*La persona que no está en paz consigo misma. Será una persona en guerra con el mundo entero -Mahatma Gandhi.
*La guerra es cosa de juego solo para aquellos que no la han experimentado -Erasmo.
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Academy for Gods
Capitulo uno: El despertar del dios de la guerra.
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-Mathew McNeil, 16 años, llevado a dirección más de 7 veces este mes, sus faltas consisten en agresión contra el estudiante Jeff Trust de forma consecutiva, así mismo, es el causante de daños a los materiales utilizados por la escuela, mediante el uso de marcadores, lápices y papel higiénico… ¿te suena familiar?- me preguntó el director.
-ya le dije que yo no hice nada de lo que dice ahí, Jeff siempre me molesta y me acosa para hacerme bromas pesadas, además, el es el que usa los marcadores, los lápices y el papel higiénico en las paredes, no yo.
-¿entonces por que tu firma aparece en cada acto realizado?- replicó.
-ellos escanearon mi firma de uno de mis dibujos y ahora la usan para inculparme.
-¡ha!, como si eso fuera posible- se nota que este tipo es todo un hombre primitivo, quisiera decirle “los 70 llamaron, quieren que les devuelvas el maldito afro que estas usando en la cabeza”.
-…
-¿Qué?, ¿no dirás nada en tu defensa?
-no lo vale- siempre es la misma rutina.
-como quieras, ten- dijo entregándome un papel… ¡¿una citación?! Ya es la octava de este mes… ufff, supongo que no me queda de otra- quiero ver a tus padres este jueves, así que espero que sean puntuales.
-no se preocupe, ni siquiera vendrán.
-¿no les entregará la citación?, entonces tendré que llamarlos.
-están de viaje en su luna de miel, ¿en serio usted quiere interrumpirlos mientras están en sus momentos sexuales?, si quiere oír gemir a una mujer mejor vallase a ver una porno en la compu.
-¡exijo más respeto jovencito!- yo también exijo un poco… pero ni usted me lo da.
-como sea, hasta mañana- dije para luego despedirme sin verle a los ojos.
Estúpido infeliz, ¿Quién se cree él para culparme de algo que no hice?... ah claro, el director mas hijo de puta que jamás haya conocido en mi vida… ufff, definitivamente no soporto esta vida… ojalá todo fuera diferente… mierda, ahora tengo a esas sabandijas pegadas al culo como siempre.
-¿Cómo te fue en la dirección McDonald’s?- ese hijo de perra…
-en primer lugar, es McNeil, segundo, púdrete Jeff.
-así que te la tiras de machito, ¿no?... muchachos, enseñémosle modales a ese escuincle.
Eran 7 contra mí, no puedo pelear contra ellos… pero si puedo huir… rápidamente tomo mi patineta y golpeo a Jeff en el estomago con ella, el cae al suelo mientras que los otros le ayudan a levantarse, pongo la patineta en el suelo para montarla y salir de ahí lo más rápido que puedo, mi escape funciona, pero ellos continúan persiguiéndome… tendré que perderlos hasta llegar a mi casa, usaré mi ruta favorita, la del parque.
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A la final pude perderlos, supongo que este día cambia un poco al menos jeje. En otras ocasiones esos tipos me habían atrapado y golpeado, pero esta vez no
-Mathew…- me llama la vocecita de un niño mientras me acerco al pórtico de mi casa… mi niño de cabellos rubios y ojitos azules.
-Tomy, ¿Cómo estás?- ese peque es toda una ternura, solo 13 años y es todo mi mundo jeje.
-estoy bien- dice abrazándome, el es un poco más bajito que yo, pero aun así no es problema para darnos algunos besos y piquitos.
-me alegra oír eso.
-Mathew… hay algo que quiero hablar contigo- ahora se ve un poco sonrojado.
-¿Qué pasa?
-es que… bueno… ¿podemos hablarlo a dentro, me da pena que alguien nos escuche?
-de acuerdo.
Entramos a mi casa y tras cerrar la puerta nos fuimos a mi habitación en el segundo piso de la casa, era la típica habitación de un adolecente: posters de bandas, videojuegos, algunos animes, además de mi televisor, una laptop y mi PlayStation 4. Tomy y yo nos sentamos en mi cama, yo me senté recostado a la pared mientras que Tomy se sentó en mis piernas mientras se acurrucaba en mi pecho, entonces le pregunté sobre lo que quería hablarme, luego me respondió.
-Mathew… veras… ¿recuerdas cuando vine aquí la última vez cuando vimos esos videos?
-e… sí, lo recuerdo, ¿por qué?
-es que… quiero hacerlo.
-¿quieres hacerlo?, ¿ya?- no me esperaba esa petición de Tomy.
-sí, quería decírtelo ese día, pero… sentí que te reirías de mi.
-¿de qué estás hablando?, Tomy, eres mi novio, nunca me reiría de ti… yo te amo…
-lo siento…- dijo apenado mi niño.
-no te preocupes, es normal que sientas pena, pero recuerda de que nunca te despreciaré o me burlaré de ti… ¿de acuerdo?
-de acuerdo… -dijo un poco aliviado.
-bueno, sobre eso… ahora no puedo, estoy muy cansado, además de que me corretearon casi todo el camino de regreso.
-esos chicos nunca te dejan en paz, ¿cierto?
-el día en que se mueran me dejaran en paz, pero por ahora solo tendré más cuidado.
-no quiero que te lastimen- Tomy se volteó y me estaba abrazando en ese instante, esos abrazos suyos me reconfortan mucho.
-te prometo que estaré bien.
-oki, pero ahora te ayudaré a olvidar este día tan pesado.
-¿Cómo?
-muy simple… haré sentir bien a mi chico genial de ojos grises.
-¿Qué?, Tomy ya te dije que…
No pude terminar de hablar ya que Tomy me cayó con un beso en los labios, sus besos eran algo que no podía resistir, pero decidió ir más profundo metiendo la lengua, exploraba cada rincón de mi boca saboreándola, no era un experto en besos, pero los suyos son los mejores que he probado en toda mi vida, Tomy y yo nos separamos para tomar aire, pero él se me quedó mirando como si quisiera mas… momento perfecto para jugar un poco.
-oiga doctor, creo aun me siento mal, necesitaré otra dosis de su medicina especial.
-no te preocupes, de daré toda la medicina que tú quieras- dijo en tono lujurioso.
Tomy y yo seguimos con los besos, cada uno más intenso que el otro, pero no pude aguantar más, si estaba cansado por mi día, pero quería continuar con esto hasta hacerlo más intenso, solo quiero lo mejor para mi niño. Tomy siguió besándome pero al separarme de él, lo acomodé sobre la cama y me puse sobre él para continuar besándolo, tras algunos besos, empecé a bajar hasta su cuello, lamiendo y besando, mientras hacía eso, a Tomy se le escapaba alguno que otro gemido de placer, enserio que le estaba gustando, y a mí también. Luego comencé a descender hasta su pecho, le subí la camiseta y comencé a besar sus pezones y su pechito, continué descendiendo hasta llegar a su ombligo donde le di algunas lamidas que le hicieron cosquillas.
-creía que yo era el doctor- dijo el peque mientras aun lo consentía.
-hace 2 minutos me gradué en medicina especial, así que quiero practicar lo que aprendí con mi pequeño doctor.
-¿no que estabas cansado?- preguntó casi como si hubiera descubierto algo sospechoso.
-sí, estaba cansado de resistir los impulsos de tocarte por todos lados.
-tonto, por eso me tocaras por todos lados el doble de veces.
-entonces mas medicina para ambos.
-ahora me siento mal, tienes que curar mis ganas de cariño y caricias.
-como usted ordene.
-pero… yo también quiero hacerte sentir bien.
-primero, tengo que curar al doctor para que el me cure a mí.
-entonces no me quiero curar todavía.
Finalmente llegué a donde quería llegar, podía ver la pequeña erección de mi niño sobre su pantalón, “ahí hay un problema serio, necesito atención urgente”, dijo mientras notaba mis ganas de continuar. Desabroché su pantalón hasta ver sus bóxers de color azul, la erección estaba más pronunciada, le quité por completo los pantalones para luego lamer su pene sobre la tela del bóxer, esto hiso que se estremeciera un poco, pero luego le di una mordidita suave, en eso dio un gemido de placer, le estaba gustando, pero yo ya quería quitarle su bóxer para que se sintiera mejor, tomé sus bóxers por el elástico y los bajé lentamente, esto hiso rebotar un poco su erección, al ver la cara de Tomy completamente sonrojada sentí ternura, no quería que esto fuera incomodo para él, así que lo besé en los labios haciéndole saber que todo estaba bien, el comprendió mi mensaje y me pidió que continuara, le quité sus bóxers por completo dejándolo desnudo de la cintura hasta abajo, pero él quería estar más cómodo así que se quitó la camisa dejando ver su cuerpito lampiño por completo, era una imagen hermosa lo que estaba viendo. Comencé a lamer un poco su pene erecto para ver sus reacciones, todas de puro placer, pero luego decidí meterlo todo en mi boca, comencé a chupar, cosa que le gustaba mucho, mientras lo hacía, el tomaba mi cabeza para imitar una penetración, el gemía y gemía, le estaba gustando mucho estas sensaciones, esta sería su primera vez, pero… también la mía, siempre me dije que mi primera vez seria con alguien que verdaderamente amara, aunque no lo crean, cuando nos volvimos novios, siempre me imaginé este momento, no porque fuera pervertido, sino porque quería que la primera vez de Tomy fuera perfecta, cosa que estaba logrando ahora mismo. Continué chupando su pene hasta acelerar un poco el ritmo, Tomy se estremecía de puro placer, de vez en cuando lamia la cabecita de su pene y también sus bolas para luego continuar.
-Mathew, me siento raro, quiero orinar- decía mi niño totalmente excitado mientras aun lo consentía.
-tranquilo, no te preocupes, solo relájate- dije para seguir con lo mío.
-Mathew… algo está saliendo… Mathew…- en eso apretó un poco las sabanas de mi cama.
En eso sentí ese líquido espeso entrar por mi boca, mi niños se vino, era su primera eyaculación, a decir verdad se vino mucho, no pensaba escupir su semen frente a él, además, como era de Tomy no me molestaba su sabor, así que me lo trague todo.
-¿te… te lo tragaste?- preguntó preocupado.
-sip, no pasa nada, además, no sabe tan mal como dicen.
-así que eso es semen… creo que me toca a mí.
-si tu lo dices, pero primero tengo que limpiarte ahí abajo.
Me volví a acercar y empecé a limpiar su pene con mi lengua dando suaves lamidas las cuales mi niño parecía adorar por completo, luego de eso, el me ayudó a quitarme la camiseta, luego comenzó a lamer mi pecho mientras jugaba con mis pezones, sentir la boquita de Tomy recorriendo esos lugares me llenaba de alegría, mi niño de verdad me amaba. Continuo el proceso hasta llegar abajo donde mi erección ya me dolía, ver a Tomy completamente desnudo era algo único, desabrochó mis pantalones, pero no se detuvo tan siquiera a ver mis bóxers, me quitó todo lo que me cubría ahí abajo dejándome sin nada puesto, entonces él quería lamerlo, vi sus intenciones, pero en vez de eso, Tomy se acomodó sobre mí para que yo pudiera introducirlo en su agujerito, pero no podía hacerlo aun, el no estaba acostumbrado a estas cosas, podía dolerle y no quería eso, entonces lo detuve y lo acerqué a mí para darle un beso en los labios, pero tuve que darle las advertencias, no podía hacerle daño a Tomy, jamás me perdonaría algo así.
-aun no podemos hacerlo, no estás preparado, esta será tu primera vez y no quiero que te pase nada- le decía acariciando sus mejillas.
-Mathew, quiero hacerlo, no me lo impidas.
-no te lo estoy impidiendo, solo digo que deberíamos prepararte para esto primero.
-ok… haz lo que tengas que hacer- dijo con una leve sonrisa, cosa que me dio más confianza.
Comencé a remojar mis dedos con mi boca, pero Tomy tomó mi mano y comenzó a remojarlos por mí metiéndolos en su boca, se me hiso algo tierno ese gesto, el siguió mojando mis dedos con su saliva hasta que finalmente estaban completamente húmedos, acomodé a Tomy sobre mi regazo de modo que pudiese tener su trasero en buena posición, el no quería voltearse mirando hacia otro lado, quería tenerme de frente mientras me abrazaba, yo empezaba a prepararlo tocando su entradita, al solo rozarla sentí que mi niño tenía un escalofrío.
-¿estás bien?- le pregunté.
-estoy un poco asustado.
-bueno… en ese caso…
-pero no quiero detenerme- dijo casi al instante- quiero que mi primera vez sea con alguien que yo verdaderamente ame… quiero que sea contigo.
No lo pensé ni dos veces cuando empecé a besarlo con pasión, enserio eso que me dijo me llenó de ánimos, mi niño en serio me amaba, incluso pensaba igual que yo en ese aspecto, yo tenía que hacer algo, tenía que complacer esa petición, mientras lo besaba introduje el primer dedo en su entradita, Tomy se estremeció un poco pero continuamos con los besos, comencé a mover mi dedo mientras se acostumbraba, sin embargo entraba con dificultad y le dolía un poco, poco a poco Tomy se relajaba, pero tras cada beso jadeaba mucho mientras estaba sonrojado, entonces introduje el segundo dedo, poco a poco las paredes de su agujerito se expandían, hasta que entraban por completo, cuando ya estaba lo suficientemente expandido, luego de eso acerqué mi pene a su entradita, mire a los ojos a Tomy y este me hiso señas para introducirlo aun en esa posición, me acosté en la cama y puse a Tomy sobre mí mientras lo metía poco a poco con delicadeza para que no le doliera, estaba muy apretada su entradita, pero cuando lo metí por completo esperé un poco a que se acostumbrara, esto era increíble, se sentía caliente y un poco apretado, pero él insistió en que siguiera, lo hice, mientras tomaba a Tomy por sus caderas, comenzaba a embestir poco a poco, sin embargo Tomy se quedaba quieto, no se movía.
-¿no sabes cómo hacerlo de esta forma?
-no…- dijo apenado.
-entonces hagámoslo en otra posición.
Acomodé a Tomy sobre la cama y lo acosté de modo que pudiera embestirlo y darle placer sin que él tuviera que esforzarse tanto, el quedó boca abajo y yo sobre él, claro que con su trasero levantado para que yo pudiera hacer el trabajo de un modo más fácil. Comencé de nuevo con las embestidas suaves, a medida que aumentaba el ritmo de las embestidas, Tomy gemía de placer, el dolor se le había pasado rápidamente, ahora solo sentía placer, mientras lo embestía se masturbaba estimulándose aun mas, incluso aportaba moviéndose de modo que cada penetración fuera más placentera, mientras seguíamos, nuestros cuerpos estaban muy estimulados, nos dejamos llevar hasta que finalmente había llegado a mi limite, me iba a venir.
-maldición, estoy por venirme… voy a sacarlo.
-no, no lo hagas… termina dentro de mí- decía entre gemidos.
-pero…
-tranquilo… voy a estar bien.
-… está bien.
Continúe embistiéndolo acelerando el ritmo hasta que no pude aguantarlo más, me vine dentro de mi niño, había llenado por completo la entradita de mi niño, cuando lo saqué, un poco de esperma salía de su agujerito, al parecer el también eyaculó casi al mismo tiempo que yo manchando las sabanas, ambos nos vinimos mucho, lo acosté en la cama y yo me acosté junto a él, estábamos sudorosos y pegajosos, nos miramos y no pudimos aguantar las ganas de besarnos una vez más, juntamos nuestros cuerpos y nos besamos con pasión, en verdad nos amábamos, tener a mi niño conmigo me hacía sentir feliz, pero el tenerlo así de este modo era diferente, yo lo amo, lo amo demasiado… al terminar con el beso, nos miramos otro rato y yo le ofrecí darnos una ducha juntos, el asintió y nos levantamos de la cama para dirigirnos al baño.
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Son las 9 de la noche, los padres de Tomy me llamaron para preguntarme si Tomy se podía quedar aquí a dormir ya que era muy tarde, yo accedí pues… lógico, es mi novio, lo amo, además de que quiero aprovechar cada segundo que pueda junto a mi niño, como no tenía nada a la talla de Tomy, le presté una de mis remeras, esta era una que papá me había comprado pensando que me quedaría, pero resulto ser que me quedaba muy grande incluso las mangas no me permiten sacar mis manos de lo largas que son, no es que yo sea bajito, pero esa remera es para gordos, ahora mismo le queda a Tomy como si fuera una bata, se ve muy lindo usándola, incluso se le sale el hombro izquierdo por el cuello de la remera además de que parte de las mangas le cuelgan de los brazos, no ha podido sacar sus manos, solo tiene puesto unos bóxers que se había traído de su casa, al parecer el muy pillo venía dispuesto a hacerlo conmigo jeje, pero aun así no me molesta, el que él quisiera que yo fuese su primera vez, me hacía sentir genial, mi niño en serio me amaba, wow, creo que ya lo he dicho muchas veces, pero me cuesta pensar en otra cosa.
Estábamos acostados en mi cama viendo la tele cuando de pronto escuché que alguien tocaba la puerta, Tomy se quedó viendo la tele mientras que yo bajé las escaleras hasta abrir la puerta, al asomarme… no había nadie, cosa rara, cerré la puerta y de pronto, cuando volvía a subir por las escaleras tocaron la puerta de nuevo, admito que estaba asustado, pero también fastidiado porque me quitaban tiempo con mi niño. Abrí la puerta una vez más y no había nadie, pero escuché un ruido extraño viniendo del patio trasero, recordé que había un bate tras un arbusto de la casa, lo tomé y me armé de valor para ir a investigar, claro que cerrando la puerta, Tomy estaba adentro, no podía permitir que le pasara nada. Comencé a caminar hacia el patio trasero aun con el bate en la mano, este era de metal, rígido y un poco pesado, cuando llegué no noté nada extraño, no había nadie, iba a voltearme, pero de pronto sentí que alguien estaba detrás de mí, me empujaron haciéndome caer al suelo, cuando pude ver, vi que eran esos tres malditos, Jeff y su grupo de secuaces.
-¿enserio creíste que podías golpearme y salitre con la tuya perra?
-solo pensé que podía irme si distraía a la puta mayor- dije desafiándolo.
-con que la puta mayor... golpéenlo- indicó Jeff a dos de sus secuaces que estaban a su derecha.
Se acercaron y mientras uno me sostenía agarrándome por la espalda, el otro me golpeaba dándome puñetazos por todos lados, en el rostro, en los brazos, el pecho y las piernas, de algún modo podía resistir cada golpe, pero si esto seguía así, no duraría mucho y seguro me matarían, “siguiente”, le indicó Jeff a otro de los que estaban ahí, este cambió de lugar con el anterior y empezó a golpearme del mismo modo, cuando sentí que no podía más, me moví esquivando el golpe, el golpe alcanzó la cara del que me sostenía, al impactar, logré liberarme para luego echarme a correr lejos de ellos, me dolía el cuerpo, pero aun así debía salir de ahí, no podía entrar a la casa, Tomy estaba ahí, si ellos lo veían de seguro lo podrían matar, salí corriendo hacia otro sitio mientras ellos me daban caza, había un lugar donde podía perderlos, una construcción cerca del área, ahí podría esconderme y perderlos para escapar hasta mi casa hasta que se tranquilicen las cosas.
Ya en la construcción seguía corriendo, buscaba un sitio donde ocultarme ya que el ejército de bravucones se acercaba, vi un almacén de cajas de aduana, quizás ahí guardaban algunas herramientas, equipos de construcción y cosas por el estilo, pero para llegar hasta allá debía pasar por la estructura de la construcción, cosa que no sería fácil dado que habían muchas cosas tiradas ahí, ninguna útil para defenderme, pero si para estorbar, entré a la zona de la estructura, tenía a esos imbéciles muy cerca, pero algunos tropezaron con ladrillos y otras cosas, dándome chance de poder adelantarme a ellos.
-¡atrapen a ese maldito!- gritaba Jeff a lo lejos.
Finalmente pude entrar en el almacén, es enorme y hay muchas cajas de aduana, las luces están apagadas, será útil para perderlos, tomo mi teléfono y alumbro un poco buscando un sitio donde esconderme, hay un contenedor abierto, entro en él y me siento a esperar a que esos malditos se vallan, entraron en el almacén a oscuras… ¡maldición, encontraron el interruptor de la luz!, ahora todo el sitio está iluminado, no puedo hacer nada, me escondo tras una caja dentro del contenedor.
-¡búsquenlo y tráiganmelo!- ese imbécil de Jeff, se nota que no piensa rendirse.
Aun sigo escondido, de pronto, uno de los secuaces de Jeff pasa cerca del contenedor, se asoma a ver que hay dentro pero… no me encontró… es un alivio. “no está por ningún lado”, dice uno de sus secuaces, “se nos escapó, maldita sea”, supongo que me he librado de esta, creo que por fin podré irme a casa.
-¿y ahora qué hacemos?- pregunta unos de los secuaces.
-ahora que lo recuerdo, ese niño que siempre está con la marica de McNeil está en su casa, lo vi entrando con él en la tarde- nos vieron entrar a mi casa, Tomy…
-¿Qué propones?- preguntó otro.
-… vamos a casa de McNeil y hagamos que el niño pague la deuda de esa perra por el- ¡¿Qué?!
-¡si, vamos!- gritaban todos esos hijos de puta.
Van a matar a Tomy, maldición, no sé qué hacer, si voy me mataran a mí, pero si no salgo mataran a Tomy… solo me queda una opción lógica… los siento Tomy… pero no creo que hoy vuelva a casa…
-¡¿Qué no me querían a mi?!- les grité a esos imbéciles que salían del sitio.
-¡ahí está, atrápenlo!- gritó Jeff indicándole al resto que me atacaran.
Esos malditos se acercaron a mí con intenciones de golpearme, me puse en posición de combate y me preparé para pelear, el primero intentó darme un golpe en el estomago, lo evadí y le propiné una patada en la cabeza logrando que cayera al suelo, el segundo se fue acercando a mi derecha, me sorprendió por completo y me dio un puñetazo en la cara, pero otro se acercó y me dio un golpe en el estomago con su rodilla, caí al suelo y escupí sangre, pero otro me tomó por la espalda y me lanzó contra un contenedor, golpeando mi cara contra el metal de este una y otra vez, luego me lanzó al suelo y otro sujeto me pateo en el brazo con fuerza fracturándomelo, el dolor era insoportable, era como si un camión me hubiera aplastado el brazo, el hueso no salía, pero la fractura se sentía, entonces otro tomó mi cabeza y la batió contra el suelo 3 veces, luego me dejaron descansar, tenía una herida en mi cabeza, salía mucha sangre de ella, estaba tirado en el suelo… cubierto de mi propia sangre… ver ese charco me hacía sentir mareado, iba a morir… pero al menos pagué mi deuda, ahora no mataran a Tomy… poco a poco, mi vista se nubla y se torna oscura… estoy a punto de morir… Tomy… no quiero que sufras nunca… te amo… espero que nos podamos volver a ver algún día…
Finalmente… morí…
¿O no?
Aun sigo rodeado de ese charco de sangre, pero sé que no estoy en el almacén… ni siquiera veo a Jeff o a sus secuaces por ningún lado… es como si estuviera en un lugar vacio y oscuro… algo se escucha, escucho pasos que retumban por todo el lugar como un eco de forma constante… el sonido se detuvo, ¿Dónde estoy?
-de pie…- me dice una voz… es mi voz, pero no soy yo el que está hablando.
-… - sigo la orden y me pongo de pie, por alguna razón, mi cuerpo no me duele.
-¿Cómo te llamas?
-Mathew… Mathew McNeil…- estoy aterrado, no veo por ningún lado a la figura que emite ese sonido, el de mi voz…
-Mathew… patético.
-¿disculpa?
-he dicho… patético…
-espera un momento, no soy patético…
-¿entonces por qué estás muerto?
-¿estoy muerto?- maldición… entonces es cierto…
-en realidad no, aun sigues con vida, pero morirás pronto.
-bueno… al menos viví una vida plena…
-¡silencio!- gritó la voz retumbando por toda la habitación como un eco- eres una desgracia total, no tienes sentido de un guerrero.
-¿de qué me estás hablando?
-eres una vergüenza para nuestro padre…
-¿nuestro padre?, ¿de qué coño me estás hablando?
-recuerda a nuestro padre… Ares…
-un momento, tsk, esto es ridículo, no soy el hijo de un tal Ares, es imposible…
-¡silencio!- volvió a gritar la voz- no es tu padre, es cierto… pero el te acogió y te salvó la vida en la guerra de Troya, eres un total mal agradecido... un cobarde.
-oye, ya es suficiente, yo me largo de aquí.
Comencé a caminar por el sitio, no me importaba a donde llegara con tal pudiera alejarme de esa voz.
-dime Mathew… ¿a que le temes?
-¿de qué me estás hablando?
-¿le temes a los monstruos?
De pronto, sentí respiraciones por todos lados así como gruñidos y chasquidos, me sentía acorralado e indefenso.
-ocultos en la oscuridad, sin manera de poder ser vistos, te acechan en las sombras anhelando tu carne y tu alma.
Algo me tocó el cuello, se sentían como garras rozando contra mi cuello, así como mi espalda, sin embargo, una horrible voz gritaba a mi oído con desesperación. “¡carne!”, caí al suelo aterrado.
-Oyes sus gritos de desesperación, anhelan comer carne humana, anhelan beber tu sangre y tragarse tus entrañas, su locura los obliga a ser animales sedientos de sangre… pero otros buscan venganza, quieren acabar con aquellos quienes ha profanado sus vidas, quieren… matar a los culpables de su muerte…
Luego sentí que alguien me tocaba el pecho… de pronto de la nada una cara horripilante me sonreía con sus dientes afilados mostrando estar cubiertos de sangre y vísceras, sus ojos eran una cosa que jamás había visto, eran como los de un demonio en persona… esa cara… era la de mi mejor amigo de primaria… necesitaba un donante de sangre, pero yo tenía miedo, me rehusé a donar sangre y en 3 días murió… la cara se abalanzó sobre mí gritando con locura y furia y desapareció dejándome aterrado por completo, las respiraciones y sonidos se detuvieron en ese instante.
-¿Qué tal… a los insectos?
De pronto sentí hormigueos y picaduras por todos lados, mis ojos, piernas, sentía como algo trepaba por mi espalda, no podía ver nada, pero se sentía como una araña… una araña enorme…
-cucarachas, gusanos y otros insectos trepan por tu cuerpo, consumiéndote lentamente por dentro y por fuera, te devoran hasta no dejar ni huesos sin perforar.
No pude ser… mi cuerpo está cubierto de insectos… la sangre brota de las heridas que me hacen en la piel, puedo sentirlos por todos lado, entran por mi nariz y por mi boca, saben asqueroso, cierro los ojos entre una gritería desesperada por quitármelos de encima…
Los insecto… ya no están… mi piel está completamente limpia, no tengo heridas.
-¿o que tal… a la muerte?
Algo se acerca a mis pies, es algo liquido… sangre… es un rastro… de pronto el rastro de sangre se acumula bajo mis pies y forma caminos hacia otros lados no muy lejos de donde estoy.
-la sangre de tu familia y amigos se acumula bajo tus pies, como un lago extenso reflejando el vacio de sus cuerpos, liquido rojo vital esparcido por todos lados en una masacre sin escalas mostrándote la culpa de tu cobardía, por no salvarlos… están muertos…
Algo se ilumina, un suelo de concreto manchado de sangre, a mi alrededor están apilados muchos cadáveres… no puede ser… mamá… papá…no es posible...
-tus familiares han caído bajo la guadaña de la parca a sangre fría mientras tú te ocultas en las sombras esperando que el verdugo no te encuentre con su farol oxidado cubierto con telarañas y adornado con los ojos de sus víctimas simbolizando los trofeos de sus ejecuciones…
-¡déjame en paz, por favor, déjame!- gritaba con desesperación.
-¿pero que harás cuando a la final… el mundo se llevé a lo que tu mas amas?
-Mathew- … esa voz… Tomy…
Lo veo aun de rodillas en el suelo, es Tomy, está de pie frente a mí, se ve bien, está a salvo…
-Tomy, me alegra ver que… Tomy…
Algo se acerca a Tomy, es una persona, su cuerpo es lampiño, no posee rostro y tiene un aspecto esquelético… tiene una guadaña oxidada en sus manos… se prepara para atacar a Tomy… ¡maldición, no!
-¡Tomy, aléjate de ahí, corre!
-es raro, si tanto me amas, entonces ven y sálvame- decía con tranquilidad, pero yo estaba aterrado hasta no poder mas.
-¡que te quites de ahí!- intenté ponerme de pie, pero mi cuerpo no me dejaba levantarme, mis pies estaban pegados al suelo.
-¿no piensas salvarme?... entiendo…
-no… Tomy, no es lo que parece, mis pies…
-bueno… adiós Mathew… y pensar que enserio fuiste algo para mí.
-no, Tomy espera…
-adiós.
-¡Tomy!
Logré ponerme de pie, pero tropecé cayendo al suelo, intenté ponerme de pie, pero… lo escuché… el sonido del arma clavándose en la carne… no podía moverme, no quería ver eso, no enserio que no quería… ese olor… algo se acumula frente a mi mientras mi rostro mira hacia el suelo, es liquido… sangre… viene de donde estaba… se refleja mi rostro en ese liquido… Tomy…
-¡¡¡¡¡NOOOO!!!!!- grito con fuerza, incluso siento como mi voz se desgarra, golpeo el charco de sangre con mis puños, pero se me pasó por alto que el impacto terminaría manchando no solo mis puños, sino también mi cara.
-¿Cómo se siete el dolor, Mathew?
-¿Qué quieres de mi?, ¿Por qué me haces esto?
-para enseñarte lo que tu cobardía podría terminar logrando, la única vez que fuiste valiente por primera vez en ut vida, fue cuando ese niño al que tanto amas estaba en peligro, pero aun así, el morirá…
-no es cierto, ya pagué mi deuda con Jeff… no le harán nada.
-¿estás seguro?, en estos momentos, tus enemigos se dirigen a tu casa a buscar al niño para golpearlo… lo mataran…
-imposible… Ese maldito Jeff…
-puedo sentirlo, jejeje, esa sed de sangre, corre por todo tu cuerpo.
-sí…
-anhelas las cabezas de ellos, ¿no es así?
-sí…
-¡quieres verlos muertos, que su sangre esté en tus manos mientras te burlas de sus cadáveres y de lo que fue de sus miserables vidas!
-¡sí…!
-entonces acéptame, acepta lo que te ofrezco, acepta al alma que vivió contigo durante años esperando a despertar, acéptame a mí, hermano… recuerda tu nombre…
-mi nombre…- en ese instante, ya no estaba en mis cabales… ahora era alguien diferente…
-¡tu nombre hermano, el nombre con el que fuiste bautizado por nuestro padre… recuérdalo!
-mi nombre… Kratos…
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Pov´s Jeff
-vámonos de aquí, dejemos que ese imbécil se pudra en el suelo- indiqué a los muchachos.
-¿Qué hacemos ahora jefe?- me preguntó uno de los muchachos.
-vamos a la casa de “McPerra”, me muero por conocer a ese niñito, además, estoy seguro de que le encantará que le hagamos una visita, después de todo, podemos pedirle que nos haga algún trabajo… así sea a la fuerza.
-jefe, ese niño no se dejará tocar por nadie, tomémoslo y amarrémoslo a una silla, de ese modo será más dócil.
-suena bien… de hecho, mejor traigámoslo y hagámoslo frente al cadáver de McNeil…
Se apagaron las luces… ¿Qué está pasando?... acaban de volver a encenderse… ¡no puede ser, el cadáver de ese maldito ya no está, eso es imposible!... alguien gritó, un minuto, nos falta uno, falta uno de los muchachos… otro grito… ahora falta otro, quedamos 5… ¿Qué está pasando… otro grito, se puede escuchar como si alguien… estuviera siendo mutilado… quedamos 4… acabo de pisar algo liquido, que coño… ¿sangre?, pero… no, es imposible que… algo me cayó en la cabeza, ¿a caso hay una gotera en este almacén?... ¡maldición!, es sangre, viene de… no… es uno de los muchachos, está clavado a una viga en el techo… por accidente tropiezo con algo… no puede ser, es la cabeza de… no, imposible, esto es un mal sueño, solo un mal sueño, solo un mal sueño, solo un mal sueño…
-¡NOOOO, PERDONAME!- escucho a uno de los muchachos gritar con mucha fuerza, pero el grito se corta con el sonido de un desmembramiento…
Empiezo a correr buscando alguna salida, nada de esto tiene sentido… maldición, la puerta de atrás está cerrada… hay una puerta en el frente a parte de la entrada principal, si llego a ella, podré salir. Algo cae en el suelo mientras corro… es el cadáver de… mierda, esto es un sueño, solo un sueño, despertaré una vez que salga de aquí, salto sobre el cadáver pero resbalo con la sangre, logro recuperar el equilibrio y me mantengo corriendo hasta que finalmente llego a la puerta… está cerrada… está cerrada, está cerra… ¡mierda!, caí sobre… ¿sangre?... es un charco entero, estoy empapado de sangre, mi ropa entera está teñida de rojo…
-Hola Jeff- esa voz… es imposible que ese maldito siga con vida…
-McNeil… ¿eres tú?
Me levanto a ver el origen de esa voz… McNeil… es McNeil… sus manos están llenas de sangré así como su ropa, su rostro apenas tiene algunas salpicaduras… ¿Qué?... su cabello, ahora es blanco… sus ojos… sus ojos son… imposible, de seguro es el reflejo de la sangre en sus ojos, o algo así… no, no lo es… el iris de sus ojos es de un color rojo intenso… como si fuera…
-¿Qué pasa Jeff?, ¿acaso viste a un fantasma, o… a un demonio?- dice de un modo natural pese a estar cubierto de sangre… ese no es la perra de McNeil…
-tu… tú no eres McNeil…
-jajá… es cierto, nos soy McNeil… nunca lo fui… ese solo era un nombre.
-entonces, ¿Quién eres?
-me llamo Kratos, nacido 4 meses antes de la guerra de Troya, muerto al final de la guerra de Troya, renacido el 6 de marzo de 2015- esa… esa es la fecha de hoy.
-entonces… ¿Qué quieres?
-solo… quiero limpiar la mierda que cagaron tus padres en el jardín, casualmente dicho excremento fue bautizado como… Jeff…
-hijo de perra… eres un maldi…
No pude terminar de hablar porque… ese imbécil me lanzó una viga al abdomen clavándome a la pared… el dolor es insoportable, lo peor es que aun sigo con vida…
-dime Jeff… ¿a que le temes?
Intento zafarme de la viga, pero el dolor es insufrible… se… se acerca a mi caminando… me va a matar…
-por favor McNeil, perdóname- pido entre lloriqueos y suplicas.
-¿le temes a… los monstruos?- dice para seguidamente lanzarme una viga clavándomela en la mano contra la pared.
-¡por favor, perdóname!
-¿a los insectos?- seguidamente clava una viga en mi pierna lanzándomela.
-¡¡perdóname!!- ya no puedo soportarlo más… no quiero morir…
-entonces… ¿le temes a la muerte?- ahora completamente cerca de mí, seguidamente me clava su mano en el estomago… ¿Por qué aun sigo con vida?... ¡que alguien me mate!- ¿te duele?
-mátame, por favor, mátame rápido.
Ese… monstruo se acerca me hace una pequeña cortada en la mejilla y… ¿me da un beso en la mejilla?... sus labios ahora están manchados de sangre, se la limpia relamiéndose los labios, chasquea un poco como si degustara una bebida deliciosa…
-mmmm, sabe un poco amargo, como si fueran vísceras de ave carroñera mezcladas con tripas de pescado y rata cruda- dice con una sonrisa… está feliz…
-… - yo solo me quedo llorando ahí… esperando la muerte aunque quiero que sea rápida e indolora.
-te duele mucho, ¿no?... dime a que le temes Jeff.
-no le temo a nada… no te tengo miedo.
-¿en serio? , de acuerdo- aun sigue con su actitud alegre.
Ahora, me está lamiendo el rostro… ¡maldición, mi ojo, metió sus dedos en mi ojo!... ahora solo me queda un ojo, el otro ni siquiera lo siento… no puede ser… está en su mano…
-¿a que le temes Jeff?
-¿Por qué me lames y me besas?
-es bueno que cuando algún ser maldito muera, este sienta algo de cariño antes de morir… ¿no crees?... ¿a que le temes?
-yo… perdóname…
-ya entiendo… me tienes miedo a mí, ¿no es así?
-sí, te tengo miedo.
-ya veo, en ese caso acabemos con esto, ¿sí?
-me parece bien.
-ok, repite después de mi… “quédate tranquilo”.
-quédate tranquilo.
-“no llores mas”- el limpia mis lagrimas de mis ojos.
-no llores mas.
-“cierra los ojos”- seguidamente cierra mis ojos moviendo con delicadeza mis parpados.
-cierra los ojos.
-“deja de sufrir”- ahora me acaricia el rostro.
-deja de sufrir.
-“esto no va a doler”- ahora acaricia mi frente.
-esto no va a doler.
-“pues todo acabará”- ahora acomoda su mano como si fuera un puño sobre mi frente.
-pues todo acabará.
-“con el golpe final”- siento como la mano convertida en puño se aleja lenta lentamente.
-con el golpe final…
-…exacto…
Fin del Pov´s Jeff
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Y con un último golpe aplastando su cráneo… el ser inmundo… muere en mis manos… en las manos… del nuevo dios de la guerra…