol lo miraba alzado sobre su cuerpo recorriéndolo de arriba abajo con la mirada mordiéndose ligeramente el labio.
- No me hagas parar ahora.- bajó ligeramente la mirada- veo que también lo deseas.- añadió susurrando roncamente haciendo que el bajo desviara su mirada avergonzado con una sonrisa contenida.- estás precioso.- bajó su rostro presionando ligeramente sus labios dejándose caer a su lado besando su hombro y cuello.
- ChanYeol...perdóname.- el alto lo miraba ahora sin comprender- debería haberte haberte visto como te veo ahora hace mucho tiempo y dejar de buscar lo que ya tenía en mis narices, siempre has estado ahí aguantándome.- BaekHyun se había abrazado al alto mientras hablaba escondiendo el rostro en su pecho.
- ¿Cómo me ves ahora?- picó ChanYeol besando esta vez su coronilla mientras jugaba a hacer círculos sobre su pecho con uno de sus dedos.
- Como alguien con quien me gustaría hacer esto cada día.
De repente BaekHyun se incorporó colocándose sobre ChanYeol con una nueva sonrisa maliciosa en los labios acercándose a besar su cuello con nuevas energías.
- Eres un pequeño diablillo.- el alto sonrió mientras cogía a BaekHyun del mentón acercándolo a su rostro volviendo a capturar sus labios en un salvaje beso acariciando sus lenguas.- y me encanta.- añadió suavemente para volver a unirse en el beso.
BaekHyun de nuevo comenzó a balancearse sobre la cintura del más alto que bajó sus manos por los costados hasta llegar al trasero haciendo que BaekHyun diera un pequeño salto de sorpresa, haciendo de nuevo gemir al alto.
- No pensaba que tu voz podría gustarme más.- volvió a rozarse contra su cuerpo agarrando con sus manos la cintura del pantalón a la vez que bajaba besando su pecho, arrancando un nuevo y ronco gemido de ChanYeol.
El bajo continuó besando su vientre, cada beso era como una nueva mecha interna para ChanYeol que intentaba controlar su respiración mientras sentía la suavidad de los labios del mayor sobre su piel deshaciéndose poco a poco cada vez que el más bajo añadía la lengua causándole ligeros escalofríos de placer acompañados continuamente por el suave cosquilleo que le producía el flequillo de BaekHyun sobre su pecho. Agarró de nuevo la cintura del pantalón desabrochando lentamente los vaqueros del alto comenzando a tirar para quitárselos.
- Eres un tramposo.- hablaba agitadamente el alto entre suspiros. - Ven aquí.- inquirió.
- No quiero, me gusta lo que veo desde aquí.-dijo terminando de quitarle el pantalón sosteniendo su mirada.
- Te vas a enterar.
ChanYeol cogió al más bajo haciéndolo subir hasta su boca mordiéndole el labio tras besarlo recorriendo su espalda con sus brazos. Lo giró haciendo que quedara debajo de él quitando sus pantalones y ropa interior de un tirón.
- Ahora el tramposo eres tú- habló entrecortadamente mientras ChanYeol atacaba su cuello y recorría todo su cuerpo con sus manos.- desnúdate del todo.- logró decir no sin esfuerzo entre suspiros.
El alto obedeció perdiéndose pronto en caricias, besos, roces de piel, no creía que hubiese ninguna sensación que superara a la suavidad del cuerpo de BaekHyun bajo el suyo, ni mejor sonido que el que producían al unirse junto con sus gemidos y respiraciones ahogadas. Quería recorrer todo el frágil cuerpo de BaekHyun con sus labios, probar cada rincón, memorizarlo y perderse en él, descubrir el sonido que brotaba según qué parte rozara, los diferentes tonos de agudos que era capaz de producirle si besaba, lamía, mordía o tocaba. El tacto de su piel era como rozar el cielo, cálido, suave, su cuerpo pequeño y manejable cubierto de una fina capa de sudor haciendo que su palidez resaltara más, no podía haber mejor visión, pelo alborotado, ojos entornados brillando con deseo, cerrándose de placer, labios hinchados de prominente color rosado entreabiertos soplando suspiros, susurrando su nombre, pidiéndole que no parara, pidiéndole más, y ChanYeol se lo daría sin impedimentos, gimiendo roncamente su nombre en su oído volviendo a juntar sus labios con aquellos que lo llamaban.
- Te quiero Channie.- consiguió articular entre sus labios antes de emitir un largo gemido arqueando su espalda perdiéndose completamente en el placer.
ChanYeol calló sobre su pecho agotado tras soltar un gemido que podía ser confundido con un gruñido del tono tan grave con el que fue emitido. ChanYeol rodó para quitarse de encima aún con la respiración acelerada y el corazón a mil, BaekHyun se acurrucó a su lado abrazándose a uno de sus brazos dejando un ligero beso en su cuello escondiendo seguidamente su rostro en él. Era feliz, era inmensamente feliz.
- ¿Qué has dicho hace un momento?- picó ChanYeol consiguiendo que el más bajo se escondiera aún más en su cuello haciéndole cosquillas con su pelo.
- Ya lo has oído.- se escuchaba su voz ahogada pudiendo ver su rostro completamente rojo.
- Vamos, ¿ahora te da vergüenza? – hablaba el alto con tono de burla y una pequeña sonrisa.- eres un diablillo disfrazado de cachorro adorable.- besó su nuca abrazándose a su cuerpo.- yo también te quiero, quizá demasiado.- añadió en un susurro antes de quedarse dormido.
Solo cuando estuvo completamente dormido BaekHyun fue capaz de repetirlo acurrucándose en su regazo, ya no volvería a sentirse solo, se sentía amado por primera vez por ser él mismo y no podía sentirse más feliz.