Capítulo 11.- Sospechas y traiciones
Seiya estaba sentado a la sombra de su árbol favorito en el patio de su facultad, leía un libro gordito y mordía su lápiz inconscientemente, esos últimos días le costaba mucho concentrarse en nada porque la preocupación por su novio lo tenía con los nervios de punta
Las investigaciones en el caso de la muerte de Shun continuaban, la policía había entrevistado a todos los compañeros de clase de Shun, a sus amigos fuera de su círculo escolar, a sus profesores, a Hades, a sus amigos, a Sorrento, a Julián y al propio Seiya, en fin… habían sido días tensionantes por decir lo menos, habían varios rumores que circulaban que eran bastante perturbadores, las noticias iniciales hacían alusión a un suicidio, pero ahora habían mutado hacia un posible homicidio.
- Hey… ¿qué haces? – Julián había llegado y literalmente se dejó caer en el césped apoyando su cabeza en el regazo de Seiya que quitó su libro y sonrió ante el gesto, a Julián no le importaba nunca nada y siempre se mostraba cariñoso con él
- Tengo examen más tarde y quería repasar un poco, ¿tú que haces por aquí? – preguntó Seiya luego de agacharse y besar a su novio en los labios
- Tenía hora libre, Sorrento está de revuelque con Mime así que… me dejaron solito, y pensé en venir a ver si tú estabas libre, no estaba seguro pero creía que tenías hora libre más o menos a esta hora – dijo Julián mirando su reloj
- La verdad no tengo hora libre, el profesor Saga está con gripe y no vino hoy
- Que bueno… ¿quieres ir al cine esta noche? – propuso Julián entrelazando su mano con la de Seiya que sonrió primero pero la sonrisa se le borró del rostro cuando vio acercarse por el pasto a los dos detectives que ya había visto en su departamento, venían acompañados de tres uniformados, sus expresiones eran por demás serias
- Julián Solo, es bueno que lo hayamos encontrado rápidamente – dijo uno de los detectives, el de cabello negro que se llamaba Shura, Julián se volteó y frunció el ceño al preguntar:
- ¿Y ahora qué hice?
- Julián Solo, está bajo arresto por el homicidio de Shun Takamura, tiene derecho a guardar silencio, tiene derecho a un abogado, si no puede costear uno, la fiscalía se lo proporcionará, ¿entiende los derechos que acabo de explicarle? – el detective de cabellos azules, Pietro, dijo esto en un tono monótono y tendió su mano para ayudar al muchacho a ponerse de pie, estaba sumamente molesto con la situación, o por lo menos eso le pareció a Seiya que estaba en shock
- ¿De qué demonios están hablando? – Julián se puso de pie sin ayuda y lució pálido, Seiya hizo lo propio pero no sabía que más hacer, quería abrazar a Julián, no quería dejar que se lo lleven, esta situación era por demás densa
- Por favor señor Solo, no queremos agregar resistencia al arresto a los cargos, ¿o sí? – dijo Shura dando un paso adelante, él tenía esposas en las manos
- Pero yo no he matado a nadie, están en un error – dijo Julián atropelladamente dando un paso hacia atrás, los uniformados dieron un paso hacia a delante y Seiya pudo ver como uno de ellos disimuladamente llevó su mano hasta su cinturón, buscaba su arma aparentemente, eso hizo que un latido escapara a su corazón
- Eso lo podrá explicar en la estación, no queremos hacer una escena, ¿verdad? – Shura dijo esto tranquilamente, levantó una mano indicando a Julián que se detuviera, el muchacho al verse rodeado ya no hizo nada más, se quedó quieto y dejó que los detectives lo esposaran, miró a Seiya que estaba pálido y le dijo:
- Llama a mi padre por favor, no creas nada de esto que no es cierto, te amo Seiya
- Yo también te amo Julián – Seiya limpió una lágrima de su rostro cuando vio cómo su novio era llevado a la patrulla que estaba parqueada al borde del jardín, dios… ¿por qué había pasado esto?, ¿por qué?
Julián se subió en el asiento trasero de la patrulla y miró por la ventana, vio como Seiya corrió hacia la patrulla cuando pudo reaccionar, vio como el detective de cabellos negros lo atrapó y lo abrazó protectoramente, parecía que buscaba calmarlo porque el castaño lloraba, la patrulla avanzó lentamente por las calles de la Universidad hasta que salió a la autopista
Si alguien le hubiera preguntado a Julián sobre su viaje con la policía, el muchacho honestamente podría haber dicho que no lo recordaba, se dejó llevar cual títere, algo le decían los uniformados pero él no estaba entendiendo nada, no podía reaccionar tampoco, le parecía surreal lo que estaba viviendo, nunca se imaginó estar en esta situación una vez más y por la misma persona, Shun… maldito Shun, ni muerto lo dejaba en paz…
Al llegar a la estación de policía fue conducido por los iluminados pasillos hasta una de las salas de interrogatorios, él ya había estado ahí antes, uno de los uniformados le quitó las esposas y lo dejó solo en aquella sala pero no se quedó solo por mucho tiempo, dos criminalistas entraron y en sus manos tenían un overol naranja, medias, ropa interior, camiseta, zapatos, en fin… todo el atuendo de los presos, esto más que cualquier otra cosa le había pegado a Julián que dócilmente se desnudó lentamente y se puso la ropa que le habían alcanzado
Los criminalistas enlistaron las pertenencias del muchacho y le tomaron fotografías de cuerpo entero cuando estaba desnudo, una vez concluida este humillante proceso, una vez que se quedó nuevamente solo, el peliazul empezó a caminar de lado a lado, cuando se cansó se sentó en la incómoda silla que estaba junto a una pequeña mesa, cuando se cansó se levantó nuevamente y caminó de lado a lado una vez más, y en eso estuvo hasta que se acomodó en la sillita apoyándose en la mesa y al poco tiempo se quedó dormido
Un ruido lo despertó y la verdad le tomó unos cuantos segundos el darse cuenta de dónde estaba y las razones por las que le dolía el cuerpo entero
- Sabes, aquí en la estación tenemos una teoría, ¿quieres saber nuestra teoría? – el detective de cabellos azules, Pietro al que apodaban DM, se sentó en la silla libre que estaba del otro lado de la mesa, Julián se estiró y un sonoro crack de su cuello fue audible en la sala
- ¿Tengo opción?
- No… no la tienes, nuestra teoría es que los sospechosos que son apresados cuando son inocentes se desesperan, caminan, lloran, golpean incansablemente la puerta, se muerden las uñas, tu entiendes… dan signos de ansiedad, en cambio los que son culpables usualmente se duermen – DM ladeó la cabeza y sonrió de medio lado
- Eso es solo una teoría, los patrones de comportamiento son solo eso, patrones, nada está escrito en piedra hasta donde los estudios lo avalan – respondió Julián claramente molesto
- Vaya… estudias medicina, ¿verdad Julián? – preguntó el detective abriendo un expediente en donde el joven pudo ver una fotografía suya y varios datos escritos pero no pudo entender lo que decían
- Si… ya les he dicho eso antes
- Es verdad… y dime, ¿en qué te piensas especializar?
- ¿Quiere hablar de mi especialización?, ¿para eso me trajeron aquí?, ¿están locos? - Julián estaba claramente indignado, esta situación se estaba llevando lo mejor de él y no podía permanecer en calma
- No… solo me dio curiosidad tu especialización, yo recomendaría medicina interna, no sé hasta qué punto puedas ejercerla en prisión pero los demás reos apreciarán el tener a un médico entre sus filas, el cuidado de la salud del sistema penitenciario deja mucho que desear – DM había estado ojeando los papeles mientras hablaba, pero cuando dijo esto último levantó el rostro y miró a Julián directamente a los ojos, esa mirada hizo que Julián sintiera como un hielo le bajaba por la espalda
- ¿Prisión?, ya les dije que yo no he matado a nadie – dijo Julián con convicción pero no pudo evitar tragar saliva, esto se estaba saliendo de control, ¿dónde estaba su padre?, ¿será que lo abandonó de nuevo?, bien podría ser ese el caso… dioses…
- Eso no es lo que las evidencias indican – dijo tranquilamente el detective
- ¿Qué evidencias? – Julián frunció el ceño y lució genuinamente confundido
- Tenemos evidencias físicas que lo ubican a usted en la escena del crimen y que usted convenientemente ha dejado fuera de sus declaraciones, además el único que tiene un motivo para querer muerto a Shun Takamura es usted, tenemos oportunidad, el cronología encaja, hágase un favor a usted mismo Julián y confiese, de esa manera podría obtener simpatía de la corte – DM expuso estos hechos con una calma aplastante, eso desubicaría a cualquiera
- Eso no es cierto, yo no maté a Shun, ¿qué evidencias dicen que tienen?, ¿qué cronología?, ¿de qué mierda está hablando? – el corazón de Julián latía con violencia, sentía un vacío en el estómago que no había sentido nunca antes
- Bueno… cuando te entrevistamos en la mañana siguiente de los hechos, estabas en tu casa y nos dijiste que la noche en cuestión habías estado en un bar con tu novio y tus demás amigos, y que luego fuiste a casa a dormir, ¿correcto? – DM preguntó mirando sus apuntes
- Si… eso es correcto
- Lo que no nos dijiste fue que fuiste a visitar a Shun en su dormitorio temprano esa noche, ¿por qué lo ocultaste? – preguntó tranquilamente DM enseñándole una foto captada por las cámaras de seguridad del edificio, eso se podía deducir fácilmente por la pobre calidad y resolución pero si se podía apreciar que era Julián el que estaba en los pasillos de aquel dormitorio, el peliazul tomó la fotografía en sus manos y suspiró al menear la cabeza y decir:
- Porque sabía que lo mal interpretarían todo si se los decía, especialmente luego de que supe que Shun había muerto, pero mire… la hora está impresa aquí, a las ocho de la noche fui por su dormitorio, ustedes mismo dijeron que Shun había muerto mucho más tarde, yo ya estaba en mi casa cuando eso pasó, yo no lo maté – Julián señalo la foto en la esquina en donde era visible la hora y efectivamente marcaba 20:12, DM sonrió de medio lado al pasarle una nueva fotografía en donde se veía claramente que Julián subía el rostro y miraba directamente a la cámara
- En la mayoría de los edificios de dormitorios del campus no hay cámaras de seguridad, solo algunos cuentan con este servicio, ¿sabías eso Julián? – preguntó el detective con tono sereno
- No… no lo sabía…
- Asumo que nunca te fijaste en ese detalle, y es lógico suponerlo porque tú no vives en uno de esos edificios
- ¿Eso que tiene que ver? – Julián no entendía a dónde quería llegar el detective con estas preguntas
- Tiene que ver en esto… - el detective mostró varias fotografías de Julián caminando por los pasillos del edificio y mirando directamente a las cámaras, el muchacho tomó las fotografías, se encogió de hombros y se las devolvió al detective sin entender la implicación de sus palabras, así que el detective continuó: - ¿No te parece extraño que más o menos quince minutos antes de la hora estimada de muerte de Shun Takamura, las cámaras de seguridad se hayan apagado sin causa alguna?
- No le sabría decir – contestó Julián mirando a los ojos al detective, el estómago le ardía, trataba de mostrarse sereno pero no lo estaba logrando
- Es bastante curioso que una sola persona haya mirado a todas las cámaras en su caminar por los pasillos del edificio de dormitorio de Shun Takamura, no es comportamiento usual y eso lo pudimos ver en los videos de las cámaras de seguridad – DM lo volvió a señalar en una de las muchas fotografías en las que Julián miraba las cámaras al pasar
- ¿Mirar cámaras es ahora un crimen?
- Podría considerarse como uno, asumiendo que el asesino al conocer la ubicación de las cámaras las hubiera apagado del panel central
- ¿No que la policía no asume cosas?, ¿no deberían basarse únicamente en la evidencia tangible?, no me parece que elaboren teorías del aire e inculpen a inocentes de lo que ustedes piensan o sueñan – el tono de Julián fue bastante agresivo
- Estamos analizando los escenarios para determinar oportunidad y motivo, del motivo estamos claros y de eso ya hemos hablado, estamos hablando de oportunidad
- El hecho de que odiara a Shun no significa que lo quisiera muerto, solo quiero dejar todo esto atrás y nunca más acordarme siquiera – Julián se recostó en el espaldar de su silla y DM lo miró intensamente al decir:
- Lo quería muerto… vaya…
- Es una expresión nada más – respondió Julián al darse cuenta de la implicación de sus palabras
- Muy bien… siguiendo con la cronología, ¿nos puede decir para qué visitó a Shun en su dormitorio esa noche? – preguntó DM mirando sus papeles
- Necesitaba hablar con él – admitió Julián, ya no era prudente negar nada si lo tenía en las cámaras de seguridad
- ¿De qué?
- Del hecho que estaba arruinando mi vida otra vez y yo no tengo la culpa de nada lo de que sea que le pase o le haya pasado, le fui a decir que no me importaba lo que su padre tratara de hacer, que yo no me iba a ir de la Universidad, que él haga de su vida lo que quiera pero que me deje en paz a mí, eso le fui a decir la verdad – Julián suspiró al terminar de hablar, como si fuera por demás obvio lo que fue a hacer allí, a DM no le pareció tan obvio al parecer porque preguntó interesado:
- ¿Y cómo lo tomó?
- Tan bien como podría esperarse, me dijo muchas cosas que ya me ha dicho antes, la verdad no le veo el punto en repetírselo
- ¿Y él fue el responsable de su ojo morado? – DM señaló su propio ojo al preguntar esto, las marcas en el rostro de Julián eran apenas visibles, pero si… el detective si había visto su ojo morado en su máximo esplendor
- Si…
- ¿Y usted?, ¿no hubo retaliaciones?
- Yo no lo golpeé, nunca he golpeado a ninguno de mis novios o amantes, eso no va conmigo – Julián se sintió ofendido con la simple pregunta, detective de cuarta, ¿quién se cree que es?
- Pero si se dejó golpear por él, ¿eso si va con usted? – preguntó venenosamente el detective
- Shun siempre fue melodramático, además de un golpe yo lo noqueaba y no me pareció que era lo correcto al estar él en el estado en el que estaba, yo asumo que ustedes vieron su habitación, tenía muchos frascos de pastillas en su mesita de noche, cuando habló conmigo estaba algo… no sé… mareado, ido, no estaba del todo coherente, por eso no me moví siquiera cuando me lanzó el puñetazo porque puso toda su fuerza en ello, y cuando logró pegarme, se cayó y se golpeó la cabeza en el filo de la cama – Julián señaló su propia frente cuando dijo esto
- Ese hematoma si fue documentado en el análisis forense, ahora… lo que más nos llamó la atención de su autopsia es que, bueno… las pastillas que estaban en su habitación fueron recetadas a él, pero no habían rastro de toxinas en su sangre, no había ingerido ningún tipo de medicación en al menos 6 horas previas a su muerte, no había alcohol ni ningún tipo de drogas – DM pasó los papeles hasta encontrar lo que buscaba, Julián miró la hoja pero no pudo leerla, estaba al revés y no pudo leerla
- Eso no fue lo que me pareció a mí
- Pero además de eso, otra de las cosas que nos parecieron interesantes, es el hecho de que encontramos su ADN en las uñas de la víctima
- ¿Mi ADN?
- Rastros de él, y por las fotografías que tenemos podríamos concluir que lo arañó en el pecho, justo aquí, ¿lo puede ver? – DM le mostró fotos a Julián que habían sido tomadas hacía no mucho, cuando los criminalistas le hicieron desnudar y lo obligaron a vestir ese mameluco naranja
- No lo recuerdo, bien pudo ser Seiya el que me arañó, a él le gusta arañarme – se justificó el peliazul, el detective arqueó una ceja y asintió ausentemente al decir:
- De cualquier manera lo podemos ubicar físicamente en la escena del crimen, hemos establecido que existe motivo y oportunidad, no creo que su caso de llegar a juicio se pueda probar duda razonable en su favor, yo recomendaría que se haga a sí mismo un favor y se declare culpable, con su colaboración a la investigación podríamos reducir en algo su condena
- Que yo no maté a Shun, yo estaba en mi casa cuando eso pasó, yo nunca he matado a nadie – insistió Julián con vehemencia e indignación, el peliazul había ido levantando el tono de voz de manera sostenida a lo largo de la entrevista
- ¿Tienes como probarlo?, recuerda que tu novio no pasó la noche contigo, él mismo nos dijo que pasó la noche en casa de su hermana, tu mejor amigo dijo que al llegar a casa se durmió y no escuchó nada hasta la mañana siguiente, bien pudiste haber salido a media noche de tu casa, desactivar el sistema de alarmas del edificio de dormitorio de Shun, matarlo y regresar a tu casa sin levantar sospechas
- Yo estudio medicina, no electrónica, Shun era buenísimo para las cosas eléctricas y eso, no yo, no yo
- Eso no es lo que dice en este reporte – DM sacó un reporta algo antiguo de actos vandálicos en la secundaria de Julián, en esa ocasión no lo habían arrestado pero su padre había tenido que pagar todos los daños, al verlo Julián palideció y atropelladamente dijo:
- Yo no hice esto, fue Shun el que lo hizo, yo no sé nada de electricidad o electrónica, nunca me ha gustado eso, era Shun el que hacía todo esto – a Julián poco le faltaba para gritar, hablaba gesticulando con las manos, se iba realmente desesperando al darse cuenta de lo que implicaban las palabras del detective
- Vaya… muy conveniente el decir eso ahora, ¿cierto?
- No es conveniente porque es la verdad
- De ser así, ¿por qué fue su padre el que pagó por los daños al colegio?, ¿por qué fue suspendido usted y no Shun?
- Porque… porque yo lo cubrí, porque nadie hubiera creído que el santo Shun fuera capaz de hacer locuras, pero así fue, Shun siempre fue aventurero y divertido, pero se avergonzaba de ello por las apariencias y por lo que su hermano pudiera pensar, lo que pasó esa noche fue su idea, yo solo lo acompañé y luego cuando nos atraparon cargué con la culpa
- ¿Por qué?
- Porque lo amaba!!!, yo lo amaba – a Julián se le cortó la voz cuando dijo esto
- Lo amaba tanto que con engaños lo llevó a su casa y lo violó, lo amaba tanto que luego de ese incidente lo buscaba sin darle tregua al punto que su familia obtuvo una boleta de auxilio en su contra, lo amaba tanto que cuando se enteró que estaba en Tokio y en su misma universidad, buscó acceso a él a través de un muchacho de su clase, y no conforme con ello lo volvió a acosar hasta el punto de llevarlo a la depresión, y como no consiguió nada más con eso, lo buscó por una última vez para amedrentarlo, para humillarlo, para golpearlo y finalmente para matarlo, confiéselo!!! – gritó el detective, con cada acusación Julián negaba con la cabeza
- Yo no puedo confesar lo que no hice, yo no maté a Shun!!! – Julián se puso de pie y se llevó las manos al rostro
- Todas las evidencias apuntan a usted, nadie más que usted
- No!!!, yo no lo maté!!!
- Hay sangre en sus manos Julián, admita lo que le hizo a Shun y así tal vez su conciencia deje de gritarle
- Yo no lo maté, se lo juro, yo no lo maté!!! – exclamó Julián con desesperación
- Lo amedrentó, lo amenazó, lo violó!!! – el detective dio un manotazo en la mesa que hizo saltar al peliazul que dijo:
- Si… está bien, lo violé, pero no lo maté, nunca he matado a nadie, nunca!!! – Julián lo dijo antes de poder contenerse, DM lo miró y sonrió, Julián no lo entendió hasta que la puerta se abrió y el alma se le fue al piso, en el umbral de la puerta estaba de pie aquel que rondaba sus pesadillas, aquel al que creía muerto, ahí estaba Shun con semblante sereno y acompañado de su hermano mayor, miró a Julián y casi en un susurro dijo:
- Me alegra que por fin una vez en tu vida digas la verdad
- Por todos los dioses… Shun… - Julián se dejó caer en la silla y se llevó una mano al pecho, no podía creer sus ojos, es que no podía creerlo…