Margaritas
Eran las 06:08 am exactamente y como todos los días mi entrada secreta era la ventanilla del sótano, que me llevaba directa mente a la puerta que estaba frente a mi cuarto, cruzaba el pasillo tomaba la perilla de mi puerta entraba y por fin soltaba un suspiro, era algo rebelde y bastante desordenado, las clases en la universidad habían terminado ya estaba graduado de veterinaria y yo solo quería divertirme aquel verano, era muy famoso entre las chicas no había fiesta en alguna en que no amaneciera con una de ellas y después de una noche de pasión corría cual cenicienta a la ventanilla de mi sótano, pero aquella mañana jamás imagine el giro que daría mi vida.
- Choi Minho! a tus 24 años haciendo el papel de niño rebelde
- madre! ... - ahora si estaba en problemas, mi madre estaba con los ojos como fuego se notaba que no había dormido en toda la noche realmente estaba molesta y yo lo pagaría
- no diré nada más... ahora te das un baño desayunas y hablaremos seriamente - yo salí como un rayo a darme aquella ducha mientras mi madre en una última mirada que le di, abría mi armario sacando una enorme maleta y mi bolso de viajes que guardaba dentro de ella... ¿que tramara ahora?
me daba una ducha fría porque obviamente mi madre había apagado la estufa... esta loca, deberás que lo está, mis ojos se cerraban solos pero gracias al agua fría no caía de cabeza fuera de la tina.
- Minho! mucho rato llevas en la ducha!
- ok, ok ya salgo! – después de pensar y recordar la de estupideces que pasaron en aquella fiesta, salí de la ducha y me envolví en una toalla y ahora sí que no entendía nada
- ponte esto y esto y rápido !
- mamá... ¿porque llenas el bolso con mi ropa?
- te compre un boleto para que vayas a cuidar la casa de tu abuela, allí pasaras el verano
- ¿Qué… estás loca?
- a quien le dices loca, este es tu castigo!!. Creías que no notaba tus salidas
- aushh no me pegues ! no lo creo ahora si se te paso la mano, la ultima vez me hiciste trabajar en la oficina de partes y esta vez es el colmo – me besti rápido mientras mi madre sentada en la cama solo mi miraba hacia un lado para no ver mi desnudes y no se callaba
- ¿que no te gusta tu castigo? ahora baja a desayunar que el tren sale en una hora, no tienes mucho tiempo y espero que no te pongas caprichoso, por que más encima te vas sin dinero !
- no mamita en serio yo voy! uff dame dinero, yo cuidare la casa de la abuela - bueno no era tan rebelde solo me gustaba divertirme y le temía a mi madre nunca supe negarme a lo que me pedía si no aceptaba un castigo venía uno peor que el anterior.
***** 5 horas después *****
- boletos, joven su boleto !
- ahh! si aquí esta!... disculpe ¿cuánto falta para llegar a Busan?
- solo una hora !
- mmm... gracias !
tenía tanto sueño con ese vaivén que no podía cerrar un ojo por más de 5 minutos, mi celular vibro era un mensaje de mi madre bastante extenso
“Minho la abuela ya está aquí! esta agradecida por qué cuidaras su casa!. Te dejo dinero en sobre su mesita de noche, allí estará Minnie, el cuidara de ti y no seas grosero con él... bay hijo disfruta tu verano, te queremos”
- genial ahora tendré nana, seguro ese viejo me tendrá con los hilos cortos, pero alguna chica podre llevar a la casa sin que él lo note...
mierda ¿otro mensaje?
“no hagas planes. Minnie podrá ser inocente pero no es tonto”
- ahhh !! - grite tan fuerte que las persona que estaban frente a mi voltearon a verme, a veces mi madre me daba miedo como mierda supo lo que pensaba…
- pasajeros al fin la terminal de Busan! - escuche el alta voz y eso me tranquilizo, ya me dio hambre y tengo sueño, gracias a dios… por fin podía bajar de esa cosa mi entusiasmo no era para nada digno de unas vacaciones, sabia o más bien creía que sería el peor de mis veranos...
tome un taxi a la casa de la abuela que estaba a las a fueras, más o menos unos 15 minutos ya tenía 5 años de no venir aquí, cruzamos por un puente de lejos pude ver un campamento de gitanos ,siempre estaban allí en esta época del año, el coche giro por unos árboles enormes y allí se dejo ver la casa de mi abuela. Baje sin prisa después de tomar mi bolso, un perro se me acerco oliéndome entero, ¿desde cuándo la abuela tiene perro?, quise acariciarlo y este me ladro que me hizo dar un salto, el chofer me dio una mirada divertido y se fue, yo seguía allí sin moverme, en un último intento el perro me salto encima haciéndome caer y se apoyo en mi pecho lamiéndome el rostro...
- guacala! no hagas eso baja te! – animal del demonio, este movía la cola creo que le agradaba el hecho de verme indefenso no me dejaba levantar.
- dante !! ven aquí deja a Minho! - aún tendido en el suelo pude escuchar aquella voz tenía un leve acento me sonó melodiosa y algo infantil
cuando al fin pude sentarme pude ver aquella persona y mi quijada estaba a mi lado en el suelo
- ¿Minho? soy Minnie… ¿piensas quedarte en el suelo toda la tarde?, el almuerzo está listo!, ¿estás bien? - un ladrido me saco de mi lujuriosa burbuja, entonces note que la chica me hablaba, era de mediana estatura, cuerpo delgado cabello castaño muy claro y largo, ojos miel podría perderme en su mirada y sus labios eran rojos y gruesos traía en sus manos un jarrón con margaritas recién cortadas
- dios que sonrisa...
- jejejeje ¿te gusta mi sonrisa? – me pregunto ella y mierda eso lo había dicho en voz alta!
- este no, es, que brisa! si eso es que hace calor y esta brisa me refresca, eso jejeje, ahh mm si soy Minho, mucho gusto -le extendí mi mano cuando al fin la tomo pude sentir como se erizaba mi piel y su mano templo su mirada estaba perdida en "mi entre pierna" mierda! que también le saludaba que vergüenza! que manera de presentarme con una erección incluida...
- me, me iré a dar un baño… con permiso! - le dije para al fin salir corriendo dentro de la casa cubriendo aquella parte con mi bolso que cargaba como un bebe de pie, ella solo se me quedo viendo con las mejillas rojas por la vergüenza que le hice pasar, mierda no podía ser tan cachondo, menos delante de una chica que acababa de conocer... espera ¿dijo "Minnie"?¿o sea que ella es?, pero es que no era un viejo o sea tengo nana! y es una chica, jajkajkajka ahora reía como un sicópata mientras me daba una ducha en la planta alta de la casa... el verano estaba comenzando y mi abuela y mi madre me castigaban así... eso estaba raro, pero no perdería mi oportunidad, Minnie realmente es hermosa y aquel acento me enloquecía.
Después de un rato baje hecho todo un galán, Minnie estaba parada en el comedor revolviendo una taza de té que tenía en sus manos, parecía distraída y yo me quede en silencio un momento, ella estaba viendo por el ventanal y la luz entraba por el dándome una mágica vista de ella, ¿realmente podía existir una criatura tan angelical como ella?...
- ¿me esperabas?
- ehh! si enseguida te sirvo el almuerzo!…
- ¿comerás conmigo verdad? - era la 2da vez que le veía sonrojarse y eso me encantaba, dejo la taza de té sobre la mesa y paso a mi lado con la mirada gacha y note que ya habían 2 puestos con sus cubiertos, la ensalada era de apio tal y como me gusta con paltas cortadas en cúbitos y aquel jarrón con margaritas en el centro, su aroma me recordaba a algo pero no tenía claro, que era… y por supuesto que comería conmigo, me senté en la cabecera tratando de ver hacia la cocina ,solo veía su sombra en la pared y su reflejo por la ventana que está a su costado, se movía muy rápido, era curioso hacía mucho ruido por lo visto estaba más nerviosa que yo
- ya esta! hice albóndigas en salsa - ¿mierda como sabe lo que me gusta?
- mm están deliciosas Minnie - sí que lo estaban, su sabor era muy diferente a los que mi madre hacía
tenia un leve sabor a orégano y no le sentí el ajo o es que no le había puesto, sí que estaban deliciosas
- qué bien! - me dijo en voz baja ella comía con gracia era muy delicada, en un movimiento quise tomar un trozo de pan y nuestras manos rosaron sobre la panera, las damas primero le dije y le guiñe un ojo.
- ¿cómo dijiste?
- dije, las damas primero! puedes tomar el pan…
- noo! - me dijo seca, dejo los cubiertos sobre el plato lo levanto y se fue a la cocina, se veía molesta no entendía que pasaba ,entonces me levante para ir con ella
- ¿sucede algo? - Minnie estaba de espalda la tome de los hombros para que volteara, ella no quería verme entonces la tome por la barbilla para ver sus ojos y note que lloraba
- lo siento no debí interrumpir tu almuerzo - me dijo en vos baja
- ¿porque lloras? – le pregunte curioso y sincero realmente me preocupaba, pero algo en su mirada triste me dejo descolocado
- de -de-bo irme hay cosas que no debo dejar para después! - estaba muy nerviosa y se fue ,regrese al comedor a terminar mi comida, ya no tenía apetito la comida no me entraría a la boca por mucho que lo intentara Minnie me había dejado muy preocupado, levante las cosas de la mesa y me fui a mi cuarto ,escuche al perro ladrar, me asome a la ventana y la vi iba al granero con un fardo de alfalfa en sus manos, "era muy fuerte para ser una chica", después de un rato recostado en mi cama pude conciliar el sueño y me quede dormido profundamente.
***** en la noche *****
Cuando por fin desperté note la casa en silencio, me senté en la orilla de la cama y encendí la lámpara era extraño, estaba cubierto con una manta era obvio que Minnie había estado aquí sobre todo cuando de nuevo me asalto un delicioso aroma a margaritas, algo me pasaba mi cuerpo quería reaccionar y recordar aquel aroma, me sentía confundido, entonces pensé que no había nadie ya que no escuche ningún ruido desde que desperté, me levante y baje directo a la cocina Minnie no estaba, salí al patio y di un vistazo a los alrededores hasta donde mi vista llegaba, pero una luz en el granero llamo mi atención, me dirigí allí trate de abrir la puerta pero esta se encontraba cerrada por dentro, suspire derrotado y escuche a Dante ladrar.
- Dante! ¿Pasa algo? - por fin escuche a Minnie, ella estaba dentro, ¿pero que hacía en el granero encerrada a estas horas?
- Minnie! ¿Puedes abrir la puerta por favor? - estaba ansioso no dejaba de jalarla para que se abriera, quería verla.
- ¿que se te ofrece? - me hablaba desde dentro, ¿era idea mía o estaba a enojada?
- ¿no vas abrir? - escuche un silencio, y luego la puerta se abrió, y otra vez me quede como idiota viéndola, su cabello tenia paja enredada y su camiseta estaba torcida un lado dejando a la vista un hombro, entonces note su pecho plano, no tenía mucho busto, pero eso era un detalle me daba igual, luego mire su rostro y la note cansada pero poco me importo y entre serrando la puerta tras de mí, y ella me veía sorprendida.
- yo - yo pensé que no despertarías... por eso me vine a descansar lo siento ahora mismo te calentare la cena – Minnie paso a mi lado para salir, pero no la deje, la tenia atrapada entre la puerta y mi cuerpo mi mano acariciaba una de sus mejillas y con la otra sacaba la paja de su cabello se veía tan hermosa así, tan indefensa frente a mí.
- siento lo de la tarde yo solo quise ser amable no quería molestarte, tal vez no acostumbras que te traten con amabilidad - le dije a centímetros de sus labios casi en un susurro ya que estaba como bobo viéndole a los ojos, sus hermosos ojos miel.
- de - de jame – ir! - trato de soltarse de mi agarre entonces no aguante más estábamos solos en aquel granero y yo no era muy paciente... y la bese, primero Minnie se resistió, tratando de salir de entre mis brazos, pero luego sentí sus manos recorrer mi pecho hasta alcanzar mi cuello acercándome mas a ella "bingo" pensé, esta noche... la haría mía.
- no! - me dijo jadeante mientras yo seguía besándola era delicioso el sabor de sus labios su lengua con la mía danzaban con lujuria en nuestras bocas yo no quería detenerme era como un deja vu ,tenía la leve sensación de haberla tenido antes en mis brazos, pero Minnie estaba muy nerviosa, en un momento corto el beso mirándome de frente como tratando de decirme algo, su mirada era triste, creí que en algún momento la vería llorar
- ¿Minnie qué pasa ? no haré nada que no quieras no te asustes, es que no sé que es, pero me siento muy atraído por ti – en ningún momento deje de acariciar su rostro era tan suave, yo no quería perder detalle de el
- ¿no me recuerdas verdad? – me pregunto su voz temblaba, yo no entendía, ¿porque la tenía que recordar?
- no, lo siento - le dije y ella se alejo de mi paso su mano por su cabello arreglo su ropa y jalo su camiseta hacia abajo cubriendo el "bulto que se asomaba entre sus piernas" (?) en serio esto estaba pasando, ella perdón él noto que lo vi y corrió subiendo por la escalera hacia la paja que estaba arriba
- perdona me! - fue lo último que dijo cuando subió por la escalera
- espera! ¿Eres un chico? ¿Bese a un chico?
- waaaa vete! no quiero verte! – el no dejaba de llorar, tenía un escándalo arriba,veía como la paja volaba por el aire y escuchaba unos golpes que hasta me asuste, parecía histérico y no lloraba gritaba
- Minnie eres un chico! ¿Por qué no me lo dijiste?
- waaaa idiota! porque te lo iba a decir! se supone que sabias que yo estaba aquí! - me gritaba entre lágrimas ,yo seguía abajo sin moverme un centímetro de donde había quedado, pero mis ojos estaban arriba esperando ver a Minnie asomar su carita, siempre había sido un chico y yo me sentía atraído por él
- ¿se supone? ¿Qué debo suponer? – repare en lo que me dijo
- waaaa! tu mismo me trajiste aquí hace 5 años atrás!, eres cruel cara de rana ojona… te odio! - me grito con rabia, entonces lo recordé, solo una persona me llamaba así!
-¿Taemin? - dije en un jadeo, me faltaba el aire no lo podía creer, era él, mi Taemin, mi Minnie el mismo que hice mío hace 5 años atrás, el tenía 14 años y yo 19 lo traje con la abuela porque sus tíos lo habían expulsado por ser huérfano, después de la muerte de su madre y por qué se enteraron de lo que sucedió entre los dos aquel verano
- waaaa vete! – seguía llorando y hasta hipaba
- Taemin… perdóname – le dije con amargura, mi frente sudaba y sentí un frío recorrer mi espalda, trate decir algo más, antes de caer al suelo inconsciente
***** rato después *****
- Minho abre los ojos por favor!
- dios mi cabeza! - fue lo primero que dije para después ver a mi niño con su rostro bañado en lágrimas a mi lado
- ¿estás bien? te diste un golpe muy fuerte, tonto, me asustaste! – Minnie lloraba en mi pecho yo estaba tendido sobre una manta en la paja, por lo visto el no era tan fuerte, y me había movido solo unos metros de la puerta pero estaba cómodo, busque su mirada y el evitaba la mía
-Taemin... ¿me perdonas?
- no entiendo que te paso! ¿Por qué te desmallaste?
- creo que es porque no almorcé, ni cene, además el desayuno me lo salte, no como cuando viajo pues me mareo y me dan náuseas
- tonto ahora es mejor que te pongas de pie te calentare la cena y después te irás a la cama
- Minnie!... – le llame bajito, pero él me escucho
- ¿ehh?...
- quiero que duermas conmigo - era un poco loco lo que le pedía, pero aquel golpe me había despertado de una larga pesadilla y ahora me encontraba viviendo la realidad y estaba ansioso por vivirla con él, pero otra vez le vi triste... en serio Taemin me lo haría difícil y yo no me daría por vencido
- comerás y te irás a la cama y no se diga más que estas débil ! – Minnie estaba muy enojado pero aun así podía sentir la tención sexual en ambos, sus mejillas ardían y no dejaba de humedecer sus labios y lo que más me volvía loco de él era ese gesto incomodo evitando mi mirada, inocentemente lograba excitarme más
- no tan débil como para hacerte el amor! - note como se tenso a mi lado mientras me ayudaba a caminar fuera del granero
- no digas tonterías a mi no me tocaras otra vez!
- pues no cenare! y suelta me!
- Minho! – me llamo enojado, yo me adelante y camine rápido hacia la casa... ni siquiera me di vuelta a verle
- Minho!… Choi Minho! - volvió llamarme ya dentro de la casa me fui directo a mi cuarto frustrado por su rechazo, me senté en la cama pensaría en que hacer, recordé que Taemin me había seguido entonces me puse de pie y grite por la puerta
- no te molestes por la cena... no comeré! - y di un portazo que temí por la puerta en si lograría abrirla otra vez, realmente me molestaba el haber sido tan idiota con Minnie "como demonios no lo recordé, en qué momento dentro de estos 5 años lo había olvidado". Estaba tan metido en mis pensamientos que no lo note entrar y ponerse frente a mí, cuando levante mi rostro el estaba más cerca aún, entonces me puse de pie sin decir palabra alguna, ahí estaba aquella mirada tratando de decirme algo, no sé cómo pero nos estábamos besando otra vez, pero este beso era diferente, era más entregado sin dudas el me amaba suspiraba con cada caricia mis manos recorrían su espalda y mordía su labio inferior para robarle gemidos
- Minho no te detengas! – Minnie estaba invitándome a tomarlo y yo no lo haría esperar pase mis manos por sus nalgas elevándolo, lo lleve a mi cama recostándolo con cuidado, besaba su cuello con insistencia ,pero no quería perder mi cordura con él y volverme una bestia, pero a él no pareció importarle y solo apretaba mis nalgas hacia él, moviéndose bajo mi cuerpo frenéticamente, era tan placentero nuestros miembros se rosaban entre sí, pude sentir su mano abriendo el cierre de mi pantalón buscando la orilla de mi bóxer, hasta que la sentí tibia rodeando mi entre pierna, apretó el glande haciéndome gemir y sonrió encantado y yo seguía como idiota, como era posible que él tuviera el control sobre mí, ya era el colmo no sé como tuve el valor sentía mis piernas temblar pero no iba a quedar mal, me puse de pie quitándome toda la ropa y me acerque a él, tome sus pantalones y se los quite y luego seguí con su camiseta solo estaba con ropa interior, la que no duro mucho puesta, pues se la quite de un tirón, para luego acercarme otra vez como un felino esperando el momento para saltar sobre su presa
- ahh ! Minho! - jadeo al verme atacar su miembro con mi boca, lo envolví con mi lengua degustando cada parte de su extensión mis lamidas eran cada vez más fuertes, Minnie me tenía del cabello enredadando sus dedos en el, yo estaba desesperado por hacerlo venir en mi boca, sentía una necesidad imperiosa de probar de su esencia
- para! por favor! - no escuche su ruego en su rostro veía lo cerca que estaba de mi cometido unas lamidas más y Taemin se vino por fin en mi boca, su sabor era algo entre salado y dulce me lamí los labios goloso sin quitarle la mirada de encima, luego me dirigí a su entrada, abriendo delicadamente sus nalgas como si fueran los pétalos de una flor y comencé a lamer con calma, acariciándola con mi lengua húmeda
- mmm dios es delicioso! ahh Minho sigue! - continué después con uno de mis dedos ,debía prepararlo antes de lo que vendría ,luego el segundo dedo y Minnie aun se quejaba con mi intromisión pero ya con el tercero dentro de él comencé a dar cortas embestidas con mis tres dedos dentro de él y ahora el gemía se movía ayudando se con sus codos apoyado en la cama veía lo ansioso que estaba, y como si nada su miembro despertó otra vez meciéndose al ritmo de sus caderas buscando profundizar más las estocadas con mis dedos
- te gusta ? mmm tengo algo mejor que mis dedos para ti - le dije seductora mente
Minnie se recostó por completo en la cama y cubrió su rostro con vergüenza, avance por su barriga dando pequeñas mordidas hasta llegar a sus pezones y por fin me sentí con la seguridad que necesitaba cuando le vi de frente su mirada estaba perdida en deseo rogándome porque lo hiciera mío quite mis dedos de su entrada reemplazándolos por mi miembro, y me lleve una sorpresa al ver como él habría aun más sus piernas permitiéndome profundizar aun más en su interior, espere un momento a que se acostumbrara pero otra vez la prisa de Taemin, me indico el momento oportuno marcando el mismo un ritmo en las estocadas que me pareció de lo mas delicioso, pero yo necesitaba más de él, no podía seguir conteniendo mis ganas por arremeter bestial mente contra su entrada, tome sus piernas colocándolas a cada lado de mis hombros y solo di suspiro antes de de darle lo más duro que podía
- ahhh demo-nios-Minho-ahh !! Si paras te-ma-to! - yo solo sonreí satisfecho ni de broma me detendría mañana Minnie caminaría con muletas
- ahh mm rayos esto -es-ta delicioso! – él gemía como un loco y yo no me quedaba atrás, veía como el jadeaba con su boca entre abierta y sus ojos cerrados entregándose a todas las sensaciones ya que yo me encontraba masturbándole, mientras que con mi otra mano tomaba su cadera a un costado veía su piel brillar en sudor ya sin poder más me deje caer levemente sobre él, para seguir embistiéndole ya entre besos salvajes, no sé donde me había salido tanta resistencia estaba lejos de correrme y agradecía el hecho de encontrarnos solo en aquella casa pues nuestros gemidos era lo único que se escuchaba en ella, mezclados con el sonido de los grillos y los animales nocturnos nuestros gemidos lejos de terminar iban en aumento.
- ahhh! Minho! ...me correré! – Taemin se sostenía de mi espalda sentía sus uñas enterrarse en ella casi me ahogaba en su abrazo, estaba en éxtasis el movía sus caderas al compás ayudando en la penetración cuando sentí su entrada apretar mi miembro, ya no éramos jóvenes inexpertos aquello fue increíble sentí aquel cosquilleo viajar por todo mi cuerpo elevando aun más todas las sensaciones haciendo me explotar dentro de Minnie, ambos nos habíamos corrido de la manera más salvaje.
- mmm! ahh! - un último gemido de él de mi Minnie al momento que salí de su interior, me hiso mirarle otra vez y lo que vi me dejo maravillado, su cabello estaba casi pegado a su frente la que corrí suavemente con mis dedos observando cada línea de su perfil, bese sus labios lentamente bebiendo casi de su aliento que aun estaba agitado su boca húmeda y cálida me entrego en un beso la satisfacción que esperaba, Taemin mi Minnie, aun me amaba y yo a él, lo podía sentir en aquel beso cargado de ternura.
- te amo Minnie – le dije sincero con mi corazón saltando a mil en pecho
- yo también te amo, rana ojona – y sonrió al ver que me hice el ofendido… y reímos juntos…
El verano apenas empezaba tendríamos muchos momentos como este, yo no podía dejar de ver su rostro y su sonrisa me hechizaba, aun sobre él pensaba en lo que pasaría más adelante entre los dos, allí perdido en su mirada recordé aquel chico desaliñado que vendía margaritas fuera del mini market, aquel chico que olvide aun no entiendo porque, pero en ese momento solo me vi envuelto en una burbuja de amor... ya lo había decidido. Tenía toda una vida para recordar aquellos momentos y crear nuevos recuerdos, me haría cargo de mi presente junto a Taemin, y no olvidaría nunca más aquel aroma a margaritas.
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