~FLASHBACK~
–Chicos sigo inseguro al respecto… estn completamente seguros de que esta locura funcionar? An podemos slo quedarnos aqu y fingir que fuimos al baile –Hide, que an no estaba convencido de lo que estaba a punto de hacer, segua tratando de insistir para que dejaran de peinarlo, maquillarlo, y hacerle mil cosas ms para cambiar su imagen, aunque tampoco poda entender todava cmo se haba dejado convencer de hacerlo.
–Hide por favor deja de quejarte, desde hace tiempo queramos hacer esto para que por fin nos creyeras cuando te decimos que no eres feo, as que ahora que te convencimos no dejaremos que te eches para atrs.
–Es que me pone nervioso pensar en qu tanto me estarn haciendo, llevan todo el da arreglndome…eso debera demostrar la titnica tarea que es lograr que me vea decente por lo menos…
–No seas bobo Hide que no se trata de eso, lo que pasa es que queremos que luzcas espectacular…y para ello debemos sacarle todo el provecho a tu atractivo…aunque de hecho…–comenz a decir el chico castao tras acomodar el ltimo mechn de cabello de su amigo, mientras con los otros dos se alejaba un par de pasos para ampliar su campo visual y observarlo por completo, claramente muy satisfechos– hemos terminado, y creo que hablo por todos cuando digo que esta imagen supera nuestras expectativas.
–Ciertamente, ahora nada de cuatro ojos, ni nerd, ni ninguno de esos horribles apodos que te decan, a partir de esta noche sers otro.
–No creo haber cambiado mucho…
–Ah no? –Fue lo nico que el, de nuevo, pelirrojo dijo antes de hacer que el ms bajo se pusiera de pie para as llevarlo hasta el espejo, donde ste no hizo mas que mirarse con una sorpresa que rebasaba cualquier otra que pudo haber sentido antes en su vida, no dijo nada debido a su estado tan shockeado, pero lo que su lenguaje facial deca, y sus ojos evidenciando que no dejaba de recorrerse a s mismo frente al espejo una y otra vez eran la suficiente prueba de lo que pasaba por su mente…
~FIN FLASHBACK~
Esa noche iba a ser muy importante, la ms importante del ciclo escolar para la mayora de los estudiantes del tercer ao de la preparatoria, que vean esa noche como el cierre de un ciclo maravilloso, y el inicio de otro an ms importante; fue por eso que el comit del baile se haba esforzado mucho en la planeacin de ste, como en cada ao suceda. Ese ao el tema elegido era “estrellas de rock”, despus de todo el formato elegante era demasiado clsico, y deseaban algo diferente que resultara inolvidable para todos; el baile siempre se llevaba a cabo en el amplio gimnasio, cuyos pisos de madera oscura, dada la ocasin, se engalanaban con un camino hecho de teclas de piano desde la entrada hasta la pista de baile, otro hacia la mesa de bocadillos, y uno ms hasta el escenario, sobre el cual se encontraban la misma batera, bajo y guitarra que vieron en la presentacin de L’Arc~en~Ciel en The fourth avenue cafe. Por otro lado las paredes estaban llenas de mltiples psteres de diferentes bandas, del techo colgaban algunas notas musicales con brillos plateados, y en el centro, una bola de espejos; el ambiente se iluminaba por juegos de luces tenues en tonos azulados, que provocaban una semi oscuridad perfecta para el ambiente lleno de msica bastante animada, la cual lograba exitosamente su cometido, pues haba ya muchos chicos en el centro de la pista bailando felizmente.
Sin embargo cuatro chicos vean esa noche como la culminacin de un plan que marcara muchas vidas; la segunda fase ya haba concluido con la transformacin de Hide, ahora vena la tercera y ms importante, la cual era el motivo por el que haban decidido asistir al baile, y armar todo el plan en primer lugar. Apenas se encontraron frente a las puertas del lugar, las abrieron de par en par para que Hide hiciera una entrada triunfal, con lo que muchos se quedaron callados, inmviles, observando al pequeo grupo que acababa de llegar, en especial a quien lo encabezaba. Los amigos de quien ahora se acababa de convertir en el centro de atencin, sonrieron satisfechos debido a las reacciones que su amigo acababa de provocar; no les sorprenda, teniendo en cuenta lo bien que luca esa noche; el pequeo muchacho por otro lado se senta demasiado extrao estando en esa situacin, su nuevo look, su ropa, todo era muy diferente, tanto que en ningn momento descubrieron quin era. Lo que ms lo descoloc fue recibir esas miradas, siempre lo haba hecho, pero no era como antes, esta vez no demostraban desprecio ni asco, sino asombro y… deseo? En verdad lo estaban mirando a l? Nunca le haban mirado de esa manera, as que cmo poda saber si en verdad se dirigan a l, cmo se senta ser observado con deseo.
–Muchachos… acaso hay algn chico muy guapo detrs de m? –Pregunt el ms bajo, bastante intimidado por las miradas que se posaban sobre l, pasando saliva para tratar de deshacer el nudo en su garganta.
–No…no seas bobo, te estn mirando a ti Hyde.
–No estoy acostumbrado a que me vean as…momento… Hyde? –Repiti para que le confirmaran que se referan a l.
–As es…no podemos llamarte por tu nombre porque se daran cuenta de todo antes de tiempo as que sers Hyde…como en “El extrao caso del doctor Jekyll y mister Hyde”, como es tu novela favorita.
–Lo s pero…rayos esto es demasiado extrao…
–Tranquilo hombre, slo reljate, te ves hermoso…as que un cambio de actitud tambin sera apropiado, deberas actuar seguro de ti mismo, y si pareces un tanto arrogante sera de mucha ayuda.
–Har lo que pueda pero no prometo nada.
–Bueno yo los veo en un rato ms, ir a ver a Yuki –canturre el alto castao mientras se separaba de su grupo de amigos para ir a encontrarse con su pareja, quien no estudiaba en el mismo instituto, pero que haba quedado de llegar a esa hora, por lo que se dirigi a la puerta para esperarlo.
–Creen que Ken vaya en serio por fin?
–Sera difcil de imaginar…pero sera genial –comenz a hablar Sakura mientras pasaba cada uno de sus brazos alrededor de la cintura de sus dos amigos que se encontraban a sus lados– as no se sentir solo cuando nosotros hagamos nuestro tro…
–Sakura! –Exclam Hyde sonrojndose de golpe mientras trataba de apartar al ms alto, pero en lugar de eso slo recibi un beso juguetn en la frente y una risa sonora del chico de plataformas.
–Vamos Hyde no te pongas as slo bromeaba, verdad panda.
–Claro…cmo crees que yo incluira a esta banana rosa gigante en mi cama…en todo caso mejor le busco un novio y t y yo nos quedamos solos –respondi con una fingida expresin seria, para despus rer casi a carcajadas tras recibir un golpe en el hombro de parte de un ceudo pelirrojo– pero qu sensible eres Ogawa, como si de verdad quisieras conmigo…en fin, yo tambin me voy por un rato, tengo que hablar con los profesores y el presidente del consejo estudiantil para hacerles saber de la situacin, los busco en un rato ms –tras terminar su discurso, revolvi el cabello de sus dos amigos antes de caminar entre la multitud para alejarse.
–Nos vemos Saku…–deca viendo a su amigo irse, con un leve puchero, no era que no se sintiera bien con Tetsu, sino que prefera estar con sus tres amigos, eso siempre le haca sentir ms seguro; el pelirrojo se dio cuenta y lo abraz por el costado con una tierna sonrisa, besando despus su mejilla.
–Tranquilo enano, todo va a salir bien no tienes de qu preocuparte.
–Confo en ustedes pero no puedo dejar de sentirme nervioso… me das un momento Tet-chan? Quiero ir al bao…y no, no necesito compaa –agreg sonriendo divertido al ver lo que su amigo trataba de responder.
–Bueno, te esperar junto a la mesa de bocadillos, as bebemos algo cuando vuelvas s?
El ms bajo slo asinti como toda respuesta antes de dirigirse a donde haba dicho; fue un gran alivio para l encontrarse a solas por un momento, estaba abrumado por tener todas esas miradas encima, a pesar de que la velada apenas comenzaba. Se tom un par de minutos para volver a mirarse detalladamente en el espejo, analizando su imagen por completo; comenzando por la parte inferior de su cuerpo, llevaba un pantaln negro de cuero bastante ajustado y unas botas del mismo color hasta las rodillas. Un poco ms arriba, una camisa azul marino cubra su torso, dejando parte de su pecho al descubierto, al igual que sus antebrazos gracias a que estaba arremangada hasta los codos, encima vesta un chaleco del mismo material de su pantaln, sus manos se cubran por unos guantes sin dedos de un azul ms claro y su cuello se adornaba con una cadena cuyo dije en forma de alas de ngel era lo nico que cubra su pecho; finalmente su cabello, en el cual se distinguan un par de mechones blancos a los costados, estaba perfectamente planchado, y sus ojos estaban ligeramente maquillados con un delineador negro.
–No parezco yo…
Susurr para s mismo, a pesar de que nadie estaba cerca para escucharlo, y tras apoyar las manos sobre el lavabo, inclinndose sobre ste en medio de un profundo suspiro para buscar calmarse, se acomod la ropa justo antes de volver a salir, volviendo a ponerse su mscara de seguridad y presuncin mientras caminaba por entre la multitud. No obstante, al hacerlo accidentalmente choc con un chico que no le haba visto antes debido a lo adentrado que estaba en el lugar, pero que en definitiva habra deseado no ver mientras estuviera a solas. De inmediato lo reconoci, su estilo era nico, desde sus pantalones de mezclilla oscura muy ajustados, adornados por dos cinturones, uno negro con remaches y otro blanco con una gran hebilla ovalada, botas negras de cintas, una camisa negra con slo la mitad de los botones abrochada y las mangas dobladas hasta los codos, unas cuantas pulseras y un collar negro de picos blancos…sin duda luca muy bien, en especial con su nuevo peinado; el cabello de sus costados estaba ms corto, y el resto en un peinado alto. El pelinegro hizo uso de todo el poder mental que posea para no quedarse en shock al verlo, ms atractivo, pero ms prohibido que nunca.
–Disculpa…–fue la nica palabra que sali de los labios de aquel chico, rubio y ms alto por apenas un par de centmetros, antes de entrar en un coma mental una vez que pudo observar bien a la persona con quien haba chocado.
–No hay problema…–tan slo le dedic una mirada llena de una falsa altanera mientras pronunciaba esas tres palabras antes de retomar su camino hasta la mesa.
No obstante el chico de cabellos ms claros se qued un momento en silencio, sin mover un solo msculo, observando al ms bajo alejarse hasta perderse entre la multitud; tard otro par de minutos ms para reaccionar del shock en el que estaba sumido, y aunque no poda sacar de su mente la imagen de aquel chico tan hermoso, sali corriendo de su lugar, olvidndose por completo de la bebida que se diriga a buscar.
–Chicos! –Exclam el lder de aquel pequeo grupo, quien lleg corriendo a reunirse con sus amigos, con una sonrisa boba en los labios, demostrando una sorpresa que no poda borrar de su expresin.
–Kyo? Qu te pasa…y dnde est la bebida que me prometiste –el primero en hablar fue Toshiya, pues reclamaba por algo que su amigo haba dicho que iba a llevarle.
–Eso no importa Toshiya, puedo traerla luego…es que…estoy tan impresionado que casi entro en shock…acabo de tener una visin, la ms bella que jams haba tenido…
–Visin? Entonces no fue algo real? –Esta vez intervino Die, con una sonrisa un tanto divertida debido a la situacin.
–No lo s…yo quiero pensar que s…tropezamos, me disculpe, l slo dijo que no haba problema, me mir y se fue de nuevo…
–Y se puede saber qu viste?
–Era un chico…un hermosamente angelical chico…era ligeramente ms bajo que yo –al decir aquello mantuvo la mano a la altura que percibi que tena– pelinegro, ojos oscuros, nariz respingada, piel bastante blanca y aterciopelada, labios gruesos y mordibles…no me alcanzan las palabras para describir tal grado de belleza, me siento flechado…–deca en medio de un profundo suspiro sin borrar su sonrisa, quedndose despus inmvil mirando a la nada, tratando de volver a recordar el rostro que acababa de describir.
–No suena a nada extraordinario Nishimura –mencion molesto el alto pelinegro, con los brazos cruzados sobre el pecho mientras observaba al aludido, y a pesar de que luca evidentemente celoso, quien provocaba aquella reaccin no se dio cuenta.
–Para m lo fue, en mi vida vi belleza sin igual…
–Y qu hay de tu querido nerd, eso quiere decir que lo olvidaste?
–Por supuesto que no… y no es igual as que cllense! Si me permiten ir a buscarlo, me gustara conocerlo a decir verdad…
Antes de que pudieran detenerlo, se alej una vez ms de sus amigos para as dirigirse a buscar a su aparicin, sin siquiera saber con seguridad si era real o slo una alucinacin de su abrumada mente. Mientras aquello suceda, el chico que resultaba el tema principal de la conversacin que aquellos chicos mantenan lleg al encuentro de su pelirrojo amigo con una expresin bastante nerviosa, lo cual le dej bastante sorprendido y preocupado.
–Hyde? Qu te ocurre, luces nervioso…
–Me top con Kyo…choqu con l cuando sala del bao…
–Pero qu pas, te dijo o te hizo algo? Te reconoci?
–No…pero su mirada…me vio de una manera tan profunda que casi me hizo temblar…
–Tranquilo enano –respondi mientras rodeaba a su amigo de manera protectora para tratar de tranquilizarlo– no pas nada as que no tienes por qu ponerte as, t sabas que exista el riesgo de encontrrtelo as que mantente tranquilo y sigue con el plan, que te vean seguro.
–Pero qu har si se me acerca antes de tiempo…
–Actuars de forma natural, como si no te afectara el verlo…por cierto hace un momento Sakura me mand un mensaje, estars bien si te dejo solo? Necesita hablar solamente conmigo.
–Bueno…no quisiera, pero comprendo as que ve, te esperar aqu, no quisiera meterme en la multitud yo solo.
–Tranquilo, Ken an est por ah, si ests en apuros llmalo, ser quien llegue ms rpido creo –con una sonrisa tranquilizadora y un beso en su frente de su amigo, se retir l esta vez para buscar a su amigo bicolor.
Hide mientras tanto se dedic a beber un poco de ponche del tazn que se encontraba en el centro de la mesa de bocadillos, buscando calmar sus alterados nervios; lo cual haba funcionado momentneamente, hasta que una vez ms observ al rubio, causante de sus mayores problemas emocionales, acercndose hacia l. Aparentemente buscaba algo o alguien, hasta que se dio cuenta de que lo miraba, hacindole entender que era l al que buscaba, por lo que se dirigi directamente a su encuentro; pero no le habl de inmediato, sino fingi que su objetivo era beber un poco de ponche.
–Est rico el ponche no te parece? –Mencion sonriendo amablemente.
–S, algo –fue la nica respuesta que sali de sus labios, con aparente apata.
–No eres de este instituto verdad, nunca te haba visto.
–No, soy pareja de alguien.
–Ah s? Puedo saber a quin? Conozco a todos los estudiantes del ltimo ao.
–De verdad te importa con quin he venido?
–A decir verdad s, muero de curiosidad de saber si es tu novio.
–Pues no veo por qu tendra que importarte, ahora si me disculpas ir a buscar a uno de mis amigos –respondi, comenzando a caminar para alejarse, pero antes de hacerlo por completo una mano le detuvo del brazo.
–Por favor no te vayas, no me has dicho tu nombre.
–Mi nombre tampoco te importa, as que te pido que me sueltes.
–Me llamo Kyo…bueno, Tooru, pero todos me llaman Kyo.
–Yo no quera saber tu nombre.
–Pero como ya te lo dije, debes decirme el tuyo, o acaso eres un grosero? No pareces ese tipo de persona.
–No puedes hacer conclusiones sobre m, no me conoces, as que te repito, sultame o lo vas a lamentar.
–No me das miedo, qu podra hacerme un chico con carita tan angelical como t.
–No me hables con tanta familiaridad –luego de ver que no le soltaba, se gir para tratar de abofetear al ms alto, sin embargo ste le detuvo por la mueca, mirando fijamente aquellos ojos color chocolate, quien le sostuvo la mirada, frunciendo el ceo.
–Qu pasa lindo, por qu me miras as.
–No me llames as, nadie te dio permiso de tocarme as que sultame!
–No quiero…–justo cuando estaba a punto de decir algo ms, Tetsu regres, y al notar lo que suceda con su amigo, termin de acercarse bastante enfurecido, pero tratando de que no se notara, agradeciendo que no hubiera sido Sakura quien viera aquello primero; al estar lo suficientemente cerca, oblig a Kyo a soltar a su amigo para alejarlo.
–Perdn Nishimura pero se puede saber qu demonios tratas de hacer al tocar de esa manera a mi novio? –Haba hablado sin pensarlo, pero ya no poda retractarse.
–Tu novio…? –Cuestion a manera de respuesta aunque muy sorprendido, tanto como Hide, pero l deba fingir para no evidenciar que era mentira.
–As es, mi novio –tras responder, acerc al ms bajo a s mismo para tomar sus mejillas y besar sus labios, sin mover los propios, slo haciendo presin, lo suficiente para hacer que la sorpresa de Kyo fuera mayor, y un sonrojo tiera las mejillas de Hide.
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