Haba transcurrido un mes desde que los seis muchachos regresaron de la playa a donde viajaron para pasar sus dos ltimas semanas de vacaciones, mes durante el cual la vida de todos sigui un curso tranquilo y normal, sin demasiadas exaltaciones. Fue extrao, el pensar que antes del regreso de Tōru Nishimura, las vidas de los cuatro msicos parecan sumidas en un estado perpetuo de calma, sin acontecimientos extraos, ni emociones tan fuertes como las que hubieron experimentado en diversas ocasiones desde que volvieron a encontrarlo, y a pesar de que la situacin no poda dejar de infundirles miedo, era un cambio que deban aceptar, despus de todo, qu ms podan hacer Sakura, Tetsu y Ken en ese caso, si su querido amigo Hide luca ms feliz desde que recuper al amor de su vida, y arrebatarle su felicidad era algo que no podan siquiera pensar. El castao de baja estatura haba mostrado una pronta recuperacin durante su estancia en la playa, y a esas alturas, el accidente que haba sufrido era un asunto casi olvidado.
No obstante Kyo no poda decir lo mismo respecto a olvidar un suceso que estuvo a punto de arrebatarle al ser que ms amaba en el mundo, despus de todo, luego de vengarse de los responsables de ello, estaba seguro de que el asunto no quedara completamente zanjado de la forma en que l haba dejado las cosas. Conoca bien a Toshiya, y el miedo por su siguiente movimiento en contra de su amado y de su hijo, le motivaba a apresurar los planes que, hasta el momento solamente eran fugaces ideas a medias, pero fue as como, igual que una revelacin divina, la respuesta lleg a su cabeza de forma repentina, como si siempre hubiera estado ah y l solamente deba sacarla de su escondite. …l ya lo saba, siempre lo supo, que su familia no era el modelo de perfeccin que sus padres se esforzaban por hacer parecer, pues muy dentro de ella, en ese ncleo que slo alguien que formaba parte de ella poda ver, se guardaban secretos que nadie se podra siquiera imaginar, debido a la imagen que tenan de ellos, y por algn motivo los haba olvidado, a pesar de saber algunos que podran causarle serios problemas a su padre. Fue por ello que durante ese mes se haba dedicado a recaudar todo lo necesario para que lo que l saba, no quedara como un simple invento de un muchacho desesperado, algo ante lo que, sin importar las dificultades que representaba, no se rindi en ningn momento, pues de ello dependa su futuro. Durante ese tiempo se mantuvo un poco esquivo con Hide y cualquier persona que le pudiera distraer de su objetivo, hecho que comenz a levantar las sospechas en el castao, pero saba que si le contaba demasiado, poda ponerlo en un severo problema, si no aseguraba antes que todo su plan marchara como lo plane. Desafortunadamente, l no era la nica persona que se encontraba diseando planes que le ayudaran a conseguir su objetivos, por lo que, aparentemente, la vida les pondra una prueba ms antes de que l y su amado lograran estar juntos como tanto lo deseaban.
Una maana que comenz como cualquier otra, Hide sali de casa junto a su hijo, a quien llevaba dentro de su carriola, pues de esa manera le pareca ms cmodo. Se dirigieron a un parque en las cercanas de su hogar, solamente para pasar un rato fuera de casa, una costumbre que siempre haba tenido, pues le encantaba la naturaleza, respirar aire limpio, como si de esa manera se apartara completamente de cualquier tipo de preocupacin que lo rodeara. Cuando se encontraron en el parque, se acomod sentado sobre una banca, a la sombra de un frondoso rbol de cerezo, cuyas flores dejaban ir sus ptalos debido a la ocasional brisa que agitaba sus ramas, provocando que de ese modo, algunos de esos rosados ptalos, aterrizaran sobre el rostro del castao y del pequeo beb que miraba todo a su alrededor, con una mirada completamente llena de curiosidad, y algunas risas tiernas, producto de la emocin que todo le causaba. Pasaron solamente un rato, cuando el muchacho comenz a sentirse incmodo en el lugar en el que estaba, quizs producto del poco movimiento que se vea en el parque ese da, algo que no ocurra con frecuencia y por lo tanto, le produjo la enorme necesidad de volver a casa. El infante cay dormido apenas unos minutos antes, por lo que sin dificultad alguna, se puso de pie de su lugar, y as emprender el camino de regreso; sin embargo, cuando le faltaban slo unos metros para terminar de recorrer la longitud del parque, un hombre mucho ms alto que l, sali prcticamente de la nada, para acercrsele por la espalda, con un trozo de tela hmedo en la mano, el cual coloc sobre su nariz y su boca, asegurndose de que aspirara el olor penetrante que el lquido con que moj dicha tela, emanaba. Cuando qued inconsciente, el hombre que le haba provocado tal estado, lo tom en brazos, justo como ahora haca su cmplice con el beb y sus cosas, cuidando que no despertara, pues as no tendran tener problemas con un beb llorando. La carriola se qued en ese sitio, abandonada en medio de la calle, pues no tenan mucho tiempo para hacerla entrar en el auto que les esperaba a slo unos metros, y al cual subieron en seguida para dirigirse al lugar donde les haban ordenado que mantuvieran encerrados. Sus instrucciones eran, al menos por el momento, no hacerles dao, en especial al beb, de modo que procuraran que durante el transporte, y la llegada al escondite, ninguno fuera tratado con demasiada rudeza. Una vez que llegaron al lugar indicado, bajaron nuevamente del vehculo, para que sus nuevos “huspedes” fueran instalados adecuadamente, en el interior de una bodega que, estaban seguros, nadie visitara, y donde ya se encontraban las personas que los contrataron, esperando por ellos, con bastante impaciencia adems, pues ya haban planeado que los llevaran antes a ese lugar, pues deban salir de ese lugar lo ms pronto posible, para as evitar cualquier posibilidad de que les vieran en los alrededores de ese sitio.
Otro lapso de tiempo transcurri desde el momento del secuestro, hasta que los amigos de Hide se dieron cuenta de su, inusualmente larga ausencia, por lo que se empezaron a sentir muy angustiados. Despus de haber marcado infinidad de veces al telfono mvil del ms bajo, sin obtener ningn resultado, comenzaron a buscarle en los alrededores, pero cul fue su sorpresa cuando llegaron al parque donde su amigo y su beb haban estado paseando, lugar en que se supona que deban estar, y donde inesperadamente se encontraron con Kyo, bastante tranquilo, con una rosa blanca envuelta en celofn en una de sus manos, evidentemente, destinada a su desaparecido amigo. Ese parque era parte del camino al edificio donde se encontraba el departamento en que el vocalista viva con su amigo bajista, por lo que no era demasiado extrao ver ah al joven pelinegro, pero el hecho de encontrarlo ah, solo, les haca descartar de inmediato la posibilidad de que su compaero se encontrara en alguna cita con su pareja.
–Hola muchachos…estaba camino a ver a Hide y Kanade, me parece curioso verlos aqu, pero as aprovecho para preguntarles si l est en casa –comenz a hablar el ms bajo de los ah presentes, con una sonrisa emocionada e ilusionada, la cual se desvaneci al instante, cuando se dio cuenta de las miradas que los dems intercambiaban, pues no le gust nada la angustia que transmitan, misma, que haban comenzado a contagiarle.
–Kyo justamente estbamos pensando en llamarte…es que no encontramos a Hide, dijo que vendra a dar un paseo con Kanade, aqu al parque, pero como nos pareci que se estaba tardando demasiado, le llamamos, no respondi a pesar de las muchas llamadas de telfonos diferentes que le hicimos…
–O sea…me estn diciendo que Hide ha desaparecido… y por qu demonios ninguno de ustedes lo acompa! No saben lo peligroso que es el hecho de que salga a la calle, slo con nuestro hijo como compaa?! Siempre andan pegados a l cuando nicamente estorbaban y ahora que deban estar con l no estuvieron!
–A nosotros no nos puedes culpar por esto Nishimura! –Exclam repentinamente Sakura, al darse cuenta del sentido que tomaban las palabras del menor– acaso crees que eres el nico que se preocupa por Hide? Pues no! Nosotros tambin estamos angustiados y el que t nos culpes no ayuda en nada! …sta no era la primera vez que ellos dos salan a dar un paseo, slo ellos dos…
–La situacin ahora es muy diferente Sakurazawa… qu no ves? Luego del maldito plan del estpido de Toshiya, que ocasion ese accidente que sufri hace unas semanas, qu les hace pensar que l se quedara de brazos cruzados al saber que no consigui lo que l quera… es obvio que buscar terminar lo que ha empezado!
–Entonces todo es culpa tuya! –Intervino esta vez Ken, al mismo tiempo que lo sujetaba por el cuello de la camisa, completamente furioso– ese demente era tu amigo, se supone que deberas poder controlarlo si era parte del grupo de tus perritos falderos!
–Cllate! Yo, a diferencia de ustedes, tro de intiles, he estado poniendo mucho empeo en disear un plan que mantendr el peligro lejos de Hide y de mi hijo, mientras ustedes slo se sientan cmodamente a escribir sus canciones! No pueden culparme por esto…
–Ya basta! –Esta vez, fue el turno de Tetsu de interferir, para que as los dems pudieran tranquilizarse y dejar de lado las rias– qu no ven que estamos perdiendo valiossimo tiempo aqu, con sus peleas, en lugar de buscar a Hide? Nadie tiene la culpa! Ni siquiera sabemos qu es lo que pas, cmo podemos adelantarnos tanto, si todava no tenemos una pista siquiera –por un momento, ninguno dijo nada, saban que l tena toda la razn, que no ganaban nada peleando y culpndose mutuamente, pues como bien acababa de sealar el bajista, ni siquiera saban con certeza lo que haba ocurrido, o una pista que les diera un indicio– se van a comportar como adultos y a pensar con lgica lo que debemos hacer? O debera irme para seguir con la bsqueda yo solo, dejndolos a ustedes aqu, pelendose a sus anchas?
–Perdn Tetsu, creo que estamos muy nerviosos, la angustia no nos deja ver las cosas con claridad…
–Ya lo s, pero por eso es que debemos mantener la calma, creo que deberamos pensar, antes que nada, en qu lugares es posible que est, cualquier cosa aunque parezca algo tonta, puede ser de ayuda.
–Qu lugares han recorrido hasta ahora? –Volvi a hablar Kyo finalmente, ms sereno y centrado en lo importante, que era el objetivo de encontrar a Hide. Tras sus palabras, el alto chico castao estaba a punto de responderle cuando su celular comenz a sonar, y con la inmediata esperanza de que se tratara de su amado, lo sac inmediatamente de su bolsillo, para as responder la llamada que estaba entrando. Sus dedos temblaban, quizs producto de la preocupacin, pero en el interior lo supo, aquel temblor era causado por un mal presentimiento que, para su desgracia, estaba a punto de comprobar– al? –Estaba tan nervioso, que su voz tambin lo demostraba, y se convirti en apenas un hilo de voz.
–Habla Tōru Nishimura? –Una voz masculina al otro lado de la lnea, haba preguntado, slo para asegurarse de que hablaba con la persona correcta, por lo que cuando recibi una afirmativa, prosigui– quiero que ponga mucha atencin, y que no piense en hablar con la polica porque las consecuencias sern graves…tenemos a su novio y a su beb.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español