Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Cita a ciegas por Lemonie

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola(?) He tenido tantas ganas de escribir estos días y esto surgió de mi cabecita mientras veía mtv tranquilamente. Bueno, es breve pero tiernito -Creo, no prometo nada(?)-. Hehe, el Hojong es uno de mis gustos secretos así que puede que muy de vez en cuando suba algo de ellos.

 

Espero que lo disfruten~

Hoya en esos momentos no sabía si realmente estaba arrepentido de la decisión que había tomado. El pobre chico estaba sentado sobre su cama con la vista perdida en una de las ventanas sin saber qué hacer en la víspera de un día tan especial en donde había decidido cruzar la línea que separaba la amistad de un profundo sentimiento amoroso.

 

Howon o Hoya, como le llamaban sus amigos, nunca había tenido sentimientos tan fuertes como los que tenía por Sungjong, alguien que antes habría calificado como su mejor amigo. Y decía antes porque hace algunos meses el mayor había comenzado a notar que todo era distinto cuando estaba con el menor; se le quedaba mirando o trataba de encontrar cualquier excusa para pasar más tiempo con él y aunque aquello no fuera un problema tan grave, Hoya no podía evitar sentirse intranquilo. Debía tomar una decisión.

 

No fue hasta hace un par de días que el moreno había decidido seguir el consejo de Dongwoo de confesarle sus sentimientos pero de una manera no tan usual, una que no resultara obvia a los ojos de Sungjong que, en ocasiones, podía ser tremendamente perceptivo. No, esta vez, Hoya tomaría ciertas precauciones siguiendo las indicaciones y consejos que había escuchado de su hyung y si es que llegaba a tener suerte, quizás todo saldría bien.

 

* * * * *

 

Los nervios aún seguían invadiendo la mente de Hoya. Al despertar lo primero que sintió fue como sus manos temblaban con en el sólo hecho de pensar que tendría al menor para él solo aquel día desde principio a fin. Se levantó sin buscar ropas demasiado vistosas, eso sería algo que más tarde se encargaría de hacer junto a aquel chico que tenía un exquisito gusto en cuanto a moda. De sólo recordarlo Hoya sonrió y negó un par de veces antes de golpear sus mejillas haciendo un intento para espabilar. No podía desconcentrarse de esa manera.

 

Ding dong

 

Y Hoya de inmediato se puso en pie, casi como un acto de reflejo. Ya sabía quién era a pesar de no haber recibido una llamada o un mensaje con anterioridad. Tratando de disimular sus ansias y esconder la boba sonrisa que se enmarcaba en sus labios se dirigió hasta la puerta principal de su apartamento para abrir la puerta y ver finalmente quién estaba ahí.

 

— Pensé que tenías una cita hoy y estás así. Dios que necesitas mi ayuda —Dijo sin siquiera saludar el chico que lucía su cabello de un castaño no muy largo, pero tampoco muy corto. El mayor se hizo a un lado para que pasara y por fin poder cerrar la puerta.

 

— ¿Ni un saludo me merezco? ¡Recién llegas y lo primero que haces es regañarme! —Exclamó el moreno, fingiendo estar serio antes de soltar una pequeña carcajada.

 

— Está bien, está bien. Lo siento pero si alguien debe decírtelo, tengo que ser yo. No atraes a nadie con eso puesto.

 

— Y es por eso que te necesito.

 

El mayor de inmediato notó que los ojos del chico del cual estaba enamorado mostraban cierta sorpresa que le hizo ensanchar su sonrisa. Sin decir otra palabra se apresuró a tomar su brazo y llevarlo a su habitación.

 

— ¿Me puedes decir por qué me necesitas? —Preguntó finalmente el menor—. Pensé que me habías dicho que querías que te diera mi apoyo moral antes de ir en tu supuesta “cita a ciegas”, no que escogiera tu ropa.

 

— Bueno, también para eso —Hoya comenzó a buscar en su ropero ganándose casi de inmediato una mirada de desaprobación del menor quien antes había tomado asiento sobe la cama y no había pasado ni un segundo en ese lugar para ponerse en pie y apartar a Hoya del ropero—. ¡Hey!

 

— No puedo creer que aún sigas con tu obsesión con las cosas moradas —Le regañó Sungjong mientras buscaba algo que no tuviera aquel predominante color—. En realidad, sí que necesitas mi ayuda.

 

Hoya tan sólo se le quedó mirando y no se dio cuenta cuando el castaño había sacado un par de pantalones negros junto con una playera blanca bastante casual con un diseño minimalista. Se las mostró con una sonrisa y Hoya hizo una mueca sin estar muy convencido.

 

— No me digas. Extrañas el morado —Le imitó el menor y rió—. Vamos hyung, tú me pediste ayuda y eso es lo que estoy haciendo. Yo sé con lo que te ves bien y créeme, esto es para ti.

 

— Si tú lo dices —Y el moreno no podía evitarlo, pero por lo menos sabía que se hacía un favor a sí mismo escuchando los consejos del menor. Después de todo, al final todo era para él y nadie más que él.

 

Sungjong tan sólo le dio la espalda sin revelar que por el rabillo del ojo a veces espiaba disimuladamente la figura de su amigo. Se quedó en silencio hasta que una pregunta surgió de sus labios mientras escuchaba al otro cambiar todas sus ropas.

 

— Y dime… ¿Podrías contarme todo este asunto nuevamente?

 

— ¿El qué? —Dijo Hoya cuando terminaba de arreglar la playera y se miraba en el espejo de la habitación sonriéndole a su reflejo. En verdad se veía bien.

 

— Esto de la cita —Y finalmente, Sungjong le observó un poco más serio, quizás hasta más interesado por el asunto—. ¿Estás seguro de esto? Digo, podrías esperar a alguien adecuado, a alguien que conozcas.

 

— Ya te había dicho que le he contactado por internet. Hablamos a menudo y llegamos a la conclusión de que deberíamos llevar un poco más allá la relación, es todo.

 

— No me da confianza —El menor frunció un poco los labios al igual que el ceño sin saber qué esperar realmente.

 

— Nada te da confianza, Sungjong —Y de un momento a otro, Hoya estaba delante del chico que continuaba sentado y desordenó sus cabellos como si tratara de tranquilizarle—. Tu hyung sabe lo que hace, lo menos que puedes hacer ahora es apoyarme en esto, ¿No? Después de todo, somos amigos.

 

— Claro, amigos.

 

Ambos se miraron por segundos que parecieron ser algo eterno sin decir otra palabra. Eso era más común de lo que parecía, pero para Hoya, esas instancias precisamente en ese día no eran algo que fuese lo más apropiado. Se apartó con la excusa de ver su reflejo y preguntarle nuevamente la opinión al menor que se veía un poco desanimado, pero de igual forma le dio su voto de confianza de que realmente se veía atractivo.

 

Ya no quedaba nada para la gran sorpresa.

 

* * * * *

 

Estaban estacionados en el área de Hongdae. Habían estado charlando animadamente durante el trayecto hasta que Hoya se había detenido y ahora un silencio bastante profundo se había posicionado sobre ellos. Ninguno decía nada pero a pesar de eso, sus miradas se encontraban furtivamente mientras que sus suspiros hacían acto de presencia a ratos.

 

— Sungjong… Debo ir hasta el restaurant que he acordado con este chico, ¿Me darás apoyo moral hasta llegar allá?

 

Sungjong pareció dudar por unos momentos mientras su expresión parecía seria y luego de unos segundos cambiaba a una totalmente suave. Hoya sintió algo muy dentro de él por esa sonrisa, pero se mantuvo en silencio diciéndose a sí mismo que ya no tendría que callarlo por mucho más tiempo.

 

— Está bien, vamos, te acompañaré para que no te pierdas en el camino —Bromeó y finalmente, ambos caminaron juntos hasta la entrada de un restaurant—. Sabes… Como amigo te puedo decir que seas tú mismo en esa cita y no trates de impresionarlo actuando o haciendo cualquier idiotez. Así como eres atraes bastante, sólo eso.

 

— ¿Algún otro consejo? —Preguntó sabiendo que no aguantaría demasiado guardando el secreto. Cuando menos lo esperó, el castaño se le acercó para arreglar un poco la chaqueta que traía puesta, dejando todo en su lugar, o eso era lo que suponía.

 

— Nada de besos en la primera cita.

 

— ¿Es en serio? —Preguntó entre carcajadas viendo como el menor le asentía. La risa de ambos se esfumó y nuevamente tan sólo se limitaron a mirarse en ese silencio que Hoya se encargó de romper después de haberse mordido el labio con cierto nerviosismo. Días pensando en lo que iba a decir y las palabras ya no querían salir de su boca, pero alguna manera se las arregló—. Sabes Sungjong… Te tengo que confesar algo antes de encontrarme con mi “cita a ciegas”.

 

— ¿Qué es? — Preguntó el menor con una expresión de confusión estampada en el rostro.

 

— Es que… No hay ninguna cita a ciegas la verdad.

 

— ¿Qué? Espera, eso quie-

 

— Déjame terminar —Le detuvo Hoya cuando ya sabía que se venía un completo discurso de porqué había dicho eso y más aún, le había hecho participar de alguna forma—. Pero sí tengo una cita. Esa cita es para un chico del cual estoy realmente enamorado y que ahora estoy viendo en estos momentos.

 

Sungjong abrió la boca con levedad sin saber que decir. Sin duda que había sido una sorpresa.

 

— Al fin y al cabo… Todo esto es para ti, Sungjong. De verdad —El mayor respiró hondo antes de decirlo y le sonrió al menor quien no daba crédito a lo que estaba escuchando—… De verdad, me gustas. Estoy enamorado de ti y me gustaría…

 

—Idiota —Y el menor le abrazó, rodeando su cuello mientras esbozaba la sonrisa más amplia que Howon había visto en su vida por su parte—. Y yo temiendo que te perdería. Claro que quiero.

 

— Aún no te he dicho nada.

 

Sungjong tomó un poco de distancia sin soltar su cuello y frunció un poco sus labios—: Entonces apresúrate y pregúntalo.

 

— ¿Quieres ser mi novio?

 

Y como una respuesta que Hoya jamás espero, Sungjong ya se había acercado hasta su rostro para comenzar su primer beso como una pareja oficial. El mayor sonrió sobre las carnosidades del menor, las cuales permanecieron estáticas, tan sólo disfrutando de esa presión que tenía el encanto de un beso casto pero lleno de sentimientos.

 

— Pensé que nada de besos en la primera cita —Bromeó el moreno al separarse.

 

— Cállate y entremos al restaurant —Respondió de inmediato el menor, restándole importancia.

Notas finales:

Gracias por leer ; ; No es la pareja más popu de Infinite pero es una que me causa ternura. Es la primera vez que escribo de ellos y aunque sea así, espero que les haya gustado <3.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).