Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

MUÑECA DE BALLET por AmaiiKissu

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Creo que es la tercera vez que intento subir esto, es muy frustrante ¬¬"


Se supone que mi primera historia sería un longfic que llevo escribiendo durante meses y que el yuri no es lo mío; y sin embargo y contra todo pronóstico, es la primera historia que termino e.eU


Como sea, este es mi primer fanfic, así que por favor, sean amables >.< Nah, mentira, si tienen dudas o algo que aportar como correcciones, sugerencias, etc., todo es bienvenido.


Bueno, ojalá les guste n.n

Notas del capitulo:

Escribí esto mientras escuchaba un hermoso vals que encontré por ahí; les recomiendo que lo escuchen mientras leen y lo repitan un sinfín de veces, para que entiendan los sentimientos de los personajes (y el mío, porque yo sí lo repetí para "inspirarme" u.u)


Quiero aclarar que me basé en la descripción del video al momento de escribir; sin embargo, la historia SÍ es de mi completa autoría, pero la música NO lo es, así como tampoco lo es la idea de una canción eterna, eso corresponde a los compositores de esta (Derek y Brandon Fiechter). A pesar de esto, la historia no tiene relación alguna con ellos ni con la canción, únicamente escribí la loca idea que se me ocurrió cuando la encontré, por lo que decidí usarla como el "tema principal" de la historia. Si existe algún problema con esto por favor avísenme, así tomaré las medidas necesarias para solucionarlo cuanto antes (ay sí, ay sí, muy formal la niña e.e).


Sin más que decir, l@s dejo leer. Por favor, disfrútenla como yo al escribirla :3

«Un, dos, tres; un, dos, tres… paso, paso, alto; paso, paso, alto… un, dos, tres; un, dos, vuelta… y otra vez… un, dos, tres; un, dos, tres… izquierda, derecha, izquierda; derecha, izquierda, gira…


Baila siempre baila, baila sin descansar… el mismo vals, la misma tonada, la misma melodía… desde hace años… te gusta bailar, solo quieres bailar… para siempre bailarás…


Un, dos, tres; un, dos, tres…»


 


—¿Qué es eso?


—Maye, por favor no me ignores.


—No te ignoro, pero en serio escucho algo. Es… ¿una canción? ¿No dijiste que este lugar estaba deshabitado?


—Lo está.


—¿Entonces por qué hay música?


—No lo sé, supongo que es de afuera.


—No, estoy segura que viene del sótano. Vámonos, tengo un mal presentimiento.


—No. No nos iremos hasta que me respondas.


—¿Responderte qué?


—Sabes a que me refiero. Te acabo de decir que me gustas.


—Y-Yo… yo n-no… no te quiero de esa forma, solo eras mi amiga…


—¿Era? ¿Cómo que era?


—Sí, eras. ¿Cómo demonios esperas que siga estando a tu lado cuando sé que te gustan las mujeres? O peor aún, ¡cuando te gusto yo! Eres demasiado extraña, estás enferma, debes ir a un psiquiatra.


—… Maye… ¿qué estás diciendo?


—Solamente la verdad. Yo no quiero volver a verte jamás, no hasta que te cures, hasta que vuelvas a ser normal; así que párate y vámonos.


—… pensé que me odiabas por estar “enferma”.


—Lo hago, pero no te voy a abandonar solo por eso. Levántate y salgamos de aquí, está casa me da miedo.


—No.


—¿Qué?


—Vete tu sola. Tú eres la que se quiere ir, así que hazlo.


—P-Pero…


—¡Largo…!


 


«Despacio o rápido, corre o camina… Paso, paso, vuelta… Solo no pares, nunca debes parar… Un, dos, tres… Bailar para siempre, eso está bien, eso es perfecto…»


 


—N-No puedo creerlo, de saber que ella era así jamás me habría enamorado, ni siquiera le habría hablado. Pero parecía tan perfecta, que yo… ¡Basta! No debo tirarme a morir por alguien como ella, si esa es la verdadera Maye, la odio por completo… Aquí fue donde la conocí, aquí me enamoré, aquí me declaré, aquí me rechazó, aquí lloré, aquí sufrí… y es aquí donde terminará este amor…


 


«Un, dos, tres; un, dos, tres… ¿Por qué lloras? Deja de llorar, comienza a bailar, solo así transformarás, tristeza en alegría… Un, dos, tres…»


 


—Vaya, realmente se escucha una canción desde el sótano, quizá deba ir a revisar; desde que soy bebé este lugar está abandonado, sería bastante extraño que ahora alguien estuviera aquí.


 


«Eso está bien; un, dos, tres… Ven a mí, para poder comenzar, un baile que, jamás tendrá fin… Un, dos, tres; tiempo de vals…»


 


—La música se oye más fuerte y también… ¿un murmuro? Pero si no hay nada ni nadie en el sótano; quizá detrás de esa puerta… Ahora que lo pienso, jamás la vi antes. Definitivamente debo entrar.


—Hasta que llegas, te estaba esperando… un, dos, tres; un, dos, tres…


—¿A-A mí?, p-pero… ¿q-quién eres?, ¿qué es esto?, ¿por qué bailas?, ¿y esa ropa?, ¿de aquí viene la música? No sé si sepas, pero está casa está abandonada y está prohibido entrar, así que-…


—Y sin embargo, tú estás aquí…


—¡Pe-pero y-yo…! O-Oye, estás muy c-cerca…


—Así estamos bien, camina por aquí, sigue mis pasos… un, dos, tres; un, dos, tres; derecha, izquierda, derecha…


—¡No! P-Por favor, s-suéltame… ¿Dón-dónde estamos? Nunca vi este lugar antes.


—Es mi salón, aquí es donde, siempre he bailado, desde hace siglos, sin parar jamás… Un, dos, tres; mueve los pies…


—¿Siglos? Sí, claro. Si te ves realmente joven y… pareces una muñeca muy hermosa, ese vestido negro de bailarina te hace ver divina, tu ballet es magnífico, y… ¡Ah! P-Perdón, solo… ignora lo que dije.


—No lo haré, realmente te agradezco, tu lindo cumplido… Tú también eres, una preciosa mujer… como este vals, triste y solitario, pero en realidad, es una hermosa, obra de arte…


—¡¿Q-Qué dices?! Y-Yo… no sé qué decir…


—No lo hagas, no tienes que… Mejor baila conmigo, este que es, tu hermoso vals…


—¿Bailar? No gracias, no sé hacerlo. Pero en serio, ¿por qué no dejas de bailar? No has parado desde que te encontré.


—No puedo hacerlo, solo vivo para, bailar esta pieza… desde hace siglos, el mismo vals… y no pararé, no hasta que, la pieza termine…


—Ajá, siglos, por supuesto. Pero entonces, ¿por qué no se acaba la música?, ¿o por qué no paras tú el disco?


—No puedo hacerlo, dejaría de bailar, eso está prohibido… un, dos, tres; un, dos, giro…


—Claro, lo que tú digas; si quieres yo la apago por ti. Es del fonógrafo, ¿cierto?


—No lo intentes, no lo lograrás… Nadie jamás pudo, detener mi destino, que es bailar, para la eternidad…


—Por supuesto que no puedo, la aguja se atoró y al cilindro se le debió romper el freno; lo que no me explico es como el disco sigue teniendo algo que tocar.


—No podrás parar, el eterno sonar, durará para siempre… Igual mi danza, jamás se acabará…


—Para por favor. ¿En serio debes decir esas cosas? Son raras y me estás espantando. Además, hablas de forma muy extraña, te detienes cada tres palabras, como si tus palabras bailaran… un vals… Oye, creo que tienes un problema, déjame ayudarte.


—No puedes hacerlo, para esto nací…


—¡Pero tus pies, están casi sangrando! Comienzo a creer que de verdad llevas años bailando. Estás demasiado pálida y delgada, ¿hace cuánto no comes o duermes?, ¿has salido de aquí en los últimos días?


—No puedo salir, tampoco debo detenerme, solamente debo bailar…


—Si estás haciendo esto por gusto, creo que ya lo llevaste a un extremo. ¡Tan solo mírate! Tienes un espejo de toda una pared, no creo que no hayas visto tu estado.


—Yo quiero bailar, bailaré por siempre, bailaré para ella…


—¿Ella? ¿Quién ella? ¿Dónde está?


—Ya no está, se fue eternamente, y me duele…


—¿M-Murió?


—Ella es inmortal, y también yo, me hizo igual,… solo me abandonó…ella me hechizó, y me dejó, bailando para siempre…


—¡Entonces no debes seguir bailando! Si ya no te ve, no vale la pena que te lastimes así, ella… ¿E-Estás llorando?


—También debo evitar, derramar lágrimas innecesarias… Si sigo bailando, transformaré la tristeza, en verdadera felicidad… y ella estará, feliz conmigo eternamente…


—¡Olvídate de ella! ¡Si ella dejó a tal belleza, es porque no te merecía!


—No puedo hacerlo… no hasta que, el vals acabé…


—¡Eso nunca pasará y lo sabes! ¿Cómo… cómo puedes seguir pensando en alguien que no te quiere…?


—¿Por qué lloras?… Es mi destino, no el tuyo, no debe afectarte…


—Porque… porque me molesta que gente idiota nos lastime… que lastime a alguien tan dedicada y hermosa como tú…


—No existe ninguna, solución para esto… pasó y pasará, por la eternidad… como mi baile, como el vals…


—¡Pero es injusto! No mereces sufrir así, ni yo, ¡nadie! El amor no debería doler, no debería existir…


—“… dos almas puras, dos corazones rotos, se juntarán para, bailar por la eternidad, y será mejor, que cualquier cura, o hechizo hecho…” ¿Entonces así era? Ahora todo concuerda…


—¿De qué hablas?


—¿Quieres bailar conmigo, esta bella pieza?… Ven a bailar, vamos a bailar… Solamente una pieza, será un vals…


—Y-Yo no…


—Bailemos una pieza, hasta que terminé, el vals infinito… Toma mi mano, yo te guiaré, yo te enseñaré, y te cuidaré… por la eternidad…


—Y-Yo… yo creo que, m-me gusta bailar, y ya entendí, solo debo contar… Un, dos, tres; un dos tres…


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).