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Nuevo comienzo por seirei

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Notas del capitulo:

-Advertencia de contenido-

Dejare estas imágenes por aquí.

http://img.desmotivaciones.es/201302/hellsing_ova_10_5.jpg

 

http://pm1.narvii.com/5654/71e1c126f41e0598a6c153bfb20807f0113c9872_hq.jpg

 


Las escenas frente a él regresaron, ya no quería seguir viéndolas pero… quería saber más sobre Alucard.

 

 

-Mi rey nos han llegado amenazas de Turquía, al parecer están por atacarnos-

 

-Eso no importa porque nosotros atacaremos primero.-

 

Se levantó del trono caminando por el largo pasillo seguido por sus consejeros.

 

-Comenzaremos con Ankara, avisa a las tropas que estén listas para partir. ¿Recibiste respuesta de Moldavia?-

 

-Sí, enviaran sus tropas para apoyarnos, nos alcanzaran en la batalla.-

 

Vlad asintió.

 

Las tropas atravesaron Bulgaria, cruzando Estambul hasta llegar a Ankara donde comenzó la batalla después del largo viaje.

 

 

 

De alguna manera las tropas enemigas los esperaban en el lugar, alguien les había dado aviso del ataque. Los superaban en número y se encontraban en mejor posición al conocer el lugar.

 

 

Cabalgo dirigiendo a sus hombres, retirándolos hacia los bosques, intentaría evitar la mayor cantidad de pérdidas en sus tropas como le fuera posible ya que las tropas que los apoyarían tardarían en llegar.

 

 

 

Ataco a los enemigos mientras sus hombres atacaban por sorpresa a los soldados que se acercaban a ellos, ayudados por los árboles que los ocultaban.

 

 

 

Poco a poco fueron presionando a las tropas del enemigo y la mayoría se retiraron dejando a unos pocos que se negaban a regresar sin ganar.

 

 

Se dirigió en su caballo negro a apoyar algunos de sus soldados que peleaban contra un grupo de varios enemigos, cuando una cuerda fue alzada entre ambos arboles obligándolo a caer junto con su caballo, al parecer no habían sido los únicos en colocar trampas, después de todo era territorio enemigo.

 

 

 

Una espada se acercó peligrosamente a su espalda mientras se encontraba en el suelo tras la estrepitosa caída, con un rápido movimiento guiado por sus instintos logro bloquearla con su espada y levantarse del suelo, frente a él se acercaban varios hombres con máscaras.

 

 

 

Estos se abalanzaron sobre él convirtiéndose en una batalla desigual por la cantidad de hombres que arremetían contra él, uno a uno fue derrotándolos enterrando su espada y cubriéndose de su sangre, uno aventó una lanza dirigiéndola a su cabeza y logro esquivarla llegando a su oponente, golpeándolo y tirándolo al piso, sin embargo otro se abalanzo sobre el aprovechando la situación, lo esquivo pero recibió una herida en uno de sus costados soltando su espada y quedando apoyado contra un árbol con el enemigo frente a él.

 

 

Uno de sus soldados más fuertes lo noto y corrió hacia su rey para ayudarlo y cuando el otro estaba por atacar lo sujeto por los brazos impidiéndole moverse.

 

 

Vlad camino hacia el soldado enemigo recogiendo su espada en el camino y apuntándola contra su garganta con una mano.

 

-Nosotros hemos vencido en esta pelea ¿Por qué no se retiraron como los otros soldados?-

 

No recibió respuesta y arranco la máscara sin dejar de apuntarlo.

 

Por la impresión dejo caer su espada y retrocedió unos pasos.

 

-Cuanto tiempo sin verte querido hermano-

 

Su boca y sus ojos se encontraban abiertos con sorpresa viendo a un hombre muy parecido a él, de cabello corto y ojos negros.

 

 Se llevó una mano a la boca temblando levemente, no podía creer lo que veía.

 

-Tu… Tú estas muerto-

 

-Te equivocas como de costumbre-

 

Suspiro mirándolo y mostrando una pequeña sonrisa.

 

-Realmente no morí, si fui capturado por el enemigo pero llegue a un acuerdo con el sultán y dieron a otro en mi lugar para que se hiciese pasar por mí-

 

-¡¿Cual fue tu razón?!  ¡Traicionar a tu propio país!-

 

Lo miro con furia y el hombre soltó una risa melodiosa.

 

-No me hagas reír, ¡Tú y nuestro padre me traicionaron primero! Yo tenía que heredar el trono. Yo iba a ganar el derecho de suceder a nuestro tío. Yo comandaría las tropas de Valaquia. ¡No tú!-

 

 

-¿Y por eso traicionaste a nuestro padre? Tú eras el mayor ¡Tu heredarías el trono!-

 

Lo miro enojado apretando los puños y la mirada frente a él fue regresada con furia.

 

-Te equivocas…, lo escuche de él, de nuestro padre, para compensarte por haber sido entregado al sultán te haría su heredero directo. ¡Yo lo sabía! ¡Me iba a hacer pelear a su lado incluso si moría y todo para que al final yo no obtuviera nada!-

 

-¿Eso fue? ¿Te cegó el poder? ¡¿Por eso te dejaste convencer  por el maldito sultán?!-

 

-El me prometió todo lo que padre me negó y cuando tú caigas el trono será mío-

 

Vlad apretó los dientes y los puños, las tropas enemigas se acercaban para ayudar a quien los comandaba, atacándolos.

 

-Mi rey ¿Qué hago con él?-

 

Vlad miro hacia otro lado intentando calmarse.

 

-Suéltalo-

 

El soldado asintió y lo soltó dejándolo desarmado mientras se colocaba al lado de su rey y este volteaba a mirar a su hermano una última vez antes de marcharse.

 

-Dile a tu sultán que iré por su cabeza y nada me detendrá ni siquiera tú. La próxima vez que nos veamos te matare.-

 

 

 

Zero se sujetó el pecho con fuerza recordando vagamente a su hermano quien había sido engañado por la vampira sangre pura haciendo que lo odiara.

 

 

 

Se retiraron a un lugar seguro, donde acamparían esperando a que llegaran las tropas restantes de Hungria y Moldavia.

 

 

 

El rey entro en su campaña dejándose caer en el suelo. ¿Porque había pasado eso? Se sujetó la cabeza con ambas manos recargándose en sus piernas flexionadas. No podía ser cierto, su hermano había traicionado a su padre, a su país y a él, solo para obtener poder, incluso se había entregado a los favores del sultán aquel hombre que destrozo una parte de su vida.

 

 

Ahora no podía parar. Rumania se encontraba frágil y dependía de él cambiar eso, Hungria y Moldavia ahora países aliados ponían en el sus esperanzas para derrotar a su enemigo en común. Solo podía seguir adelante.

 

 

Las tropas llegaron y se mantuvo firme frente a sus soldados, guiándolos en la batalla. Su venganza contra el sultán y liberar a su país lo hacían seguir adelante.

 

 

Vencieron sobre Ankara, su hermano no apareció durante la pelea al parecer se había retirado junto con sus hombres.

 

 

 

Avanzarían a Esmirna y Antalya, seguramente el enemigo creía que atacarían directamente el castillo en Adana pero primero reducirían su fuerza militar atacando gran parte del país.

 

 

 

Las tropas restantes llegaron, eran suficientes para continuar peleando y continuaron hacia Esmirna presionando a los enemigos hacia el puerto donde la sangre de los muertos intentaba teñir las aguas de rojo disolviéndose en estas y dejando los cuerpos flotantes.

 

 

 

Sus avances eran comunicados a toda Rumania y a los países aliados que habían cedido sus tropas, llevándoles esperanza.

 

 

Tras su triunfo sobre Esmirna avanzaron a Antalya, las estructuras rocosas dificultaban su viaje haciéndolo tardado y el aire húmedo y el calor de la playa cercana afectaba a los soldados.

 

 

 

Las tropas enemigas eran mayores a las ultimas enfrentadas y fue más difícil vencer, costando un gran número de bajas de su lado, pero al fin habían vencido en las principales ciudades y pronto llegarían al sultán y seguramente ahí estaría su hermano.

 

 

 

 

Los rayos del sol iluminaron un poco su rostro molestándolo y comenzó a abrir lentamente los ojos, miro hacia arriba viendo el rostro tranquilo del vampiro y con una mano acaricio su rostro recorriéndolo con los dedos hasta llegar a sus labios, recargándose sobre el pecho de este para acercarse a él, su cabello plateado cayó sobre el negro notándose la gran diferencia en el color.

 

 

Una mano acaricio su cintura y otra lo tomo del rostro acortando la poca distancia y besándolo tomándolo por sorpresa, sus ojos vieron cuando los azules frente a él se abrían y un sonrojo cubrió sus mejillas siendo observado detenidamente hasta que se separó del beso, la mano en su cintura comenzó a bajar y miro hacia abajo notando su desnudes, frunció el ceño y separándose del vampiro corrió adentrándose al baño rápidamente para tomar una ducha.

 

 

Alucard simplemente sonrió soltando una pequeña risa que alcanzo a escuchar su pareja. Le encantaba verlo nervioso, todas sus expresiones le atraían y le hacían querer poseerlo para que nadie se atreviera siquiera a mirarlo.

 

 

Zero lo estaba aceptando, podrían ser felices nuevamente y ahora para toda la eternidad como debió haber sido en un principio.

 

 

Espero a que saliera viéndolo regresar a la habitación con una toalla amarrada en la cadera secándose el cabello con otra. Demasiado tentador.

 

 

Se levantó y jalándolo de un brazo lo acerco, sentándose en la cama con el sobre sus piernas.

 

 

Zero lo miro sorprendido y su boca se abrió apunto de protestar siendo invadida por la lengua del vampiro que abrazaba su cintura y lo pegaba a su cuerpo. Frunció el ceño pero las caricias amenazaban con hacerlo reaccionar y entrecerró los ojos, pasando los brazos por su cuello.

 

 

La puerta de la habitación se abrió repentinamente y Yagari entro molesto seguido de Cross que parecía nervioso.

 

-Espera Ya…-

 

Miro la escena frente a él y sus lentes se desacomodaron, Zero estaba sorprendido y no se había movido de su posición observando a su maestro y al director frente a él.

 

Cuando repentinamente Kaien se llevó las manos a la cara.

 

-¡Noooo! ¡¡Mi hermoso hijo ya no es virgen!!-

 

Zero y Yagari lo miraron sorprendidos, el primero abrió la boca pero no sabía que decir… tenía razón después de todo y el segundo lo miro enfadado.

 

-¿Qué? ¡Ese no es el problema aquí!-

 

Volteo a ver a la pareja frente a él, señalándolos enojado.

 

-¡Ustedes dos sepárense!-

 

Zero reacciono apartándose rápidamente del vampiro, por el movimiento la toalla en su cintura cayó al suelo y la pareja frente a él se sorprendió.

 

 

 

Yagari miro hacia otro lado nervioso y Cross grito como una niña con corazones en los ojos, mientras Zero avergonzado y enfadado se cubría con las manos mirando al vampiro quien le sonrió pervertida mente pasando la lengua por sus labios lo que aumento más su vergüenza y rápidamente se colocó la toalla sujetándola con una mano mirándolos.

 

-Largo de aquí todos… ¡Ahora!-

 

Los tres obedecieron después del tremendo grito que soltó y Alucard le dirigió una última mirada viendo el avergonzado rostro de Zero, que lo miro un segundo para después mirar nervioso y enojado hacia otro lado provocándole una pequeña risa al vampiro antes de salir dejándolo solo.

 

 

Suspiro fastidiado mirando el agarre en la toalla de su cintura para comenzar a cambiarse, no parecía buena idea dejar solos a esos tres mucho tiempo, apresurado salió peinando su largo cabello de la habitación encontrando a Yagari intentando apuntar a Alucard con su escopeta mientras el director se interponía entre ellos intentando calmarlo y el vampiro simplemente los ignoraba. ¿Cuánto tiempo habían estado solos 5 minutos? Se cruzó de brazos y camino hacia el vampiro jalándolo de una manga del abrigo negro que portaba hasta la puerta de la casa para después voltear a ver a su padre adoptivo y a su maestro.

 

-Le enseñare los alrededores-

 

Kaien los despidió sonriente con la mano mientras su maestro los miraba molesto para después ver a Kaien de manera extraña.

 

 

Prefirió ignorarlos y camino por la academia hasta la entrada notando que no había soltado al vampiro en todo ese tiempo y lo soltó rápidamente. Alucard sonrió y Zero siguió caminando volteando a cualquier parte mientras el vampiro lo seguía de cerca.

 

 

Después de unos minutos llegaron a la ciudad, había muchas tiendas y personas caminaban asomándose por las vitrinas, suspiro fastidiado realmente no le gustaban los lugares donde había tantas personas ¿Por qué no se le había ocurrido ir a otro lugar? no lo habia pensado mucho, simplemente queria salir de ahi.

 

 

 

Las personas que caminaban cerca de ellos comenzaron a verlos de manera insistente, los ignoro adentrandose en una xafeteria cercana, el mismo lugar al que lo había obligado a ir Yuki una vez, se dejó caer en los asiento de manera cansada y el vampiro tomo el lugar frente a él, la mesera rápidamente se acercó emocionada ofreciéndoles los menús pero Alucard rechazo el suyo con la mano mirandola un segudo, provocándole un pequeño sonrojo, mientras que Zero parecia perdido en sus pensamientos y señalo lo primero de la lista un té.

 

 

-¿No tomaras nada?-

 

-Dudo que aquí tengan vino pequeño vampiro-

 

Negó con la cabeza ¿Por qué venderían alcohol en una cafetería?

 

-Tsk... Deja de llamarme así-

 

La chica regreso colocando el té frente a Zero y se retiró nerviosa aun con las mejillas rojas.

 

Zero llevo el té a su boca, el sabor no era muy bueno ¿Tendría algo que ver con el hecho de que ya no pudiera probar comida humana?

 

Despues de unos minutos en los que se haba formado un total silencio entre ellos dejo dinero sobre la mesa y se levantó algo fastidiado caminando hacia la puerta mirando al vampiro, Alucard se levantó pero fue detenido por varias meseras que chillaban emocionadas rodeándolo.

 

-¡Es realmente guapo!-

 

-¡Por favor denos su teléfono!-

 

-¿Es artista?-

 

Los corazones flotaban en el aire, Zero las miro enojado y después al vampiro que sonreía de forma algo torcida sin responderles, molesto aparto la vista fijándose en el ventanal pero se sorprendió, había algunas personas asomadas intentando ver hacia adentro hacia donde estaba el y otras al vampiro. La gente comenzaba a hacer tumulto alrededor creyendo que se trataba de alguien famoso, molesto apretó el agarre en la puerta rompiendo la manija y con grandes zancadas camino hacia el vampiro tomándolo del abrigo y jalándolo con el hacia la entrada saliendo del lugar, dejando a las chicas desilusionadas.

 

Pasaban esquivando a las personas de alrededor pero unas chicas insistentes los seguían, fastidiado se detuvo mirando al vampiro.

 

-Esto es culpa tuya -

 

Alucard sonrió divertido.

 

-Ellas nos siguen porque quieren ¿Acaso estas celoso?-

 

Se inclinó sobre el mirándolo a los ojos.

 

Su cuerpo se estremeció y miro hacia otro lugar con el ceño fruncido.

 

-¿Quién esta celoso?-

 

Una mano acaricio su rostro y un sonrojo inundo sus mejillas.

 

-Hay una forma de solucionarlo-

 

Las chicas los estaban alcanzando, el vampiro tomo su rostro y agachándose lo beso abrazándolo por la cintura, la lengua ingreso a su boca convirtiéndose en un beso apasionado y aferro sus manos al abrigo negro.

 

 

Las chicas los miraban con sorpresa y nerviosas comenzaron a irse.

 

 

Se separaron por falta de aire. Alucard miro algo cerca de ahí y jalo a Zero quien estaba ligeramente aturdido, entrando en un lujoso bar.

 

 

Se sorprendió, pero al menos las chicas se habían ido. Tomaron asiento y el vampiro ordeno una costosa botella de vino.

 

 

 

Sostuvo la copa en su mano y bebió de ella de manera elegante, bajo la atenta mirada de su pareja, sonrió y coloco una copa llena frente a él.

 

 

Miro la copa con desconfianza, nunca había bebido alcohol.

 

La tomo entre sus manos probándola, sintiendo el espeso olor inundarlo y el líquido que quemaba un poco su garganta, la sensación la conocía y solo podía compararla a cuando bebía sangre aunque era realmente mucho más débil.

 

 

Alucard le ofreció otra copa sonriendo y la tomo lentamente, si lo pensaba era un buen momento para aclarar sus dudas, fruncio los labios y miro al vampiro frente a él ¿Que debería preguntar primero?

 

 

El mesero se acercó a ellos colocando una botella sobre la mesa.

 

-Cortesía del caballero de allá-

 

Le sonrió llenándole la copa.

 

-Menciono que usted es muy hermosa y si no está en una relación con el caballero tal vez quisiera acompañarlo en su mesa esta noche.-

 

Zero lo miro fastidiado saliendo del enrredo de pensamientos.

 

-¿Qué? ¿De qué rayos…?-

 

 

Alucard tomo su mano tomándolo desprevenido para después besarla recargándola contra su boca, frente al hombre que intentaba seducir a su pareja mirándolos desde lejos, este lo noto y se acercó a ellos para disculparse.

 

-Parece que me equivoque y eran pareja después de todo. Déjeme decirle que su novia es muy hermosa-

 

El mesero asintió al igual que los que estaban cerca de ellos escuchando.

 

Zero abrió los ojos y la boca sorprendido.

 

¿Le habían dicho mujer? El vampiro frente a él sonrió con burla mirándolo.

 

-Es mi esposa-

 

Soltó una risa divertida y Zero pego los puños contra la mesa levantándose, mareándose un poco por la acción, al parecer las copas de vino comenzaban a afectarle, frunció el ceño y el vampiro termino de beber su copa dejando unos billetes en la mesa y siguiéndolo hasta la entrad bajo las atentas miradas algo sorprendidas de ambos hombres.

 

Una vez fuera del bar caminaban entre las personas.

 

-¿Esta ciego o qué? maldita sea... ¡Es obvio que no soy una mujer! -

 

Se escuchó una risa contenida y se giró mirándolo furioso.

 

-Tienes razón... tu eres más hermoso-

 

Tomo uno de los largos mechones plateados acercándolo a su boca. Zero sintió su rostro arder pero al voltear al rededor algunas personas se habían detenido a ver la escena y ya les estaban tomando fotos.

 

-Maldicion esta gente…-

 

 

 

Alucard fijo su vista lejos de ahí y Zero lo miro fijándose en la misma dirección. Una pequeña alteración en el aire ¿Niveles E? Ambos comenzaron a caminar rápidamente hacia el lugar llegando a la parte abandonada del pueblo. El viento pasaba haciendo que las desvencijadas ventanas golpearan contra las paredes y las puertas crujieran, no sentía ningún humano cerca pero ¿Que era esa sensación?

 

 

Llevo su mano al cinturón por instinto había olvidado que ya no contaba con su bloody rose.

 

 

El vampiro camino hacia un viejo edificio que parecía querer desmoronarse, volteando un momento lo tomo de la mano y lo acerco a él colocándole su enorme pistola Casull apretando el agarre.

 

-Hay una enorme cantidad de ghouls en este lugar y un vampiro artificial que los comanda.-

 

Hablo sorprendiéndolo.

 

-Observa lo que se encarga de erradicar la organización Hellsing-

 

Pateo la puerta frente a él ingresando en los pasillos, el lugar parecía vacío y oscuro a simple vista, las paredes maltratadas lucían la pintura descarapelada por la humedad y el viento soplaba atravesándolo y creando voces.

 

 

 

Alucard avanzo sin inmutarse con su enorme pistola negra en la mano hasta el patio descolorido y vacío, en el centro del lugar había una cubierta de fierro donde marcaban unas agarraderas manchadas con sangre para descender, movió la tapa empujándola con una de sus botas dejando un túnel oscuro a la vista con unas pequeñas escaleras que bajaban sin fin. Zero lo miro, no pensaba entrar ahí.

 

 

Unos gruñidos fuertes inundaron el lugar haciendo eco y por el túnel aparecieron unos hombres mostrándose hasta la mitad intentando salir, tenían las caras deformadas y los ojos desenfocados, mientras abrían la boca mostrando los dientes intentado alcanzarlos para morderlos, moviéndose de forma desquiciada y arrastrándose. ¿Realmente eran niveles E? escucho unos gruñidos y pasos acercarse rápidamente hacia ellos, varios de esos hombres se acercaban desde uno de los extremos del viejo edificio. No, no eran niveles E eran otra cosa, parecían estar totalmente fuera de control, sus movimientos eran torpes y su aspecto grotesco. Disparo al que se encontraba más cerca pero este siguió avanzando.

 

 

 

Alucard disparo a los que sobre salían del túnel mientras la sangre se esparcía por el lugar.

 

-Apunta a la cabeza, de otro forma no se detendran.-

 

Su cuerpo reacciono apuntándolos con el arma y disparando, las cabezas explotaban frente a él cayendo al piso de piedra.

 

 

El vampiro se posiciono sobre la entrada disparando sin parar a los cuerpos que arremetían con salir salpicando todo de sangre mientras sonreía.

 

 

Su vista se enfocó en más de esos seres que bajaban aventándose por las escaleras y saliendo de los departamentos. Cada vez eran más, les disparo uno a uno y los cuerpos caían siendo aplastados por los que seguían su camino, la sangre goteaba y los cuerpos se deslizaban por las escaleras. ¿Cómo es que esos seres habían llegado ahí?

 

 

Cuerpos de ghouls cayeron tras él desde los pisos superiores, rompiéndose y arrastrándose intentando acercársele obligándolo a voltear y dispararles, un ghoul se precipito hacia el por la espalda apunto de morderle el cuello pero Alucard le disparo apartándolo para después seguir disparando hacia abajo, un fuerte grito se escuchó desde una de las columnas mostrando a una pequeña niña de vestido blanco que se balanceaba acercándose, apareció tras el tomándolo por sorpresa con un cuchillo en la mano dispuesta a atravesarlo por el estómago, su cuerpo vibro no alcanzaría a esquivarlo a tiempo, el calor lo inundo un segundo y la niña vampiro exploto en miles de pedazos esparcida por el suelo, se tapó la boca con asco y sorpresa mirando la sangre y los restos para dirigir su vista al vampiro que lo veía sonriendo.

 

 

-Ese era el vampiro artificial que los controlaba, sin él todos los ghouls que fueron creados desaparecerán-

 

Su ropa estaba manchada con sangre y al momento esta desapareció volviendo a su gabardina roja y su cabello se hizo más corto mientras guardaba su arma y se acercaba a su pareja quien permanecía con un leve shock mirando los restos en el suelo que se incendiaban en llamas azules para desaparecer.

 

Tomo su mano retirándole el arma y lo abrazo pegando su cabeza contra su pecho.

 

-Fueron tus poderes, se activaron al sentir peligro no se puede evitar.-

 

Se agacho sobre el acariciando su espalda y mirando directamente las orbes lilas.

 

-De cualquier forma si no lo hubieras hecho, lo habría hecho yo.-

 

Frunció el ceño viendo los ojos azules frente a él, estaba tan cerca podía sentir su aliento frio contra su cara, su cuerpo reaccionaba por si mismo cuando se trataba de él, subió los brazos hasta abrazar su cuello y el vampiro sonrió uniendo sus bocas en un suave beso calmándolo.

 

 

Después de unos minutos salieron del lugar, caminaban por el bosque que rodeaba la escuela, Zero se recargo en uno de los arboles sintiendo un mareo y algo en su cabeza lo hizo apretar los ojos con fuerza y al abrirlos vio al vampiro frente a él, se encontraban en un jardín viendo el atardecer recargados bajo la sombra de un árbol mientras los rayos del sol comenzaban a desvanecerse.

 

 

-¿Por qué?-

 

Vlad acaricio el rostro frente a él.

 

-¿Por qué aceptaste comprometerte conmigo?-

 

No podía creer lo que acababa de decirle, recargo la cabeza hacia atrás contra el árbol y este lo miro fijamente.

 

-En el momento en que te vi por primera vez lo entendí.-

 

Se acercó hasta escasos centímetros de su rostro.

 

-Tu lugar es conmigo, no puede ser nadie más que tu-

 

 

Zero se separó un poco mirándolo sorprendido.

 

-¿Cómo puedes estar tan seguro?-

 

El vampiro acaricio su cabello mirándolo fijamente, azul contra amatista para después cerrarlos un momento y volver a abrirlos.

 

-Es un poder mayor a cualquier otro que me obliga a mirarte y desear estar junto a ti.-

 

Sorprendido lo observo mientras este se acercaba acortando el poco espacio entre ellos uniendo sus bocas y sosteniéndolo delicadamente del rostro en un beso corto para después separarse notando la cara sonrojada y sorprendida del que sería pronto su esposo.

 

Le tendió una mano inclinándose frente a él.

 

-¿Caminarías conmigo Zero?-

 

Sabía lo que esas palabras implicaban, respiro profundamente calmando su nerviosismo, nunca sabía exactamente que esperar de ese hombre pero estaba dispuesto a averiguarlo, estar con él lo llenaba por dentro cubriendo cualquier vacío, realmente le gustaba. Sujeto la mano frente a él soltando una pequeña sonrisa.

 

-Caminare contigo.-

 

Vlad sonrió levantándose y jalándolo con el atrapándolo entre sus brazos.

 

 

 

Reacciono abriendo los ojos con una mano en su rostro ocultando el notable sonrojo que inundaba sus mejillas y el vampiro se acercó sonriendo.

 

-Parece que recordaste tu promesa-

 

 

Zero lo miro apretando los labios, pegando su cuerpo contra el árbol y siendo apresado contra este por los brazos del vampiro que se acercó a escasos centímetros de su rostro, acortando la distancia para acercarse a su oído y sintió su aliento en su cuello.

 

-¿Caminarías conmigo Zero?-

 

Su cuerpo se estremeció sintiendo su cuello ser besado y cerró los ojos con fuerza un momento, al abrirlos el vampiro lo miraba con los ojos entrecerrados y sus bocas separadas por una distancia casi inexistente.

 

-Si…Caminare contigo-

 

Soltó con dificultad, su voz temblaba y el vampiro frente a él sonrió besándolo, pasando la lengua por los labios.

 

 

 

Sus labios cosquillearon y noto que su cuerpo temblaba inexplicablemente, abrió levemente la boca sintiendo la lengua adentrarse comenzando a recorrerla y apoyo las manos sobre el abrigo negro.

 

 

Alucard acaricio el largo cabello recorriendo su torso, acariciando su cintura sobre la camisa blanca y bajando por la cadera. Separo las piernas de su pareja con una de las suyas presionando levemente su miembro escuchando el delicioso gemido que soltó la pequeña boca acallada por el beso, para apretar con una de sus manos el redondo trasero.

 

 

Las manos pasaron por su cuello pegando más sus cuerpos y el vampiro sonrió complacido.

 

 

 

 

 

Las puertas de la asociación se abrieron de par en par dejando ver a un hombre alto de cabello castaño claro y ojos del mismo color que caminaba adentrándose en la sala, sus botas producían un pequeño golpe contra el mármol blanco del piso y el sonido inundaba con eco el lugar, se detuvo frente al líder de la organización quien lo miraba desde su posición al igual que los miembros del consejo que se extendían a ambos lados.

 

-Cazador Kaito Takamiya hemos asignado una nueva misión para usted, la cual no puede rechazar-

 

Hablo el hombre mirándolo fijamente.

 

-¿En qué consiste?-

 

-Conocemos su pasado joven Takamiya y esperamos que esto no nuble su decisión-

 

Kaito frunció el ceño.

 

Un hombre se acercó entregándole unos documentos para después retirarse.

 

-Esa es la información referente a la misión, confiamos en que no decepcionara a la asociación. Puede retirarse.-

 

Asintió dando la vuelta caminando hacia la salida mientras abría el documento en sus manos. Se detuvo repentinamente fuera del lugar y las pesadas puertas fueron cerradas. Sus ojos se abrieron con sorpresa el nombre de Zero aparecía, no podía creer lo que estaba leyendo. Enfadado comenzó a caminar rápidamente averiguaría lo que estaba sucediendo, verlo por sí mismo sería más fácil de creer.

 

 

 

 

 

 

Las manos apretaron el agarre en su trasero levantándolo, haciendo que rodeara la cintura del vampiro con las piernas sin separarse del beso, podía sentir la gran erección pinchar su entrada aun con los ajustados pantalones puestos.

 

 

La camisa blanca fue desabrochada y las frías manos recorrieron su abdomen, el vampiro termino el beso para continuar besando su cuello, su cuerpo aún estaba recargado contra el árbol y levanto la cara dándole acceso a su cuello, la larga lengua lo recorrió penetrándolo con los colmillos y succionando su sangre, pequeños gemidos escapaban de su boca y el calor inundaba sus mejillas.

 

 

El agarre en su cintura aumento y comenzó a embestirlo levemente. Apretó el agarre alrededor de su cuello pasando una mano por el cabello negro que ahora lucia más corto, su cuerpo estaba caliente y excitado, una mano desabrocho su pantalón apresando su miembro, el tacto frio lo hizo soltar un fuerte gemido y el vampiro dejo de beber besándolo aun con su sangre en la boca.

 

 

 

Soltó el agarre dejándolo de pie y comenzó a descender besando su cuello, recorriendo su cuerpo acariciándolo, bajo a su pecho lamiendo y besando haciendo que su cuerpo se estremeciera, se inclinó frente a él y Zero se recargo contra el árbol mientras su pantalón era jalado hacia abajo junto con sus bóxer hasta quitarlos, sintió el aliento frente a su miembro y mordió sus labios con deseo viendo directamente los ojos azules y el rostro sonriente que lentamente se acercó sacando la lengua para recorrerlo.

 

-Ahhhmm Alucard…-

 

Tomo el miembro con una mano besando la punta comenzando a engullirlo lentamente con su boca.

 

 

La sensación era increíble y su cuerpo se estremeció de placer gimiendo, la lengua recorría su miembro envuelto por las paredes de su suave y caliente boca, succionándolo y rosándolo levemente con los dientes, arqueo la espalda escuchando los fuertes latidos inundar su pecho y se sostuvo de los hombros frente a él, sus miradas conectaron y una mano viajo a su trasero apretándolo, acaricio el cabello negro frente a él tocando el rostro del vampiro.

 

 

 

Apretó con ambas manos el redondo trasero de su pareja simulando embestidas contra su boca, escuchando los gemidos entrecortados que salían sin control.

 

 

Zero apretó el agarre en su cabello, asiendo presión en su hombro mientras su cuerpo se retorcía de placer.

 

 

Se corrió llenando la boca del vampiro sintiendo pequeños espasmos que amenazaban con hacerlo perder el equilibrio, sus piernas temblaron mientras miraba su miembro ser sacado lentamente de la boca para ser besado en la punta y subir recorriendo con pequeños besos por su abdomen hasta su boca devorándolo mientras los brazos rodeaban su cuerpo sosteniéndolo pegado a él.

 

 

Alucard lo cargo haciendo que pasara nuevamente las piernas alrededor de su cintura y desabrocho su pantalón dejando expuesto su miembro rosándolo contra la entrada, el cuerpo de Zero se relajó rodeando su cuello con un brazo mientras el otro apretaba el abrigo, se separó del beso jadeante pegando su rostro contra el del vampiro y acercándose a su oreja mordiéndola levemente para bajar a su cuello pasando la lengua sobre este y enterrando sus colmillos, la deliciosa sangre inundo su boca.

 

 

Aprovecho que el cuerpo de Zero estaba relajado bebiendo su sangre y lo penetro de una sola estocada adentrándose en él, con las deliciosas paredes calientes aprisionándolo y escuchando los fuertes gemidos contra su cuello.

 

 

Sintió el miembro penetrarlo caliente y duro dentro de él, el dolor recorrió su espalda y agradeció que este no se moviera durante unos instantes, acostumbrándose a la invasión.

 

 

Recorrió sus piernas acariciándolo para apresar con ambas manos su trasero separando y apretando los redondos glúteos para comenzar a embestirlo suavemente saliendo casi por completo y penetrarlo rápidamente soltando pequeños suspiros de placer.

 

 

Gimió fuertemente dejando de beber y lamio la herida que se cerró enseguida, las embestidas se volvieron rápidas moviéndose dentro de él, su cuerpo fue separado del árbol mientras una mano recorría su espalda por debajo de la camisa que colgaba de sus brazos y la otra lo dejaba caer por momentos sobre la erección notándola más profunda adentro de él. Se sostuvo con fuerza de sus hombros mientras su cadera subía y bajaba por las manos que la sostenían, oculto su cara en el pecho del vampiro escuchando sus propios jadeos y gemidos mientras su cuerpo vibraba de placer.

 

 

Alucard lo sostuvo con una mano recorriendo con la otra su espalda hasta su cintura y una de sus piernas tocando el miembro suavemente entre sus dedos comenzando a acariciarlo.

 

 

Las embestidas se hacían cada vez más rápidas y su miembro excitado era acariciado por la fría mano del vampiro, alzo el rostro mirando los ojos azul profundo entre cerrados que lo miraban y la boca levemente abierta, un aspecto hermoso que solo veía en esas circunstancias, se acercó uniendo sus bocas siendo correspondido enseguida y tornándose en un beso demandante y salvaje que recorría todo su interior dejándolo sin oxígeno.

 

 

 

Su pecho bajaba y subía rápidamente al igual que la mano en su miembro, las embestidas violentas y el demandante beso lo tenían al límite se correría en cualquier momento.

 

 

Alucard lo noto y aumento el movimiento de su mano apretando el miembro haciendo que este se corriera soltando un fuerte gemido que inundo sus oídos, llevo sus manos al trasero sin detener las embestidas aprisionándolo entre sus dedos y dando una profunda embestida se corrió en su interior llenándolo, soltando un leve gemido de placer y permanecieron en esa posición unos momentos.

 

 

Zero jadeaba intentando recuperar la respiración, aferrado al abrigo de su pareja y este sonrió saliendo lentamente de su interior, tomo el pañuelo de su traje limpiando su mano y abdomen de su pareja para después llevarlo a su entrada separándola con dos dedos mientras el semen se deslizaba saliendo de su interior goteando al piso y gemía levemente, cuando termino Zero soltó el agarre de sus piernas parándose y recargando su cuerpo contra el árbol aun con un fuerte sonrojo en sus mejillas viendo al vampiro que abrochaba su pantalón colocándose los guantes, busco su ropa encontrándola cerca de ahí, se tambaleo un poco caminando hacia ella siendo sostenido por la cintura por uno de los brazos del vampiro y beso un lado de su rostro.

 

-¿Quieres que te vista?-

 

Susurro en su oído.

 

-No. Yo puedo hacerlo.-

 

Se deshizo del agarre molesto, tomando la ropa entre sus manos comenzando a vestirse bajo la atenta mirada de Alucard que le sonreía divertido.

 

 

Abrocho su pantalón y sintió el cuerpo del vampiro pegarse a su espalda sorprendiéndolo un poco, las manos comenzaron a abrochar su camisa y al terminar beso su cuello. Zero apretó los labios con vergüenza para voltear y ver al vampiro levemente molesto, para dirigirse hacia la casa del director.

 

 

Pareció pensarlo un tiempo cuando se detuvo mirando su cabello corto y su ropa.

 

 

-¿Cómo es que puedes hacer eso?...cambiar el largo de tu cabello y las ropas -

 

Alucard lo miro divertido.

 

-Puedo tomar cualquier forma, generalmente tomo formas que he tenido antes. Tú también puedes hacerlo, cuando te desperté y elimine el sello que tenías tu cabello creció un poco y cuando dejaste salir un poco de tus poderes tu cabello volvió a crecer como lo tenías originalmente, aun no conoces tus poderes pero lo harás con el tiempo-

 

-¿Cualquier forma?-

 

Lo miro con desconfianza y Alucard entrecerró los ojos sonriendo.

 

-Parece que no me crees pero lo has visto muchas veces antes-

 

Su cabello creció largo y su ropa cambio a un traje negro ajustado.

 

Zero lo miro, había visto esa forma antes en la mansión.

 

-Esta es la forma que tome cuando me convertí en vampiro-

 

Los ojos rojos se abrieron en la niebla oscura que se encontraba alrededor de su cuerpo, del mismo color que sus ojos en ese momento tan rojos como la sangre, el traje completamente negro con la risa terrorífica lo hicieron retroceder levemente alterado. El vampiro lo noto y permaneció quieto tornando sus ojos azules y cambiando su forma.

 

 

Zero lo miro sorprendido, frente a el había un niño de cabello largo y negro con fleco, tenía un traje blanco con un abrigo largo y un sombrero del mismo color, posaba con un brazo levantado tocando su sombrero y el otro cruzando su cadera mostrando una enorme sonrisa y los enormes ojos azules lo veían.

 

Abrió la boca un segundo acercándose un poco.

 

-¿Pero qué….?-

 

El vampiro lo miro dejando de posar.

 

-Es mi forma de cuando tenía unos 14 años, la use un tiempo cuando servía para el anterior líder de Hellsing-

 

 

Se agacho un poco mirándolo fijamente, su rostro era delicado al igual que toda su forma.

 

-Pareces una niña pfft…-

 

No pudo contenerse y comenzó a reír frente al vampiro quien lo miraba con los ojos entrecerrados.

 

 

Zero noto la pequeña cara molesta y sorprendiéndolo lo tomo por los hombros abrazándolo y el sombrero cayó al piso, tenía un rostro muy bonito pero no podía evitar recordarle al pequeño niño que había visto antes en sus recuerdos sufriendo.

 

 

 

Alucard se movió entre sus brazos apartándolo un poco y besándolo sorprendiéndolo para después apartarse un poco sonriendo. Llevo una de sus manos al pequeño rostro del vampiro acariciando su mejilla para después jalarla un poco dejando ver sus colmillos, volvió a reír por la mueca que había puesto frente a él y cuando abrió los ojos este había cambiado de forma, tenía el cabello corto y el traje negro con la gabardina roja habían regresado, se encontraba agachado mirándolo con los ojos rojos mientras sonreía de manera sádica y un aura peligrosa lo envolvía.

 

 

Su cuerpo tembló un poco sorprendiéndose y al intentar enderezarse fue jalado con brusquedad apresado por uno de los brazos de Alucard mientras el otro tomaba su mentón acercándolo a su rostro.

 

-Parece que te estas divirtiendo pequeño vampiro ¿Deberíamos continuar con lo de hace un momento? ¿Qué árbol te gusta?-

 

-Es… Espera-

 

 

 

Al fin había llegado a Japón, no podía creer lo que decían aquellos documentos, pero era un cazador y una misión era una misión.

 

 


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