- Quiero que me desees Sehun.
- Yo quiero que tus piernas tiemblen y los vecinos sepan mi nombre – dijo antes de besarlo y atraerlo más a su cuerpo.
- ¡Dios! – dijo Luhan riendo. Se acercó más a Sehun para besarlo, lamio sus labios. Los mordió y prosiguió a invadir la boca de quien pronto le daría más placer que cualquiera
Sehun y Luhan comenzaron a besarse lento pero seguro, con pasión, con deseo con ganas incontrolables de sacarse la ropa, de desgarrar cada prenda. Era un placer incontrolable para Luhan el sentir como las manos del menor recorrían su cuerpo despacio y moviendo los dedos para provocar cierto cosquilleo.
- Bésame Luhan – ordeno Sehun, y el mayor volvió a besar a Sehun, se movían intentando hacer del acto algo más cómodo pero comprenderán que en la cocina la cosa no es tan simple.
- Sehun, aaaah – un orgasmo se escapó de los labios de Luhan y se acercó al oído del menor para pedir la más humillante petición pero a la vez lo que más deseaba en esos momentos – hazme tuyo Sehun.
Ante esto Sehun decidió que no sería una mala idea hacerlo en aquel lugar, ya que cada vez que fuese la hora de comer ambos recordarían lo que sucedió y seria placentero, pero también recordó que sería bastante incómodo. Comenzó a lamer el cuello del menor y le susurró al oído “eres mío Luhan” con tanta suavidad que un escalofrió recorrió el cuerpo del mayor deseando que Sehun también fuese suyo.
Entonces fue cuando Sehun tomo a Luhan por las caderas y le pidió que lo acompañara a un mejor lugar, para estar más cómodos. Subieron las escaleras tomados de las manos, y cuando estuvieron a punto de entrar en la habitación Luhan dudo ¿Qué tal si esto solo era una broma de parte de Sehun? ¿Qué sucedía si solo estaba jugando con él? Sehun pudo notar que algo le pasaba a Luhan pero conocía tan poco las actitudes de Luhan que le costaba descifrar que podía ser lo que pasaba, era difícil en verdad conocer a Luhan ya que era bastante reservado.
- Sucede algo – pregunto Sehun con mucha curiosidad.
- ¿ah? No, no es nada
- Mírame – dijo algo molesto – no me mientas
- lo lamento Sehun pero – dijo bajando la mirada – no me gusta que jueguen conmigo – Sehun bajo los brazos y con sus manos, de manera muy suave tomo la cara de Luhan y lo obligo a que lo mirara.
- ¿y quién está jugando? – dijo sonriéndole
- n-no lo sé – dijo casi sin respiración, los ojos de Sehun eran profundos y demostraban una sinceridad inigualable, se veía tan perfecto intentando dominar la situación en la que estaban.
- Luhan – dijo sin dejar de mirarlo – no te obligare a nada que no quieras, yo solo quiero verte sonreír, y sé que en ocasiones suelo ser un cretino pero ahora solo estamos tú y yo – entonces la mirada de Luhan cambio, se soltó de las manos de Sehun y frunció el ceño.
- entonces volverás a ser un cretino cuando estén los demás – dijo muy serio
- no, o sea, no precisamente pero debes entender que los chicos nos molestaran
- ¿nos molestaran? Esa es tu mejor excusa, sabes Sehun sigues siendo un idiota
- Luhan –grito Sehun mientras el mayor se alejaba a su habitación
- Púdrete – y se encerró en la habitación cerrando la puerta tan fuerte que las piernas de Sehun temblaron
- Luhan por favor, hablemos ¿sí?
- Aléjate antes de que te mate.
Entonces Sehun dejo de insistir, la verdad las amenazas de Luhan no le asustaban pero el hecho de que él se enojara más si, se quedó sentado afuera de la habitación esperando que Luhan saliera de ahí, digo, en algún momento tenía que salir a comer o algo ya que últimamente comía mucho. Se mensajeaba con Kai sobre lo que había sucedido y este le envió varios emojis en forma de golpe por la estupidez que había hecho, hablaron por un largo rato hasta que Kai lo dejo porque Kyungsoo había llegado a su casa, la madre del moreno lo había invitado para celebrar sus 30 años de casados.
Sehun llamaba a Luhan constantemente por teléfono pero este no contestaba y la única vez que contesto le grito que lo dejara en paz. Se aburrió de insistir así que solo fue a buscar una manta y se quedó esperando, paso tanto tiempo que Sehun se quedó dormido.
Luhan por su parte ya había despertado y su estómago sonaba con un volcán a punto de estallar, tenía mucha hambre así que necesitaba salir para comer algo, abrió la puerta con lentitud para que Sehun no lo viera y así evitarse un larga conversación la cual, terminaría en una pelea de seguro.
Pero lo que sus ojos lograron divisar fue a un indefenso joven muy atractivo dormido en las afueras de su habitación, sí, era Oh Sehun quien dormía como un bebé sentado en el piso con una manta. Luhan primero pensó en que sería bastante divertido golpearlo para que despertara y luego salir corriendo pero, mientras más miraba al menor, más tierno le resultaba este, se veía realmente hermoso con sus ojos cerrados, se veía tan calmado, era como si pudiera ver al verdadero Sehun, al chico tierno y sereno que realmente era, al chico sensible y lleno de amor para entregar.
Sehun abrió los ojos, se sentía observado.
- ¿Luhan? – dijo muy bajito así que el mayor se posiciono a su altura.
- ¿estás bien Sehun?
- Si, ¿tu?
- si – dijo mirando sus manos que se movían con inquietud, tenía ese maldito efecto cada vez que Sehun estaba cerca.
- No lo parece – dijo incorporándose
- Es la verdad – dijo Luhan
- ¿Lu? – Dijo acercándose con lentitud y Luhan abrió sus bellos ojos sorprendido por la pequeña distancia que había entre ellos - ¿puedo besarte? – le susurró al oído y Luhan solo se limitó a asentir
En la oscuridad del pasillo habían dos cuerpos arrodillados en la alfombra, la poca luz que salía de la habitación de Luhan parecía que solo llegaba a iluminar el momento justo en el que Sehun toma el rostro de Luhan con delicadeza y lo acerca hacia el para hundirse en un beso, de un momento Luhan pensó que Sehun lo besaría como lo había hecho en la cocina pero no, no fue así, lo beso lento, suave como si lo que había en sus bocas fuesen dos bailarines de vals, danzando con lentitud y una pasión escondida, se separaron después de unos segundos.
Sehun se levantó primero para poder ayudar a Luhan, con lentitud tomo la mano del mayor y juntos caminaron hacia el balcón de la habitación de Luhan, había sillón de tamaño mediano donde Sehun se sentó y Luhan se recostó apoyando la cabeza en las piernas del menor, Sehun logro acomodarse de tal manera que Luhan estuviera lo más cerca posible, con la manta cubrió ambos cuerpos. Bajo el manto de estrellas comenzaron a hablar de la luna, de los colores, de la vida y de la muerte, de cosas pequeñas como del porte de una hormiga hasta lo más grande como una montaña, el estómago de Luhan rugió, Sehun rio, le dio un beso en la frente y fue a buscar algo para comer, Luhan lo seguía abrazado a su espalda, entre juegos y besos prepararon algunos bocadillos.
- ¿nadie te enseño a comer? – le dijo Luhan
- ¿Qué?
- nada – dijo Luhan sonriendo
- Amo tu sonrisa – dijo Sehun y Luhan se sonrojo
- calla y come – exigió Luhan con un puchero.
- con una condición
- ¿Cuál?
- que me beses – dijo acercándose a Luhan de manera provocativa y a la vez divertida. Luhan soltó un risita y beso a Sehun de manera tierna y sonriendo a la mitad del beso.
Acurrucados en el balcón de Luhan nuevamente disfrutaban del maravilloso cielo oscuro y el pequeño destello de luz que recibían de la luna. Sehun comenzó a sentir que sus ojos le pesaban, estaba agotado, se sentía tan a gusto, le gustaba tanto el calor que le trasmitía Luhan, se sentía en el cielo, entonces se quedó dormido.
- ¿Sehun? – dijo Luhan y al no recibir respuesta se voltio levemente para comprobar que Sehun se había dormido. Entonces se dedicó a contemplar la blanca piel de Sehun bajo la luna, lo transparente que se veían sus parpados, la manera en que sus labios parecían curvarse. Intento levantarse pero era inútil, Sehun no lo soltaría, así que se acomodó y se dispuso a dormir.
A la mañana siguiente…
- Luhan despierta
- ¿Qué sucede?
- Tengo hambre
- Levántate y come algo
- HAMBREEEEEEEEEEEE – grito Sehun y Luhan cayó al piso asustado por el grito
- Idiota – dijo enfadado y Sehun no paraba de reír
- A comer – se escuchó desde abajo, era Lay
- Al fin alguien considerado- dijo Sehun levantándose
- Me das asco – dijo Luhan y Sehun se volteo
- Anoche no decías lo mismo – dijo y lo beso – Ah, buenos días Lu
- Estoy en un gran y maldito lio – dijo con las manos en la nuca
- Buenos días Lay – dijo Sehun mientras bajaba a la cocina – que bien huele
- Buenos días Sehun – dijo Lay con una enorme sonrisa – gracias, espero que también tenga buen sabor
- Estoy seguro que lo tendrá – dijo Suho entrando en la cocina
- Buenos días amor – dijo Lay besando a su novio
- Bueno días – era Luhan quien entraba a la cocina y beso la pancita de Lay
- Lu, no hagas eso asustaras a la cosa – dijo Sehun
- No le digas cosa – reclamo Luhan
- Y entones ¿Qué es?
- Un ser humano
- Bueno, asustaras al ser humano – dijo y tomo un sorbo de jugo de naranja, los demás rieron y Luhan frunció el ceño
- Eres detestable ¿lo sabias?
- Es un talento, gracias
- No te adulaba
- Gracias de todas formas
- Está bien, basta los dos es hora de comer este delicioso desayuno
- Quizás Luhan quiera comer … otra co-sa – dijo Sehun coqueto y Luhan escupió su leche con café
- ¿ah? – dijo Lay mirando a Luhan
- No es nada, es una broma no lo entenderán - dijo intentando salir del apuro
- Está bien, a comer
Luhan quería matar a Sehun, lo fulminaba con la mirada, ¿Cómo se le ocurría decir algo así en frente de todos?, estaba loco, completamente loco, pero gracias a dios no había ocurrido otra vez, charlaron todos normalmente y de a ratos comentarios sobre lo sabroso que había cocinado Lay.
- El embarazo te hace cocinar mejor que las abuelas Lay
- Gracias Sehun – dijo sonriendo Lay
- Lay, tu siempre cocinas exquisito – comento Luhan
- Eres muy amable Lu – y lo abrazo tiernamente
- Bien, creo que tengo algunas cosas que hacer – dijo Sehun levantándose de la mesa – nos vemos luego
- ¿A dónde iras? – pregunto curioso Suho
- Iré a ver a Chanyeol
- Mándale saludos y que cuando pueda salir que venga a visitarnos – Sehun miro a su hermano sorprendido
- ¿te siente bien? – pregunto Sehun bastante curioso
- Aprovecha que me está empezando a caer bien esos idiotas – dijo Suho – no me hagas volver a odiarlos
- Está bien – dijo Sehun riendo – Hey Lay, gracias por volverlo más blando
- No hay de que Sehun – dijo brindándole una sonrisa y una leve mirada a su novio también.
Sehun había subido a su habitación, necesitaba una ducha y arreglarse para ir a visitar a su amigo, sabía que estaba en excelentes manos pero habían acordado con los demás ir a verlo para molestarlo ahora que había confesado su amor por Baekhyun públicamente. Tomo su mochila y salió de la habitación pero antes de llegar a las escaleras…
- Hey idiota – Sehun se voltio, era Luhan
- ¿Qué quieres? ¿unos besitos? – dijo sonriendo pero Luhan parecía serio.
- No vuelva a decir estupideces a delante de Lay ni de nadie
- ¿Qué dije?
- Eso bueno, eso que dijiste – Luhan comenzaba a sonrojarse
- Aaah… -dijo recordando – eso solo fue por dejarme con las ganas inmensas de hacerte M – I –O
- Idiota – dijo enfadado – no lo vuelvas a hacer
- No me niegues tu cuerpo entonces – dijo con una sonrisa llena de provocación
- Piérdete
- Mejor piérdete tu – dijo y lo tomo de un brazo para arrastrarlo hasta él – piérdete en mi cama – dijo susurrándole al oído – nos vemos Lu
- Te odio te odio te odio – camino enfadado hasta su habitación - ¡ay! En que me he metido enamorándome de este idiota, Minnie ¿Dónde estás cuando te necesito? – dijo mirando su teléfono enviando un mensaje a Minseok “tenemos que vernos, necesito ayuda” y con el texto muchas caritas tristes así MInseok sabría que eran problemas con Sehun.