Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Primera vez (WonTaek) por GabyXiumin

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Espero sea de su agrado...

Notas del capitulo:

Gracias por pasar a leer...

~ Narra WonSik ~

— Se lo diré sin rodeos. Se trata de mi hermana. Quiero que reciba lo que merece. No sólo la cárcel. Quiero que la ley la capture y la ejecute y quiero estar presente para verlo. — Dijo un viejo conocido con odio reflejado en sus ojos.

— Usted estuvo presente en las pesquisas, YiFan; usted vio lo que sucedió. Yoona fue absuelta y, a menos que se presenten nuevas pruebas, permanecerá libre. — Dije con tranquilidad.

— ¡Pruebas! ¡Dios mío, qué más pruebas se necesitan! Estaban discutiendo en la parte superior de la escalera. Yoona agarró a SeokMon y la arrojó hacia abajo y la asesinó. Eso es un asesinato, ¿no? Es lo mismo que si hubiese usado una pistola o veneno o cualquier otra cosa. — Me hundí cansadamente en el viejo sillón de cuero que allí había y estudié la ceniza que estaba formándose en mi cigarro.

— Déjeme explicárselo desde el ángulo legal. — Dije y mi voz debe haber sonado como una fórmula bien memorizada. — Primero, no hubo testigos. — Concluí con seriedad.

— Yo oí el grito de SeokMon y la oí caer. — Dijo obstinado. — Y cuando corrí y la encontré allí, oí que Yoona cerraba la puerta de manera violenta. Empujó a SeokMon y se escondió como una rata. — Acusó sin vacilar.

— Pero usted no vio nada. Y como Yoona alega que no estuvo en el escenario de los hechos, no hay testigos. En otras palabras, la declaración de Yoona anula la suya y como usted no fue un testigo ocular, no puede calificar como asesinato lo que pudo haber sido un accidente. — YiFan movió lentamente la cabeza ante mis palabras.

— Usted no cree eso. — Dijo. — WonSik tú no crees eso. — Volvió a decir.

— No es cuestión de lo que crea; estoy mostrándole los aspectos legales del caso. ¿Que me dice usted acerca de lo sucedido? ¿Que ganaba Yoona con la muerte de SeokMon? No había dinero ni propiedades involucradas; ella es tan independiente de su economía como usted. — Dije con seriedad.

Mi amigo se inclinó hacia mí, con las manos apoyadas en las rodillas.

— No. — Concluyó. — Ni propiedades. — Soltó rendido.

Me dolía ver a un viejo amigo en esas circunstancias, pero, como abogado de la familia tenía que ayudar a resolver al caso de la manera más legal posible, después de todo eran, hermano contra hermana.

~ Fin narra WonSik ~

WonSik estaba molesto, siempre terminaba su trabajo en tiempo récord, sólo con la intención de poder tomar los dos colectivos que lo llevarían a su casa antes de que llegará la noche.

Era una persona dedicada enteramente a su trabajo, siempre y cuándo, este dentro de su horario laboral.

Pero la tarde de hoy, antes de abandonar su oficina; a su superior se le ocurrió darle un nuevo caso que atender, eso no era ningún problema, claro, si no le hubiese exigido que lo chequeara antes de irse a su hogar, y que al finalizar le hiciera un resumido escrito de los puntos fuertes en dicho casó.

Dándole como resultado, que para cuándo WonSik lo terminará ya fuera por completo de noche, y para ayudar a su mala suerte, comenzará a llover.

Se tranquilizó así mismo, dándose unas palabras de aliento, "es el precio de ser el empleado y no el empleador", y con eso en mente, sujetaba con fuerza su paraguas mientras caminaba con su mayor velocidad por las calles solitarias de Seúl.

Tenía que apresurarse a tomar su colectivo correspondiente, antes de que gracias a la lluvia los colectivos decidieran dejar de brindar servicio, cosa que ya le había sucedido en el pasado, y realmente no quería que le vuelva a suceder.

Estaba llegando a la senda peatonal, cuando la luz de las calles y todos los edificios cercanos se cortaron, dejándolo verdaderamente perdido.

Comenzó a mover sus manos en busca de algún apoyó y no lo encontró, movió un poco sus pies, sólo unos cuantos pasos y nada, intentó dar unos cuantos más, y fue bruscamente jalado por su hombro.

— ¿Es que no vez por donde vas? — Escuchó una voz completamente suave decir, voz que por poco no la hubiese podido oir.

WonSik forzaba su vista lo más posible, pero era inútil, no lograba ver nada a su alrededor, estaba apuntó de formular alguna respuesta, cuando una fuerte ráfaga de viento arrancó el paraguas de su mano, y automaticamente comenzó a sentir la insistente lluvia caer con fuerza sobre su cuerpo.

No eran simples gotas de lluvia, si no que eran pesadas y hasta dolía recibirlas tan directamente, sin mencionar el viento que amenazaba con llevárselo en cualquier momento.

— Necesitó tomar el colectivo en la parada 411213, está cerca, le agradecería que me dejará allí. — Dijo WonSik sin poder abrir los ojos con toda esa lluvia.

No obtuvo respuesta, sólo comenzó a ser jalado por su antebrazo, no dijo nada más, sólo se dejo hacer, procurando mentalmente que lo estuviesen llevando a dónde el lo pidió, y no que estuviese siendo víctima de un secuestro prácticamente voluntario.

Fue guiado a pasos apresurados por un no muy largo rato, y de la nada dejaron de andar, luego escuchó el ruido de una puerta siendo abierta con rapidez, y nuevamente fue jalado, lo metieron dentro y automaticamente sintió la puerta ser cerrada.

Ya no sentía la lluvia y el ambiente era realmente cálido, pero seguía sin ver con claridad.

— ¿Que pasó con la parada de colectivo? — Preguntó WonSik con firmeza mientras estaba mirando hacía la puerta cerrada.

— ¿A quién le hablas? — Escuchó preguntar a una voz a su izquierda, por lo que rápidamente giró hacía allí.

— A ti. Me gustaría que me dejarás ir si no tienes intenciones de ayudarme. — Concluyó WonSik con seriedad.

— ¿Porque continúas viendo hacia la nada? — Pregunto nuevamente la misma voz, logrando tensar todo el cuerpo de WonSik.

— No se de que hablas. Pero me gustaría que me habrás esa puerta. — Apuntó WonSik con seguridad.

— Esa no es la dirección correcta. — Dijo esa suave voz. — Ya esta, ahora la luz de la estufa es lo suficientemente fuerte como para ver con claridad aquí dentro. — Dijo nuevamente la voz, luego de que su propietario subiera el fuego de una estufa a gas.

WonSik no dijo nada, sólo se concentraba en ver a su alrededor, sus ojos ahora lograban distinguir algunas cosas, pero sólo formas oscuras que por lo menos le dejaban imaginarse donde estaba metido, y las posibles cosas en su camino.

Giró hasta encontrar la forma de un cuerpo delgado y bastante alto, se quedó tratando de observar lo más posible, pero no podía distinguir más que su silueta oscura, aunque agradecía que por lo menos sólo halla una persona aparte de el.

— ¿Tienes velas? — Pregunto WonSik con firmeza.

— Olvide comprarlas. — Le respondió el dueño de la propiedad tomando asiento en algún lugar. — Te daré un cambió de ropa o te vas a enfermar. — Concluyó el chico yendo a buscar en su placard. — Ten. — Dijo una vez encontró que ofrecerle.

WonSik no dijo nada, sólo comenzó a caminar hacia la silueta negra a pasos lentos, procurando no chocar nada en su camino, pero para su mala suerte, se golpeó la rodilla con una pequeña mesa, la tanteo con sus manos y siguió con su camino.

Una vez estuvo frente a la otra persona, estiró su mano con seguridad, pero no encontró la ropa donde creía verla, movió su mano nuevamente y seguía sin poder tomarla, cosa que lo estaba comenzando a poner nervioso.

WonSik iba a intentar escapar, pero antes de que eso suceda volvió la luz, dejándole ver con claridad al hermoso chico frente a su persona, observó cada detalle del contrario, notando también que este ya llevaba ropa seca, tomó las prendas que le entregaba el chico y sonrio.

— Mi nombre es WonSik. — Se presentó con una sonrisa. — ¿Tú eres? — Pregunto expectante.

— TaekWoon. — Le respondió el pelinegro. — En esa dirección está el sanitario. — Informó apuntando con su dedo índice.

WonSik asintió y se apresuró a cambiarse, una vez estuvo dentro se desvistio con rapidez, para segundos después comenzar a vestirse nuevamente.

Se estaba colocando la remera para dar por terminada su vestimenta, y nuevamente todo se oscurecio, haciendo que entre en pánico, comenzó tantear con sus manos a su alrededor, encontrando el picaporte, giró este y rápidamente logró salir.

Estaba caminando por el pasillo mientras tanteaba las paredes, para evitar chocar con algo o simplemente caer.

— ¿Se te perdieron los lentes? — Pregunto TaekWoon mirando al contrario caminar, ya que la luz de la estufa te dejaba ver el lugar con claridad o al menos a el.

— No los necesito. — Contestó WonSik con seguridad.

— Pero no puedes ver. — Agregó TaekWoon estudiando al contrario.

— Sólo es ceguera nocturna. — Respondió WonSik sin muchos animós, ya que el siempre se encargaba de ocultar su pequeño detalle. — Nunca me recetaron lentes, porque mi vista es muy buena. — Comentó sólo porque el contrario era un hombre realmente guapo.

TaekWoon no dijo nada más, sólo fue hasta el invitado y lo tomó de la mano, luego comenzó a guiarlo hacía un sillón que se encontraba en la sala, lugar donde le ofreció sentarse y WonSik así lo hizo.

— Eres guapo. — Comentó TaekWoon dejando sin palabras al contrario.

— ¿Es una broma? El único guapo aquí eres tú, pero, ¿yo? No, hace tiempo lo dejé de ser. — Soltó WonSik con rapidez.

Recordando sin querer las palabras de su ex pareja.

— Sólo dije lo que pienso. — Contestó el pelinegro entrando a la cocina, luego puso agua a hervir, ya que como no había luz sólo haría ramel instantáneo.

El agua se encontraba en el fuego, la lluvia seguía a pleno y amenazaba con empeorar, pero todo cambio cuando nuevamente la luz volvió, permitiendo a WonSik relajar todos sus músculos, pero causando el efecto contrario en TaekWoon, quién parecía estar secuestrado en su propia casa, cosa que WonSik notó.

— Siento hacerte pasar un momento incómodo, apenas la lluvia se encuentre disminuida, me iré. — Anunció WonSik algo avergonzado por estar abusando de la amabilidad contraria. — ¿Cuantos años tienes? — Pregunto sin vacilar.

— Tienes la remera al revés. — Informó el pelinegro. — Veintisiete. — Respondió a la anterior pregunta.

— Eres mi mayor, tengo veintiséis. — Comentó WonSik sonriente mientras se quitaba la remera para acomodarla como realmente iba. — ¿Que profesión tiene? — Pregunto está vez haciendo acto de presencia a sus modales.

— Administración. — Contestó TaekWoon yendo nuevamente a la cocina.

Esta vez a hechar los fideos y el saborizante, quizás allá venido la luz, pero sus ganas de cocinar seguían siendo nulas.

— La mia es abogacía. — Comentó siguiendolo hacía la cocina. — ¿De que trabaja? — Pregunto observando lo bonito y bien mantenido que estaba el lugar.

— Administró mi restaurante. — Informó TaekWoon girando a mirar al contrario.

— ¿Tiene su propio restaurante? — Exclamó sorprendido por la corta edad contraria. — Por cierto, soy abogado. — Informó aunque nadie le hubiera preguntado.

— Si. — Contestó TaekWoon con voz suave.

— Usted no es del tipo de persona que maneja conversaciones largas, ¿verdad? — Cuestionó WonSik al darse cuenta de las pocas palabras que decía el contrario.

— Eres la primer persona a la que le permito hablarme tanto. — Respondió TaekWoon lavando algunas tazas que se encontraban en el lavabo.

— ¿Y podría decirme el porque? — Pregunto WonSik expectante.

— Ya te lo dije. — Respondió TaekWoon tomando asiento frente al contrario. — Si la lluvia no se detiene, puedes dormir en la segunda habitación. — Informó apuntando hacía dicho lugar.

— No podría abusar tanto de usted. — Se negó WonSik automaticamente.

— Ni que fuera la gran cosa. — Murmuró el contrario.

— ¿Disculpe? — Soltó WonSik mirándolo fijamente.

— No, nada. — Dijo el pelinegro mientras se iba a quitar la olla del fuego.

Después de la algo incómoda cena...

Ya habían terminado de comer, por lo que se encontraban mirando televisión para esperar a que paré de llover.

¡Ahhhh! Se escuchó un gritó proveniente del televisor, cosa que sorprendió por completo a WonSik, sinceramente el prefería ver los dibujos animados o los programas de comedia.

— ¿No estás acostumbrado a este tipo de cosas? — Pregunto TaekWoon sin despegar la vista de la escena del crimen.

— No realmente. Yo normalmente los veo por escrito ú oral, no soy un policía de crímenes especiales. — Aclaró WonSik con sinceridad.

— Mmh. — Escuchó en respuesta.

WonSik se puso rápidamente de pie al asustarse por el asesino que apareció de manera sorpresiva detrás de la protagonista

— ¡Detrás tuyo! — Exclamó WonSik con las esperanzas de ser escuchado por la chica dentro de la película.

— Pareces un hombre serio, pero me das la misma sensación que mi pequeño gatito. — Comentó TaekWoon sin despegar la vista de la televisión.

— Me gustan los gatos. — Comentó WonSik tratando de sonar sereno.

— También a mi. — Murmuró TaekWoon casi en un susurro.

— Por cierto... ¿Que hacías bajo la lluvia? — Pregunto WonSik realmente curioso, logrando que el pelinegro giré a verlo.

— Mi gato había salido un rato antes de que lloviera, y como empezó a llover y el no volvía, decidí salir a buscarlo. — Informó con seriedad.

— Oooh... — Dejo salir WonSik sorprendido, ya que con esa lluvia el no saldría ni a buscar a Yifan.

— Podría usar ésa excusa. — Agregó TaekWoon mirandolo fijamente. — O decir la verdad. — Finalizó con tranquilidad.

— ¿Excusa? Espera... ¿Verdad? — Pregunto WonSik con curiosidad.

— Si, una excusa para ocultar la verdad. — Concluyó TaekWoon haciendo incómodar a su invitado.

— ¿Cuál verdad? — Pregunto WonSik con valentía.

¿Y si era un asesino en serie o algún tipo de psicópata? ¿Como debía actuar siendo el pelinegro un hombre tan... Guapo?

— Te estaba observando. — Informó TaekWoon. — Primera vez que me interesó en observar a alguien. — Confesó sin vacilar.

— ¿Me estabas observando desde que doble en la esquina? — Pregunto WonSik sorprendido por la confesión del contrario.

— No. Te estuve observando desde hace dos años cuando tú novia cortó contigo en mi restaurante, una tarde de verano con la excusa de que culpa de tú trabajo no le prestabas la atención que ella se merecía. — Informó el pelinegro con seriedad dejando a WonSik en estado de shock. — Pero no sabía sobre tú nula visión nocturna, veo que tengo muchas cosas por aprender. — Agregó algo pensativo.

— ¿Hablabas tanto? — Pregunto WonSik sorprendido. — Espera... ¡¿Te gusto?! — Exclamó en pregunta.

Hacía mucho no se sentía tan nervioso, ya no era un adolescente, pero siempre sus relaciones fueron fallidas, cosa que lo hicieron un ignorante en ese campo.

TaekWoon no respondió, simplemente se puso de pie frente a WonSik, quién estaba de pie desde que se había asustado con la película.

— Dame unos segundos. — Respondió el pelinegro pasando sus largos dedos por los labios del contrario.

Para después comenzar a rozar su mejilla con la de WonSik, quién simplemente se quedaba firme ante sus acciones.

TaekWoon rozó sus labios con los del contrario levemente y luego se apartó con lentitud.

— ¿Que tanto estás haciendo? — Pregunto WonSik un poco impaciente.

— Quería ver si el tocarte de está manera se me hacía repulsivo. — Informó TaekWoon con tranquilidad.

— ¿Disculpa? — Pregunto WonSik entre ofendido y desilusionado.

— Normalmente tocar a otras personas me resulta repulsivo, no se el porque, simplemente resulta así, aunque el contacto sea mínimo. — Confesó TaekWoon.

— ¿Y qué sentiste al tocarme? — Pregunto WonSik con seriedad.

— Fue agradable. — Contestó TaekWoon con sinceridad.

— ¿Podrías acostumbrarte a mi contacto? — Pregunto WonSik posando sus manos en las caderas ajenas.

— Eso creó. — Contestó el pelinegro. — Aunque tengo curiosidad por saber hasta donde soy capaz de llegar contigo. — Confesó mirando las manos ajenas tocando sus caderas.

— Primero deberíamos conocernos. — Soltó WonSik rápidamente.

Ya que el siempre solía llevarse por la ley de las tres citas antes de pasar a actos mayores.

— Como hombre, aceptó que las citas no me gustan. Y como hombre mayor, te recuerdo que somos lo suficientemente grandes como para decidir evadir las formalidades. — Concluyó el pelinegro con tranquilidad.

— Pensé que no hablabas mucho. — Soltó WonSik completamente sorprendido. — Trata de detenerme si me accedo. — Pidió sonriente. — Hombre mayor. — Agregó justo antes de unir sus labiales con los del contrario.

TaekWoon se sorprendió por su repentina acción, pero como sólo una vez le había sucedido, no sintió repulsión, era como cuando besaba a su ex novia, a quién había perdido en un accidente de tránsito.

Al recordar a esa persona el pelinegro apretó sus brazos con fuerza alrededor del cuello del peli-gris y lo pegó por completo hacía el, se sentía tan familiar.

— De casualidad... ¿No hemos echó esto antes? — Pregunto WonSik mientras intentaba recuperar el aire que había perdido mediante el reciente besó.

— No. Aunque también sentí esa sensación. — Contestó TaekWoon con sinceridad. — ¿En que momento desprendiste mi cinturón? — Pregunto al notar ese detalle.

— Es sólo el comienzo, me pediste no ir con calma, te trataré bien, aunque sea mi primera vez con un hombre. — Soltó WonSik de manera apresurada y perdiendo la vergüenza.

— También lo será para mí. — Informó el pelinegro. — Sólo has lo que tengas que hacer. — Pidió con algo de desinterés.

WonSik lo besó nuevamente, y mediante el beso quitó la remera del pelinegro, para luego comenzar a acariciar con delicadeza la piel expuesta del mayor.

— Tan suave... — Susurró WonSik sobre sus labios. — Eres muy egoísta por no soportar compartir tú contacto, aunque de alguna manera eso me hace sentir algo feliz. — Confesó sonriendo levemente.

Siguieron con la unión en sus labios y las caricias, cuando nuevamente se volvió a cortar la luz, haciendo que WonSik se detenga automaticamente, y comenzará a forzar su vista en un fallido intento de ver al contrario.

— Sólo sigue con lo que hacías. — Pidió TaekWoon tirando del menor para que se sentará en el sillón, luego él también se sentó y volvió a unir sus labios.

WonSik cerró sus ojos, aunque de todas maneras no podía ver, después recosto al mayor en el sillón y siguió con sus acciones.

— ¿Porque tardaste tanto en aparecer frente a mi? — Pregunto WonSik dejando de besar al contrario y todavía con los ojos cerrados.

El único que pudo apreciar lo tierno que había resultado ser WonSik era el pelinegro, ya que el menor detestaba mostrarse vulnerable ante los demás.

— Porque parecias no querer involucrarte con nadie, y también porque no sabía si podría tocarte sin arruinarlo todo. Así que me conforme con observar. — Contestó TaekWoon sin vacilar.

— Eres egoísta, me observabas pero yo ignoraba tú existencia. — Comentó WonSik depositando un besó en los labios ajenos siendo bien recibido. — Te cobraré multa por tus malas decisiones. — Informó mientras se ubicaba delicadamente entre las piernas del mayor.

— Suena extraño. — Confesó TaekWoon, quién se sentia extrañamente cómodo en esa posición con el contrario.

— Sólo déjate hacer y disfruta, cualquier cosa me avisas. — Formuló WonSik justo antes de volver a unir sus labios con los de TaekWoon, siendo automaticamente correspondido.
Notas finales:

Espero poder leer sus opiniones ;D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).