Capítulo 6.- Aún falta un poco más para llegar al fondo
- ¿Sabes de qué tengo antojo?, cerezas… ¿tienes cerezas? – Seiya estaba acostado sobre su estómago y sonreía al sentir las manos de su amante en su espalda, Julián tenía las manos cálidas y algo dibujaba en la suave piel del castaño que se movía a ratos porque le hacía cosquillas
- No sé… habría que chequear, creo que tengo pasas y nueces, quédate quieto que pareces ardilla, me va a salir chueca el ala y está quedando espectacular – Julián besó la nuca de Seiya que sonrió y se movió solo un poquito para virar su rostro y besar al peliazul en los labios
- ¿Qué estás dibujando ahora? – preguntó Seiya curioso, a él no le agradaban mucho los tatuajes y por eso no se había hecho uno nunca, pero le parecía divertido que a Julián le gustara dibujar en su piel, y al peliazul le gustaba dibujar en Seiya luego de hacer el amor, así que en eso se encontraban
- Un dragón, en serio que va a quedar espectacular – Julián se estiró y besó a Seiya en la nuca, el castaño sonrió y se estiró como gatito en la cama
- Tengo hambre Julián
- Me falta el ala, espera solo un poquito y te prometo que te haré la cena – ofreció Julián palmoteando suavemente el trasero de su amante que sonrió y acomodó su cabeza hacia el otro lado al decir:
- ¿Espagueti?
- Lo que quieras, solo quédate quieto un ratito más, sabes… me gusta tenerte así, desnudito, quietecito y rendido ante mí, no no no, la verdad me encanta – Julián sonreía mientras dibujaba y Seiya sinceramente disfrutaba todas las atenciones de su amante, nunca nadie lo había hecho sentir especial como Julián lo hacía, el castaño si pensaba que luego de finalmente acostarse con Julián, se le iba a pasar el sentido de novedad y lo iba a botar en unos días, pero aparentemente no era así, se notaba que Julián estaba feliz también
- A mí me encanta que dibujes sobre mí, sabes… creo que erraste la carrera, podrías ser tatuador profesional o algo – Julián estaba dibujando ahora un dragón en la espalda de Seiya, pero ya le había dibujado antes un pulpo en su tobillo, un robot en el brazo y una salamandra en la parte de atrás de la muñeca, usaba un marcador de tinta permanente pero con el agua en pocos días se borraban los dibujos, a Seiya le encantaba la salamandra de su muñeca y estaba considerando hacérsela de manera permanente, eso agradaría a Julián
- Si claro… me convierto en tatuador profesional y a mi padre le explota la cabeza – Julián bufó y Seiya pudo notar que el solo mencionar a su padre se le fue la buena vibra que usualmente tenía
- Wow… en serio no te llevas con tu familia, nunca me has contado la razón – Seiya se giró un poquito para poder ver a Julián que hizo una mueca
- No te ofendas Seiya pero no es algo de lo que quiero volver a hablar nunca más en mi vida, ¿ok?
- No me ofendo, solo me sorprende porque tú eres genial, estudias medicina y en contra de todo pronóstico no has perdido ni un solo semestre, te fumas el ocasional porro pero no le haces a las drogas, te tomas el ocasional trago pero no le entras a la bebida, sabes cocinar, sabes pintar, eres muy divertido, tienes muy buenos modales, créeme… mi mamá te adoptaría en un santiamén – Seiya se incorporó en la cama y acarició la mejilla de Julián que sonrió sinceramente ante estas palabras, abrazó a Seiya y lo besó con pasión en los labios, y en eso estuvieron hasta que la puerta principal sonó, pasos también y luego Sorrento dijo en voz alta:
- Ya dejen eso y bajen, tengo comida china
- ¿Comida?, palabras mágicas – Julián besó a Seiya en los labios y ambos se levantaron de la cama, se pusieron algo de ropa y bajaron para encontrar a Sorrento que estaba en la mesa del comedor poniendo los contenedores allí, los cubiertos y los vasos
El muchacho de ojos verdes y cabellos magentas meneaba la cabeza al ver los arrumacos poscoitales de sus amigos que ahora eran pareja, lo único bueno era que usualmente no eran lo que se pudiera decir “melosos” y además estaban en eso un par de semanas nada más, era lógico suponer que no pudieran quitarse las manos de encima
- Hey… ¿qué tienes en la espalda? – preguntó Sorrento al ver algo en la nuca de Seiya, el castaño estaba usando una camiseta de Julián que le quedaba grande y por eso se podía ver claramente la base de su cuello
- Un dragón, pero no lo he visto, no se vale… yo quiero verlo – se quejó Seiya haciendo caras
- Sácate la camiseta y te tomo una foto – dijo Julián encogiéndose de hombros y sonando por demás fresco
- ¿Quieres fotos mías?, ¿desnudo? – Seiya lució en shock por un segundo, hasta se llevó las manos al cuello de la camiseta cerrándosela más, con esta reacción Julián atropelladamente dijo:
- ¿What?, claro que no… ohhhh… pensándolo mejor, claro que sí, me encantaría tener fotos tuyas desnudo, eso alegraría mis días – Julián finalmente sonrió y le dedicó una sexy sonrisa a su castaño, que sonrió muy divertido y se dejó besar del peliazul que lo estrechó contra su pecho
- Yo te tomo la foto, sácate la camiseta que yo también quiero ver ese dragón – Sorrento tomó el teléfono de Julián e hizo señas a Seiya, que todo abochornado se sacó la camiseta y se quedó quieto en la cocina hasta que su amigo le tomara la foto, luego le dio el teléfono y no pudo creer sus ojos, el dragón que le había dibujado Julián era perfecto, por decir lo menos, y se lo había dibujado bastante rápido
- Wow… y mira que a mí me gustó mucho la salamandra que me dibujaste en la muñeca, pero… esto no se compara, eres genial Julián – Seiya miraba el teléfono y sonreía
- Tengo un muy buen lienzo, pero ya vamos a comer, me muero de hambre – Julián besó a Seiya en el cuello y lo llevó a la mesa, allí cenaron, bebieron un poco de vino y se dedicaron a los chismes de la facultad, eso siempre era divertido, aunque ahora las cosas estaban tomando tintes un poco dramáticos y turbios
Sorrento estaba acabando de comer, cuando su teléfono sonó, al verlo arqueó una ceja, lo dejó en la mesa y preguntó:
- ¿Fue Shun a clases hoy?
- ¿Shun?, no… no lo he visto este par de días si quieres que te diga la verdad, ¿por qué? – respondió Seiya encogiéndose de hombros
- Porque hay el rumor en el campus de que él no tuvo sexo con su novio en la fiesta, sino que su novio lo violó en la fiesta, ¿es eso cierto? – Sorrento tenía el ceño fruncido y miró directamente a Julián cuando hizo la pregunta
- Claro que no es cierto, yo les conté lo que en verdad pasó, o por lo menos lo que yo vi, porque no me quedé arriba toda la noche mirando a Shun dormir, pero no te preocupes por eso Sorrento, es solo un rumor, no creo que pase a mayores – respondió Julián antes de que Seiya pudiera decir algo
- ¿Tú lo sabías? – Sorrento en serio frunció el ceño esta vez
- Seiya me lo dijo hace un par de días, pero es verdad que no creo que pase a mayores, no dijeron lo mismo de… de… ¿cómo se llamaba ese chico?, ¿el rubio ese que tiene cara de matón a sueldo?, diablos… ¿cómo se llamaba? – Julián empezó a voltear su cubierto y cerraba los ojos tratando de recordar a alguien aparentemente, Seiya no tenía idea de lo que sus amigos hablaban
- ¿Radamantys? – aventuró Sorrento
- Ese mismo, dijeron que había violado a esa chica bonita de cabellos negros, ¿no te acuerdas?
- Pandora – dijo Sorrento recordando todo ese lío
- Ella misma… igual dijeron algo muy parecido de esa pareja y nada fue cierto, se armó un relajo de épicas proporciones, me acuerdo que vinieron los papás de ella a hablar con la administración de la Universidad porque supuestamente la violación se había dado en los dormitorios dentro del campus, se dijo que se habían levantado denuncias en la fiscalía y toda la cosa pero a la final nada de lo que dijeron verdaderamente pasó, fue solo una pelea que tuvieron y luego de que las aguas volvieran a su cauce ellos hasta volvieron, entonces no entren en pánico ni se estresen por lo que no hay necesidad – Julián movió la mano desvirtuando el asunto completo, Sorrento no lucía para nada convencido y ahora Seiya lucía algo nervioso e incómodo, él no pensó que su pequeña mentira pudiera tener tales consecuencias, la situación estaba muy fea a su criterio, es que hablar de violación eran palabras mayores
- Pero… ¿no deberíamos aclarar las cosas? – preguntó Seiya en voz baja
- ¿Aclararlas?, ¿cómo? – Julián tomó un sorbo de su vino
- No sé… ¿hablar con Shun o algo? – propuso Seiya, Sorrento asintió levemente pero Julián meneó la cabeza de forma determinante y dijo:
- Lo que menos podemos hacer es hablar con Shun porque expondríamos lo que hicimos, no podemos aclarar nada sin decir que fuimos nosotros los que mentimos, y eso sería un problemazo para nosotros, no no no, no podemos decir nada sin lanzarnos la soga al cuello nosotros mismos
- Pero… - Seiya en verdad se sentía culpable al solo pensar en Shun y en lo que debería estar pensando y sufriendo
- Sabes… Julián tiene razón, esperemos que todo pase, no podemos aclarar nada sin decir que fuimos nosotros los que iniciamos ese rumor – corroboró Sorrento suspirando cansado, él no estaba muy de acuerdo con ello pero… no había otra forma, Seiya lució triste, Julián tomó su mano y la besó al decir:
- Me gusta mucho lo dulce que eres pero… no podemos hacer más, el rumor de Shun pasará así como pasaron los rumores tuyos, no quiero verte estresado, ¿ok?
- Ok…
- Si quieres podemos decir que te vimos teniendo un trío con el profesor Saga y su hermano Kanon, podemos decir que lo estaban filmando y que lo piensan vender a una empresa porno, eso llamaría la atención de todos los idiotas de tu facultad y ayudaría a que el rumor de tu amigo Shun se desvanezca más rápido, lo malo es que tú vas a volver a ser la comidilla de todo el campus, no solo de tu facultad, pero mírale el lado positivo, serías famoso – dijo Sorrento muy divertido
- Eso tampoco – respondió Seiya algo defensivo, no quería volver a pasar por lo que había pasado hace no mucho tiempo
- Solo tenemos que esperar que otro chisme más jugoso que este estalle, y en unos días nadie se va a acordar de que tu amigo Shun existe siquiera – Julián besó la mano de Seiya nuevamente y le sonrió
- Tienes razón, me parece terrible que así funcionen los chismes pero tienes razón en lo que dices, ¿me pasas el orégano? – Seiya suspiró pero sonrió levemente al decir esto, Julián sonrió también y se lo pasó
- Oye, ¿quieres ir al cine mañana? – preguntó Julián y Seiya asintió
- Claro…
A la mañana siguiente, Seiya estaba sentado en el césped a las afueras de su edificio, estaba distraído resolviendo la tarea de cálculo cuando un alboroto se armó, varios oficiales de la policía entraron, venían armados y tenían varios perros con ellos. Todos los muchachos que estaban en el patio miraban como los policías se movían, como más seguían llegando, como el bullicio normal del día murió y dejó paso a ruido de pasos apresurados y ladrido de los perros.
Eso ya lo habían visto todos antes porque la policía había hecho algunas redadas en medio de las campañas anti drogas que patrocinaba la Universidad, entonces los muchachos estaban curiosos con ello, porque la vez anterior si habían detenido a varios muchachos que eran conocidos por expendio de drogas dentro del campus.
Seiya no le dio más importancia de la que debía y volvió a su tarea de cálculo cuando un bullicio muy diferente se iba levantando, algo estaba pasando en el edificio, vio como un muchacho bajó corriendo las escaleras teléfono en mano y hablaba con urgencia, el castaño asumió que llamaba a su padre porque gesticulaba y entre las pocas palabras que alcanzó a escuchar distinguió: “… vinieron por él… es inocente… venga rápido porque lo van a llevar a la patrulla… no lo sé… a la cárcel supongo…”.
Luego de algunos angustiosos momentos todos vieron con sorpresa que dos oficiales tenían a alguien en custodia. Hades bajaba lentamente las escaleras y tenía las manos esposadas en su espalda, todos los ojos de la facultad entera estaban en él, los susurros empezaron a llenar el ambiente, hasta que el primer grito los conmocionó a todos:
- Violador!!! – una muchacha que estaba al pie de las escaleras había gritado
- Espero que sepas lo que les hacen a las alimañas como tú en la cárcel!!! – un muchacho en medio del patio gritó
- Muérete Hades!!! – otra chica gritó, y ya luego de eso todo fue confusión, un griterío se armó, le empezaron a lanzar a Hades latas de refresco y otras cosas que los chicos tenían a la mano. Los policías tuvieron que rodear a su prisionero para evitar que sea agredido más de lo que ya había sido, así que apresuraron su paso y lo sacaron del campus en la más horrible de las confusiones, lo subieron a la patrulla y se lo llevaron
Seiya se había levantado con el resto y miró como Hades fue llevado en la patrulla, el castaño tenía un hueco en el estómago que le ardía, no podía creer lo que acababa de ver, y menos lo creyó cuando volvió al patio y levantó la mirada, en el corredor del segundo piso estaba Shun y era claro que lloraba, su expresión valía más de mil palabras…
***
- ¿Tienes helado? – Seiya estaba acostado y miraba a Julián que estaba entretenido retocando la salamandra que le había dibujado antes en su muñeca
- Tengo vino que está en el refrigerador, ¿eso cuenta? – el peliazul le sonrió a su amante que suspiró y se cubrió el rostro con una almohada
- No… no cuenta
- Pero está heladito, ¿seguro que no cuenta? – Preguntó Julián acariciando la mejilla del castaño que meneó la cabeza y suspiró, el peliazul sonrió y le dijo: - ¿Te han dicho alguna vez que tienes un color de ojos muy especial?
- No… tengo los ojos cafés Julián, nada de especial en ello
- No le digas eso a un adicto al café, amo la tonalidad de tus ojos, tienes destellos miel en ellos y eso es algo raro, nunca lo había visto antes, en Okinawa hay un dicho que dice: “Una pareja debe funcionar como las manos y los ojos, cuando las manos duelen los ojos lloran, y cuando los ojos lloran las manos secan”, tienes unos ojos muy bonitos Seiya, es lo primero que noté de ti
- ¿Además de mi espectacular trasero?
- Tu trasero merece su propio libro de proverbios, pero si… vi primero tus ojos
- Eres un adulador Julián, y no te creo, estoy seguro de que me viste el culo primero, luego mis notas en cálculo y luego mis hermosos ojos – Seiya suspiró otra vez y trató de voltearse, pero Julián no lo permitió porque sujetó su muñeca y le quitó la almohada del rostro al preguntar:
- ¿Qué pasa chiquito?, y ahora no me puedes decir que nada porque estaba haciendo mis mejores esfuerzos para complacerte y tu apenas si me miraste, ¿mal día en la facultad? – Julián miró al castaño que meneó la cabeza y susurró:
- No me hagas caso
- No puedo no hacerte caso, dale… cuéntame, ¿qué pasó? – Julián insistió y tomó de mejor manera la muñeca de Seiya para seguir con su dibujo
- Hades fue arrestado hoy – susurró el castaño
- ¿En serio?, ¿tu amigo Shun presentó la denuncia?, no lo puedo creer… - Julián lució genuinamente sorprendido
- Aparentemente así es, Shyru me dijo que Shun presentó la denuncia hace un par de días, y que hasta hoy armaron el caso contra Hades – Seiya suspiró cuando dijo esto
- Sigues pensando en ir a hablar con Shun, ¿verdad?
- Con la policía quiero hablar si quieres que te sea sincero, esto está feísimo Julián, Hades está preso por nuestra culpa y yo…
- No no no, tranquilízate Seiya, no vamos a hablar voluntariamente con la policía del rumor que lanzamos porque no vamos a ganar nada si lo hacemos – Julián acarició la mejilla del castaño al decir esto, pero se notaba que esta situación estaba matando a Seiya, él nunca esperó que las cosas si iban a complicar a tal nivel
- Pero Julián…
- Yo les conté lo que vi, pero no sé qué pasó después, yo estaba abajo jugando billar con ustedes, esa foto yo no la tomé, alguien más estuvo allí esa noche, no solo fuimos nosotros los que iniciamos ese rumor, no te culpes de lo que no tienes la culpa Seiya, si la policía lo arrestó pueda que tenga pruebas, ¿no?
- La policía debe tener algún tipo de prueba para haberlo arrestado, supongo yo… - Seiya lucía angustiado en este punto
- Eso supondría yo también – Julián se encogió de hombros, a su criterio no era que la policía fuera la mejor institución del planeta, siempre había dudas sobre la seguridad de los chicos en el campus, siempre había cuentos y rumores de robos, agresiones, violaciones, golpizas, la policía del campus a veces dejaba mucho que desear, aunque para este caso en particular la policía metropolitana era la que estaba interviniendo
- Pero… ¿y si son solo rumores?
- Si son solo rumores, no va a haber problema, el hecho de que lo hayan arrestado no significa que vaya a ir preso ni mucho menos, seguramente su padre ya lo sacó con fianza, ven chiquito y no te estreses, no me gusta cuando estás estresado, ven acá, eso es… - Julián jaló a Seiya para acomodarlo de mejor manera en la cama y lo besó con pasión, el castaño estaba en verdad preocupado y se sentía culpable como no se había sentido antes, las explicaciones de Julián ya no lo convencían, él quería hacer algo para arreglar ese embrollo, el problema era que no tenía idea de cómo hacerlo sin echar de cabeza a su novio, a su mejor amigo y a sí mismo, dioses… todo era muy complicado…