Podría ser una noche común y corriente, nada interrumpiendo la tranquilidad nocturna, dedicada a todos para dormir y descansar.
Soñar con hermosos deseos del corazón.
Tal vez algunas demostraciones lindas y casta de amor…
Sí, eso podría ser ideal en muchos ámbitos.
Obviamente en el santuario de la Diosa Atena, la noche no representa mucha diferencia con las personas comunes.
Aunque… Todos los caballeros dorados, se han reunido en cáncer, algunos por iniciativa propia, otros convencidos, y bueno dos porque sus parejas los obligaron, pero ¿Que se le va hacer?
Cabe mencionar que en este lugar se prohibió la entrada a todo “Mocoso menor de edad”, en palabras del guardián de la cuarta casa.
Y ¿Por qué esto?
Bueno… Es el aniversario de vida de Death Mask, si bien… No ha sido un excelente compañero de armas con todos y goza hacerlos sufrir con bromas muy pesadas, la mayoría lo toma como tal, pero las venganzas no se dejan esperar.
Aun así, desean dejar rencores del pasado, están trabajando en eso…
Es un proceso lento, más lo están intentando, no se les puede culpar por la hacerlo.
Durante la fiesta, el alcohol no falto, proporcionado en esta ocasión por Milo, Kanon y Dohko.
Si, el viejo maestro lleva bebidas alcohólicas a sus “Niños”, aprovechando que el patriarca fue con la actual Atena a una pequeña misión de dos días, aunque solo era para acompañarla.
Pidió a su amado Libra que los mantuviera tranquilos por el cumpleaños de Death Mask, pero… Su idea de “Mantenerlos Tranquilos” es que todos beban bajo su “Supervisión”.
Cosa que muchos hicieron y otros, prefirieron beber alguna otra cosa, para acompañar el ambiente.
Sin duda se la estaban pasando bastante bien.
Al cangrejo dorado de esta generación, los regalos si le interesan, pero si son todos, botellas de alcohol y ganarles su dinero con los juegos de azar que organizo de forma rápida, es suficiente.
Se podría decir que lo tiene todo, es un hombre de deseos simples… Alcohol, dinero, bromas y… Es la excepción que dice…
“Afortunado en los juegos de azar, desafortunado en el amor”
Y ¿Por qué esto?
Fácil, aun no se sabe cómo, muchos se preguntan como sucedió, sin embargo…
Death Mask de Cáncer, tiene el amor del decimosegundo caballero dorado, el considerado más hermoso de la orden dorada.
Formalmente son una pareja, sus compañeros obviamente los felicitaron, aun con sus dudas de si esto funcionaria a futuro.
Y podría ser que no…
Más no saben cuál es la razón por la que estos dos caballeros han llegado a formar ese vínculo de amor tan estrechó que comparten actualmente,
Y es que ambos se complementan perfectamente.
Los dos desde muy jóvenes, empezaron a sentir deseos sexuales muy grandes, los cuales al principio se negaban compartir entre ellos.
Si bien, Capricornio siempre estuvo al lado de los dos, tanto como amigo, como un concejero que en cierta forma fue el único que se enteró de los sentimientos de cada uno por el otro y les ayudo a que los expresarán.
Nunca supo sobre los fetiches de sus amigos y obvio era mejor para Shura.
El momento en que conocieron los gustos sexuales que les dieron el inicio a su actual relación, fue una misión en donde Afrodita quedo expuesto ante el cangrejo.
Y lejos de las burlas que se pensaran, Death pensaba en darle privacidad a uno de sus mejores amigos, salvo que este le pidió no se alejarse y terminaron cayendo en el deseo carnal, experimentándolo a una edad temprana.
Lo cual ha seguido a sus veintitantos años actuales.
Conociéndose a como lo hacen ahora, ya no existe la vergüenza como tal.
Así que Death ya le había dicho su deseo de cumpleaños, y Afrodita cumpliría, ya que de igual forma él tubo lo suyo en su aniversario de vida.
¿Qué tenía de malo cumplirle un gusto de esa índole a tu pareja?
Obviamente siempre y cuando ambos estén de acuerdo, y que no se hieran los sentimientos y cuerpo ajeno…
Al menos que les guste algo rudo.
Si es consensuado y con respeto, puedes disfrutar ampliamente de tu sexualidad con la persona que ames y te corresponda obvio.
Pasadas las horas, el ambiente se hacía más denso, aquellos que no habían tomado en toda la noche, decidieron irse a sus templos, llevándose consigo a sus parejas, unos ya pasados de copas y otros agradeciendo poder retirarse, para hacer otras cosas con quien ama.
Los que han estado bebiendo junto a la persona que aman, ya están cayendo dormidos en el cuarto templo, sí que estos hombres aguantan mucho el alcohol.
El único que podría seguir bebiendo toda la noche es Libra, ahora lloriqueando porque su amado borreguito no está, pero olvidando que lo vera en un día más.
Un ambiente hasta cómico en cierta forma, pero…
No se ve por ningún lado al festejado, ni al novio de este.
¿Dónde podrán estar?
Nadie se daría cuenta si faltan, para el momento en que se alejaron, es justo en el que todos están cayendo rendidos o retirándose.
Por eso que dos cosmos estén hasta Piscis no se les hace raro y si lo notan, no van a preguntar, son cosas de pareja, que a nadie más les interesa.
---Templo de Piscis---
En la oscuridad de la última casa, precisamente la habitación hermosamente adornada, y limpia, rodeada por rosas no venenosas, para darle ese toque elegante del que su dueño es caracterizado.
Se puede apreciar, al de cabellos peli celestes, en el suelo, sentado, apoyándose en sus rodillas, con la cabeza entre las piernas del cangrejo, mientras succiona el miembro erecto de este último.
Las mejillas sonrojadas, por la labor de practicar sexo oral, el color rosa de sus labios ha manchado la base del pene de su amante, mientras que con sus manos se apoya y arregla su cabello, para versé hermoso aun dando placer al cumpleañero.
-Ohrg… Que bien lo haces florecita- Las palabras que son dedicadas a piscis por parte del peli morado están con el tono lascivo que esta labor despierta en él.
No responde, solo dedica una mirada algo perdida, pues no niega que el sabor de Death le gusta, aunque es algo fuerte y amargo se ha acostumbrado mucho, hasta que se ha vuelto adicto por completó.
Metiéndolo por completó de una sola vez, haciendo una garganta profunda, para después sacarlo casi por completo, dejando la saliva del peli celeste en toda la longitud del grueso falo, que muchas veces ha hecho gemir a piscis.
Sabe en qué puntos tocar, para hacer que su cangrejo disfrute al máximo.
Unas succiones rápidas, para luego ir lento, introducir hasta la base y otras a la mitad el pene.
Su lengua, lamiendo la punta, sin dejar de mirar con coqueteo a cáncer, para después ir depositando besos en el miembro duro y caliente, bajando hasta llegar a los testículos en los cuales, lame con maestría, mientras chupa delicadamente.
Sabe que esta técnica le ha funcionado mucho, después de todo hace un gran oral que Death puede comprobar que es el mejor de todos, aunque no tiene con quién compararlo, no le hace falta.
Su floreciera, no es un recatado hombre, tímido, ni santurrón, como reconoce que muchos son en el santuario.
Afrodita es atrevido, sexy y sabe cómo ser… En palabras de Death “Una buen perra en celo”
Algo que solo lo ha dicho en la cama y disfruta el peli celestes.
Palabras lascivas, si está dentro del ambiente de pareja sexual y les agrada, obviamente pueden ser utilizadas.
Fuera de su habitación, está prohibido de decir algo así.
Con la labor del sexo oral, sabe que no tardará mucho en hacerlo venir.
-Arrrggg… Más rápido… Vamos lindo pasecito, compláceme que hoy lo merezco- Su sonrisa de triunfo, combinado con el próximo orgasmos que experimentara.
Se sabe cuándo está por llegar, las manos del Italiano van directamente en los celestes cabellos, para ir empujándolo con mayor fuerza hacia su miembro, quiere dejar todo dentro de la garganta de su amante.
Un tacto que le indica a Afrodita que pronto su estómago quedara inundando por el seme de quien ama tanto.
No se opone a esto, deja que el cangrejo marque el ritmo de como penetrar su boca.
Hasta que el momento llega, siempre el final es una garganta profunda, el espeso liquido blanco saliente del pene que alcanza el orgasmo, se deposita en la boca de quien lo complace, la descarga dura unos segundos, pero es tan placentero para ambos.
Tanto que Afrodita llega también al mismo destino, pero no es solo por este acto lo que provoca su descarga.
Saliendo de esa boca recién tomada, los ojos cristalinos de piscis, mirándolo como si hubiera perdido la razón, su propio cuerpo se calienta por las sensaciones que escurren de las comisuras de su boca y miembro.
No duda en lo más mínimo en tragar cada gota de la semilla del cangrejo.
Death mira lo que ha hecho con su adorada florecita, como suele llamarlo, pero el mejor espectáculo se vendrá en unos minutos y lo sabe bien.
-¿Te gusta llevarlo dentro?- Esa pregunta suena tan extraña, pero su mirada esta puesta en el peli celeste que aun yace en el suelo sentado.
El rostro rojo, los ojos brillantes por el sexo oral que le ha dado un intenso placer, el cuerpo temblando un poco, y el pecho manchado por el semen del peli celeste y las gotas del cangrejo que se escaparon.
Sin mencionar que en el cuerpo de este hombre, las marcas de algunos chupetones, mordidas, incuso algunas marcas rojizas que parece ya estar desvaneciéndose, evidenciando que son de tiempo atrás.
Una obra que de seguro el hombre que ahora yace parado junto a piscis es responsable.
-Si…- Contesta de manera torpe y pausada, aún necesita componerse –Pero… Aaaah… Death… Por favor… Sácalo, te quiero a ti…- Ladea su cabeza, dejando escapar las lágrimas que implican placer, sus propios ojos parecen corazones pequeños de lujuria.
-Florecita… Sabes cómo debes llamarme el día de hoy ¿No?- Esta sin duda provocando el juego que desea, de antemano ya lo sabe el otro.
Para este punto, el glamur de Piscis se ha ido, dejando atrás a un hombre lleno de deseo sexual, que hará cualquier cosa para conseguirlo.
Sonríe, para luego poner una mirada de súplica, para acariciar su propio pecho, un acto de provocación para el otro.
-Por favor… Caballero de cáncer… Penétrame hasta hacerme gemir como una vulgar puta- Levemente levanta su cuerpo, apoyándose con mayor fuerza en sus rodillas, deseando alcanzarlo para pedir un beso.
Un acto que le gusta hacer y recibir antes de comenzar la penetración anal.
Logro que piscis se denigre ante él, pero es un trato entre ambos, que disfrutan.
Sonriente ante esa escena –Así me gusta- Los violetas ojos se fijan en el caballero más hermoso que le suplica por sexo y una demostración de amor.
Que claro se darán ambos.
Sin mucho cuidado, ni tacto le ordena subir a la cama que es de su propiedad.
Ponerse en cuatro, para que deje ver el trasero completamente expuesto y mojado.
-Ja, ja, ¿Ya te has cansado de tu juguete?- Pregunta como si no viera el efecto de tensión que existe en el cuerpo de piel pálida.
-Solo sácalo… Haaaaaa… Y penétrame…- Los gemidos lanzados por el peli celeste, se intensifican al momento que Death comienza a estirar el cable por el que esta sujeto la esfera en el interior del ano.
Solo quiere seguir torturando a su pareja antes de hacerlo suyo.
-Lo hare... Pero deja que me divertía un poco más…- Su mano sigue molestando la entrada de piscis, y moviendo el juguete con el cual ha estado aguantando desde hace horas en su interior.
Sin duda una tortura placentera, al momento de sentarse, y más porque se ha mantenido en lo máximo todo el tiempo, las vibraciones son muchas, que ha tenido que aguantar al sentir una venida repentina, haberse manchado su pantalón obviamente no era aceptable.
Este era una parte del regalo que el cangrejo dorado se refería y le pidió a su pareja, para que este día, lo aguantara.
Toda la fiesta debía mantenerse con eso dentro, hasta que llegara la hora de jugar ambos.
-¿Cuántas veces te has venido?- Ha estado extrayendo la punta del artículo, para ir sacándolo muy lentamente el juguete, quedando en la entrada la pequeña esfera, aun vibrando, haciéndola girar, de una forma para desesperar al otro.
-Aaaaah… Por favor… Han… Aaaaaa… Cua… Tro… Cin… Co…- Un espasmos en su cuerpo se siente, arqueando la espalda, haciéndolo soltar un fuerte gemido de placer.
Uno que inunda por completó su habitación, pues el infeliz cangrejo, saco ese objetó de una forma brusca, casi un tirón tosco.
Esto, muy contraproducente, por la extrema sensibilidad en el área anal del peli celeste, que no pudo contener su voz, y mucho menos el orgasmo seco, que parecía estar experimentado.
Sus piernas apoyadas por las rodillas, ya no podían aguantar más, es demasiado éxtasis en su ser, para soportar, necesita descansar… Su conciencia parece parpadear en un tono rosa, azulado.
No logra pensar bien, ni dejar de sentir como su ano se contrae…
La entrada rojiza se puede apreciar por mantener ese objetó dentro, aunque solo saliera un cable conectado a la parte de la potencia a las vibraciones, que tuvo que sujetarlo a su piel por un buen tiempo.
Pero aunque Afrodita este complejamente agotado, Death no lo dejara descansar aun.
La sobreexcitación del peli celeste, su cuerpo muy sensible es un coctel para seguir molestándolo, al grado que los gemidos y expresiones sean tan perfectas y pervertidas, solo para el disfrute del cangrejo.
Quiere ser el único que ha logrado corromper al más hermoso y elegante de los doce caballeros dorados.
Si bien ya lo ha hecho hace mucho, solo que esta es diferente llevando sus juegos a otro nivel.
-No, no vas a descansar mi puta florecita… Tiene que seguir complaciéndome un poco más- Sus palabras están en una mezcla de dominio y ternura que solo ambos pueden entender y disfrutar.
-Es… Pera… Mi…- No pudo protestar más, sus caderas siendo elevadas con cierta brusquedad, para levantar ese trasero pálido, con tonos rojizos en sus zonas privadas.
No va tener tregua, debe seguir dándole el regalo más placentero al cangrejo que ama.
-Shhh… Solo quédate boca abajo… Y grita mi nombre todo lo que quieras…- Las indicaciones que da, suenan más a una burla, que a consideración, pero… Es lo que ambos aceptan.
-Pero… Death… Yo… Aahhhhh- Alza su cabeza levemente, sus ojos vuelven a dejar escapar lágrimas, de pacer y tal vez un poco de dolor, por la sensibilidad de la zona, su espalda se arquea dejándola ver ante los ojos de su amante, quién lo está tomando sin importar las protestas del otro.
-Gemiste tan lindo…- Su sonrisa, al ver las reacciones del cuerpo ajeno, en el cual ha dejado sus marcas en más de una ocasión, sus dedos tomando esas caderas y marcándolas con fuerza, la espalda con esa hermosa línea media, que le encanta verla tan delineada, al igual que el resto del ser de piscis, es simplemente perfecto.
La piel blanca que posee, el cabello celeste que cae delicadamente por las curvas de la espalda a los lados que caen y cubren los brazos.
Puede sentir las piernas temblar, incapaz de sostenerse bien por sus propios medios, pero el miembro de Death, al igual que esas penetraciones toscas, lo mantienen en su lugar.
El sudor de ambos se combina en medio de la oscuridad de aquella habitación, inundada en gemidos y sonidos roncos por parte de ambos, el olor al sexo está presente.
Las muestras de amor y deseo se combinan en solo una, que ambos disfrutan de forma inexplicable.
El cuerpo de Afrodita le pertenece solo a él, lo demuestra cada que puede ante cualquiera, que esa florecita es suya y si alguien se atreve a mirarlo o tocar, lo acaba de una sola vez.
Pero de igual forma el hombre que en esta ocasión, se arregló un poco decente, quitándose la barba ridícula que ha estado conservando.
Le gusta en cierta forma también ser el cangrejo de piscis, no le desagrada que Afrodita a veces le de muestras de su afecto que son algo atrevidas delante de sus compañeros, pero no tan al grado de esta noche.
-Aaaaahrrr… Death… Aaaah… Si…- Su rostro de placer se le denota, con las lágrimas escapando, la boca abierta, jadeando con la lengua un poco de fuera y la saliva saliendo de un lado de la comisura derecha, pidiendo que siga su pareja penetrándolo.
-Argggg… Así me gusta que seas…- Escuchar su nombre salir de esos labios rosados que se les ha ido el color del labial, pero siguen con el natural, solo logra existirlo mucho más.
El falo duro, grueso y caliente del cuarto dorado, está jugando su vaiveneé con cada estocada busca…
No existe mucho cuidado al estar entrados en ese fuerte placer carnal que se entregan.
Besos en la espalda, mordidas profundas, penetraciones que solo se dejan escuchar al choque de ambas pieles sudorosas.
Un poco más de este acto entre ambos hombres, para que puedan llegar a sentir el clímax que tanto desean.
Aunque el peli celeste ya no se siente capaz de aguantar otro, su miembro esta erguido sin duda, pero… Tantas venidas que ha experimentado, que siente que con esta se desmayara sin previo aviso.
Es allí, cuando está a punto de terminar, sujetando con mayor fuerza las caderas, algo cansadas, para aprisionarlas más contra su cuerpo.
Estocadas tan profundas, que logran tocar el punto G de piscis…
Las lágrimas escurren por el delicioso placer que lo hacen alcanzar cada vez más.
Unas penetraciones mas, y es allí que Death Mask culmina el acto… Que se denomina como sexual, mas existe algo de cariño entre ellos…
Una venida, que sale disparada en el interior de Afrodita.
Lanzando un ronco gemido, demostrando que el también ha experimentado placer gracias al delicado cuerpo del peli celeste que les pertenece cada que ambos gustan.
De igual forma, el último caballero logra sentir como su miembro deja salir una pequeña venida, la última que podrá aguantar en este día.
Sus débiles gemidos, inundan los oídos del de cabellos morados, para acto seguido desmayarse sobre su propia cama...
Ha sido demasiado placer para un solo cuerpo… Ya ha aguantado varias venidas en esta noche… Ya no resiste más.
Death, lo puede notar, al ver que las fuerzas de Piscis decaen, aun sosteniendo sus caderas, sonríe, sabe que lo ha dejado por completó exhausto.
Por primera vez en toda la acción, se comporta algo tierno y suave con él.
Depositando sus caderas con cuidado en el colchón, para que pueda dormir con tranquilidad.
Está bien que sea un pervertido de primera y le guste los juegos rudos, pero tampoco lo va a devorar mientras duerme, posiblemente cuando sea de mañana y ambos despierten lo hagan nuevamente pero… Para ese momento su cumpleaños ha terminado y se ganara una bofetada, por seguir con sus ganas insaciables por el pálido cuerpo.
Desea ver el dormido rostro de piscis, ese tan hermoso, que le roba la tranquilidad siempre.
Girándolo con cuidado de no despertarlo, aunque ahora es imposible, lo admira con una mirada una lasciva, pero con toques de amor, para acto seguido abrazarlo delicadamente, jugando un poco con esos sedosos cabellos, que se han manchado del sudor de ambos, pero conservan el dulce aroma de quien ama.
Un beso en esos labios, que conllevan un sabor algo amargo, pero no le molesta, es su propia marca que dejo en piscis.
-Sabes pececito… Gracias por mi regalo- Le dedica una sonrisa suave, para besar nuevamente esos labios tan deseables –Es el mejor de todos-
Se quedaría un poco más admirándolo, hasta que el sueño le gane…
Ha disfrutado en grande su cumpleaños, su amante le ha cumplido el deseo que tenía, no se puede quejar.
Logro hacer algo así de vergonzoso con piscis, y este no se quejó en lo más mínimo durante esas acciones.
Le cumplido lo que quería para su cumpleaños, así que ahora ambos están a mano.
Aunque seamos honestos, para Afrodita esto no conlleva ninguna dificultad, también disfruto mucho esas acciones intimas, al grado de perder la conciencia por tanto placer que se llevó.
Ahora si bien, ambos descansan felizmente en la comodidad del doceavo templo, eso no significa que sus actos no fueron oídos por algunos otros.
Sí que al estar algo pasados de copas, los hizo olvidar que si bien los templos están a una buena distancia, sus fuertes gemidos y voz, es capaz de traspasar hasta el templo siguiente.
Pero esa es una historia para después.