Algunos das ms pasaron de una forma bastante tranquila, las cosas para Kyo y Hide parecan suceder en un ambiente tranquilo y pacfico, como si desde ahora nada que los alterara fuera a suceder. Primeramente la relacin entre ambos mantuvieron un clido color rosa, o al menos eso pareca, y de igual manera la estrecha amistad entre Hide, Sakura, Tetsu y Ken se mantuvo en ptimas condiciones, despus de todo, ninguna nimiedad sera capaz de destruir una hermandad como la que ellos tenan. Sin embargo Kyo segua muy intranquilo respecto a sus sentimientos... despus de todo, si su novio se trataba de un chico con tan desagradable aspecto, por qu senta esa rabia cuando ste se iba con sus amigos, por qu senta su sangre hervir cuando alguno lo abrazaba, y por qu en su estmago una sensacin desagradable burbujeaba cuando Sakura lo defenda de l con esa fiereza que ninguno de los otros dos posea, como si lo celara, como si estuviera defendiendo a su mayor tesoro, siendo que Hide le perteneca...adems eso, ese tipo de pensamientos slo lo confunda ms, cada vez sus sospechas de que senta celos eran ms fuertes, pero no quera admitirlo, no poda, pues hacerlo significara una humillacin muy grande, sera como admitir su derrota, declarndose la presa y no el cazador.
–Kyo estas bien? Desde hace un tiempo que te hemos notado bastante extrao, ests pensativo, ausente...el plan est marchando bien no?
–Marcha excelentemente bien, todo va de acuerdo a como lo plane... es slo que desde un tiempo para ac me siento muy extrao, como si no fuera yo mismo.
–Ha pasado algo extrao que quieras contarnos?
–Definitivamente ha pasado algo, pero no se los quiero contar, les parecer an ms raro pero es demasiado personal como para decirles.
–Comienzas a asustarnos Nishimura.
–No tienen por qu...as que si me disculpan, debo buscar a mi novio para almorzar juntos.
No dijo nada ms, tan slo se puso de pir de su asiento para as ir en busca de su pequeo pelinegro, pues sin saber en qu momento ste desapareci repentinamente, al igual que sus amigos, y supuso que era obvio pensar que estaba con ellos, por lo que sera ms fcil buscarlos como grupo. Finalmente logr encontrar a su pareja, se encontraba en medio del patio, bajo la sombra de un rbol bastante grande, sin embargo no estaba en compaa de sus tres amigos, sino slo con Sakura, quien le rodeaba los hombros por el costado, y el ms bajo apoyaba la cabeza en uno de los ajenos, abrazndolo de igual manera por el costado; verlos as le haba molestado, de nuevo esos inexplicables celos que an se negaba a admitir, segua sin entender qu le molestaba tanto de que abrazaran as a su novio...por lo tanto estuvo a punto de acercarse a separarlos, cuando escuch algo bastante interesante que le hizo detenerse detrs de un rbol cercano para poder escuchar la conversacin sin ser visto.
–Hoy se cumplen aos desde ese suceso verdad Hide...por eso ests tan desanimado –era cierto, l mismo ya haba notado que su pequeo novio no tena la energa de costumbre, estaba bastante apagado, se dio cuenta cuando no lo abraz y bes con esa euforia que lo caracterizaba, cosa que le extra, y que en cierto modo se qued esperando que ocurriera.
–S...ya pasaron tres aos ya desde que...l, sali de mi vida de esa manera tan cruel... sigues pensando que Kyo sera capaz de hacerme lo mismo?
–No lo s, yo quiero pensar que no, pero lamentablemente sabes que no confo en l, sin embargo esta vez yo estoy contigo enano y te juro que si se atreve a algo siquiera semejante lo mato a golpes, por encima de tus splicas de que no lo haga, con algo as te aseguro que no me detendra –algo por lo que no se detendra muy por encima de las peticiones de Hide para que no lo golpee? Eso s que lo intrigaba, se tratara de otro secreto del chico de anteojos que l desconoca? Ya estaba harto de que le ocultaran tantas cosas, no soportaba ms esa posicin de ignorancia, se trataba de su pareja, se supona que con l no deba tener secretos.
–Yo...de verdad espero que no sean esas sus intenciones Sakura...me morira de tristeza si alguien quisiera usarme de nuevo como su juguete...
De nuevo como su juguete...sas haban sido sus palabras, pero entonces eso quera decir que anteriormente alguien ya lo haba hecho, se habra tratado de un plan como el suyo? Eso no poda ser posible, sonaba a demasiada coincidencia, adems nadie ms pudo haber ideado un plan siquiera parecido al suyo...definitivamente deba idear algo para lograr que Hide se sincerara ms con l.
La solucin no fue tan difcil de encontrar, siendo l un genio en encontrar soluciones para todo, y en poner a trabajar su malvola mente en cuestin de segundos. El sbado de esa semana era 29 de marzo, y segn sus averiguaciones el chico de braquets haba cumplido aos el 29 de enero, exactamente dos meses antes, en un da que se supona que a l no le importaba, por lo tanto poda usarlo de excusa para planear una noche especial. Su argumento sera que se senta, en cierta forma, culpable porque no haba podido celebrar su cumpleaos junto a l, ya que en ese entonces no tenan una relacin ms que de vctima y verdugo, pero que sin embargo esta vez deseaba preparar algo especial, no slo para l, sino para los dos, pues se merecan una noche a solas, lejos de todos los problemas que anteriormente los haban agobiado. No le cost nada convencer al pelinegro de no pasar ese sbado junto a sus amigos, ellos tres haban sido el verdadero problema, no obstante con un poco de la persuacin adecuada, todos accedieron a posponer su importante reunin. Pasaron dos das ms del mismo modo tranquilo, de manera que el sbado lleg bastante rpido; para Kyo fue un poco difcil planear una velada romntico, teniendo experiencia nula en esas cosas, pero finalmente plane algo que segn sus expectativas, sera del gusto de su pareja. Sus padres haban salido de la ciudad por una semana, y por lo tanto tendran la casa para ellos solos, convenientemente; haba dispuesto arreglos de rosas por doquier, rosas, rojas y blancas, un semi-crculo de blandos cojines se encontraban justo enfrente de la chimenea, mientras el comedor, con dos lugares bien colocados, se adornaba con ms rosas y algunas velas, mientras que ms velas y ptalos de rosas marcaban un camino desde la puerta principal hasta la mesa. La cena era algo especial tambin, de igual manera que el postre, el cual haba sido lo nico que haba preparado l mismo, pues la cocina definitivamente no era uno de sus puntos fuertes; se haba arreglado lo mejor posible, despus de todo deseaba impresionar a su novio. Un traje negro con una camisa blanca semi-abierta del pecho y unos zapatos del mismo color conformaban su vestuario, y se senta bastante seguro esa noche, senta que realmente conseguira lo que quera, tal vez incluso ms...y tras un momento sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando el timbre de la puerta se hizo sonar, por lo cual rpidamente apag las luces elctricas que seguan encendidas, se asegur de que las velas estuvieran encendidas, y se ech un ltimo vistazo en el espejo que reposaba en la pared junto a la puerta, la cual abri despus de comprobar que todo estaba en orden, sin embargo lo que vio lo dej impresionado. No estaba seguro de si era su imaginacin, la falta de iluminacin o si de verdad exista lo que vea; el pelinegro luca diferente, an llevaba sus terribles gafas anticuadas y sus braquets, pero en lugar de la coleta con la que siempre recoga su cabello, sus cabellos, esta vez bastante ms cortos, caan hasta la mitad de su frente, y como una cascada por su cabeza y nuca, adems el traje gris que llevaba puesto no era un mar de tela como acostumbraba a usar su ropa, sino que estaba un poco ms ajustado, dejndole ver que posea una cintura muy estrecha y unas piernas para nada despreciables.
–H-Hide... en verdad eres t? Te ves diferente...
–S-s Kyo, soy yo... te gusta? Ayer por la tarde me cort el cabello y bueno...tom este traje del vestidor de mi padre, aunque an me queda un poco grande, no est tan flojo como suelo usar mi ropa pero...quera algo ms apropiado...y mejor dejo de hablar ahora...–susurr lo ltimo con un fuerte sonrojo en sus mejillas, se senta bastante apenado al haber hablado tanto y tan rpidamente, reaccin que provoc una inconsciente sonrisa enternecida de parte del ms alto.
–Tranquilo no pasa nada...y respecto a lo otro debo decir que te ves muy bien, te sienta bien el cabello as... ah! Pero qu grosero soy, pasa por favor –con una sonrisa en los labios, se hizo a un lado en la puerta para que pudiera pasar, con lo cual el sonrojo que anteriormente coloreaba su rostro se hizo ms intenso, y una amplia sonrisa emocionada se dibuj en sus labios.
–Kyo...esto es muy hermoso... en verdad preparaste todo esto para m? –Tras decir aquello se volte sobre su propio eje para poder encarar al rubio, el cual se sonroj muy levemente al verlo, esa expresin de plena felicidad, esos brillantes ojos llenos de ilusin...fue algo increblemente provocador el verlo as, por lo que no pudo resistirse a tomar su rostro entre ambas manos para as besar suavemente sus labios, acariciando sus mejillas con los pulgares mientras el ms bajo aferraba ambas manos a la espalda ajena, correspondiendo de inmediato al beso con la misma ternura.
–Claro que es para ti, no podra haber preparado esto para nadie ms...as que anda, vamos a cenar.
Tras dejar otro beso sobre los labios ajenos, ms breve esta vez, lo volte para poder abrazarlo por detrs y guiarlo hacia la mesa para disponerse a cenar; por supuesto la cena la haba comprado hecha, en una cantidad mayor, pues estaba enterado del gran apetito que el chico de cabellos azabache posea, lo cual le pareca gracioso, despus de todo, la primera vez que lo llev a comer casi le dio un infarto de la impresin al ver las cantidades exorbitantes de comida que ste consuma. La cena se llev a cabo segn lo planeado, en medio de una amena pltica entre ambos, algunas bromas de vez en cuando, carios, pero sobre todo, siempre con una sonrisa de parte de los dos. Kyo cada vez se senta ms cmodo en compaa de Hide, realmente disfrutaba de estar con l y s, eso s era capaz de admitirlo, despus de todo, lo que comenz como una titnica tarea se convirti en una cmoda cotidianidad que empezaba a disfrutar genuinamente. Al terminar de comer, ambos se dirigieron a la chimenea para tomar asiento sobre los cojines que estaban alrededor de sta; el postre para cerrar con broche de oro aquella cena, era fondue de chocolate, para lo cual el rubio prepar fresas, rebanadas de pltano y bombones.
–Y...qu te pareci la cena lindo, espero que todo haya sido de tu agrado.
–Lo fue...y te lo agradezco, he pasado una noche maravillosamente perfecta.
–Yo tambin...aunque lo admito, lo mejor de la velada fue tu compaa –con una sonrisa bastante clida, llev una mano a acariciar la mejilla del contrario, provocando que ste se sonrojara cuando sinti sus labios reclamarle un beso– Hide...hay una pregunta que me gustara hacerte.
–Una pregunta? Pues claro...dime.
–Yo s que ese secreto que t y tus amigos comparten es muy preciado para ti, que tu lealtad hacia ellos no te permite contrmelo pero...adems de se... tienes ms secretos?
–E-eh? P-por qu esa pregunta ahora...–comenzaba a ponerse muy nervioso, y la tensin en su expresin revelaba la incomodidad que senta con esa cuestionante, pero cmo podra evadirla.
–Espero que no te molestes pero...el otro da los escuch a ti y a Sakurazawa hablar de lo que aparentemente es un secreto muy doloroso para ti...s que tus amigos dudan mucho respecto a m todava, pero t has demostrado que confas en m as que, por qu no confiar en m lo suficiente para contrmelo.
–No es falta de confianza, Kyo...–fue extrao, de un momento a otro esa mirada tan llena de brillo que comenzaba a admirar, desapareci, para esta vez mostrarle una sombra que incluso a l le transmiti su dolor– esa parte de mi pasado es la ms dolorosa de todas...se trata de un chico que me lastim demasiado...ms que t cuando me golpeabas, me insultabas y me tratabas como basura, ms que Ruki cuando me rebaja al peor nivel como si tuviera lepra, ms que cuando me dijo framente que me muriera para hacerle un favor al mundo, lo que l me hizo fue algo tan desalmado que no dejo de recordar con dolor y tristeza cunto dao me hizo...
–Pero Hide...si es as de grave...yo deseo saber para poder apoyarte, por favor no me dejes fuera de tu vida, cuntame como lo haces con tus amigos.
–Bueno...este secreto es algo que solamente Sakura sabe...
–Ms a mi favor, si eres capaz de contarle a l, por favor cuntamelo a m, soy tu novio yo te quiero y deseo saber todo de ti para apoyarte.
–Slo si me prometes que nadie lo sabr...–mantuvo el rostro desviado mientras hablaba, apenas en un susurro pues senta que si vea al ms alto, se arrepentira de hablar al respecto.
–Te lo juro por mi vida, y por nuestra relacin que es lo ms sagrado para m.
–Bueno...–hizo una pequea pausa para respirar profundamente un par de veces antes de continuar– hace tres aos, estando en ltimo ao de la escuela secundaria lo conoc, an recuerdo claramente su nombre...Takano Makoto...l era un chico bastante apuesto, y muy popular en realidad, podra decir que ms o menos como t, aunque su nombre estaba lejos de aparecer en el cuadro de honor, por lo tanto sa fue su perfecta excusa para acercarse a m. No sola molestarme como los dems, pero hasta entonces me evitaba...y bueno convivimos por unas semanas despus de que acced a ayudarlo con las tareas, lleg conmigo llorando porque supuestamente sus padres lo mataran a golpes si reprobaba como siempre, por eso no pude negarme. Luego de un tiempo, dijo estar muy agradecido conmigo y que por eso comenzaba a sentir algo por m as que al decirme eso, empez digamos a tratar de conquistarme, lo cual lamentablemente logr al poco tiempo...
–Y...qu pas cuando te conquist –habl despacio para no perturbarlo o asustarlo.
–Me entregu a l, le entregu mi primera vez como jams pens que sucedera...y estaba muy feliz hasta que...hasta que descubr que slo me conquist...hasta lograr que me acostara con l...por una maldita apuesta...
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