El pequeño Tao se encontraba acostado en su cama con un libro entre sus manos. Mientras más líneas leía más lágrimas cían violentamente de sus ojos. En la portada del libro se leía “Bajo la misma estrella”, uno de sus amigos se lo había recomendado, lo vio en una tienda y no dudo n comprarlo. Sintió dos golpes en la puerta. Se sobresalto, había estado demasiado sumido en aquel libro.
-¿Qué pasa?-pregunto, cerrando el libro y marcando donde había quedado-
-Hijo, YiFan esta abajo ¿Le digo que suba o tu bajarás?
Se le había olvidado por completo que el mayor iría a su casa. Pensó unos segundos y respondió.
-Dile que suba-grito, para que lo escuchará-
Escucho como su madre se alejaba, se levanto y fue al baño que se encontraba al final del pasillo. Se miro al espejo, su nariz al igual que sus ojos estaban totalmente rojos, sus ojos además estaban cristalinos debido a las lágrimas y un rastro de lágrimas en su rostro. Se mojo la cara intentando quitar cualquier evidencia de haber estado llorando.
-Maldito libro. Maldito cáncer-susurraba caminando en dirección a la habitación-
Al abrir la puerta vio a YiFan sentado en su cama.
-Hola, Gege-cerro la puerta a sus espaldas-
-Hola, Tao-dijo Kris, examinando su rostro-¿Por qué llorabas? ¿Paso algo?
El rostro del rubio reflejaba preocupación. A veces el menor odiaba que este lo conociera tanto. Negó con la cabeza.
-No es nada, YiFan-respondió-
-Tao, dime-demando-
-Si te digo te burlarás de mi-hizo un pequeño puchero, tallándose un ojo-
‘Eres adorable’ pensó el mayor, sonriendo inconscientemente.
-No me burlaré, de por si se que eres sensible y lloras por todo-se encogió de hombros-
Tao suspiro.
-Todo es culpa de ese libro-señalo el libro que estaba en el mueble, junto a la cama-
YiFan lo tomo y comenzó a ojearlo.
-Augustus se estaba muriendo y justo llegaste tú-reclamo Tao-
-Ósea… ¿Me estas queriendo decir que un libro es más importante que yo?-YiFan estaba completamente indignado-
-Por supuesto que si-asintió el menor, conteniendo la risa. Amaba molestar al mayor-
-Ya veras-dijo YiFan-
Tomo a Tao de la mano y lo tiro a la cama, dejándolo acostado. Comenzó a hacerle cosquillas al menor en los costados, ambos se removían y reían juntos. Yifan, amaba eso, escuchar las risas de Tao, ver su sonrisa y sus ojos en media luna.
-Ge…Gege!... detente-pedía Tao entre risas- por favor…
YiFan se detuvo, ambos tenían sus respiraciones entre cortadas, el mayor dejo su cabeza cerca del hombro del menor y su mano izquierda en el abdomen del menor. Vio como él menor cerraba sus ojos y una pequeña sonrisa aparecía en su rostro. Quedo hipnotizado por esa imagen y sin pensarlo beso el hombro de Tao, que era lo que tenía más cerca. Tao solo lo miró y se le escapo una leve risita. YiFan, subió un poco más, quedando a su misma altura, sus rostros estaban a pocos centímetros de distancia.
Aunque eran mejores amigos anteriormente habían compartido besos nada propios de la etiqueta “Mejores amigos” sus rostros estaban increíblemente cera, sus frentes juntas y el mayor no se resistió a dejar un leve beso en los labios de Tao.
En un inicio Tao sentía pánico de hacer aquello, luego ya no le molestaba lo tomaba solo como una muestra de cariño. Pero ahora… ahora le dolía el hecho de que solo eran besos sin o0tro significado que amistad, porque si, Tao estaba enamorado de su Gege.
Ambos se acomodaron mejor en la cama y cerraron sus ojos. Tao tenía su rostro en el cuello de él mayor, y este lo tenía abrazado de una manera protectora. Al rato después ambos se sumieron en el mundo de los sueños.
Tao despertó cuando escucho como la puerta de la casa se cerraba, estaba un poco aturdido y torpe, pero luego recordó que se había dormido con YiFan, este aun estaba con su respiración calmada y sus ojos cerrados. Tao no puedo dejar de sentirse atraído por ese rostro. Con uno de sus dedos comenzó a picarle el estómago al mayor que comenzó a removerse, ese acto hizo que sus cuerpos se rozaran y acercaran más. Pronto YiFan comenzó a abrir los ojos, encontrándose a un Panda sonrojado y sonriendo.
-Tengo flojera-estrecho más a Tao entre sus brazos y puso su cabeza en el pecho de este-
-Hay que levantarse, ni siquiera se que hora es-dijo el menor-
El mayor tomo su celular del bolsillo, en la pantalla se lograba ver a Tao una tarde en el parque con una expresión distraída. Tao se sorprendió al ver esa imagen de fondo de pantalla.
-¿Por qué tienes esa foto?-exclamo Tao-
-Son las 19:57-evadió la pregunta del menor-
-Gege, no respondes a mi pregunta ¿Por qué tienes esa foto?-pregunto un avergonzado Panda-
-No lo sé, te veías lindo y tierno, así todo distraído, además ni siquiera sabías que la tenía hasta ahora que la viste-respondió YiFan-
-Eres demasiado-río ligeramente el menor-
-Aunque pienso que si hubiese puesto a un Panda, se abría visto idéntico a ti-se burlo el mayor, que pronto se vio con una almohada en su cara-
-Mejor bajemos-murmuro el menor-
Se levantaron de la cama y fueron a ver un poco de televisión, el estómago tanto de YiFan como de Tao comenzaron a sonar por causa del hambre, ambos se carcajearon y fueron a ala cocina, ahí Tao encontró una nota en el refrigerador.
“Iré a ver a tu tía, volveré mañana. YiFan se puede quedar. Les deje la cena en el mueble”
-¿Gege, te quieres quedar a dormir?-pregunto, mostrando la pequeña nota-
YiFan la tomó y la leyó.
-Por supuesto, alguien tiene que cuidar al bebe de la casa-reprimió una risa al decir eso-
Tao se quejo e hizo un puchero. Kris solo le revolvió el cabello con una sonrisa en su rostro. El menor hizo amago de golpearlo pero el mayor le agarro las muñecas y lo abrazo por detrás, inmovilizándolo.
-Esto no es justo-otro puchero creado por esos hermosos labios-
-¿Qué cosa no es justa?-pregunto YiFan, poniendo su mentón en el hombro de Tao-
-Que tu me molestes y yo no pueda hacer nada-se revolvió inquieto-
-No reclames y mejor comamos algo ¿Okay?-Tao seguir con ganas de golpearlo, pero este beso la mejilla del menor, borrando ese pensamiento-
Comieron entre risas y tonterías, fueron al comedor cuando terminaron y decidieron ver una película, para la mala suerte del menor era una de terror, a cada momento daba saltos y tiritaba. Iban en la mitad de la película y YiFan miró de reojo a Tao, tomo el control remoto y detuvo la película. Tao tiritaba del miedo, e mayor se acerco a el y lo envolvió en sus brazos.
-Lo siento, Tao-musito-no debí haberte dejado verla-le seco las lágrimas que ni el menor sabía que estaban-
Ya era muy tarde y decidieron ir a acostarse.
-Tu ropa esta ahí-Tao señalo uno de los cajones-
El menor fue al baño al lavarse los dientes y cuando volvió YiFan estaba terminando de ponerse la parte superior del pijama. El menor se desvistió y se puso su pijama, bajo la atenta mirada del mayor, que lo puso algo nervioso.
Se acostaron en la misma cama, Tao dejo la luz de la lámpara encendida y empezó a terminar de leer el libro nuevamente. Sus mejillas se encontraban empapadas cuando termino de leer. Apago la luz y dejo el libro en la repisa, se acostó bien sintiendo el calor del cuerpo de YiFan a su lado.
-¿Por qué lloras Panda?-pregunto abrazándolo por la cintura-
-Nada, solo que termine el libro-explicó, en voz baja-
-Lloras por un libro…-murmuro-
-Ya! Sabes que soy así-elevo un poco la voz, haciendo un puchero-
YiFan lo observo detenidamente y no logro contenerse, atrapo ese puchero entre sus dientes y para luego acoplar sus labios con los ajenos, saboreando esos bellos y deliciosos labios, estrecho más al menor entre sus brazos aserrándolo más a su cuerpo, recibiendo un pequeño y débil gemida. Tao se alejo.
-Ge...-murmuro con la cabeza gacha y los ojos llorosos-
YiFan lo tomó del mentón y elevo su rostro, haciendo que lo observará.
-Tao, estoy enamorado deti-confeso-
El besaba a Tao aprovechando que este lo tomaba como una expresión de cariño entre ellos, pero al ver ese cambio tan repentino de actitud le hizo decir lo que dijo, no sabía si le correspondería o lo rechazaría, pero no quería que el menor sufriera por su culpa. Los ojos de Tao volvieron a cristalizarse, su cuerpo comenzó a tiritar y comenzó a sollozar, abrazo a YiFan y este lo apretó fuertemente, no sabía que era lo que pasaba pero sentía que debía hacerlo. Los sollozos comenzaron a disminuir, cuando el menor estuvo más tranquilo miro directamente al mayor.
-¿Estas bien?-hablo con voz suave, YiFan-
Tao no respondió, simplemente se acerco y beso los labios del mayor, este se sorprendió y no tardo demasiado en corresponder, esta vez eran tomos los sentimientos expresándose, sus labios acariciándose y saboreándose, la falta de oxígeno se hizo presente obligándolos a separarse, pero su abrazo no se rompió. Sus corazones latiendo fuertemente, Tao fue el primero en tomar la palabra-
-Gege…-aunque jamás lo había dicho, se derretía cuando Tao lo llamaba así, YiFan lo miró, sus miradas se encontraron-Te amo-musito sonrojado-
-Yo también mi pequeña panda-apretujo a Tao, con la felicidad rebasando el vaso-
Se quedaron dormidos a los pocos minutos, sintiendo el calor del otro. Al día siguiente el primero en despertar fue YiFan, que no puedo hacer más que observar el rostro de Tao, su cabello oscuro y suave, sus ojos con esas ojeras que lo hacían ver adorable, esa nariz que amaba hacerla rozar con la suya y esos labios, esos labios dulces que lo levaban a la gloría de tan solo probarlos un poco, no se alejaría de Tao nunca, estuvo mirándolo al menos una hora.
El menor despertó algo aturdido y torpe, se sonrojo cuando encontró a YiFan observándolo atentamente, este se enterneció y sonrió.
-Buenos días, Panda-se acerco a besar los labios del nombrado, quien solo cerro los ojos y se dejo llevar-
-Buenos días, Gege-dijo Tao, tallandose un ojo-
Se levantaron, Tao decidió darse una duchar y sacarse el sueño de encima, cuando estuvo listo bajo para encontrar a YiFan en la cocina intentando preparar algo comestible.
-¿Quieres quemar la casa?-pregunto Tao, entrando a la cocina y ver un poco de humo negro-
-Cocinar no es mi estilo-murmuro, el menor rió-
-Yo lo hago ¿si?-le dijo Tao con una sonrisa-
YiFan, amo a esa sonrisa y solo enrollo sus brazos en la cintura de Tao y lo beso, tomándolo desprevenido. El menor sonrió nuevamente sobre los labios de Kris, a quien le gusto aquella sensación. Se alejaron y Tao comenzó a hacer el desayuno bajo una penetrante mirada. Comieron entre besos sorpresivos por parte de YiFan y sonrojos por parte de Tao. Terminaron de comer y fueron a ver televisión, aunque el mayor no prestaba demasiada atención a la T.V si no que veía a Tao, este al darse cuenta de ello giro la cabeza mirándolo también, el mayor se acerco y junto sus frentes.
-Te amo, Tao-susurro, esa voz profunda y grave al ser más baja era aun más sexy. A Tao le saltó el corazón al escuchar esas palabras-
-Yo también te amo-respondió-
Ambos juntaron sus labios en un suave beso, que fue interrumpido por el sonido de la puerta abrirse.
-Hola, niños-dijo la madre de Tao-
-Hola, mamá-respondió Tao-
-Hola-dijo YiFan con una sonrisa en sus labios-
-Gracias YiFan por quedarte con Tao-agradeció la señora-
-Hay que cuidar al bebe, yo no dejaría que le pasará nada-YiFan y la madre de Tao rieron, este solo gruño por lo bajo-Bueno, creo que debería irme.
Se despidió de la madre de Tao y este último lo fue a dejar a la puerta. YiFan lo abrazó por la cintura y lo beso como no había podido hacerlo bien antes.
-Ven a la tarde a mi casa. Quiero llevarte a un lugar-Tao asintió ante la propuesta-Nos vemos, bebé.
-Hasta luego, Gege-respondió Tao y este se fue-
Se adentro a la casa, encontrándose con una madre curiosa, esta sabía que a su hijo le gustaba el mayor.
-¿Y…?-pregunto la señora-
-Se podría decir que estamos saliendo-musito-
La madre de Tao comenzó a hacer algunas cosas, como ordenar y limpiar, mientras tanto Tao se puso a ver televisión nuevamente. La señora luego de terminar de hacer los quehaceres, se sentó junto a su hijo.
-¿Cómo que se podría decir?-entrecerró sus ojos, mirando curioso a su hijo-
El pequeño pensó un poco y contesto.
-Le gusto y el ami, pero no hemos aclarado nada-se encogió de hombros-En la tarde iré a su casa.
-¿A que hora es la tarde?-pregunto entretenida la madre de Tao-
-No lo s…-en ese momento sonó el celular de Tao-Ge…-contesto el teléfono-
-Tao!-se escuchaba feliz el mayor desde la otra línea-
-Nos vimos como hace 1 hora ¿Por qué tan feliz?-río el menor-
-Cada vez que hablo contigo estoy feliz-el menor se sonrojo-Hoy ven a las 18:30.
-Ok, justo eso mi madre me preguntaba-rió-
-Adiós, Panda. Te amo-Tao se sonrojo a más no poder, miro a su madre que lo miraba atento-
-Nos vemos, Ge. Yo también-se sonrojo-
-¿Tu también que?-se hizo el desentendido, Tao suspiro-Panda dilo ¿Si?
No pudo resistirse a esa petición, ante esa manera tan dulce de hablarle.
-Yo también te amo, Ge-cerro sus ojos-
-Nos vemos-pudo percibir la sonrisa del mayor, sonó el pitido de que la llamada había finalizado-
-Tao tomo una almohada y se tapo su rostro, sin querer mirar a su madre.
-Son tan cursis que me dan arcadas-comento su madre-
-Si lo escuchara de alguien más, también me darían arcadas-se encogió de hombros-
-Pero te pasa a ti, mi pequeño-le acaricio el cabello de forma dulce-
-Estaré allá a las 18:30-cambio un poco el tema-
Hablaron durante un rato y luego almorzaron. El menor subió a su habitación para ordenarla, el día anterior la habían dejado del asco con YiFan. Al terminar se recostó, el mayor se quedaba tan continuamente allí o se acostaba en la cama de Tao, que la almohada tenía un ligero aroma a él, Tao tomo aire llenando sus fosas nasales de ese suave aroma. No podría entender como de un momento a otra su relación con el mayor había cambiado, poco a poco sus ojos se cerraban y todo se volvió negro.
Cuando despertó vio su celular. Eran las 18:15, se levanto apresuradamente y se dio una ducha rápida, a las 18:27 iba en dirección a la casa del mayor. No era lejos, así que podía irse caminando, pero igualmente demoraba unos 20 o 30 minutos. Llego a las 18:50 cando ya veía la casa del mayor, vio como alguien salía de esta, aquella persona iba en su dirección, al estar más cerca supo de quien se trataba.
-Hola, Yixing-saludo sonriendo-
-Hola-contesto de mala manera-
-¿Qué pasa?-pregunto confundido-
-¿Sabes que pasa, Tao?-ironizo-Lo que pasa es que Kris te eligió a ti-y se marcho-
Tao quedo aun más confundido y cuando llego a la puerta, en esta ya estaba YiFan lo miro con curiosidad y confusión. Este solo suspiro, pero antes de hablar tiro del brazo al menor y lo acerco a él, sus alientos se mezclaron, sus respiraciones se agitaron, sus labios se juntaron y sus lenguas se entrelazaron. Entraron a la casa aun besándose de manera fogosa pero la falta de aire se hizo presente, lo que hizo que se alejaran.
-Hola, Tao-la voz de YiFan, era un poco entrecortada por el reciente beso-
El menor rió.
-Hola, YiFan-sonrió. Kris amo esa sonrisa, ver esos hermoso labios hinchados y rojos-¿Puedo preguntar que paso con Yixing?
El mayor volvió a suspirar y asintió, fue al sofá y se sentó con Tao a su lado.
-Hace unos meses el me dijo que yo le gustaba-hizo una pausa-yo le dije que lo quería, pero no de esa manera (friendzone) me dijo que haría que yo sintiera lo mismo y más cosas por él. Le dije mis sentimientos por ti-el menor se sonrojo-y se puso furioso, ahora vino a seguir con su plan de “Tu me amarás tarde o temprano” pero le dije lo nuestro, se puso furioso y casi muero por un golpe en la cabeza-señalo un sartén que había en el mueble, el menor asintió-
-Entonces por eso me dijo aquello-murmuro Tao-
-¿Qué te dijo?-el mayor se enfado un poco-
-Le dije “Hola” y el me respondió mal, le pregunte que le pasaba y me dijo “¿Sabes lo que pasa, Tao? Lo que pasa es que Kris te eligió a ti”-contó-
YiFan, acerco aun más al menor su cuerpo y lo apretó entre sus brazos.
-¿Por qué demoraste tanto? Pensé que te había pasado algo-pregunto el mayor-
-Lo siento-hizo puchero-me quede dormido.
-¿No te basto dormir ayer toda la tarde y luego en la noche?-lo molesto-
El menor hizo un pequeño sonido, reclamando. El mayor rió aun más fuerte, tomo a Tao por los costados y lo sentó en su regazo, frente a frente.
-¿Y donde me llevaras?-pregunto entretenido Tao-
-Ha un lugar que conozco y me gustaría que conocieras. Por cierto, hay que avisarle a tu madre que no llegarás a casa-YiFan se encogió de hombros, mientras ordenaba el cabello del menor-
-Bueno, pero dile tu, porque no pienso decirle eso a mi madre, luego de que me obligaras a decirte que te amaba frente a ella-rió el menor-
-Bueno, tenía que saberlo ¿no?-rió-Ok, yo la llamaré, espera un segundo.
YiFan, saco con un poco de dificultad el celular de su bolsillo. Tao, quiso bajarse de encima de este para hacerlo más fácil pero este lo detuvo. Marco el número y puso el celular en altavoz. Se escucho 3 veces un pitido hasta que contestaron.
-¿Aló?-se escucho la voz de la madre del menor-
-Hola-saludo YiFan, el menor estaba en silencio-
-¿YiFan?-pregunto, este solo hizo un pequeño sonido afirmando-¿Cómo estás? ¿Tao, ya esta allá?
-Estoy bien, gracias-sonrió-
-Estoy aquí-respondió Tao, apoyando su cabeza en el hombro del mayor-
-Buena la llama para informarle que Tao se quedará aquí esta noche. Espero no le moleste-dijo sin rodeos, apretando sus brazos alrededor del menor-
Se escucho una leve risita, quizás que cosas esta pensando esta señora, pensó Tao.
-Claro, no hay problema-contesto, animada-Yo me tengo que ir, cuida de mi niño YiFan, adiós.
-No se preocupe, primero muero antes de que le pase algo –Tao escondió su rostro en el cuello del mayor, avergonzado-Adiós…suegra-rió antes de cortar la llamada y el menor lo golpeo despacio-
-¿Cómo le dices eso a mi madre? Ni siquiera le dije explícitamente “lo nuestro”-remarco las comillas-
-¿Y que es lo nuestro?-pregunto YiFan, juntando sus frentes-
-No lo sé-rió juguetón, encima de los labios ajenos-
-Somos nosotros…solo…nosotros-murmuro y juntos sus labios con el menor-
Era solo una presión de labios perfecta para el momento tan cursi y tierno, al separarse YiFan se levanto con Tao entre sus brazos y lo llevo al cuarto, mientras lo acostaba en su cama.
-Yo me iré a bañar y vuelvo-le aviso YiFan-
-Anda, yo me quedare aquí-se encogió de hombros-
-No te quedes dormido-se burlo el mayor, Tao solo hizo un pequeño sonido de reclamo-
Tao, empezó a dar vueltas por la cama buscando una posición cómoda. Cerró los ojos para relajarse, el olor de YiFan ahora llenaba más sus fosas nasales. A los 10 minutos sintió la puerta abrirse y luego un cuerpo encima suyo, solo con los pantalones, YiFan estaba sin nada en la parte superior, sonrió juguetón y abrió los ojos.
-Ve y termina de vestirte ¿si?-le replico el menor-
-Bueno, bueno-rió y se levanto, pero antes dejo un pequeño beso en la pude la nariz de Tao, quien rió antes el acto-
-¿Me dirás donde me llevarás?-se sentó en la cama-
-No seas impaciente, Tao-rió el mayor-
El menor lo miró y le saco la lengua de forma tierna y juguetona, que le hizo ver como el niño que era. YiFan solo sonrió ante eso. Mientras negaba con la cabeza. Se seco un poco el cabello y se puso una camiseta que dejaba ver sus clavículas.
-Me dio calor-murmuro Tao-
Se desabrocho su abrigo, dejando ver lo que escondía debajo. Una camiseta blanca que se traslucía levemente, algo suelta que dejaba al aire sus clavículas y parte de su pecho. YiFan, paso su lengua por los labios. Se acerco a Tao.
-Estoy listo, vamos-dijo y el menor se levanto de la cama-Y para tu seguridad, abróchate eso-subió la cremallera del abrigo y Tao rió-
-Pervertido-Tao se acerco al mayor-
Tomo el borde de la camiseta de YiFan, y la tiro hacía abajo, cuando sus rostros estuvieron a la misma altura, el menor unió sus labios con los de él mayor de manera feroz y a la vez suave, cuando la falta de aire se presento se alejaron y YiFan entrelazo suavemente sus dedos con los ajenos, mientras lo guiaba a Tao al auto. Ni siquiera manejando el mayor soltó la mano de él menor, este solo veía como las casa y edificios desaparecían, para ser reemplazados por un manto verde, al cabo de una hora YiFan detuvo el auto a un costado, se bajo. Mientras Tao lo veía curioso y confuso, abrió la puerta del lado de Tao y este bajo también. El mayor lo agarró del codo y lo arrastro entre los árboles, Tao estaba aun más confuso y cada vez que preguntaba algo, le decían que no fuera tan impaciente, lo besaba castamente y sorpresivamente o simplemente no le respondía.
-YiFan!-rodó los ojos-
Este se detuvo violentamente, que casi el menor choca contra él, agarro a Tao de la muñeca con fuerza y con la otra su mandíbula, acerco su boca a la del menor y lo beso, con violencia y decisión, amor y dulzura, deslizo sus brazos por la cintura del menor, Tao tardo un poco en corresponder, pero pronto enredo sus dedos en el rubio cabello de él mayor y lo acerco más a él. Sus labios devorándose, al alejarse, Tao sintió incómod su labio inferior, llevo un dedo hasta allí y su dedo se mancho de rojo. El mayor lo había mordido.
-Ya llegamos-susurro para luego limpiarle la sangre con su lengua-
YiFan, se puso al lado de Tao, dejándole ver el paisaje. El gran manto verde de hace un rato, pero con la diferencia de que ahora había un lago y una cabaña al lado. Era totalmente hermoso. El mayor lo abrazo por detrás y comenzaron a caminar en esa posición.
-Mis papas compraron esa cabaña-apunto la pequeña casa junto al lago-nunca la ocuparon, así que yo empecé a arreglarla, y…bueno, aquí esta-se encogió de hombros-
-Es hermoso-murmuro Tao, aun viendo los alrededores-
-Vamos dentro-lo jalo entrelazando sus manos-
El menor solo lo siguió, al entrar YiFan entro a una habitación, mientras Tao admiraba el lugar. Era algo simple pero hermoso a la vista de él menor, en el centro había un sofá y pocos muebles donde se ubicaban algunos cuadros, en su mayoría de él mayor cuando pequeño. Se acerco y tomo una entre sus manos, ya no recordaba con claridad al mayor cuando pequeño y esas imágenes le hacían recordar hasta al más mínimo detalle. Sonreía como idiota la ver aquellas imágenes. Sintió como una mano lo desplazaba hasta otro cuarto, cuando se percato donde estaban, había una cama a un lado y un pequeño mueble junto a esta, en ese mueble había una imagen, se acerco un poco más. Era una imagen de él. Miró a YiFan, incrédulo, quien desvió la mirada avergonzado. El mayor tomo una manta y llevo a Tao nuevamente al exterior. Cuando estuvo algo cerca del lago, estiro la manta en el suelo y se sentó encima de esta, llevándose congio a Tao, el mayor se acostó, mientras el menor se sentó observando como el sol desaparecía entre los árboles, el agua del lado tan clara que era posible ver todo lo que pasaba debajo de esta.
El cielo ya estaba oscureciendo. Tao se acostó juntos YiFan, quien lo miro e hizo que se acercará, quedando su cabeza en el pecho de YiFan. Tao sentía cada latido del corazón de este, iba a un ritmo bastante rápido. El menor sonrió, el provocaba aquello.
-Tao-empezó a hablar YiFan-cuando te conocí, fuiste un gran amigo, a lo largo de mi vida un gran apoyo. Primero te veía como un amigo, luego como mi hermano pequeño, pero ahora…eres mi pequeño, mi pandita. Mi chico, mi hermoso chico -ambos se miraron. El menor estaba sonrojado-Te amo-cerró sus ojos-
-También te amo, Gege-le susurro al oído-
-Huang Zi Tao-habló con firmeza-¿Quieres ser mi novio?
Tao lo miró sorprendido y feliz.
-Se que no soy lo mejor, pero quiero y puedo hacerte feliz-YiFan se subió encima de Tao, con sus rostros a centímetros-
Los ojos de Tao estaban llenos de lágrimas y asintió. El mayor posó sus labios sobre los de él menor.
-¿Cómo se llamaba el libro que leías? ¿Bajo la misma estrella?-pregunto YiFan, al separarse-
-Si ¿Porque?-el menor lo miró curioso-
-Quiero que nuestra historia se llame “Bajo la misma Galaxia”-el menor rió y volvieron a juntar sus labios-