-¿Qué?- John se quedó sin habla ante lo dicho por su compañero. Nunca espero encontrarse en el espacio, ni en su más loca fantasías se le llegó a cruzar por la mente.
Pero ninguno tuvo tiempo de asimilarlo antes que una alarma comenzase a sonar.
-Strange- Le advirtió con la mirada el rubio a su pareja, para que este los enviara a todos a la dimensión de los espejos.
-¿Qué sucede?- Pregunto John al ver como algunas personas pasar frente a ellos sin que estos detallaran en ellos.
-La dimensión de los espejos es un lugar fuera de la dimensión real en el cual los demás no pueden vernos o tocarnos y cualquier cosa que hagamos o digamos no se verá reflejada en la realidad- Trato de explicar el hechicero.
-Arthur te dije que esperaras en nuestra habitación- Hablo un hombre delgado con el cabello corto y negro peinado hacia atrás, con un atuendo negro y entallado a su figura, se notaba esbelto y de fuerza en todo los aspectos, al verlo ambos rubios solo pudieron quedar impresionados, su aura era muy fuerte para ser ignorado.
-Por favor, estamos en medio del espacio ¿Quién puede ser tan tonto como para abordar esta nave en medio del espacio y contigo abordo?- Esta vez el que hablo fue un hombre de estatura más baja que el anterior con el cabello castaño, con una bata color verde y una pijama roja, sosteniendo una tasa en mano- Khan vamos estoy cansado y quiero descansar de todos tus planes por un día.
-El castaño te sienta bien agente- Strange miro pícaramente a su pareja, a lo que el otro bufo.
-Está bien, pero espero que estés preparado para tu amo- Sonrió sínicamente, a lo que el otro se sonrojo. De todas maneras si alguien estaba en su nave dudaba que escapara.
-Si amo- Fue la única contestación del castaño mientras agachaba la cabeza con total vergüenza, una y mil veces se preguntaba cómo había terminado en aquella situación, él nunca había tenido suerte pero Khan era especial, era ese suceso que necesitaba en su vida y sabía que él era todo lo que Khan necesitaba.
-Suficiente nos vamos- Grito el exmilitar mientras sentía que podía compara con un tomate en color.
Strange hizo caso a su orden y abrió un nuevo portal, pero en esta ocasión el único detective consultor de su mundo pasó de último viendo por última vez donde aquella pareja (Khan y Arthur) se había ido momentos antes.
-¿Y ahora dónde estamos?- Pregunto Ross.
-Este debe ser Londres pero por sus condiciones puedo decir que estamos en un mundo apocalíptico- Sherlock se encontraba seguro de ello- Hasta no hace mucho aquí había civilización pero algún detonante hizo que todo eso cambiara, tengo una teoría pero necesito datos.
El hechicero utilizo el ojo de Agamotto para luego abrir un portal.
-Entren
Al otro lado del portal Watson pudo ver a su pequeña Rosie siendo cargado por unas mujeres.
-Ella es…- Exclamo el rubio con sorpresa y temor.
-La hija de tu versión de este mundo- Afirmo Strange a la pregunta no exclamada- Como Sherlock dijo estamos en un universo apocalíptico, seres que en nuestro mundo conocemos como Zombis o muertos vivientes caminan entre nosotros. Nos encontramos en Australia, tú moriste pero cumpliste tu última misión de dejar en un lugar a salvo a tu hija, nuestras versiones nunca llegaron a conocerse.
Aquella declaración había dejado una extraña sensación de desosiego en todos los presentes.
-Sigamos- El agente Ross no se encontraba nada cómodo con ese ambiente.
El ex médico militar miro por última vez a aquella pequeña que jugaba con aquellas mujeres deseándole mucha suerte para el futuro, sentía que una parte de su alma se quedaba allí junto a la pequeña, lo que ninguno vio fue a un joven de no más de 18 años delgado y de cabello azabache se acercaba a aquel grupo de mujeres, joven que se haría importante para la vida de la pequeña a la cual protegería con su propia vida de ser necesario.
-Así que nos encontramos de nuevo Guillam o mejor dicho Pierre.
Eso fue lo primero que vieron los viajeros, dos rubios viéndose fijamente con ansias de matarse mutuamente uno con una actitud altanera mientras el otro se notaba pasivo.
-Dixon no esperaba encontrarte… tan pronto- Aquello provoco furia en el contrario.
-Deja de jugar conmigo sabes que puedo matarte si quisiera.
-Y tú sabes que yo podría hacerlo mismo en cualquier momento.
Poco a poco ambos iban acercándose mientras el rubio más pequeño apuntaba con una pistola el cuello del otro, mientras el otro rubio le amenazaba con un cuchillo en la parte inferior de la mejía con tal fuerza que provoco una cortada, pero a pesar del corte el más pequeño parecía disfrutaba de eso.
-Solo diré que a ti no te queda el rubio- Comento el agente para distraer a todos de aquella situación, sentía que en cualquier momento aquellos dos se lanzarían uno al otro y se harían pedazos pero no con intención de matarse como tanto pregonaban.
Hasta que sucedió, ambos rubios asaltaron la boca del otro con total lujuria, lo cual los 4 hombres tomaron como señal de retirada.
-Parece que en todas las dimensiones tenemos buena química- Le guiño el ojo el de mechones platinados al mayor del grupo.
-Cállate tonto- Aquello solo provoco que el hechicero sonriera con autosuficiencia.
Otro portal fue abierto y esta vez pudieron ver claramente como había muchos jóvenes.
-Harry espérame, Hermione dijo que la buscáramos.
-No Ron no hay tiempo…
-¿Estamos en una escuela?- Pregunto el agente a lo que el detective bufo con fastidio pero no dijo ningún comentario hiriente como el exmilitar sabia deseaba expresar. Hasta cierto punto el que su compañero no haya dicho ningún comentario molesto le extrañaba.
-Vamos John- Todos giraron mirando al poseedor de esa voz.
-Sherlock no creo sea buena idea, Everett se molestara mucho conmigo y aún seguimos castigados por inundar el baño.
-Detalles John además tu hermano esta tan concentrado en regañar al mío que ni notara que fuimos al bosque. Además Stephen sabe lo que haremos- Al rubio no le quedó más remedio que suspirar en resignación, no podía dejarlo solo. Y tras un hechizo ambos jóvenes desaparecieron.
-Parece no eres el único mago de entre nosotros- Bromeo John al hechicero.
-Te lo advierto Stephen si algo le pasa a John por tu culpa te juro que esta vez no te la perdono, sabes que después de lo de Harry mi familia no ha podido ser la misma como su hermano mayor debo cuidarlo- Miro con ira a su mejor amigo.
-Exageras Everett nada malo le pasara, los leones sabemos de estas cosas, además esta con Sherlock que es lo peor que puede pasar- Y ante aquel comentario el rubio solo pudo mirarle con incredulidad- No digas nada y mejor vayamos- Y al igual que los otros dos jóvenes estos también desaparecieron.
-Bueno eso fue interesante y nada sexual- Exclamo hasta feliz el blogger- Aunque si me sorprende que esta vez no fueran solo una versión de nosotros mismos sino dos.
-Posiblemente en esta dimensión nuestra energía se dividió en dos lo que provoco que en ambos casos nacieran gemelos, siendo una dimensión de gran poder mágico algo lo pudo haber inducido.
Todos quedaron satisfechos con aquella afirmación.
Al entrar por el siguiente portal todos se encontraron dentro de una cueva.
-Pensé que ya no volverías- Vieron como un ser mitad dragón mitad humano se levantaba.
-Prometí que lo haría- Fue la contestación del hobbit- Además no tenía otra opción- Sonrió, ya no le temía a aquel maravilloso ser.
-Sherlock- Grito John al ver como el dragón se acercaba al pequeño completamente desnudo. El detective solo miro a su compañero con extrañeza- Lo siento, esto me recordó a otros sucesos- Enrojeció al ver su error, lo cual provoco risa en los otros dos (Strange y Ross).
-Ahora eres mío hobbit, no podrás ir a ningún otro lugar si yo no lo deseo. Tu eres mi nuevo tesoro- Bilbo no sabía porque esas palabras le habían provocado un placentero estremecimiento, desde aquel encuentro carnal con el dragón en el cual sintió que moriría ya no tenía fuerzas para negarse a nada de lo que le dijera. Seguía sin saber que le había hecho pero no podía negar su atracción por aquel ser desde que lo vio por primera vez.
-Suficiente- Dijo Watson, comenzaba a creer que el otro doctor hacia esto a propósito. No podía ser posible que ni siendo de dos especies diferentes no podían estar alejados, el admiraba a su amigo no lo negaba y cuando fingió su muerte se sintió a morir pero de eso a estar enamorado había una gran diferencia ¿o no? Comenzaba a tener dudas y eso le provocaba cierto miedo.
Al ver la incomodidad del otro doctor Stephen decidió acceder.
-Siguiente parada el universo principal- Abrió otro portal el hechicero- Ya he venido con anterioridad aquí, en este ambos somos actores, ustedes- Señalo a ambos rubios- Se llaman Martin y nosotros Benedict. Lo especial de este universo es que se encuentra enlazado con el resto, lo que ellos llaman películas o libros no son otra cosa más que vistazos de sucesos de diversas dimensiones. Aquí Martin es actualmente divorciado y Benedict es casado pero- suspiro- Es mejor que lo vean- Abrió otro portal.
-Con un carajo que ya no me busques más- Grito colérico el rubio actor, tanto John como Everett podían verse reflejados en él, se notaba no solo su enojo, sino que sufría- Entiéndelo, ya no podemos ser lo que éramos antes de todo esto, estoy cansado, termine con Amanda por esto, no comprendo que es lo que quieres que haga, pero de lo que si estoy claro es que yo no soy como tú, no puedo hacer como que nada de lo que sentí fuera falso, estoy cansado de que todo lo que haga solo me recuerde a ti, siempre me preguntan por ti maldita sea no soy tu jodida niñera, ni pareja, ni nada. No soy nada para ti- Se notaba aquellas palabras le habían dolido.
-Martin tu sabes que eso no es cierto, es solo que no puedo.
-Y lo entiendo Ben, en realidad lo hago y por eso te pido que te alejes de mí- Sabia que el otro no podía dejar a su esposa, sabía que lo quería pero él no podría hacer otra cosa más que alejarse para su sanidad mental como la del otro actor.
-Martin yo…
-No Benedict, ya no hay de qué hablar, cada quien hará lo suyo y espero seas feliz- Salió del estudio con el corazón en la mano, mientras el de hermosos ojos heterocromaticos se rendía.
-Ellos están…- Exclamo con dolor el rubio.
-Enamorados- Completo Strange- Pero su amor es imposible, ellos nunca tuvieron algo pero su amor estaba más allá de lo físico. He venido unas cuantas veces aquí, existen muchas personas que notaron su química y aunque fueron muy buenos amigos en su tiempo Martin no pudo soportarlo y ha decidido romper lazos con Benedict- Miro con dolor como ambos actores tomaban caminos separados.
A todos se les hizo triste aquella historia, a pesar de sus diferencias ninguno se imaginaba una vida sin su compañero o pareja.
-Nuestra última parada- Abrió otro portal detrás de él.
En esta ocasión pudieron observar cómo se encontraban en el antiguo Londres.
Pudieron observar como dos hombres de avanzada edad con el cabello cano se encontraban consideradamente juntos para esos tiempos.
-¿Que pintas?- Pregunto el más alto.
-El paisaje- Inclino un poco su cabeza para que el otro pudiera apreciar mejor su pintura- Pero señor ex primer ministro no cree usted que está muy cerca de este humilde pintor, que dirían sus leyes de eso- Le miro divertido, le gustaba molestar a su pareja con esos temas.
-Rembrandt- Bufo.
-William- Contesto burlón- Mejor prepárate que mi hijo dijo que hoy vendría con los niños.
-Pero si el que está todo lleno de pintura eres tú, mira tu cabello es un desastre- Toco el largo cabello ondulado de su pareja.
-Tomare una ducha, podrías encargarte de lo demás por mí- Le dio un corto beso en los labios.
-Te aprovechas de mi- Comento con diversión, y a la vez pensó en todo lo que se hubiera perdido de no ser por la difunta esposa de su pareja, la cual convenció a Rembrandt de hacer ese trabajo que puso en duda su reputación por lo cual llegaron a conocerse, siendo muchos años después que se volvieron pareja aun en contra de las leyes de su amado país- Y pensar que pude haber muerto sin conocerte- Sonrió con melancolía, para luego mirar al cielo y sonreír- Gracias- Susurro por lo bajo.
Por primera vez para los cuatro integrantes de aquel viaje todos sintieron empatía y alegría por una de sus versiones, se notaban eran felices. Todos de alguna manera deseaban algo como eso para ellos.