Capítulo 3.- La consulta médica más temida
Seiya estaba caminando por los pasillos del hospital y hablaba por teléfono con su hijo menor que no había ido a la escuela porque estaba algo agripado pero no era nada grave, el castaño estaba un tanto aprensivo porque estaba en camino a la cita que tenía con Ikky y su esposo, ese no era un buen prospecto la verdad, por lo menos no para él
- Si pollito, no me olvido te lo juro – dijo el castaño a lo que entraba a su oficina, Ikky y Hyoga ya estaban allí, Ikky estaba de pie frente al librero y miraba una foto que tenía Seiya allí de sus hijos, Hyoga estaba sentado en la camilla y ya estaba usando solamente una bata, el rubio estaba por demás incómodo, en sus manos tenía muchos papeles de los resultados de sus exámenes, rayos x y demás cosas que serían útiles para la evaluación que tenían por delante
- ¿?
- No no no, me niego a comer pizza otra vez, ya comimos pizza el lunes, por qué no llamas al restaurante de comida china o algo?, aunque deberíamos comer una ensalada y un asado, eso es lo que en verdad quiero, mejor dile a tu hermano que llame a tu tía y nos lleve un asado a la casa, no crees que nos hace falta comer comida real de vez en cuando?
- ¿?
- Ok., yo también te amo, chao pollito – Seiya colgó el teléfono y sonrió a manera de saludo al decir: - Lo siento, planes de cena impostergables, cómo estamos? – el castaño vestía sus ropas azules, él atendía consulta pero le resultaba más cómodo trabajar con su ropa usual de quirófano, lo malo era que nunca tenía bolsillos
- Estamos bien Seiya, muchas gracias por recibirnos sin mucha anticipación – dijo Ikky parándose junto a Hyoga y tomando su mano, este gesto hizo sentir seguro a Hyoga pero si le picó a Seiya en el corazón
- No te preocupes, ahora si… cuéntenme todo y empiecen desde el principio
Seiya se quedó de pie arrimado a su librero y escuchó con atención lo que Hyoga contó, al inicio el rubio estaba algo nervioso y cohibido, pero Seiya le empezó a hacer preguntas bastante técnicas, como lo habían hecho los otros médicos, luego miró sus exámenes, sus radiografías y todo, el tono de voz de Seiya era bastante tranquilo y algo impersonal, eso tranquilizó a Ikky porque le pareció muy profesional de parte de su ex, y por eso cuando les dijo que le gustaría practicar un eco, Hyoga no se negó, sino que se recostó en la camilla y trató de relajarse, Ikky estaba de pie a su lado mientras Seiya lo preparaba todo, él tenía un eco portable en su oficina, así como un electrocardiógrafo y un dopler fetal
El castaño descubrió el vientre de Hyoga y le aplicó el gel, luego pasó aquel aparatito cuidadosamente sin despegar los ojos de la pantalla, Hyoga no se dio cuenta pero Ikky si, Seiya frunció el ceño ligeramente, algo estaba mal, Ikky lo sabía pero esperó hasta que Seiya retiró el aparatito y le dio unas toallitas a Hyoga para que se asee y le dijo que podía vestirse
- Ok., y cuál es el problema? – preguntó Ikky que estaba mirando a Seiya que escribía en una cartilla
- No comas ansias, esperemos a tu esposo, no me gusta repetir las cosas dos veces – respondió Seiya tranquilamente sin levantar la mirada, Ikky bufó con impaciencia mientras caminaba por la oficina, el teléfono de Seiya sonó y el castaño sonrió al contestarlo, lo puso en altavoz porque seguía escribiendo en la cartilla, Ikky lo podía escuchar y se formó un nudo en su garganta, sus hijos nunca hablarían con él como hablaban con Seiya, que dijo sin tomar en cuenta a su peliazul ex esposo: - Hola hijo, cómo estás?, ya comiste?
- Si papá, el bicho está acostado en tu cama y se niega a moverse, lo bueno es que ya no tiene fiebre, sigue mocoso pero respira mejor que ayer
- Que bien, por favor no te olvides de su jarabe que está en el mesón de la cocina, si me guardaron un poquito de alguna cosa para la cena?
- Si papá pero si en verdad tienes hambre sería bueno que compres algo en el camino, y… oye… puede quedarse a dormir hoy mi amigo Han?
- Claro, solo no incendien la casa hasta yo llegar, no ignores a tu hermanito por favor, mira que está enfermo y se pone sensible cuando se enferma
- Ok., ok., entonces podemos jugar wii en tu cuarto?
- Si, solo no salten mucho en mi cama, si me la rompen yo duermo en tu cuarto y te abrazo como peluche, estás advertido
- Bueno papá, no llegues tarde, tengo un deber de biología y necesito que me ayudes, bueno que nos ayudes a Han y a mi
- Claro… solo para eso me quieres cerca, no?
- Ay papá no seas dramático, nos vemos en la noche, te quiero papá
- Y yo a ti Tak, nos vemos en la noche, y es en serio lo de que no incendien la casa
- No te angusties, si recargamos los extintores el mes pasado
- Graciosito…
- No te estreses papá que te arrugas, bye
- Bye
Seiya colgó el teléfono y siguió escribiendo, miraba de vez en cuando los resultados de los exámenes y del eco que acababa de hacer, Ikky lo miró y preguntó:
- Qué le pasa a Ryu?, tiene problemas respiratorios? – para beneplácito de Seiya, Ikky sonó genuinamente preocupado
- No, tiene gripe y se pone súper molestoso y se hace bebé para que lo atendamos, ya lo revisó mi amigo Shaka, ya lo medicó y ha pasado en casa ayer y hoy, ya mañana lo mando a la escuela, no te apures que no es nada grave
- Qué tan seguido se enferma?
- No muy seguido, sino que la gripe está de peste en la escuela, y aunque no me lo creas Tak es muy buen enfermero, pero quiere ser músico, bueno… ya que… no creo que vaya a ser médico como yo
- Mucho menos va a querer ser empresario como yo
- Él quiere ser músico, bueno… por lo menos quiere ser músico ahora, el año anterior quería ser pintor, ya el año que viene querrá ser alguna otra cosa, tu sabes cómo son los chicos
- No… no sé cómo son, Seiya yo…
Ikky iba a seguir hablando pero fue interrumpido por Hyoga que salió del vestidor y se sentó en una de las sillas frente al escritorio de Seiya y lo miró expectante, el castaño acabó de escribir en la cartilla y miró su reloj, tenía una cirugía en 10 minutos, la revisión de Hyoga había tomado más tiempo de lo esperado pero, no lo podía hacer al apuro, precisamente por ser él, se tomó todo el tiempo del mundo para chequearlo todo bien y hacer una evaluación minuciosa
- Ok., esta es la situación, de lo que pude ver en el eco, tu matriz es fibrosa y tienes varios miomas pequeños en las paredes internas, pero hay uno en especial que es algo grande, eso es a lo que se referían los otros médicos al decir que necesitas una cirugía
- Entonces si necesito una cirugía?
- Si, el caso es medio complicado y necesitarás mucho reposo, los tratamientos hormonales que has recibido no han estado del todo mal, pero hay valores que están fuera de foco, necesito hacer más pruebas de sangre y de diferentes cosas para asegurarnos que tus valores se estabilicen antes de proceder con nada más, además hay que asegurarnos que los miomas sean benignos, en la mayoría de casos es así, pero luego de su extracción me gustaría hacer una biopsia
- Cáncer?, puedo tener… cáncer? – a Hyoga se le paralizó el corazón
- No… usualmente no es el caso, pero has estado en tratamiento hormonal por mucho tiempo, y eso siempre tiene consecuencias, en tu caso muy particular no veo nada extraño, pero me gustaría estar 100% seguro de ello antes de empezar un nuevo tratamiento, por eso necesitas hacer ejercicio en preparación para tu cirugía pero por favor nada drástico, hacer yoga es una buena idea, por favor no pilates o kickboxing ni nada de ese estilo, necesitas estar tranquilo y evitar a toda costa golpes en tu vientre o movimientos muy bruscos, entonces por favor no montañas rusas y esas cosas, las hormonas nos juegan malas pasadas con cambios de humor pero debes mantenerte lo más sereno posible, unos días en la playa no te caerían mal mientras trabajamos en limpiar tu organismo de toxinas – el tono de voz de Seiya tranquilizó en gran medida a Hyoga que por un momento ya se vio a sí mismo en la tumba
- Entonces… no tengo que hacer cambios drásticos para el tratamiento?
- No… tu modo de vida es bastante saludable lo que ayuda a acelerar el proceso, sigue como has estado hasta ahora, no alcohol, no tabaco, no drogas, y me gusta mucho tu dieta, yo debería comer lo que comes tú, pero mis hijos se niegan a comer cosas verdes, lo único verde que les ves comer, son los ositos de goma o los m&m – dijo Seiya lo que hizo sonreír a Ikky, Hyoga sintió alivio y preguntó:
- Y el sexo?, podemos tener sexo?
- Si, por el momento no hay problema, vamos a suspender las hormonas que has estado tomando por un par de meses en los que no es necesario controlar o monitorear nada hasta que te estabilicemos, luego vendrá la cirugía y luego si empezaremos con un tratamiento que tengo que diseñar para ti específicamente, me gustaría hacerte un estudio genético para ser lo más específicos y detallados posibles, también necesito hacerte un panel de amplio espectro sobre las alergias que puedes tener y tolerancia a los medicamentos y demás sustancias químicas, de esa forma el tratamiento al que te someterás será de bajo impacto para tu organismo pero obtendremos los mejores resultados, nos tardaremos algunos meses pero por el momento estemos optimistas
- Entonces si tenemos esperanzas? – Hyoga no lo podía creer, los otros médicos habían desestimado su caso y le decían que iban a intentarlo, lo que proponía Seiya sonaba complicado, laborioso pero parecía que obtendría mejores resultados, eso hizo feliz al rubio que apretó la mano de Ikky con emoción
- No lo podría afirmar en un 100% por ciento, pero tu caso no es el más complicado que he visto, yo creo que si existen posibilidades pero estaremos más seguros sobre la marcha
- Genial, son las mejores noticias que hemos escuchado, verdad Ikky?
- Si, la verdad si
- Muy bien, habla por favor con la enfermera Marin en la estación general de enfermería y ella coordinará con mi cronograma las próximas citas y eso, ahora me tengo que ir, tengo una cirugía y no me puedo atrasar, tengo que llegar temprano a casa, mi pollo está enfermo y no duerme si yo no llego
- Gracias Seiya, en verdad gracias – dijo Ikky y lo dijo en serio
- No me agradezcan todavía, aún nos falta mucho camino por recorrer
- De cualquier manera muchas gracias, y ya no te quitamos más el tiempo – Ikky se puso de pie y tomó la mano de Hyoga que sonrió feliz en este punto, Seiya solo tomó su gorrito y rodeó el escritorio para poder abrir la puerta de su consultorio, Ikky salió con Hyoga y se fueron directo a la estación de enfermería, Seiya caminó de vuelta a su oficina y fue a su vestidor, se cambió rápidamente de ropa y al salir se chocó con Kanon que venía entrando
- Hey, qué haces por acá? – preguntó Seiya con una sonrisa en los labios, él estaba algo contrariado pero el ver a Kanon siempre le alegraba el día
- La curiosidad mató al gato, quería ver al nuevo esposo de tu ex – respondió el peliazul entrando a la oficina de Seiya y jalándolo para que entre con él y cerrando la puerta tras de ellos
- Y lo viste?, están ahí todavía? – Seiya no se fijó si seguían ahí o no
- Si los vi, pero ya no están ahí, ya se fueron – Kanon abrazó a Seiya que lo abrazó de vuelta y apoyó su frente en el pecho del mayor que le acarició la espalda
- Que bueno, oye… recién te bañaste?, hueles rico – Seiya aspiró profundamente y cerró los ojos
- No, es mi aroma natural – Kanon rió y bajó su mano para acariciar descaradamente el trasero de su amante que sonrió y se puso de puntillas buscando los labios del peliazul para unirse en un apasionado beso, Seiya rodeó el cuello de Kanon con los brazos y el mayor pegó sus cuerpos tomándolo de la cintura, a Seiya le encantaban los besos robados que se daban en sus ratitos libres por los rincones del hospital, y esta era la primera vez que lo hacían en su oficina, Kanon era el médico que dirigía la sala de emergencias entonces casi nunca subía a los consultorios
Kanon coló una de sus manos entre las ropas de Seiya y le acariciaba suavemente la espalda mientras reclamaba su cuello, el castaño enredaba los dedos en sus azules cabellos y en eso estaban cuando la puerta del consultorio se abrió, Ikky abrió mucho los ojos al ver la escena, principalmente porque los amantes no se dieron cuenta que les habían abierto la puerta y continuaron con sus muy apasionados besos, Ikky estaba seguro de que Seiya no tenía nada con nadie, y el verlo ahora en brazos de otro hombre… le llegó al alma y le molestó más de lo que debería
- Tengo… cirugía… - dijo Seiya con dificultad
- No… pueden… empezar… sin ti…
- Ya estoy… atrasado… mmm….
- Atrásate… en serio… y hazme… el amor… - dijo Kanon levantando a Seiya del piso, el castaño rodeó el cuerpo del peliazul con las piernas y lo abrazó con más fuerza para no caerse
- No no no… mejor después… de la… cirugía…
- Yo te quiero aquí y ahora… me traes loco… - dijo Kanon caminando con Seiya a cuestas por la habitación y llegando hasta la camilla, en donde sentó al castaño que se sacó el gorrito que estaba puesto y metió las manos dentro de la camisa de Kanon, al parecer el peliazul lo había convencido, Ikky no lo resistió más y se aclaró la garganta sonoramente, Kanon y Seiya rompieron sus besos y se quedaron estáticos, Seiya no necesariamente empujó a Kanon ni mucho menos y muy intrigado preguntó:
- Qué pasó Ikky?, se les olvidó algo?
- Hyoga dejó su teléfono en tu escritorio, siento interrumpir – Ikky señaló el escritorio de Seiya y el castaño vio un teléfono extraño allí, así que hizo una seña para que entre y lo coja, Kanon miró al ex de Seiya que lo miró de vuelta, la tensión era palpable
- Necesitas algo más? – preguntó Seiya porque Ikky no se movía de dónde estaba
- Pero que malos modales los míos, mi nombre es Ikky Takamura, es un gusto… - Ikky se acercó a la pareja y estiró la mano, Kanon la tomó y la estrechó con fuerza al decir:
- Kanon Yamada, el gusto es mío – ambos hombres se quedaron mirando y apretándose las manos, Seiya los vio y meneó la cabeza, que par de imbéciles la verdad
- Bueno, el gusto es de todos, asumo que te está esperando tu esposo Ikky así que es mejor que te vayas, yo tengo una cirugía a la que ya estoy en verdad atrasado y tú también tienes que irte – Seiya saltó de la camilla cuando dijo esto y los separó, pero Ikky y Kanon se miraron con odio en ese punto
- Es verdad tengo que irme – dijo Ikky en contra de su voluntad, Kanon alzó la mano y se despidió con una seña y una cínica sonrisa que Seiya no vio porque le estaba dando las espaldas a su amante y miraba de frente a Ikky
- Adiós Ikky
- Te llamaré por lo del partido de futbol de Ryu, no me lo perdería por nada en el mundo
- Me alegro, bye
- Bye
Ikky salió del consultorio y le salían chispas de los ojos, dentro Seiya volvió hasta la camilla, tomó su gorrito y golpeó a Kanon en el estómago con él, el mayor se rió muy divertido y abrazó a Seiya por la espalda besando su hombro, el castaño hizo moción de resistirse pero no lo estaba haciendo con ganas
- Qué querías probar con Ikky?, quién es el más macho o algo así?
- No… pero quién crees que ganaría si lo hiciéramos?
- Yo, indiscutiblemente yo ganaría, par de inmaduros… habrá valor… – respondió Seiya con mucha seguridad, Kanon asintió sonrió encogiéndose de hombros para luego acercarse a su amante que estaba poniéndose el gorrito nuevamente y le ató el nudo en la parte de atrás, le besó el cuello y lo giró para besarlo en los labios una vez más y decir:
- Pues eso si, nos vemos luego de tu cirugía?
- Si, yo te busco en la tardecita, no es una cirugía complicada pero quien sabe, siempre puede haber complicaciones
- Suele pasar, por cierto… cómo sigue Ryu?
- Ya está mejor, ese jarabe que recomendaste le sentó de maravilla
- Me alegro mucho, ya vete que te van a mirar feo por llegar tarde, pero no te olvides de mi y no me dejes plantado Seiya, me puedes dejar con todo menos con las ganas que tengo de hacerte el amor
- Ok., no te apures que nos vemos más tarde, bye
- Bye
Seiya salió de su consultorio y caminó directo a los elevadores para llegar a los quirófanos, Kanon salió inmediatamente después y sonrió al caminar por el pasillo hacia el otro lado, él debía volver a la sala de emergencia, a lo que salía vio a Ikky con su esposo, el rubio estaba hablando y gesticulando con las manos, se veía feliz, estaban junto a la máquina de café, Ikky levantó la mirada y ambos se vieron, Kanon levantó la mano a manera de saludo y sonrió, Ikky estaba visiblemente molesto pero no había nada que pudiera hacer con Hyoga a su lado.
En la noche Seiya llegó a su casa y estaba algo cansado, su cirugía no se alargó, pero el break que tomó con Kanon si fue bastante largo y extremadamente placentero, al entrar a su habitación vio a sus dos hijos y al amigo de uno de ellos muy entretenidos jugando wii, Ryu botó el control por la cama y se lanzó a su padre que lo abrazó y sintió su frente, su pollito estaba con un poco de fiebre pero ya se lo veía mucho mejor
- Cómo te has sentido?, si te dio tu hermano el jarabe? – preguntó el castaño con su hijo en brazos, Ryu no lo soltaba todavía
- Si papá, no seas dramático – contestó Takeshi sin despegar sus ojos de la pantalla del televisor
- Ok., me alegra que no hayan quemado la casa en mi ausencia, traje una lasaña por cierto – dijo el castaño sacándose el saco que estaba puesto y lanzándolo al mueble
- Te guardamos comida china papi – dijo el pequeñito gateando por la cama para tomar su control otra vez
- No hay problema amor, me sacrifico y como dos veces, les parece bien si me ducho, cenamos y luego vemos lo de su tarea de biología?
- Si papá, ve tranquilo, por cierto… cómo te fue hoy?, fue… ese tipo a tu consultorio? – Tak puso pausa al juego y se volteó para mirar a su papá que asintió y dijo:
- Ese tipo es el esposo de tu padre, entonces deberías tratarlo un poco menos despectivamente, y si… si fueron
- Lo atendiste?, en serio? – Tak frunció el ceño y meneó la cabeza
- Hijo… guardar rencores no es bueno para el alma, entonces si lo atendí y lo voy a seguir atendiendo, tu deberías ser un poco más generoso con tu padre, él sufre por tu indiferencia – Seiya ladeó la cabeza y acarició la mejilla de su hijo mayor, el que lo abrazó y dijo:
- Yo no soy tan buena persona como tu
- Si lo eres, y yo no soy ningún santo, solo soy… práctico, el pelearme con tu padre no me conseguirá nada, el negarme a atender a su esposo tampoco, si los puedo ayudar pues lo voy a hacer, no te parece que es lo correcto?, no crees que es lo que debo hacer?
- No, ese no se merece nada – Tak le dio un beso en la mejilla a Seiya para luego voltearse y quitar la pausa del juego para volver a poner su atención en ello, Seiya suspiró y sin más entró al cuarto de baño
Mientras se duchaba, el castaño pensaba que la situación de Ikky era complicada, él sabía que su ex amaba a sus hijos pero Tak era bastante especial, él resentía inmensamente a Hyoga, el muchacho solía decir que él fue el causante del divorcio de sus padres, por él ellos se separaron, por él ellos ahora vivían en un departamento en el centro, era un departamento amplio y cómodo pero no se comparaba con la casa en la que antes vivían, la misma casa que ahora Ikky compartía con aquel que interfirió en el matrimonio de sus padres
A los ojos de Takeshi, Hyoga siempre sería “el otro”, y se lo había dicho muy claramente a Ikky, por eso sus relaciones se habían ido enfriando al pasar los meses, el muchacho no aceptaba nada de lo que su padre les enviaba, no aceptaba sus llamadas o salidas, no aceptaba nada, Seiya tuvo que tener muchísima paciencia para poder tranquilizar a su rebelde hijo, porque hubo una época en la que Tak estuvo dado al diablo y no se soportaba ni él mismo, ahora en cambio había volcado todo su cariño a Seiya y a su pequeño hermano, representaba una ayuda para su papá con el cuidado de Ryu, y nunca le armaba problema a su tía Seika, con la que se quedaban seguido por el trabajo y los horarios de Seiya, ganarse a Tak, o por lo menos lograr que sea menos agresivo era una tarea difícil que le esperaba a Ikky, Seiya solo esperaba que sea perseverante en ello y no se rinda, a la final, ese par de niños eran sus hijos
Luego de la cena, Seiya ayudó a los muchachos con su tarea de biología, y fue a su habitación a ver la televisión con su pequeño Ryu, el pequeño peliazul hablaba y hablaba sin parar, le estaba contando a su papá de sus clases, de sus amigos, estaba emocionado porque su papá Ikky le había llamado a preguntar como estaba, le había deseado que se mejore y le había prometido ir a su partido el domingo, Seiya sonrió al escuchar esto, por lo menos Ikky iba a cumplir su palabra, eso era algo
Cerca de la medianoche cuando Ryu ya estaba dormido, a Seiya le dio sed, así que se levantó y caminó por el pasillo de su departamento, sonrió al escuchar risas en la habitación de Takeshi, Han era un chico muy divertido, amigo de su hijo desde el jardín de niños, ellos más que amigos parecían hermanos, los papás de Han lo dejaban seguido en su casa porque el muchacho era hijo único, a Seiya le caía bien porque era un buen muchacho, a lo que volvía a su habitación con una botellita de agua en la mano se quedó de pie en el pasillo porque algo que escuchó le llamó la atención
- Entonces no vas a ir al partido?, Ryu no te lo va a perdonar – decía Han y sonaba con tono de reproche
- Es que no quiero ver a ese hombre, me da urticaria el solo verlo, ughhhh
- Es el esposo de tu papá
- Esos dos me dan urticaria, no los quiero ver, mejor le digo a mi papá Seiya que tus papás van a hacer una parrillada y que me invitaron o algo así
- No hay problema, tu sabes que eres bienvenido siempre en mi casa, pero el bicho se va a enojar contigo y tu papá Seiya también – dijo Han
- Es que no quiero verlos, además de cuándo acá a Ikky le importa lo que pase en nuestras vidas?, él nos dejó por irse con ese estúpido, por su culpa nos tuvimos que cambiar de casa, mi papá Seiya tuvo que aumentar sus horas en el hospital y ahora llega muerto del trabajo, tiene menos tiempo para nosotros pero hace todo lo que puede por darnos todo y estar con nosotros, yo no sé cómo le hace pero lo hace, a él si no le ha pesado el ser padre, al otro si le ha pesado tanto que no lo habíamos visto por meses – el tono de Tak era bastante molesto
- Ya Tak no te pongas así y baja la voz que vas a despertar a la casa entera – dijo Han en un susurro
- Es que me indigna lo que nos ha pasado, mi papá Seiya ha necesitado ayuda muchas veces y ha sido mi tía Seika la que hace malabares por ayudarlo, sus amigos del hospital también, hasta el tío Shun ha ayudado a mi papá y a él lo vemos mucho más seguido, pero Ikky nunca ha estado aquí para nosotros, pero ahora que el que necesita ayuda es él, al primero al que acude es a mi papá Seiya, y él es tan tonto que acepta y lo va a ayudar, es que no lo puedo creer
- Tu papá dijo que a él no le molestaba hacerlo
- Pueda que a él no, pero a mi si, ese imbécil de Hyoga no se merece nada, ojalá sea estéril o algo
- Ay Tak, no digas eso
- Mejor cámbiame de tema que me pongo histérico, cuéntame… hablaste con Sora?, te dijo algo de mi?, le parezco sexy o algo? – Tak suspiró al decir esto y cuando preguntó por aquella chica sonó interesado y relajado
- Sexy lo que se dice sexy, pues no, pero me dijo que estás dable – contestó Han con una risita burlona
- Dable?, que genial - Seiya suspiró y meneó la cabeza al caminar de vuelta a su dormitorio, la situación con Tak estaba peor de lo que había pensado, Ikky llegó muy tarde al parecer… diablos…