[Minho]
Que había pasado, en este tiempo que decidí alejarme de Taemin, las cosas se estaban tornando extrañas y para cerrar con broche de oro, la llegada de Yuri, fue la gota que derramó el vaso.
Estábamos tranquilos cenando, cuando de la nada me preguntó el porque estaba sólo, y de contestarle pase a sentir sus labios sobre los míos, no se si fue la emoción del momento o lo confundido que estaba, pero cuando estaba por responderle el beso, en mi mente sólo apareció una imagen...
TAEMIN
Mi bello ángel Taemin, no, no me podía dejar llevar por el momento, o por el simple hecho de seguirme sintiendo herido, Taemin es lo más importante para mi, y siempre lo será.
Inmediatamente me separe de ella y me puse de pie, la mira confundido y me coloque la mano en mis labios.
-¿Que se supone que estas haciendo Yuri?.- ella me miró con un toque coqueto y acomodo su cabello.
-Besándote, no es obvio Min.- Min... Así me dice mi pequeño ángel, dios ¿que acababa de pasar?
-Primero, No me llames así, te lo prohíbo.- tome aire y nege con la cabeza.- Segundo no vuelvas a hacer eso.
-Pero ¿Porque?, tu eres un hombre libre y yo igual, no veo el porque no debería hacerlo.
-Por el simple hecho de que no soy un hombre libre, tengo a la persona más perfecta a mi lado y lamento si sueñ+no grosero pero no eres ni la cuarta parte de lo que el es.- me miró confundida.
-¿El?
-Si, el, mi mayor tesoro.- dije orgulloso.
-Dios, no me digas que un ser tan perfecto como tu es ¿Gay?
-No lo soy, yo sólo lo amo a el.- dije seguro, una sonrisa enmarcó mi rostro.- Y sabes te agradezco el que hallas hecho eso, porque me he dado cuenta que no quiero pasar un minuto más lejos de él, así que si me disculpas, me tengo que ir.- dije y salí de ese lugar.
No había nada más que dudar, si Taemin no me apreciaba tanto como yo, me encargaría de que eso pasará, pero estar lejos de él por más tiempo ya no podría.
Subi a mi camioneta y emprendí el viaje a su casa, si no calculaba mal su madre estaba en el trabajo y el no tenía mucho que había salido de la universidad, así que me apresure, importándome un comino los semáforos, lo único que me importaba era llegar y besar a Taemin, para demostrarle que lo amaba más que ha nada en este mundo.
Llegue a su casa y toque como loco, escuche su voz y mi corazón quería salirseme del pecho, cuando lo vi detrás de la puerta pensé que iba a morir de un infarto. El me miró sorprendido y trató de formular una frase pero fue en vano, sólo balbuceaba cosas sin sentido, vi como sus ojos se empezaban a poner rojos, indicándome que lloraría en cualquier momento.
Abrí más la puerta y lo abracé, como si se me fuera a escapar de entre los brazos, como si fuera la última vez que lo pudiera abrazar, como si mi vida dependiera de eso.
-Te amo!!, ya no puedo estar más sin ti, no me importa si en estos momentos soy yo el que ama más, sólo quiero tenerte a mi lado, no puedo pasar más tiempo sin ti.- le dije sin terminar el abrazo, escuche como sollozaba más fuerte, lo solte un poco y levante su rostro, limpie sus lagrimas, dejé un beso en su frente y lo mire a los ojos.
-Min...- trató de decir.
-Shh!!, no digas nada amor, no digas nada.- le acaricie su pelo con calma.
-No quiero volver a separarme de ti, te amo, y no tienes que dudarlo, lamento haber herido tu orgullo, eres realmente importante para mi, eso jamás lo dudes.- respiro profundo para seguir hablando.- Claro que mi madre es importante para mi, ella ha sido la única que ha estado a mi lado apesar de todo, tu llegaste a mi vida para darle más sentido, pero no me pidas que abandone a mi madre, yo dependo muchísimo de ella, lamento si la tomo en primer lugar antes que a ti pero, no lo puedo evitar, pero te prometo que trataré de cambiar, sólo no vuelvas a irte de mi lado.- dijo para volverme a abrazar y llorar aún más fuerte.
Lo abracé fuertemente y por más que intente no llorar, los sentimientos empezaron a brotar y las lagrimas a recorrer mi rostro y de un momento a otro ahí estábamos los dos abrazados llorando en la entrada de su casa. Después de unos minutos más nos separamos y nos miramos a los ojos, ambos los teníamos completamente rojos y no pudimos evitar sonreír ante nuestra imagen, el me jaló de la mano y entre a su casa, cerro la puerta de esta y sin siquiera imaginármelo, de la nada sentí sus labios sobre los míos, era un beso realmente desesperado, la lucha por el dominio parecía interminable, era un beso que debía ser dulce para demostrar el amor que nos teníamos, pero era completamente todo lo contrario.
No supe en que momento Taemin paso de estar parado frente a mi a abrazarme como un Koala, sus piernas rodeaban mi cadera y mis manos apretaban sus glúteos, retrocedí un poco y me tope con algo que al parecer término en el piso, Tae y yo empezamos a reírnos en medio del beso, pero esto no nos detuvo en nuestra acción.
Taemin se separó un poco de mi, jalando mi labio inferior con sus dientes.
-Te he extrañado tanto, como no lo imaginas Min- me miró tan sensual que sentí la excitación crecer aún más dentro de mi.- Te necesitó...
Y al diablo la cordura, lo baje y lo guié hacia las escaleras, el pareció entender y tomó el mando para dirigirnos a su habitación. Cuando por fin llegamos el fue quien retomó el beso y me adentro a su recámara, cerro su puerta de una patada, para no romper el beso y de la nada sentí como me empujaba fuertemente hacia su cama.
Caí sobre esta y lo mire con lujuria...
-Me tienes que recompensar por todo este tiempo que estuvimos separados...- dijo coqueto.
-No hay problema con eso, yo contento de reponerlo.
La noche era larga y nuestro amor infinito, jamás me cansaría de decir lo mucho que amo a mi Taeminnie.