‘’Podrás ser un dobe, pero igual te amo’’
Hace poco ha llegado un chico nuevo a la prepa, como no soy muy sociable, aun no se su nombre. Parece que muchos le guardan rencor, por lo que veo, aunque no sé por qué razón, si nadie lo conocía.
Por alguna extraña razón, se acercó a mí:
- Hola, me llamo Naruto Uzumaki, mucho gusto- sonrió, parecía un buen chico.
- Hola…
- Y tu nombre es…
- No te interesa.
- Pero que frio eres.
- ¿Algún problema?
- Solo que quería saber tu nombre, teme.
- Si insistes dobe, es Sasuke Uchiha, ¿feliz?
- Mucho, ¡pero no me digas dobe, teme!
Después de eso, se fue a escoger un banco, lo cual se sentó adelante del banco que tenía al lado. No es nada interesante de comentar, pero ya que.
Algo raro dentro de mí me hizo sonreír, no sé qué fue ya que soy totalmente serio. Me siento extraño, estuve toda la clase con los ojos pegados en aquel teme. Quizás… ¡NO, NUNCA!
Debo estar mal, no puedo mirarlo tanto como ahora, lo que mirado todas las horas que pasamos en la prepa. Ya que lo pienso me recuerda a alguien en la infancia…
- ¿Te pasa algo Sasuke? – con cara de dobe preocupado.
- Nada que te interese, dobe.
- ¡Que no me digas así! En fin, ¿puedo preguntarte una cosa?
- Como quieras.
- Entonces… ¿Quieres ser mi mejor amigo? –con la misma sonrisa amigable de siempre.
- Está bien –suspire.
- Seremos los mejores amigos ¡De veras!
Se veía tan contento, que hasta a mí me hacía feliz y hacerme vomitar al mismo tiempo.
Luego de que haya vuelto a su lugar, Kakashi-sensei nos designó a todos en un grupo, lo cual no me gustaba la idea. Aunque si me tocara con Naruto… ¡NO PIENSES ESO!
- Grupo siete, Naruto Uzumaqui…
En ese momento levante la vista.
- Sakura Haruno…
¿Por qué ella? No es que piense que Naruto y esa lleguen a tener algo, no estoy celoso o algo parecido.
- Y Sasuke Uchiha
No sé por qué pero me alegro oír mi nombre, al menos estaré un poco tranquilo por ello.
Más tarde, como lo había ordenado el sensei, nos juntamos los tres en el receso. Cada uno traía su almuerzo, Naruto, ramen y Sakura, no me interesa ni se. Como mi comida se había terminado, Naru me ofreció de lo suyo (se ve que tenía mas).
- Hey, ¿quieres ramen?, tengo otro si lo aceptas, ya que me llene-ríe.
- No, gracias.
- No, ten por favor –me lo acerca a la boca como si quisiera dármelo, aunque yo pudiera.
Tanto insistió que tuve que aceptarlo y me dio de comer ramen el. En realidad, me dio solo un poco y después dejo que yo siga solo.
Sakura nos miraba con cara rara y de pervertida a la vez, ¿Qué estará pensando? Nos hizo sentir incomodos por su culpa, tanto que nos sonrojamos, aunque Naru se veía lindo… ¡DIOS, QUE ESTOY DICIENDO!
Posteriormente, cada quien se fue a su hogar, menos yo que me quede rondando por el pueblo. Sorpresivamente, se puso a llover de la nada, suerte que tenía paraguas. Doy la vuelta en la esquina y veo una silueta familiar: era Naruto.
- Hey dobe, ¿aún no has llegado a tu casa?
- Bueno, no es tan fácil cuando hay lluvia, ¿no? Además es demasiado lejos
- Mi casa está a pocas cuadras, puedes quedarte si quieres.
- No quisiera molestar teme… Pero, si insistes... –riéndose nervioso.
- Ven, ponte aquí –lo sostuve del brazo y lo lleve abajo del paraguas.
Esto es vergonzoso de decir, pero me sentí raro de nuevo, como hace ya horas. Hasta parecía que estábamos más cerca de lo normal. Yo sé que aquello no era algo que un chico cualquiera sentiría si estaría apegado a otro.
Al fin habíamos llegado allí, así que nos paramos en el techo. Por fin nos habíamos separado un poco, ya me estaba poniendo nervioso. No me pregunten por qué. Si él está aquí eso significa que se quedara un largo rato hasta que pare de llover, espero que siga unas horas más.
Lo invite a pasar, ya que al menos tenía ordenado algunas cosas, y le dije que dejara su mochila en el perchero. Como la lluvia lo tomo de sorpresa, le aconseje que si quería se podía sacar la ropa mojada, bañarse y ponerse la que se encuentra en el ropero.
- ¿De veras no te molesta?
- No, para nada –o al menos pienso eso.
- Gracias, ¡De veras!
Cuando ya había dejado la ropa, la lleve a secar mientras esperaba que salga. No, no es por la razón que ustedes creen, no lo quiero ver desnudo con sus mus… ¿Eso lo dije yo?
- Hey teme, donde está tu rop –y en ese momento se resbalo y cayo arriba mío. Completo silencio y quedamos rojos los dos, suerte que tenía toalla.
- L-lo siento –se levantó y me ayudo a mí. En ese instante no me imagine que alguien como el llegara a causarme algo extraño como lo que sentí.
Pasaron minutos y ya había parado la lluvia, mala suerte para mí. Sé que iba a verlo al otro día, pero quería pasar más tiempo a su lado y descifrar lo que siento. Pero al final los había entendido.
Al otro día, estaba decidido a decirle mis sentimientos, pero debía preparar lo que le diría.
- Naruto, te tengo que decir algo…
- ¿Qué Sasuke?
- Quizás esto sea raro de decir, pero desde que apareciste en mi vida, me hiciste sentir completo. Aunque lo niegue no lo puedo evitar. –se sonrojo.
- Pero, qué cosas dices Sas…-mi cuerpo se dejó llevar y lo bese.
- Lo siento, yo solo… -me tomo por sorpresa y me beso también.
- Hasta ahora no entendía mis sentimientos, pero gracias a esto pude comprenderlos. Te amo Sasuke Uchiha.